Holi!! Sigueme en Facebook: Wolfmika01

:D

******

El entrenamiento era duro, pero también era lo que lo que le distraía de los acontecimientos de los últimos días, la llegada de aquel sujeto que al parecer para todo el cuartel era casi la representación de una divinidad la ponía incomoda, como si tuviera algo de culpa, pero no sabia el motivo por el cual se sentía de ese modo, simplemente carecía de sentido.

Nuevamente el sonido del aire ser cortado la trajo al mundo real, apenas y fue rápida para esquivar el corte de la daga, Nevra quien entrenaba con ella entrecerró el ojo, ya la había notado distraída, y, si su movimiento hubiera sido certero ahora mismo la de ojos lila tendría una cortada en la mejilla.

-Sabes que estar distraída de esa forma puede costarte la cabeza.- dijo de forma seria aun que su rostro tenia un estado mas relajado que le de sus palabras.

-No fue apropósito... mi mente se perdió por unos segundos... ¿Continuamos?

-¿Segura? Esta vez no pienso parar en el ultimo instante.- Con una sonrisa socarrona tomo su postura para continuar el entrenamiento, ella hizo lo mismo por su lado sujetando la espada firmemente mientras sonreía llena de confianza a su oponente.

Reanudaron su entrenamiento dejando que las armas chocaran entre si, con el tiempo Nevra había notado que la habilidad de Roxan con la espada era cada vez mejor, como si fuera una extensión mas de ella, sumado a sus movimientos era como si ademas de atacar y defender danzara con el adversario, algo muy curioso pero a su vez de rara forma encantador. Ciertamente él había dicho que distraerse en un combate podría hacerlos perder la cabeza y justamente tenia que ser él mismo quien se distrajera en ese instante, en un rápido movimiento por parte de la castaña, no solo había sido desarmado sino que también derribado, el dolor en su espalda por la caída duro solo unos segundos en los cuales cerro sus ojos tras sentirse caer, al abrirlos noto a la chica sobre él y el filo de la espada a milímetros de su cuello.

-¿Dos de tres? - y esta vez fue ella quien sonrió de forma socarrona.

-¿Te mencione que la ventaja aparece en los momentos inesperado? - ahora Nevra le sujeto la muñeca rápidamente desarmandola en un instante, y con un brusco movimiento cambio de lugares quedando sobre ella, aun que sin armas con su mano le tomo del mentón con cuido para mirarle fijamente a los ojos.

En ese instante para los dos el tiempo parecía detenerse incluso el sonido, Roxan parecía dejar de respirar poco a poco mientras él seguía mirándole de aquella forma intensa, no tenia siquiera la intención de preguntarse del por que lo hacia, solo admitía que le gustaba esa intensa mirada; y nuevamente el fuerte latido de su corazón se hizo escuchar cuando el vampiro lentamente centraba su mirada en sus labios, y acercaba mas su rostro al de ella.

Se separaron de golpe al escuchar unos aplausos, ambos completamente avergonzados y las mejillas ardiendo ¿Iban a besarse? La respuesta era mas que obvia ¡SI!

-¡Felicidades, fue una buena practica!- el vampiro se levanto de inmediato ayudando a la joven a ponerse de píe y después hacer una ligera inclinación con la cabeza al dragón. Pero ella, ella no hizo ninguno ademan de respeto aun que sabia que tenia que hacerlo algo en su interior se lo impedía y no era por querer parecer una rebelde, es solo que no podía y no tenia mas explicaciones.

-Maestro, disculpe no nos dimos cuenta que estaba aquí.- la seriedad en el vampiro se hizo presente.

-Tampoco tenían que hacerlo de lo contrario habría visto una practica mas forzada a ser perfecta que a algo natural, y lo que pude ver me agrado, pero...- ese pero se había posado justo sobre la chica, por que ella sentía que diría algo sobre su manera de entrenar, bueno siempre se tenia que estar abierta a todo tipo de critica.

-¿Pero?

-Tus movimientos fueron algo curiosos ¿Peleas siempre de ese modo? - le pregunto, un poco mas aliviada dejo escapar un suspiro, cosa que le hizo enarcar una ceja.

-La verdad, hasta antes de llegar a Eldarya jamás tuve la necesidad de entrenar con una espada, no es algo habitual en la tierra a menos no lo fue para mi.

-Entonces has llegado y practicado aquí, aunque se nota que la habilidad la tienes innata.

-Yo no lo considero así, solo es como si tuviera suerte ademas me entreno a diario.

-En ese caso... quisiera intentarlo.- Roxan y Nevra se miraron confundidos ¿Que quería decir con eso? Antes de que alguno de los dos pudiera formular la pregunta lo vieron acercarse y tomar la espada que estaba en el suelo, parecía inspeccionarla.- dime ¿Aceptarías practicar conmigo?

-¡Si! - su respuesta ademas de ser animada le sorprendió coloco una mano sobre su boca mientras el rojo se apoderaba nuevamente de sus mejillas ¿Por que había hecho eso? ¡¿Por que había dicho que si?!

-¡Jajaja! Me encanta tu entusiasmo, te veré aquí al atardecer.

Klauth se marcho del lugar con la espada entre sus manos, ese entrenamiento con la chica llamada Roxan le haría revivir algunos preciados recuerdos.

Leiftan quien no estaba tampoco muy lejos miro con seriedad a los tres, no era sorpresa encontrarlo aveces mirando los entrenamientos de la chica, sino que el haber escuchado la promisión de entrenamiento ¿Podrían ser celos? La verdad, no, no estaba celoso de que "El gran dragón" fuera a entrenar con ella, sino que temía, si las memorias despertaban en Roxan antes de tiempo todo estaría arruinado.

el caldero siempre ha sido un elemento natural e indispensables para las brujas, aunque podían usar todo tipo de artefactos donde preparar la pócima debía de admitir que la cascara de un coco no era lo que consideraría un objeto auxiliar, debía de medir minuciosamente cada porción en sus elementos. Mientras estaba sentada en el húmedo suelo de la cueva y vapores de diferentes colores le rodeaban Ashkore llego frente a ella sin hacer ni un solo ruido, un destello de luz salio de la cascara de coco iluminando la cueva, ambos se miraron de manera seria.

-No esperaba tu llegada tan pronto querido.- su tono dulce le hizo sentir nauseas en el estomago.- ¿Que puedo hacer por ti?

-Dejate de juegos, tenemos una misión.

-¿Una? Por los dioses casi a diario tenemos tareas que cumplir dime ¿que necesita nuestro querido Daemon.

-Dijo algo sobre la rosa de...- inmediatamente Zenda se puso de pie y en un momento había lanzado a Ash contra uno de los muros entretenido con su magia.- ¿De que? ¡¿La rosa de que?!- le demando saber. Él comenzó a hablar en una lengua antigua rompiendo el hechizo de la bruja para atacarla de igual forma, no con magia sino con fuerza física estrellando su cuerpo contra el suelo entretenido con un fuerte agarre en el cuello.

-No lo hagas nuevamente o esta vez juro que te romperé le cuello.- aferrando mas su agarre la bruja soltó un quejido buscando aire casi de manera desesperada, Ash aflojo un poco su agarre.- La rosa de los vientos ¡¿Que es, dolo?!

-S-suel...tame...- cediendo tras algunos segundos le solto, Zenda se alejo un poco de él recuperando el aliento.- maldita bestia... la rosa de los vientos es un arma...

-Eso ya me lo dijo Leiftan, pero ¿Por que es valiosa esa arma? ¿Que tiene que ver Klauth en eso?

-El forjo la rosa de los vientos, no es un arma cualquiera es un arma Aengel... el arma de Erika.- nuevamente el enmascarado lucia intrigado por las palabras y aunque no lo admitirá también por esa mirada llena de rabia de la bruja.

-Algo me dice que le tienes un odio declaro desde tiempo inmemorables... Dime más, ¿Quien es esa Erika?

-La dueña de la rosa... Klauth forjo esa arma para la mocosa desde que dio sus primeros pasos, las armas de ese entonces eran diferentes a los simples juguetes que usan ahora, esas armas compartían ciertas conexiones con sus dueños, una habilidad única entre Aengels.

-Eso quiere decir que Leiftan puede manipular esa arma. - Zenda sonrió ampliamente por su error, pero no lo culpaba el pobre era tan ignorante como ella tan astuta.

-No, nadie mas que su portador puede ser testigo de lo que esa arma experimento antes de que su portador desapareciera... Leiftan tiene miedo de que la rosa lo delate por eso intuyo que quiere que la recuperemos nosotros y así evitar que Klauth lo descubra.

Con un movimiento de su mano se materializo un libro el cual comenzo a hojearse por si solo hasta mostrar su centro en una luz blanca.

-Un mapa, ridículamente lo que necesito solo si se viera algo en esa luz Zenda, no intentes jugar conmigo.

-Se paciente Lance... yo no se donde esta el arma, pero se quien si.- con otro movimiento en agual tras de ella monstruo una figura bien conocida por Ash.

-Ella... ¿De verdad? ¿Que tiene que ver ella en todo esto?

-Todo a su tiempo cariño, todo a si tiempo... el mapa se te revelara una pequeña ofrenda de sangre de alguien puro e inocente de corazón... esa mocosa es el ingrediente principal solo basta una gota.

-¿Solo una? No prometo nada tal vez pierda mas de una gota.- burlándose tomo el libro sujetándolo en su cinturón estaba a punto de irse cuando Zenda le detuvo.

-Necesito un favor.

-¿Por que piensas que te haré un favor?

-Por que desde que has llegado no paras de hacer preguntas que me parecen de lo mas ridículas... iras al C.G. por favor lleva a esta encantadora niña contigo.- de entre las sombras de aquella cueva apareció una mujer unos cuarenta centímetros mas pequeña que él, esbelta de tez blanca, ojos verdes como el olivo y cabellos tan blancos como la nieve.- su nombre es Indely y sera mis ojos e interacciones en el C.G. para mantener a Klauth a raya necesito estar cerca asi que usare a esta niña

-La has encantado no es así.- dijo notando lo evidente, los ojos de la chica tenían ciertos destellos azulados y una marca en el cuello parecía un lunas en forma de pétalo.

-Evidentemente Lance, ahora no pierdas tiempo.

Tras un par de maldiciones por parte del que vestía de negro él y la nueva muñeca salieron de la cueva, Zenda se giro a mirar la imagen en el agua pasando lentamente sus dedos por la mejilla en el reflejo.

-Cuando tu preciada luz de esperanza este en mis manos Klauth, sufrirás lo mismo que yo sufrí por culpa de esa bastarda.

lo noticia corría rápidamente por todo el C.G. no sabían quien fue el que los escucho para comenzar a difundir el rumor sobre una pelea entre la faelienne y el Maestro Klauth, algo que y a comenzaba a incomodarla, pues la verdad ella respondió por inercia no había meditado ni una sola de sus letras aunque fueran dos en su respuesta realmente fue algo...

-¡Idiota!- No solo ella, sino todos concordaban con Ezarel en que eso fue lo mas Idiota que pudo haber hecho y dicho. - ¿Como pudiste aceptar una duelo?

-Yo... yo lo dije sin pensar.- confeso sumamente apenada.- Aun... aun queda tiempo puedo retractarme y...

-No, no puedes. - Hablo Miiko haciendo que las flamas de su bastón se alteraran al igual que ella.- Has dicho que si y ahora debes cumplir, los dragones son famosos por mantener su palabra intacta y harán todo lo posible por que se cumpla.

Algo incomodo Valkyon paso su mano tras su nuca, quería mucho a Roxan era como una pequeñita hermana menor que aprovechaba cualquier descuido para meterse en líos y este era uno.

Y uno gordo.

-Lo único que puedes hacer es rezar al oráculo por que se aburra en el enfrentamiento, no suelo decir esto pero debes huir de cada uno de sus ataques.- todos le dieron la razón al de Obsidiana y solo por parte de ella gano un chillido casi idéntico al de floppy.- No tenemos tiempo para entrenarte pero si puedo adecuar tu espada para que esta resista y no se rompa en el primer golpe.

-Eso no ayuda mucho... ademas... ya no tengo mi arma, él se la llevo. - con una risa nerviosa todos le miraron con reproche, un arma no era un juguete, si alguien tenia una era por que se la confiaban a quien era apto y confiable.

-Bien, no creo tener otra opción. - Suspirando Leiftan salio de la sala donde Roxan estaba siendo ocultada y reprendida por su acción de aceptar un duelo con uno de los mas antiguos. - Valkyon puedes adaptar mi arma para Roxan.

-Leiftan ¿Estas seguro? - intervino la kitsune nuevamente.- eres demasiado cuidadoso con tus cosas sobre todo tu espada no la prestas a cualquiera.

-Teniendo en cuenta la situación actual, prestarla para un duelo es algo banal, ademas creo que ella tendrá ahora un motivo más con él cual hacer que nuestro maestro se aburra, seras cuidadosa ¿verdad?

-S -Si... yo lo lamento Leiftan por esto.- tras un par de palabras, concejos y regaños Valkyon se marcho para adaptar el arma de Leiftan, el obsidiana admitía que de todas esa espada era singular y hermosa, Leiftan le había dicho que fue un recuerdo de su padre y que jamas tuvo la necesidad de usarla hasta que se unió a la guardia, esta era de un material extraño y no solo eso ciertas partes estaban bañadas en oro tanto que parecía tener vida propia.

Por su parte Nevra y Ezarel aconsejaban a la chica en que momentos tener cuidado, no era por que ya hubiesen enfrentado a un dragón antes, sino que las luchas de antaño les habían hecho ganar experiencia que ella no tenia.

-Sobre todo evita la cola. - dijo Nevra tras ayudarle a tomar una postura de defensa con una de sus dagas simulando ser una espada.

-¿Su que?

- Algunos relatos antiguos decían que los dragones eran pacifistas y el fuego era su arma mas letal, pero también eran diestros luchadores tanto con armas como en fuerza física, una leyenda habla de un dragón que no soportaba la idea de ser superado y usaba una forma semi humana usando su cola como otra arma. - Ezarel fingió atacarle para que pusiera en practica las maniobras para defenderse como le estaban enseñando.

-P-pero... él no es como esa leyenda la final solo es...

-¿Un cuento? Nosotros eramos cuantos para ti hasta que llegaste.- Nevra recalco esas palabras que le hicieron estremecer si entonces el maestro era igual a esa leyenda... estaba muerta.

Las horas pasaron y el atardecer llego, casi todo Eel estaba reunido en el claro formando un gran circulo, él ya le estaba esperando, prácticamente todas las miradas femeninas estaban posadas en aquel hombre fornido quien solo tenia un pantalón puesto y el torso desnudo; Roxan se mordió los labios, no solo por que el sujeto era guapo, sino por que tenia miedo, técnicamente se sentía en una película de Rocky Balboa, exactamente en esas escenas donde es acompañado por todo su equipo hasta el ring... y la verdad... no estaba muy lejos, sus amigos le acompañaron hasta donde la multitud quedaba estática había algún tipo de barrera de protección que solo le permitió a ella el paso.

-Definitivamente una pelea de Rocky o una lucha a muerte como los gladiadores...- se dijo para si muerta del miedo se giro a sus amigos para mirarlos.- si parece que pierdo alguien arrojara una toalla para detener la pelea.- los cuatro enarcaron una ceja ante la referencia que evidentemente no entendían.- alguien va a interceder

-No te aseguro nada Ro, pero si es posible saldré a tu defensa.- aquellas palabras apenas le hicieron mitigar un poco el miedo, aferrando la empuñadura de la espada en su mano se giro para encarar al maestro, este ya le esperaba con los brazos cruzados y una sonrisa en la cara.

-Cuando estés lista, puedes darme tu primer ataque.

"Cuando estés lista dame tu primer ataque seré bueno contigo"

-¿Seras bueno conmigo? - pregunto con seriedad, la sonrisa de Klauth casi desaparece, mas solo soltó un suspiro divertido, pero para Roxan algo en su interior le decía que eso ya había pasado... ¿Deja vu?

-Posiblemente, ahora ataca.

Respirando profundamente cerro los ojos eliminando cualquier distracción de su camino, el ruido la presencia de los demás incluso ella misma... los chicos miraban como adoptaba una postura diferente a las que le habían enseñado o de las que ella usaba habitualmente, aquella era mas bien la posición de una bailarina. Roxan sostuvo la espada a lo alto dejando que la hoja quedara a milímetros de su mejilla y la empuñadura que sujeto con ambas manos a la altura de su oído.

Un grito involuntario salio de sus labios lanzándose sobre su adversario que le esquivo con facilidad, él contra taco levantando su mano con la espada para dar un golpe certero que ella esquivo por los pelos, los chicos le habían dicho que lo esquivara hasta que se aburriera pero ¿Por que respondía a los ataques? Sus movimientos habían cambiado rápidamente y Leiftan quedaba cada vez mas sorprendido no solo él... todos.

Klauth realizo un movimiento de abanico para desarmarla, cada movimiento, cada expresión todo, no no podía ser una coincidencia... la adrenalina corría por cada una de sus venas con fuerza, olvidando simplemente que aquello era un entrenamiento pasando a ser un combate mas real, los espectadores miraban asombrados como con gran facilidad el maestro realizaba heridas en el cuerpo de la chica en intentos vanos por defenderse y atacar mientras que él estaba intacto, las heridas eran cortadas leves tanto en su piel como en la ropa nada exagerado incluso el dragón se contenía en sus ataques. Repitiendo el movimiento en abanico con la espada había logrado desarmarla a lo que muchos pensaron era le fin del encuentro, pero para su sorpresa no fue así.

Desarmada la chica de orbes lilas se lanzo contra él sujetando con fuerza el filo dela espada indoctrinase un corte en la mano.

-Pero... ese movimiento ya lo había visto, al igual que esa sonrisa triunfante, aprovechando el desconcierto de él, la chica lo uso como apoyo para subir y dar una certera patada en su quijada, su primer golpe certero y ni siquiera ella lo creía.

-Por... el oráculo... ¿T- todos vieron lo que yo vi? - Miiko fue sostenida por Leiftan cuando sus rodillas fallaron, Roxan no solo había logrado darle un golpe certero sino que al mismo tiempo lo había desarmado.

-Solo fue suerte, gracias al oráculo que la cuida.- No, no era el oráculo y lo sabia.

Algo asustada por lo que había pasado Roxan dejo caer la espada, mirando a sus compañeros rogaba por que alguno detuviera todo esto, y ellos lo entendieron su mirada reflejaba un miedo absoluto por sus acciones, como si temiera que por esa falta de respeto hubiera herido el orgullo del dragón y ahora quisiera matarla.

-¡No te distraigas!- ella apenas y pudo reaccionar al siguiente ataque un puño que apenas y pudo esquivar, pero no tuvo tanta suerte con una patada en su costado que literalmente a mando volando a los pies de sus amigos rompiendo la barrera, ese fue le fin del encuentro.

Los chicos asustados socorrieron a su amiga quien había quedado inconsciente por la brutalidad de aquel golpe, sus heridas no eran profundas y habían dejado de sangrar hace bastante poco solo eran simples cortes sangrantes, lo que mas preocupaba era si aquella patada no le rompió las costillas o el hecho de haber sido arrojada derrapando en el suelo por algunos metros hasta romper la barrera le dejaría severas secuelas.

-Esta mue...

-Sigue con vida.- interrumpió Nevra a Miiko después de asegurarse de que siguiera respirando.

-Gracias al oráculo no tiene ningún hueso roto.- confirmo Valkyon, Klauth se les acerco colocándose de rodillas frente a ella, Nevra en ese instante reacciono pegándola más a su cuerpo para protegerla, él seria un dragón al que veneraban, pero ni eso le salvaba por haberla herido de tal forma.

-Me pase y lo siento, fue mi culpa desde un inicio retarle a este conflicto, y puedo ayudarle solo necesito que me dejen hacerlo.

-Roxan estará bien gracias a los dioses, ella necesita ser inspeccionada por Ewelein.- sosteniéndola en brazos se apresuro a dejar el claro para ir a la enfermería.

Con el espectáculo terminado, cada uno de los habitantes del cuartel regresaron a sus actividades, Klauth quien iba entre la multitud seguía muy intrigado ante lo ocurrido, no por haber golpeado al a chica y dejarla inconsciente, sino por el sentimiento tan familiar que le produjo el encuentro, Roxan no solo compartía rasgos físicos con Erika sino que tenia algo más... la posibilidad planteada por Miiko de tener entre alguno de sus parientes pasados a un Faery el podía descartarla por completo pues Erika jamás tuvo hijos, ella había desaparecido cuando solo tenia 16 años.

Después de que Ewelein terminara de curar las heridas de la chica afirmo a todos que no tenían de que preocuparse pues no corría peligro alguno. Aunque a ciertas personas hubieran preferido quedarse hasta que despertara Ewelein prefirió que la dejaran descansar con tranquilidad, ademas de que posiblemente no despertaría sino hasta el siguiente día.

Tras la oscuridad de esa misma noche, una figura se movía entre las sombras con el cuidado de no llamar la atención de nadie y si eso llegaba a pasar, bueno... decir que le sucedería a esa pobre alma no era necesario.

Las cortinas blancas en la enfermería se movían de manera armoniosa con el viento, y aquella harmoniza solo era rota por el inquieto sueño que la joven tenia, las pesadillas estaban regresando con ella corriendo en ese extraño lugar oscuro e invadido de muerte, el cielo escarla apenas le permitía observar el camino, frente a ella había tres criaturas humanoides, claramente sabia que habían perdido toda su naturaleza faeryca al ser corrompidos... daemons... las criaturas por inercia se lanzaron contra ella dispuestos a matarla, lo sabia, sabia que iban a matarla, lo siguiente para ella solo fue una luz borrosa que termino por matar a esos daemons, su cuerpo entero temblaba sobre todo sus manos en una de ellas estaba fuertemente cerrada en una empuñadura, al ver sus manos cubiertas de sangre el terror la invadió, no era ella, esa no era ella, jamás por ningún motivo mataría a otra criatura.

No...

.¡NO!

El grito potente le hizo despertarse de golpe y no solo eso ahora también sentía un fuerte agarre en la muñeca que le hizo gritar aun mas fuerte, el enmascarado estaba a un lado de ella sujetándole la mueca con fuerza. Ashkore debía admitirlo la chica lo había asustado al despertar de esa forma ¡Y vaya que tenia fuertes pulmones y una garganta resistente! Jalando le aun con mas fuerza logro sacarla de la cama donde estaba y arrinconarla en una pared.

-Gracias por alertar a los demás de mi presencia.- Ash preciono la garganta de la chica cortando le le aliento, solo necesitaba de ella una gota de sangre y conseguirla era problemático. La puerta fue abierta rápidamente por Ewelein quien en esos momentos por bueno y malo era quien hacia la guardia nocturna en el lugar.

-¡No! No por favor... no lastimes a Ewelein.- adivinando los pensamientos del enmascarado, la castaña suplico con poco aliento puesto que el agarre seguía siendo fuerte, tomándole la palabra, soltó a la chica solo para pegar su espalda a su pecho.

-Sera mejor que seas una buena Elfo y cierres esa puerta lo que asara aquí no es asunto tuyo.

-Mejor aun seras tu quien se marche ahora.- Ewelein le sostuvo la mirada duramente mientras hacia una discreta señal a alguien más, por desgracia Ashkore no era fácil de engañar levanto la daga que usaba para arrojarla contra la elfo, pero este apenas y pudo hacerse aun lado notando que el ataque no estaba dirigido a ella sino, a quien salia de la enfermería para alertar a todos.

Aunque fue un movimiento arriesgado el alboroto no tardo en escucharse, el ridículo grito de la chica habita alertado a los de odio mas fino

-Me gustaría jugar un rato con ustedes pero tengo cosas mejores que hacer.- colocando a la chica sobre su hombro salto por la ventana.

Ewelein no tardo ni un segundo más para ir a auxiliar a su compañero y gritar por ayuda, los primeros en llegar fueron Ezarel y Nevra seguidos muy de cerca por Leiftan, Miiko y el maestro Klauth y mientras aplicaba los primeros auxilios fue breve.

-El enmascarado se llevo a Roxan.

Apenas había saltado de la ventana con la chica sobre le hombro la dejo caer tal cual costal al suelo para después levantarla por la muñeca y comenzar a correr, la chica hacia uso de su propio peso para entorpecer su secuestro, si es que se le podía decir de ese modo, el alboroto ya podía escucharse tras de ellos.

-¡SUELTAME!- grito tratando de hacerlo tropezar, pero él no caería tan fácil

-Al final no sera como lo planeaba.- maldiciendo entre dientes Ashkore apenas pudo arrojar a la chica hacia la izquierda donde el también salto esquivando un ataque, Valkyon habia no solo escuchado el ajetreo sino que también había visto el como Roxan era llevada a la fuerza y demandaba ser liberada, el toque final, quien quería llevarla era el enemigo principal de la guardia.

-¡Dejala ir! - Valkyon estuvo nuevamente apunto de atacarlo pero Ashkore le obligo a detener el puño a milímetros de la nariz de la chica.- ¡Cobarde!- el enmascarado había usado a Roxan como escudo y nuevamente había una daga en su cuello.

-Jamás he jugado limpio.- El sujeto soltó un gruñido cuando la guardia llego, realmente no tenia tiempo para juegos estúpidos.- todo esto por la maldita rosa de los vientos.- susurro, Roxan apenas pudo girar un poco su rostro para verlo había alcanzado a escuchar lo que decía.

Ahora que lo pensaba mejor Zenda nunca le dijo que el sacrificio debía ser voluntario bastaba solo una gota de sangre... presionando el filo de la daga en su clavícula hizo un rápido movimiento generándole un corte a la vez que la arrojaba hacia esos perdedores al mismo tiempo se daba a la fuga.

-¡Que no escape!- Grito Miiko, Nevra y Valkyon corrieron tras de él, mientras que Ezarel se apresuraba con Roxan. Klauth quien también pudo haberlos ayudado a perseguir la sujeto pues no solo le habían hablado de él sino que también era quien no quería que llegara a Eel, tenia muchas preguntas que hacerle pero algo lo retenía a quedarse en ese lugar

-Tienes suerte vas a vivir.- tratando de aligerar el ambiente Ezarel intento bromear con ella.

- Yo... no, no, él ataco a alguien en la enfermería.

-Estará bien, Ewelein ya lo esta atendiendo. - haciendo al elfo aun lado Klauth se inclino para tomar a la chica en brazos.

-Regresemos a la enfermería y esperemos por los demás, Lady Miiko sera prudente que por ahora incrementen los guardias en todo el refugio.

-Si, Ezarel por favor ocupate de eso, Leiftan por favor intensifica la seguridad sobre todo en la sala del cristal y...

-No.- interrumpió le dragón.- la seguridad de los habitantes es mas importante, un par de guardias bastaran.

Así, tras dar las ordenes Miiko y Klauth fueron con Roxan a la enfermería. Ewelein curaba la nueva herida en el cuerpo de Roxan mientras la calmaba diciendo que la única victima del enmascarado estaba bien, casi al amanecer todos estaban reunidos en ese lugar, Ashkore se les había escapado.

-Pedí que se hiciera todo el inventario nuevamente tanto de la sala de alquimia como de la herrería, al parecer no falta nada, tampoco en la despensa.- Informo Leiftan, que el enmascarado se apareciera y no robara nada, pero que intentara secuestrar a Roxan era... era por demás extraño.

-El nunca irrumpe en el C.G. sin hurtar algo... -todos compartían las palabras de Miiko, por otro lado Klauth negó con la cabeza, tantas veces ese hombre entro a robarles y jamas pudieron atraparlo.- ¿Para que quisiera tenerte?

-Tal vez...- Ella lo pensó recordando los susurros.- Tal vez no me quería a mi. - ahora todas las miradas se posaban sobre ella.

-¿Que quieres decir? - cuestiono Nevra

-Lo escuche hablar y decir...y decir...- inexplicablemente sus labios comenzaron a temblar, no solo sus labios, su cuerpo entero temblaba el aire poco a poco comenzó a fallarle.

-¡Por el Oraculo! ¡Sufrirá un colapso!- Ewelein aparto a todos y junto con Ezarel trataron a la chica quien parecía perder la capacidad de respirar.- Todos salgan de aquí

Sin alegar los dejaron solos, Nevra miraba al suelo lleno de frustración ante lo que pasaba, primero el maestro Klauth y su enfrentamiento, pocas horas después Ashkore y ahora sufría un colapso, Roxan habia tenido días malos desde su llegada a Eldarya pero este encabezaba la lista.

Klauth...

Mientras él los observaba ajeno a sus pensamientos una voz, dulce y cálida lo llamo.

Klauth...

-Zen...- la figura traslucida de una mujer que él no olvidaba apareció por breves segundos frente a sus ojos, la figura comenzó a alejarse de él. - No, No, por favor regresa.

Los demás estaban inmersas en una discusión sobre lo que pasaba y no notaron cuando el dragón se marcho, Klauth buscaba a aquella mujer de la cual jamas pudo olvidarse su aura lo guio hasta la sala de cristal.

El lugar estaba sumergido en tranquilidad el brillo del cristal transmitir una sensación de calma a pesar de lo agitado de la noche, mientras él buscaba por todos lados, la silueta traslucida de la mujer apareció entre las luces que emanaba el cristal, no le cupo duda alguna de que aquella mujer era o fue su esposa.

-Zen

-Klauth...- el sonido de su voz parecía ser un susurro apenas audible, no cabía duda era su espíritu pero, había algo mas, algo en su esencia que faltaba.- te estaba esperando.

-Creo adivinar que fuiste tu quien me llamo para regresar al C.G ¿No es asi? - la figura espectral sonrió de medio lado negando con la cabeza.

-No, yo no puedo llamarte, quien lo hizo fue alguien que conoces bien y que necesita de tu ayuda.- ese tono serio ella solo lo usaba cuando las situaciones eran preocupantes, y, adivinando la pregunta que este estaba por hacer se apresuro a responder. - Erika fue quien te llamo.

-¿Que paso? - esta vez fue su turno para ponerse serio y soltar directamente la pregunta, ella sabia a que se refería con ese "¿Que paso?" pero no era momento de responder a sus preguntas, no cuando su tiempo era limitado y su poder mágico estaba bajo control de Zenda.

-Tienes que encontrar la rosa de los vientos antes que el Daemon que perturba la paz de este mundo, cuando este en tu poder revive las memorias que aun quedaron grabadas en ella.

-La rosa... Zen no es tiempo para estos juegos necesito...

-La rosa se dividió en dos partes una de ellas esta resguardada por un igual tuyo la joya central, solo el dueño de la rosa puede recordar su ubicación.

-Espera... ¡ESPERA!- grito al ver como la silueta comenzaba a desvanecerse su energía mágica también desaparecía no podía dejarla ir, no así, no sin saber por que ella...

En la habitación de Roxan la manzana dorada poco a poco perdía su brillo, la figura antes presente frente a Klauth la sostenía entre sus manos mirándola fijamente mientras las lagrimas que brillaban por la tenue luz de la habitación se reflejaban en su rostro.

-Mi pequeño Angel.

Con un suspiro entrecortado cerro sus ojos dejando que sus recuerdos la llevaran a aquellos días que ya no podía recuperar, tal vez si su egoísmo y sus celos no la hubieran dominado tendría recuerdos aun mas hermosos.

Pero sus recuerdos, solo la llevaban al momento en que su vida había cambiado.

Klauth siempre procuraba de cuidar a todas las criaturas mágicas que habitaban en aquel pueblo junto a los humanos, y el lugar no era del todo a pasible gracias al aquelarre y sus travesuras con los cultivos y el ganado, los humanos habían comenzado las caserías de brujas, no solo a las brujas sino a toda criatura diferente a ellos. Klauth fue alertado sobre una nueva casería casi a las afueras del pueblo, en ese lugar habitaba una unión de Aengels, de cierto modo una de las ultimas existentes.

La pequeña habitación apenas se iluminaba con la lampara sobre la mesa de madera, sus ojos azules estaban fijos en la llama y sus manos sobre su vientre dibujando pequeños círculos aun con todo lo que ocurría se preguntaba ¿Como podría decirle sobre eso? Klauth no quería el nacimiento de ningún niño hasta que su nuevo mundo no fuera creado siempre decía que la tierra ya no era segura para nadie, tan metida estaba en sus pensamientos hasta que algo le llamo, el sonido de la madera chirriante de la puerta al abrirse dejo entrar un poco del frio aire de la noche y después un hombre entro, ella recupero la respiración al ver que era Klauth... en aquel momento su Klauth...

-¡Por fin! - exclamo la mujer poniéndose de pie, el rostro de él lo decía todo, no había podido hacer nada por quienes fueron atacados por humanos.- Klauth lo lamento tanto.

-Cada vez estoy más convencido en que debemos irnos cuanto antes de la tierra. -sus palabras fueron duras y secas, lo comprendía hasta ese punto.

-Lo sé, pero por ahora solo debemos a...- sin terminar de hablar su boca quedo abierta en el momento en que un llanto infantil se hizo presente, hasta ahora ella no fue cociente del pequeño bulto en el brazo del dragón. -Klauth... ¿Que es eso?

-No pude salvar a Eder y Lena pero pude salvarla a ella del fuego.- ¿Ella? Tomando el bulto en sus brazos noto entonces que la tela estaba algo negra y el olor a quemado aun era perceptible, al descubrir el bulto entro los pequeños ojos brillantes por lagrimas de un recién nacido, unos ojos tan penetrantes y puros de un inusual color lavanda.

-¿Que...?

-No es usual pero tampoco imposible y sobre todo es un milagro, Zen, es una Aengel – él parecía feliz por ello, Extrañamente en algún punto de la historia de los faerys a muchas razas comenzó a carecer algo, para los lobos, la cordura bajo la luna llena, los vampiros comenzaban a ser débiles al sol, los dragones ya no podían reproducirse y en los Aengels las mujeres estaban muriendo, los nacimientos entre esa raza en peculiar eran todos varones pero ella... ella era la primera después de siglos en nacer.

-U-un milagro sin duda... Klauth nosotros, un milagro también podría...

-La he adoptado.- sus palabras fueron interrumpidas ante aquello.

-¿Perdona?

-No habrá ningún problema por que decida criarla es única y mas que nunca debe ser protegida, Eder era uno de mis mejores amigos yo cuidare a su pequeña como nuestra.- una punzada y un sentimiento amargo se instalo en su pecho... por que...Por que Klauth pretendía criar a esa niña cuando el mismo le ha dicho que no pretende tener hijos ¿Como decirle ahora que otro milagro estaba creciendo en su vientre? Él lo dijo: no es usual, pero tampoco imposible.

-No, no como mía Klauth, solo tuya, yo no quiero nada que ver con eso... contigo o con ella ¡NO PASARA!- molesta dejo a la bebé con brusquedad en los brazos del dragón que no entendía nada ni siquiera esa actitud agresiva. Saliendo de la cabaña, la bruja miro sus manos temblando.- mi pequeño... solo seras mio, solo mio ocultare su presencia de Klauth... esa mocosa... debería estar entre los de su raza no aquí no en mi hogar no apocando mi milagro...

La manzana dorada reboto en el suelo, en la habitación ya no había nadie, solo lo único que se sentía era el sentimiento de dolor y culpa junto al casi susurro de un sollozo.

Notas finales:

Me inspire xD hasta ahora el capitulo más largo que he escrito... un pequeño paréntesis aquí y es que posiblemente la historia vaya a ser editada ¡Pero! no la borrare solo editare ciertas partes por que siento que habrá cosas que no van a concordar con la idea que tengo. aclarado esto sigamos xD

Klauth sospecha en grande de Roxan ya no solo por su parecido a Erika sino por habilidades que van despertando en ella... ¿La rosa de los vientos? se dan una idea de que es y para que sirve esta arma el drama ya viene y drama del bueno, algunos se preguntaran ¿Klauth que relación tiene con la bruja? bueno aquí se aclara un poco más no lo que les paso.

Espero que les guste el capitulo.

Preguntas, dudas aclaraciones lo que sea todo es bienvenido.

hasta la próxima actualización n.n