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Chrome e Ykhar se miraban mutuamente, habían sido despertados en la madrugada por Lance ya que Leiftan necesitaba de esos dos para algo muy especial, el daemon por su parte no había entrado en detalles solo les había dado el libro que anteriormente había encontrado y dicho que necesitaba todo eso preparado lo antes posible. Al principio los dos pensaron que era algo para el oráculo, tal vez la creación de un oráculo falso para despistar a toda la guardia de Eel, pero lo que sus ojos miraron no era lo que imaginaron.

Leiftan quería que ellos dos se encargaran de crear un ritual.

-¿Puedes entender algo?- pregunto Chrome, Ykhar torció sus labios mientras cruzaba los brazos bajo su pecho, apenas tarde unos segundos en regresarle la mirada.

-Tu eres bueno en la alquimia, tu dime. – en respuesta el lobo bufo. – sé que quiere hacer, lo que no entiendo es ¿Por qué? Esto es algo complejo y tardaremos unos das en recolectar los elementos y sobre todo el más importante aquel que se denomina bidón.

-De eso me encargare yo mismo. - ambos dieron un respingo al escuchar la voz de Lance a sus espaldas, la brownie le quedo mirando fijamente él parecía estar mejor que en día anterior, es más ni siquiera parecía que hubiese estado en una mala condición. Lance se giró a verle y solo en ese momento ella desvió su mirada. – ustedes limítense a que todo esté listo lo más rápido.

-No entiendes que es complicado porque no lo has visto. - reclamo Chrome. – esto es un ritual muy antiguo y técnicamente nuevo para nosotros ¿Qué planean hacer esta vez?

-Hasta donde se cachorro, los planes de Leiftan no son de tu interés, solo estas aquí para limitarte a seguir órdenes.

-Lance, yo lo entiendo... pero... la única que podría con esto es Zenda y ella ya no...y a demás ¿Qué pasaría si algo sale mal?

-Si algo saliese mal, solo sería culpa de ustedes dos. – sus palabras desinteresadas les hicieron sentir un frio de pies a cabeza, en otras palabras, si algo salía mal Leiftan podría matarlos. - así que recomiendo que nada salga mal y así ustedes seguirán intactos. Aquí tienen una pequeña parte de lo que necesitaran. - dijo, dejando un pequeño saco sobre la mesa. – él sabe sobre los riesgos así que deberán preparar dos rituales; uno para corroborar que no habrá algún fallo y el final.

Ambos asintieron a sus palabras, Lance se retiró del lugar para dejarlos solos y siguieran con su "misión" Chrome no tardó mucho en ver el contenido del saco, en su mayoría eran varias plantas y raíces que despedían un olor dulce y algunos minerales de los cuales solo había escuchado hablar.

-Ykhar... ¿A quien crees que quiera sacrificar?

-No lo sé, y tampoco es asunto nuestro, recuerda estamos a sus órdenes para vengarnos y tener un mundo digno de nosotros, ya no hagas más preguntas y lo mejor será que nos demos prisa con esto.

Ambos cortaron s charla hasta ese punto, Ykhar retomo el libro para estudiar el ritual, mientras que Chrome salía para recolectar el resto de materiales, sería una tarea difícil, pero debían de cumplirla a como diera lugar.

***~~~***~~~

Valkyon se encontraba solo en la cantina, ese día para todos era muy deprimente, primeramente, porque la vida de una de sus amigas estaba en juego y la otra...

-Lance está vivo.

Nevra se había marchado de la sala, por lo que la noticia de Valkyon no pudo sorprenderlo al igual que a Miiko y Ezarel.

-Fue quien nos atacó en la isla de los lamentos. - confeso, Klauth asintió a sus palabras. Miiko y Ezarel se miraron mutuamente. Para la kitsune enterarse que Lance seguía con vida era un golpe fuerte, para ella él fue uno de sus seres más preciados, de cierto modo y a escondidas de todos ellos mantuvieron una relación en secreto.

-Eso quiere decir que tú eres...- Ezarel trato de terminar de hablar más fue Klauth quien tomó la palabra.

-Un dragón. Si, Valkyon y su hermano además de mi somos los últimos de nuestra especie.

- ¿Por qué Lance esta con Leifta? - pregunto Miiko aun desconcertada. - él...su compromiso con la guardia era admirable, Lance no parecía ser del tipo que llegaría a traicionarnos.

-No lo sé Miiko, me gustaría decirles que se por qué, pero no es así, desconozco a Lance, desconozco sus motivos. Pero, si les he confesado esto ahora es porque, no creo que esto sea una casualidad, hasta ahora con todo lo reciente, me atrevo a pensar que de cierto modo el oráculo sabía que esto nos pasaría, quiero decir Erika, Roxan y...todo esto.

-La situación ya de por si es confusa, tenemos el asunto de Roxan y lo más importante el oráculo fue secuestrado por Leiftan, mientras la tenga en su poder, nos tiene a todos. - Ezarel tenía razón y aunque la situación de Roxan también era preocupante, el oráculo era una parte sino es decir que es el elemento más importante para su existencia.

Valkyon suspiro pesadamente mientras evitaba seguir pensando en aquello, todo lo que pasaba era difícil de digerir, cambiar una vida por miles era cruel y para nada era fácil de tomar la decisión. Si tan solo hubiese otra forma de salvar a todos... otro suspiro escapo de sus labios. Un suave tacto en su brazo le hizo girarse algo sorprendido, pensaba que estaba solo en ese lugar; sus orbes doradas se toparon con unos verde olivo que le dio una tranquilidad inexplicablemente inmediata.

-Indely...

-Lo siento, te he visto otra vez perdido en tus pensamientos ¿Todo esta bien?

-Me gustaría decir que sí, pero... y tu ¿Cómo te encuentras? Te habías desmayado como si algo te pasara.

-Estoy bien, solo fue una terrible migraña que vino de inmediato, no suelo tenerlas a menos que...

-¿Qué?

-Como sabes soy una selkie y soy muy susceptible a la energía negativa y el ataque de Leiftan dejó un rastro terrible de energía negativa. – Valkyon parecía entender, él tomo su mano entre las suyas un gesto que hizo a la albina sonrojarse levemente.

Todas las palabras de Klauth le regresaron a la mente, y hasta ahora nunca se había cuestionado el hecho de sentir algo más que estima por esa mujer.

-Uno protege lo que ama y ama lo que protege. - dijo de manera inconsciente, la albina no pudo evitar dar un respingo en su lugar al escuchar esas palabras. – yo... quiero decir, el maestro Klauth él me dijo esas palabras cuando te desmayaste...

-Valkyon... disculpa si lo interpreto mal, pero ¿Es algún tipo de declaración por tu parte?

-Indely yo...- las palabras parecían atorarse en su garganta, ambos se miraban fijamente a los ojos y aquella parte que no era controlado por Zenda, sino que era Indely misma sentía su corazón latir con fuerza dentro de su pecho. - yo... es solo que recordé la situación también a Nevra y Roxan...

-Ah...

-Lo siento, no quería decirte eso, quiero decir...

-Valkyon está bien, lo entiendo no debes preocuparte, pero te molestaría explicarme ¿Qué pasa con ellos? – Por unos instantes dudo en contarle sobre la situación, solo Miiko, Ezarel, Nevra y él además de Klauth sabían la gravedad respecto a lo que sucedía con Roxan y Leiftan, no habían querido decir nada tampoco sobre el secuestro del oráculo para no causar un alboroto.

-Es complicado, lo siento Indely, no puedo decirlo...-él de obsidiana apretó ligeramente su mano antes de ponerse de pie, justo en ese momento todos sintieron algo extraño, a Valkyon le aprecio que la tierra bajo sus pies se había movido un poco e Indely solo observo el tarro de cerveza comenzar a deslizarse un poco sobre la barra.

-Valkyon...

Lo siguiente que ocurrió desato el pánico en todos, los cristales de las ventanas se estrellaron, y tal parecía que el C.G. completo era sacudo con fuerza, la primera reacción de Valkyon fue tomar por el brazo a la selkie y pegarla a su cuerpo, gritaba para tratar de calmar a las personas que estaban ahí más era inútil, todos se empujaban y corrían por lograr salir de la cantina a los jardines o a cualquier lugar que fuera seguro. Una de las lámparas se desprendió del techo cayendo apenas a medio metro de donde ellos estaban.

En la sala de alquimia ocurría exactamente lo mismo, aunque eran muy pocos los que estaban dentro fue más fácil para Ezarel y Miiko controlarlos del pánico al ver como todos los recipientes caían de forma violenta contra el piso. Y en la habitación de Roxan, Nevra la sostenía en brazos al igual que todos los demás estaba desconcertado ante la situación, la puerta de la habitación se abrió de golpe, Karren tenía el terror plasmado en la cara y no hizo más que acercarse a su hermano para sentirse a salvo.

-¡¿Qué está pasando?!- pregunto la vampiresa aterrada, los cristales de esa habitación también comenzaron a estrellarse.

-No lo sé, pero tenemos que irnos de aquí. – apresurado tomo a Roxan en brazos para salir de la habitación seguido de Karenn quien se aferraba a su brazo tal cual lo haría una niña pequeña.

Todos estaban fuera del C.G. la tierra seguía sacudiéndose, un terremoto como ese... algo como eso jamás les había ocurrido, el tiempo en que la tierra se sacudía les pareció eterno, hasta que poco a poco todo fue regresando a la calma. Las personas aún aterradas comenzaron a exclamar cosas que apenas y se podían entender, algunos fueron directos a Miiko y Klauth otros rodeaban a los jefes que estaban más cerca de ellos pidiendo explicaciones.

-Todos estamos igual de desconcertados y no tenemos una respuesta. - fueron las firmes palabras de Ezarel. Tras librarse de todos los que le rodeaban exigiendo una explicación tomo a Ewelein del brazo, había visto a Nevra un par de metros, todos debían reunirse y tomar una decisión, el secuestro del oráculo debía saberse tarde o temprano. – Nevra, tienes que venir con nosotros, que Ewelein y Karen se queden con Roxan.

-¿Qué le paso?- pregunto la Elfo al ver a la chica inconsciente.

-Le di un sedante, no tenemos tiempo para explicar todo, solo ocúpate de ella. - Sin esperar respuesta los jefes se marcharon a prisa, tanto Ewelein como Karenn compartieron una mirada desconcertada.

Tras algunas horas y pequeñas repeticiones del sismo, Miiko decidió hablar ante todos, todo el mundo estaba reunido impaciente por escuchar lo que su líder estaba por decirles, la kitsune se moría de miedo profundamente el pánico se apodero de ella, más se mantenía firme frente a todos, cerrando sus ojos respirando profundamente, solo agradecía que sus amigos y Klauth estuviesen tras de ella apoyándole en silencio.

-Hace unos días Eel fue atacado por alguien que consideramos un amigo y un aliado. Leiftan concejero de la guardia brillante y un amigo para todos resulto ser ese traidor. - las sorpresas no se hicieron esperar para muchos, Cameria arrugo la frente y cerro los puños con fuerza, aun recordaba a alguno de sus amigos haber caído aquel día y Karenn por su parte solo atino a desviar la mirada pues Chrome era también un traidor. - se aprovechó del hecho que los tres líderes, el maestro Klauth y yo fuéramos de misión por un objeto valioso para efectuar su ataque y no solo eso, sino que también...también aprovechó la oportunidad para secuestrar al oráculo.

El pánico desatado era inevitable, poco después la rabia contra la guardia exploto por haberlo permitido. Klauth coloco una de sus manos sobre el hombro de Miiko y soltó un gruñido que hizo que todo el mundo guardara silencio.

-Entiendo lo que todos ustedes sienten. - hablo el dragón. - pero culpar a la guardia no traerá al oráculo de regreso, se hará todo lo posible por recuperarlo, así que necesito... no, todos ustedes deben de poner de su parte para ayudar a esta guardia, para demostrar al enemigo que no cederán de manera fácil, todos son fuertes y no se dejaran vencer ante el miedo. Leiftan quiere que el miedo los consuma y no le darán esa ventaja al enemigo. - el silencio se establece, pero la confianza era lo que más comenzaba a florar en todos, era verdad, si todos caían presa del pánico las consecuencias serían peores. – Miiko, hace tiempo deje la guardia para dejarla en mejores manos y es tu turno de demostrar que no estoy equivocado, así que guía a las personas que llegaron aquí creyendo con firmeza en t y todos ellos.

Un nudo se formó en la garganta de la kitsune, ella asintió y retomo la palabra ganándose nuevamente la confianza de todos los habitantes.

Se había acordado que por seguridad era mejor montar campamentos en los jardines y que nadie se quedara dentro del C.G. o sus hogares previniendo un posible derrumbe, la biblioteca y sala de alquimia solo serían usados por la guardia brillante siendo los únicos autorizados para entrar; la cooperación de la gente fue magnifica y nadie objetaba nada, Miiko lo agradeció infinitamente. También se había montado una tienda especial para ser una "base" de reuniones para ellos.

***~~~***~~~

La suave manera en que era mecida le hacía sentirse en paz, sabía que estaba flotando en el agua y que todas sus penas se iban con ese suave mecer, pero, aun así, algo le inquietaba... ¿Por qué estaba ahí? Con los ojos cerrados el suave mecer se detuvo y solo hasta ese momento abrió sus ojos.

Se encontraba en un hermoso paraíso congelado en cristal, el frio que albergaba en el lugar le hizo tiritar abrazándose a si misma ¿Dónde estaba?

-¿Nevra?

Le llamo, pero nadie respondio solo su propia voz vino en eco a ella.

-¿Miiko? ¿Ezarel? ¿valkyon?... ¡¿Klauth?!

Nada, y ese hecho comenzaba a ponerla más nerviosa que antes, el lugar, aunque era hermoso carecía de vida, por un segundo pensó que tal vez Leiftan tenía que ver con todo eso. Sus piernas se movieron rápidamente por cada lugar, pero solo encontraba más y más extensiones de un jardín congelado.

- ¡¿ALGUIEN?!- insistió, su corazón comenzaba a latir con fuerza por la desesperación y si estaba en ese lugar era porque... ¡¿y si estaba muerta?!

Su respiración era acelerada, se llevó las manos a la cabeza. No, no podía ser ella no podía estar muerta y estar atrapada en el limbo, no...no... no, debía ser un error. Pero justo en le momento que se giró para regresar a donde despertó el horror se plasmó en su rostro. Ahí frente a ella estaba ella misma con la herida sangrante en el torso, con su mirada fija en ella.

Sus ojos se abrieron nuevamente de golpe junto a un grito mientras se enderezaba, no podía reconocer el lugar donde estaba, pero esta vez si pudo sentir unos brazos rodeándola para calmarla, le tomo unos momentos calmar su acelerado respirar la ayuda de la otra persona que acariciaba y besaba su cabeza le hizo regresar más rápido a la realidad. Nevra estaba a su lado.

-Todo está bien, fue una pesadilla, tranquila... tranquila.

-N-nevra... estas aquí...dios mío estas aquí. - ella se aferró a él conteniendo el llanto de sentirse aliviada. - tenía miedo, estaba sola y luego...luego...

-Shhh, Ro, estas aquí y yo contigo solo fue un mal sueño ¿lo entiendes? Nada va a separarte de mi lado, de nosotros. - con cuidado comenzó a limpiar las lágrimas que se deslizaban por sus mejillas. - respira ya paso.

-¿Dónde estamos?

-En una tienda. - respondió. - pasaron algunas cosas cuando te sedamos, y por seguridad todos estamos alojados en los jardines.

Roxan no comprendía a que se refería y Nevra se tomó su tiempo para explicarle todo lo ocurrido, desde que Valkyon era un dragón, hasta la inestabilidad de su mundo a causa del secuestro del oráculo y los sismos que se han estado repitiendo, la culpa de ser responsable de aquel secuestro se le instalo en el pecho. Por unos momentos dudo en sí debería contarle sobre su reciente visión, pero la final no lo hizo, ellos ya tenían problemas con el secuestro del oráculo para tener que sumarle el hecho de que ya estaba teniendo visiones de su propia muerte.

Ambos se quedaron en silencio solo unos segundos, Nevra notaba que Roxan tenía algo que decirle, pero ella no se atrevía a hablar, ni siquiera habían tocado el tema sobre el tipo de relación que ahora debían tener, es decir ni siquiera podrían considerarse ya ser solo amigos ¿o sí?

-Lo sé...- fueron sus palabras que rompieron el silencio, Nevra le quedo mirando a la espera de más y ella solo respiro tan profundo como los pulmones le permitieron antes de mirarle y sonreírle de una manera triste. – Sé que voy a morir, cada vez siento que el despertar de Erika se acerca y es inevitable; cuando me miro al espejo ya no me siento yo misma, ni siquiera puedo asegurar que la mujer en aquel reflejo sea yo, es mi rostro, son mis ojos. pero. - ella tomo con fuerza las manos del vampiro entre las suyas. - pero hasta que ella despierte quiero vivir feliz y tranquila.

-Roxan, no digas eso tú y solo tus eres dueña de tu cuerpo, es tuyo y Erika no tiene derecho a quitarte lo que te pertenece es...

-Nevra. - le interrumpió. - Estoy aquí por un propósito, y antes de que se cumpla quiero seguir siendo la Roxan que conociste, esa chica que afronta los retos que ayuda a los demás que se enamoró y se entregó a ti en el bosque, tal vez yo sea quien muera, pero sé que me mantendré viva en tu corazón así que por favor...

- ¿Por qué debes dar tu vida para salvar a los demás? – él bajo la mirada apretando sus manos, tal vez sus palabras eran duras y cargadas de rencor ante el destino de joven de orbes lila, pero a esas alturas sabiendo que ella era la persona que quería como compañera eterna debía de irse de esa forma. - si estuviera en mis manos te tomaría y nos iríamos lejos de todos para que ese destino no se cumpla.

-Lo entiendo, pero Nevra... el destino fue quien me trajo, quien nos juntos y quien decidirá en que momento debo irme, por eso te lo ruego hasta entonces déjame ser feliz a tu lado, ayúdame a sonreír una vez más hasta que sea mi momento de partir, te lo ruego.

La manera dulce en que le decía aquello le hizo formar un nudo en la garganta, él mejor que nadie sabía lo maldito y agradecido que le destino podía ser y Roxan ya había aceptado el hecho de que moriría, soltando sus manos la atrajo hasta él en un fuerte abrazo, más fue ella quien se separó un poco para unir sus labios con los de él.

-Te amo Ro.

-Y yo a ti.

Fuera de la tienda dos personas habían escuchado la pequeña charla, Ezarel y Valkyon se miraron de manera triste, su amigo iba a sufrir cuando ella se fuera y no podían evitar sentirse mal ante el hecho de que Roxan muriera, ambos prefirieron irse en lugar de molestarlos por la mañana tratarían el asunto que los había llevado a buscarlos.

Ezarel por su parte entro a la pequeña tienda puesta para ser la enfermería de manera provisional, Ewelein le miro tirarse sobre una de las camas y solo atino a enarcar una ceja.

-Te vez mal, pero dudo que te sientas enfermo para tener que venir aquí ¿Qué ocurre Ez? – pregunto la elfo, Ezarel le miro unos segundos antes de fijar su mirada al techo de tela. - ¿Ez?

-Escuche algo que me hizo pensar. - contesto. - Ewelein si alguien a quien amaras con el corazón esté a punto de morir ¿Qué harías? – la pregunta le sorprendió tanto que le hizo abrir los ojos de par en par, por un segundo pensó que Ezarel estaba enamorado de alguien, pero lo conocía también que de ser él no hablaría como si se tratara de otra persona, seria directo y más con ella.

-Bueno, me has tomado por sorpresa, aunque me intriga ¿De quién hablas? Y respecto a lo anterior, trataría de no demostrar a esa persona la tristeza que su partida me causaría...Ezarel ¿Esto tiene que ver con lo que ocurre? – él solo asintió. - por el oráculo ¿Quién?

-Ewe... esto que voy a contarte debe quedarse entre nosotros, y por favor no actúes diferente frente a esa persona por lo que estas por saber. - Ezarel comenzó a contarle lo más preciso lo que ocurría, él hecho de que Roxan fuera la encarnación del Aengel que Leiftan buscaba con desesperación, Lance vivo, y que la joven de orbes lilas moriría cuando Erika su otra lama despertara por completo para hacer uso de su cuerpo... la confesión era tan sorprendente e irrealista, que Ewelein tuvo que sentarse en el suelo para evitar caer de su silla por la noticia.

-Roxan va a morir ¡¿No pueden hacer algo?!

-Incluso ella sabe que su día está cerca y lo peor es que al parecer no hace mucho había comenzado una relación con Nevra y sabes, eso me hizo pensar mucho en "eso"

"Eso" Ewelein no pudo evitar bajar la mirada ante esa palabra, Ezarel como todos en ese lugar tenían sus pequeños secretos y el de ese elfo tenía un nombre claro.

-Ahora que lo mencionas, me sorprendió que con los siniestros no tomaras un Quiromagno y salieras de inmediato a las costas de granate ¿Has mandado a alguien no?

-A Taenmil, no quiero que nadie sepa sobre ella, admito que me hubiese gustado ir en persona para verla y asegurarme de que está bien, pero si sigo aquí es porque si logramos rescatar al oráculo aseguramos no solo el futuro de este mundo sino también el de ella que es mi mundo.

-Ez, creo que te lo dije una vez, pero... una familia debe estar unida y si los mantienes como un secreto, ella podría cansarse, sobre todo porque en mi última visita...- se interrumpió soltando un gran suspiro. – Ella esperaba impaciente tu visita para darte la noticia, pero con lo ocurrido es mejor que te lo diga y tomes ese Quiromagno para ir corriendo a verle.

-Ewelein...- sus palabras le asustaron. - ¿Qué pasa con ella?

-Está embarazada Ezarel y no me cabe duda de que ese hijo es tuyo.

***~~~***~~~

Recolectar los ingredientes para el ritual se estaba volviendo un fastidio, hace menos de un dpia se le hbia dado la misión de conseguir todo lo necesario para dos rituales y debía de admitir que la tarea no era sencilla, la pequeña "biblioteca" que tenían aunque fueran pocos libros la información era precisa y clara y más con el libro que hablaba de plantas y raíces para efectuar todo tipo de medicinas, a los alquimistas les parecería oro en sus manos aquella información, pero tras cada ingrediente y modo de preparar sin duda se trataban de los hechizos de una bruja.

Chrome miraba él libro más a fondo las raíces que necesitaba junto a otras tantas no estaban en ese lugar algunos ingredientes fáciles de conseguir se encontraban en las tierras de Eel y algunos minerales como los que Lance le había dado se podían encontrar con facilidad en las tierras de niebla y oscuridad, lo fácil seria conseguirlo lo difícil era llegar y salir con vida de aquel lugar. Haciendo uso de todo su coraje, el pequeño lobo fue a hablar directamente con Leiftan.

Leiftan se encontraba en una pequeña sala sentado al fondo era como ver a un rey en su trono, solo que su reino se reducía a un escondite en una cueva y unos cuantos traidores de otras tierras que se unieron a su causa.

- ¿Leiftan? – le llamo el daemon salió de sus pensamientos para mirarle y sonreírle tal cal como si no fuera un traidor, solo con su calma habitual.

-¿Pasa algo? Solo espero que no sea algo de lo que tenga que preocuparme.

-Creo que tal vez un poco, no lo sé la verdad... bueno tiene que ver con la misión que nos has dado a Ykhar y a mí para el ritual.

-¿Qué pasa Chrome? – su calma se esfumo y el lobo se arrepentía internamente por eso pero ya no había modo de salir de ese lugar y decirle que no importaba.

-Sé que quieres todo lo más pronto posible, pero, mientras buscaba los elementos necesarios me di cuenta que, aunque muchos estén a nuestro alcance algunas raíces se encuentran en Eel y otras en las tierras de niebla y oscuridad, por Eel no tengo problemas, pero el otro lugar.

-Entiendo... dime ¿Qué necesitas? Sé que ese lugar es peligroso, pero creo saber cómo apañármelas, además necesito salir un poco de aquí.

-Eh... ah si... pues son unos minerales fluorita, escolecita y crisocola, según la leyenda eran tesoros de las criaturas oscuras que habitaron la tierra y llegaron también a este mundo.

-La historia se distorsiona con el tiempo Chrome, así como decían que los Daemons éramos una raza diferente a los Aengels, en realidad somos la misma raza solo que con pensamientos e ideales distintos y poco entendido. Si crees poder encargarte de las raíces que crecen en Eel, la misión es tuya, pero solo debo de recordarte que ese ritual debe estar listo lo antes posible no quiero que sigan demorándose.

-S-si...Leiftan, necesito algo más

-¿Qué cosa?

-El libro que nos diste, Ykhar quiere estudiarlo, pero si puedo decirte lo que pienso yo soy el que sabe más sobre la alquimia que ella, no dudo que ya lo comprenda en estos momentos, pero me gustaría poder analizar el ritual para que todo salga a la perfección y no se cometan errores con el primer intento, si sabes que me refiero.

El daemon le quedo mirando unos segundos, aunque la mirada lo ponía nervioso, tras pensarlo bien, el lobo tenía razón, Ykhar era inteligente pero sus conocimientos en alquimia eran nulos y Chrome era mejor alquimista que cualquiera de los presentes.

-Dile a Ykhar que te de ese libro, si llega a negarse dile que es una orden mía, pero Chrome, ese libro es más valioso que tu vida, así que más te vale tener todo el cuidado del mundo con el, de lo contrario no creo que sea necesario decirte que pasara.

-Por supuesto Leiftan y gracias.

Rápidamente se apresuró a salir de ese lugar, apenas lo hizo sus pulmones liberaron todo el aire contenido y pequeñas gotas de sudor se deslizaron por su frente, ahora que lo recordaba estaba tan nervioso que ni siquiera se fijó en observar en que parte del lugar estaba el oráculo. Y posiblemente Leiftan se la llevara con él para ir en busca de los minerales.

Aunque por otro lado le causaba una gran curiosidad saber qué y para qué era ese ritual que debía efectuarse en la brevedad posible.

Notas finales:

¿Ustedes lloraron? QnQ yo si, la verdad me inspiré para esa esa escena iba a poner un poco de lime pero no quise arruinar el momento niños hasta yo me pongo seria en esto XD ok ya... por otro lado la declaración de una relación no es como se esperaba pero ya se dio a entender que entre Nevra y Ro existe algo, aunque por otro lado Valkyon no es un experto en declaraciones XD las cosas en Eldarya comienzan a ir mal por la falta del oráculo ( si me inspire un poco también en lo que ocurre en el juego ) por suerte Miiko logro sobre llevar el asunto con ayuda de sus amigos y de Klauth.

Por otro lado ¡¿Qué ha pasado aquí?! ¡¿Ezarel padre?! ¿Cómo? ¿Cuándo? ¿Dónde? ¿Quién es? A que eso les impacto muajaja bueno pues por ahora no diré nada más los dejare con intrigas locas, algún día se los presentare XD

Y ahora lo más importante ¿Qué es ese ritual que planea Leiftan? Sin duda no puede ser nada bueno si Roxan siente que esta su final cerca.

Bueno el siguiente capítulo tratare de hacerlo menos triste y digo tratare no prometo nada – le tiran piedra- QnQ bueno lo hare snif snif

Espero les gustara el capítulo.

Dudas, preguntas, aclaraciones, lo que sea todo es bienvenido.

Hasta la próxima actualización n.n