El día de Navidad llegó. La gran casa de Emma, inundada en adornos en cada rincón de todo el paramétro,Lucy correteando por toda la casa como si fuera una loca desquiciada trayendo algunos aparatajes faltantes para el gran árbol navideño, que ocupa la gran sala de la casa Rouses; Un pino de tres metros, si, es gigante. Emma, observaba a su madre como si la mujer sufriera un ataque o algo por el estilo.La chica estaba junto al árbol colocando cada adorno que Lucy le pasaba.

-Oye Lucy,¿No crees que te estás tomando esto...Tan enserio?.- La chica se puso de cuclillas tomando una mini reliquia de Santa Claus para luego posarlo en el árbol mirando a su madre.

- Claro que no Emma. La Navidad es importante y sabes perfectamente bien que,- Fué a la cocina tomando un vaso lleno de agua que estaba en la encimera para luego posar dicho vaso en sus labios y tragar todo el liquido e ir luego a la sala - Que Todo Esto, es importante.No entiendo como estas tan tranquila si la primera que se emocionaba por todo esto eras tu.- La miró con escepticismo.

- «Era»,-Recalcó  la palabra- Como mencionaste, ya lo superé .No me importa.

- ¿Ah si?.-Preguntó Lucy cruzándose de brazos y mirándola divertida- Pues, como No te importa le pediré a Alex que coloque la estrella, ya sabes, es una tradición.

Emma se alarmó y soltó  un gritó  ahogado. Lucy sabía perfectamente que a Emma le importa la navidad, y mucho; aunque diga que no le importa, es lo contrario a eso.Ella es siempre la que coloca la Estrella en el árbol, y eso es lo que más le emociona de la Navidad.Colocar la estrella, sentir el viento gélido y frío cuando el invierno acecha con acercarse; Jugar con la nieve y sentir su piel erizar cuando cae en su cuerpo; Sentir esperanza, paz, felicidad...Sentir que olvida todo lo que le ha pasado alguna vez, los problemas, las preocupaciones,Todo.

- ¡No!

- Eso pense- Lucy chasqueó los dedos- Hija no lo niegues, tu y yo sabemos que adoras la navidad y no solo eso..

- Ya Lucy, basta. Alex no colocara la Estrella, yo lo hare.Sabes que es tradición.-Miró  hacia la punta del árbol- Y claro que no me importa la Navidad, es más si es por mí no existiría - Mintió - Pero, como adoras esta época te daré el gusto mama.

La chica se acercó a Lucy y le besó  la mejilla, yendo a su habitación, dejando sola a su madre en aquel salón.

Ya en su cuarto,se dirigió a la mesita de noche que se ubica de lado a su cama, se sentó en la orilla de la cama y abrió la gaveta y tomo un cajón: Un regalo. El regalo de Max. Ella sí lo compró, en realidad, desde que ella se alejó de aquella librería fue directo en busca del regalo perfecto para él.

«Ojalá le guste» Pensó la chica con el regalo en sus manos. Ella no supo por qué pero, se sintió  un tanto agobiada al no encontrar lo perfecto para Max. Por poco se arranca los pelos por no encontrar lo adecuado. ¿Por qué  se esmera tanto en el regalo perfecto? Ni ella lo sabe.Solo quiere lo perfecto, solo para él.

Max conducía su auto, con el regalo de Emma reposando en el otro asiento de lado de él, lo miró  por un segundo y una leve sonrisa se apoderó de su rostro al pensar lo feliz que estará  Emma cuando reciba dicho regalo. Un fugaz pensamiento paso por su mente, inundándolo todo: Emma.

«Joder,¿Por qué pienso tanto en ella? ¿Por qué  la quiero ver? ¿Por qué  añoro que la noche llegue para ir en su busca y verla? Ver su hermoso rostro, su hermosa sonrisa...Que me trae loco, esos ojos, tan azules como el cielo, mirarlos y perderme en ellos..»

«¿Que me pasa?» Se preguntó el inglés una y otra y otra y otra vez.

Aparcó su auto en la calle,bajó del auto y se acercó  a la entrada del gran y lujoso edificio, subió  en el ascensor y espero. Cuando el ascensor lo dejó en el piso correspondiente, salió de aquel cubicúlo y se dirigió a su departamento, entró  y fue directo a la ducha.

Salido de allí con una toalla puesta, tomó su móvil y marcó un número. Tres pitidos.

- Hey Nick.

- Max,¿Cómo estás hermano?

- Bien, mejor que eso.-La viva imagen de Emma se apoderó de su mente.

- Que bien hermano. ¿Por qué  llamas?

- Pues... Vas a la casa de Emma en la noche  ¿verdad?

- Sí, con Willa

- Con ¿Quién?

- Con TÚ novia joder. Emma dijo que en su casa se celebrara una pequeña  fiesta navideña y pues, vamos a ir Willa y yo

- Si si ya lo se. Nick, Me refiero a que...¿Estas ocultandome algo que..No se?

- No, No-No..- Nick titubeó.

- Está bien, nos vemos allá entonces

- Bien, adiós.

«Nick me oculta algo y debo averiguar que es»

Ya eran las ocho, Lucy caminaba nerviosa quitando y poniendo todo en la gran mesa repleta de deliciosos platillos hechos por Marsella y Lucy se aseguraba de que todo estuviera en orden.

Emma estaba en su habitación, eligiendo lo perfecto para la noche, sus amigos vendrán en poco y Max también. Se quiere ver hermosa...Por el.

- No! No es por el Emma, No, No y No. Te vestirás hermosa para Alex, si, para él. «Ay si, y yo nací ayer, por favor Emma, admite que lo haces por Max, admite que lo deseas ver con tu vida, admite que lo am...» No!.Dijo Emma gritando con furia a su subconsciente.

Fue directo al closet y tomó  un vestido color lilas sin tirantes y suelto  por las rodillas, con un pequeño bordado en el escote de los pechos,algo sencillo pero hermoso.La chica se vistió, peinó y calzó unos zapatos de ballet negros. Se acercó  al espejo de cuerpo completo y se quedó  estupefacta, esa chica frente a ella no es la Emma de ahora, la Emma enojona y fría, Esa Emma, que tiene frente a sus ojos es la Emma de hace dos años, la Emma feliz, la Emma que no sufria,La Emma de hace dos anos.

Una lágrima se asomó en su mejilla y ella la alejó.

«No llores Emma, No llores, No hoy» Se dijo a sí misma.

Bajó al salón y ahí  estaban todos o casi todos: Marsella,su madre, Alex,Nick,Willa.

- Hey-Dijo para que se dieran cuenta de su presencia.

- Emma,-Lucy la miró  y sonrió- Estas Preciosa hija.

Emma la abrazo y luego saludó  cada uno.- Emma, si no fuera por que eres mi amiga...-Nick se acerco a su oído para susurrarle- Te violaría aquí mismo.Emma le dio un codazo riendo.

- Nick eres un cerdo.

- Aun asi me quieres.- Hizo puchero.

- Estas hermosa.- Alex se acercó  a ella y la tomó  de la cintura, besandola.Todos los presentes los miró  con ternura, por lo menos Marsella,Lucy y Willa.

- Que tal si...¿Vamos a cenar?.-Lucy dijo dándole paso a todos para que fueran al comedor.Emma tomo a Nick del codo.

- ¿Y Max?

-No lo se Emm, dijo que vendría, de seguro viene después de cenar con su familia, en Navidad siempre va para alla a visitarlos.- Emma asintió no muy convencida y junto a Nick fue al comedor.

Acabada la cena, todos fueron al gran salón, Lucy y Marsella hablaban de trivialidades mientras tomaban ponche;Los demás hablaban entre risas y juegos junto al árbol de Navidad.

Lucy se acercó a su hija y le dijo al oído.

-Emma, Marsella y yo iremos a una pequeña celebración de  Martha en su casa. por favor, no pongan la casa patas arriba.

-Esta bien Lucy.No hay problema.

Lucy y Marsella dejando una vez la casa, todos gritaron de felicidad, ya que tenian la casa solo para ellos.- ¡Genial! Jodeeeer!!!-Gritó  Nick tomando a Willa de la cintura y con una copa de vino en la otra mano. Emma los miró  de reojo al notar cierta intimidad en aquel duo, Willa al notar que Emma los miraba se alejó  de Nick al instante.

-¿Que tal si  damos los regalos ya?-Preguntó Willa nerviosa.

- No, debemos esperar a Max-Emma se sentó  en el sofá junto a Alex. Tocaron la puerta- De seguro es él, vuelvo ahora-Emma se paró del mueble  y fué directo a la puerta de entrada y abrió. Un hombre elegante, con traje negro estaba frente a ella. Max . Ella lo miró  estupefacta, estaba guapisimo, para comersélo vivo.

- Ho..Ho.Hola.-Tartamudeó  nerviosa al tener semejante modelazo frente a ella: Max llevaba el pelo peinado para atrás, un traje negro y zapatos que hacian juego. La chica inhaló profundo y el perfume del inglés se apoderó de todos sus sentidos, embriagándola por completo, inundando el lugar con su olor masculino. Max le sonrió.

- Estas preciosisima Monita.- Max la miró  de arriba a abajo.La chica sintió  como si la escanearan por completo, se sintió  desnuda por completo al sentir la mirada de Max, como si traspasara el vestido con rayos equis y estuviera extaciandose con lo que ve.

- Pa-Pasa.- Emma lo dejó pasar y juntos se adentraron al salón.

- ¡Max! Hermano.-Gritó Nick abrazando a Max.- Llegaste en el momento oportuno.

-¿Ah si?

Willa al ver a Max se abalanzó a el y le plantó un beso en los labios, tomándolo desprevenido.

Nick apretó  su mandibula y su rostro cambió  a enojo.Emma miró al trío con un leve fruncimiento, preguntándose por qué Nick se enojó al ver a Willa y Max juntos ¿Es que acaso siente celos de Max?

- Bien, ya esta aquí .- Dijo Nick haciendo que Max y Willa se separaran. Cada uno tomó su regalo.

- Bien...Willa, es para..Ti.- Dijo Emma cediéndole el cajón cubrido por papel de adorno.

- Gracias Emm.- Willa lo abrió y gritó al ver que era.- Emma, esta precioso, gracias.- Willa la abrazó, dicho regalo era un lienzo, y en el estaba pintada la Torre Eifel. Willa una vez le narró  a Emma que quería conocer Francia, conocer la ciudad del amor.- Toma.- Willa le tendió el regalo, Emma lo abrió y le agradeció.

Despúes de que todos abrieron sus regalos, se dispusieron a beber vino y a hablar.Alex, Nick y Willa hablaban, asi que Emma y Max aprovecharon eso y se escabulleron del trío para salir al jardín.

La noche inundaba todo Londres, la luna le daba un toque de luz a toda la ciudad, las estrellas, tan brillantes como las luciérnagas, asomadas en el cielo; El viento azotaba a los arboles, Emma se abrazo a si misma debido al frío, Max noto que ella tiritaba de frío así que le cedió la chaqueta del saco.

- Mejor.- La rodeó  y se la colocó.

-Gracias.- Ella no sabia que hacer o decir, él la ponia nerviosa, tanto que hasta hablar se le hace difícil.

- Umm... Bonita noche.- Dijo Max mirando el cielo.

- Si...Es..Hermoso...-Emma miró al cielo y quedó  maravillada por lo hermoso y brillante que estaba.

Max la miró, y sonrio al presenciar tal belleza en una sola persona; carraspeó, tomando la atención de la chica.- To,Toma- Le cedió un cajón adornado con papel de color.- Es...Para ti.

Emma lo miró y luego recordo por que le cedia aquel presente.

- Vuelvo ahora.- Dijo la chica, fue hacia un árbol que estaba en el jardin y tomo el cajón que estaba allí. Se acercó a  Max nuevamente y se lo tendió.- Para tí.

- ¿Que tal si tu lo abres primero?.- Propuso Max mirándola.

- No no, tú primero.

- No, tú primero.

- Bien...-La chica comenzó a desgarrar el papel de adorno emocionada, como una niña pequeña , ansiando descubrir que hay en aquella caja. La chica abrió la boca en forma de « O » estupefacta al ver que era.- Max...Esto es...

- Si pues yo...- No lo dejó terminar, ya que se abalanzó  hacia él,dándole un abrazo.

- Gracias- Susurró en su oído.- Gracias por el libro.

- Si pues, cuando nos vimos en la libreria te vi afligida ya que no lo podías comprar asi que, yo lo hice por ti. Ademas The Fault In Our Stars es un gran libro, eres digna de leerlo.- Sonrio.

Se separaron y le tocó a el. Abrió  la caja con ansias y sonrio al ver que era: Un medallón, era una nube sobre otra, como la imagen del libro Bajo La Misma Estrella, la mitad de las dos nubes, como la mitad de un corazón . Llevaba escrito «Ok» «Ok» El no entendió  ya que solo tenía la mitad del medallón y pues le falta la otra mitad.

-Gracias..?-Dijo él, mirándola dudoso.

- ¿No entiendes cierto?-El negó a lo que ella rió  tomando la cadena que llevaba puesta en el cuello y mostrándole que ella tenía  la otra mitad, el acarició  la mitad que ella poseía en aquella cadena; La miró y luego ambos sonrieron.

Ella tomó la mitad del medallón que ella poseía  y Max tomó la suya, la unieron y por un momento, por un milisegundo, el medallon al juntarse brilló . Ellos lo miraron asombrados, luego leyeron el mensaje que estaba escrito en el: «Okay? -.Okay»

-Es como las dos nubes de la imagen de Bajo La Misma Estrella.

- En realidad, es esa nube, es que...No se, cuando lo vi, supe que debi tenerlo, ya que es como...- La chica miró  hacia el suelo avergonzada por lo que iba a decir.

- Vamos, dilo, no pasa nada.- Dijo Max tomando su mentón y levantando el rostro de Emma.

- Es como si nos..Complementaramos, No lo sé, solo...Yo..-Susurró. Max acercó  su rostro al de ella, la miró y luego dirigió  su vista a los labios de la chica, esos labios tan suaves, rojos, deseosos, incitándolo a besarlos, sentirlos, extaciarse al lamerlos con su lengua y descubrir el sabor que poseen.

- Eres hermosa.-Susurró  Max mirándola y acercándola a su anatomía. Emma lo miró nerviosa, lo quería besar, lo deseaba tanto o mas que su vida. Tenerlo en sus brazos y no dejarlo ir jamás.

- Eres hermosa.- Repitió una vez más, tomando su rostro en sus manos y mirandola a los ojos, esos ojos azules que lo están volviendo loco.

Emma se acercó más al cuerpo de Max, esperando el siguiente paso por parte de él. Max se acercó más, estando a centimétros de los labios de aquella chica, sus respiraciones jugaban una con la otra, como si estuvieran a punto de  extinguirse. Max la acercó más, rozando sus labios con los de ella...

«Ella es solo un objetivo. Solo eso»

Pero...Se alejó de improvisto, se alejó,recordando sus propias palabras, se alejó, se fue...Huyo, como un cobarde, dejando a la chica alli...Sola.

Emma no entendió por que se fue, preguntándose «¿Que hice mal?» Lágrimas se asomaron en sus mejillas, entró corriendo a la casa y subió  los escalones yendo a su habitación y cerrando de un portazo. Se deslizó en la puerta y dejó  salir las lágrimas, gritó de rabia, por que fue una tonta al dejar que Max se acercara tanto a ella, comenzó  a llorar nuevamente.

Alex comenzó  a dar golpes a la puerta con fuerza. Asustado por lo que le haya pasado a su novia. A la chica que ama.

- Emma .Abréme la puerta por favor. Por favor.- Gritó Alex al otro lado.

Emma lloró aún más, al escuchar a Alex, lloró por que ella no lo merece, lloró por que ella no lo ama, y se culpa por eso, lloró  por que está  sintiendo algo por Max. Lloró por que lo admite, por que admite que se esta enamorando de aquel patán que la dejó sola en aquel jardin. Llora por que se enamoro de un idiota.

Se enamoró, y ella juró no hacerlo, pero en su corazón ese juramento se habia roto al momento que conoció a Max Irons.