Capítulo 28
-Ibiki, nos hemos portado bastante bien, tenemos dos peces gordos para divertirnos, ya me había cansado de este bastardo -pateó a Obito que ya ni siquiera se movía, habían sacado sus ojos y sellado su chakra, estaba muerto en vida -ya ni siquiera responde el bastardo, te pasaste con la electricidad la última vez, tal vez dañaste su cerebro, si ya no se retuerce empiezo a perder interés -Anko rió divertida -pero olvídate de él, tenemos sangre fresca, bueno ya está medio acabada -rió con burla al ver al acabado anciano respirar con dolor, de sus mangas salieron pequeños explosivos, colocó lentamente cada uno sobre su cuerpo disfrutando la mirada de terror del anciano -no… sabes, con quién… demonios… te estás… metiendo -Anko sacó su lengua lamiendo sus labios con diversión -lo sé perfectamente, con un estúpido anciano que quiso pasarse de listo con el lindo zorrito, ¿sabes?, me agrada, te enseñaré a respetar maldito cretino hijo de puta -se alejó con diversión viendo explotar su piel -aaaaaahhh -podía ver pedazos de sus músculos y hueso en sus extremidades. Ibiki llegó con unas agujas conectadas a unos claves, enterró una a una bajo las uñas de sus manos -aaaaaahhh -la electricidad recorrió sus nervios causando el dolor multiplicado por mucho, ambos interrogadores reían con burla.
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-Este hijo de puta no saldrá de TI, será el saco de boxeo del lugar, no lo mandaremos a la cárcel del fuego, sufrirá diariamente, su celda; ¿revisaste los documentos que encontró Jiraiya en el sello en su brazo? -Itachi asintió con coraje -le di aviso a mi padre, era un desgraciado, él fue el culpable de provocar a mi clan, caímos como estúpidos -Tsunade negó con cansancio -todos caímos, no se culpen, lo importante es que ya está donde debe estar -Itachi asintió no muy seguro -¿Naruto puede salir del hospital?, me gustaría llevarlo a casa, han sido meses estresantes para ambos -la hokage negó -tómate este mes, sabes las consecuencias de romper el genjutsu, su cerebro recibió daño en su memoria, debes ser fuerte, se vienen meses pesados -Itachi asintió con dolor -cuando regreses debemos buscar a kabuto, según el interrogatorio, Danzo mencionó que Kabuto era el encargado de inseminar a Naruto con los genes de Hashirama y de Madara Uchiha, debemos localizarlo, escapó el hijo de puta -Itachi apretó el ceño con coraje, asintió.
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Naruto aún dormía, Itachi lo observaba con atención mientras lo veía dormir, besó suavemente sus labios, el rubio apretó su nariz respingona, abrió lentamente sus gemas azules observando al azabache frente a él, Itachi estaba nervioso -hola cariño, ¿cómo te sientes?.. -Naruto parpadeó con duda observando al hermoso azabache frente a él, sus mejillas se sonrojaron demasiado con sus palabras y su rostro, parpadeó nuevamente confundido, giró su mirada en la habitación, no reconocía el lugar, parpadeó con curiosidad viendo la mesita de noche, levantó una foto donde el azabache frente a él y él, estaban abrazados sonriendo, giró su mirada al mayor que lo veía con preocupación, Itachi había colocado la foto ahí a propósito.
Naruto mordió sus labios con duda, el azabache era alguien extremadamente guapo, su mirada era amable, bajó su mirada a la foto nuevamente, ¿era su pareja?, el rubio avergonzado levantó su mano, sostuvo un mechón de sus rubios con nerviosismo y vergüenza -¿quién eres? -Itachi abrió sus onix demasiado ante el susurro, le dolió demasiado ser olvidado, entendía el porqué, sabía el riesgo al romper el genjutsu, se veía tan dócil y vulnerable su pequeño, respiró hondo tratando de calmarse -soy Itachi, tu prometido-
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