17. Confesión

El lugar se quedó en silencio, solo se podía escuchar el sonido exterior a la habitación.

Había un ambiente algo tenso e incómodo.

-Eh... yo - Estaba nervioso, muy nervioso - S-sí, me gusta alguien - Dijo.

Chuuya lo miraba fijamente, esperando a que respondiera a la segunda cuestión.

-Su inicial es... - Respiró hondo - La C - Soltó finalmente. Sus mejillas se volvieron de un leve tono rosado. Y cerró los ojos con fuerza.

Chuuya, al contrario, los abrió por el asombro.

No podía ser él ¿Verdad?

Se conocieron a penas unos meses atrás.

Seguramente sería la inicial de otra persona. Quizás de alguien de la universidad.

-Sé que tal vez esto suene raro, pero, me gustas - Dijo Dazai - Y no sé el porqué, simplemente sé que todo el tiempo que hemos pasado juntos ha sido... increíble - Confesó.

-Se que esto es algo idiota de mi parte - Rió amargamente - Pero solo quería que lo supieras, no espero que me correspondas o que salgas conmigo, podemos ignorar todo lo que ha pasado en estos últimos minutos y seguir como estábamos - Finalizó. Y luego se fue corriendo al baño.

Chuuya quiso detenerlo y decirle algo, pero se encontraba paralizado y las palabras no salían de su boca.

Era un sentimiento extraño, alguien se le acababa de confesar por primera vez en mucho tiempo, pero esta vez no había sido como las anteriores, esta vez había sido ¿especial? No sabía cómo describirlo.

Miró a la pareja de gatos, ellos hacían ver el amor tan fácil.

.
.
.
.
.

Por otro lado Dazai entró al baño, y se echó agua en la cara para calmarse.

Mierda, ¿en qué estaba pensando al confesarse?

Seguramente Chuuya estaría ahora mismo burlándose de él. O incluso ya no lo querría ver nunca más. De seguro le daba asco.

Asco.

Esa palabra resonaba en su cabeza.

No supo cuándo, pero lágrimas bajaban por sus mejillas.

Y unos pequeños sollozos se escapaban.

¿Por qué?

¿Por qué le había empezado a gustar él?

Si no se hubiesen peleado la primera vez que se encontraron, quizás ahora no se encontrara en esta situación.

Todo fue su culpa, por qué no podía ser normal y que le gustaran las chicas. O por qué no podía gustar de otra persona.

Todo esto se parecía mucho al drama de los libros que leía.

Soltó una risa en medio del llanto.

Se echó más agua en la cara y luego simplemente se sentó en una esquina, sin hacer nada, solamente perdido en sus pensamientos.

.
.
.
.
.

Pasó media hora, en la que ambos habían tenido su tiempo para pensar con claridad todo lo que había pasado.

Chuuya decidió que lo mejor era hablar con él y corresponderle como era debido, después de todo habían estado a punto de besarse no hace mucho.

Y Dazai pensó en ignorarlo por un tiempo, no sabía cómo iba a reaccionar Chuuya, y no quería descubrirlo sin estar preparado.

Por lo que salió del baño y cogió sus cosas sin dirigirle una sola palabra.

Luego salió de la clínica dirección a una cafetería no muy lejos de allí.

Cuando llegó, se sentó en una mesa, y pidió un café con leche junto a un trozo de tarta de zanahoria.

Cuando se lo fueron a entregar se quedó mirando fijamente al chico que le estaba atendiendo.

Su cabello castaño rojizo y sus ojos azul oscuro se le hicieron familiares. Entrecerró los ojos intentando recordar.

-¿O-odasaku? - Dijo quedándose en shock, había cambiado mucho desde que eran pequeños.

El pelirrojizo, que ya se había dado vuelta para volver a su puesto de trabajo, se detuvo bruscamente.

-Solo una persona me ha llamado así en toda mi vida - Pensó y se dio la vuelta - Dazai - Se pudo ver una sonrisa en su rostro.

-¡Si eres tú! - Dazai saltó a abrazarlo.

-Si - Correspondió el abrazo.

-Hace mucho que no te veo ¿Qué ha sido de tu vida? - Preguntó Dazai.

-Pues tuve una infancia normal después de que me adoptaran, estudié literatura, y no sé si lo sabes pero ya he publicado un par de novelas - Dijo alegre.

-Ayyy, me alegro muchísimo - Dijo.

-¿Y tú? ¿Qué tal? - Preguntó curioso.

Dazai le empezó a hablar de casi todo los detalles de su vida, habló de su familia, sobre sus estudios, y de su actual mascota, junto a todos por lo que estaba pasando por ella.

-¿Sabes? Llevo una tarde horrible - Dijo.

-¿Por?

Dazai le empezó a contar todo lo que había pasado y todo sobre Chuuya. Mientras que Oda escuchaba atentamente.

-Por lo que me has dicho, esa persona te aprecia mucho. Además dijiste que hubo una vez en la que casi se besan y él no hizo nada para apartarte - Dijo y él asintió - Tampoco te dijo nada después de confesarte, así que no creo que tengas que preocuparte, quizás no encontraba las palabras correctas.

-Pero- - Fue interrumpido.

-Pero nada, se que hace mucho tiempo que no nos vemos, pero el Dazai que yo conozco no se echa atrás por cosas así - Dijo mientras lo agarraba por los hombros - ¿Te acuerdas de cuando quisiste hacer galletas en el orfanato, pero no quedaba harina?¿Qué fue lo que hiciste

-Estuve chillando todo el día para que las cuidadoras la compraran - Dijo divertido.

-Si hiciste eso por una galletas no te detengas por algo así - Finalizó.

-Odasaku, se supone que el psicólogo voy a ser yo - Se rió y Oda también.

Miraron la hora, se habían vuelto las diez de la noche. No sabía cómo es que era tan tarde.

Intercambiaron números, para seguir en contacto y Dazai tomó rumbo a la puerta para volver a la clínica.

En ese momento una mancha naranja apareció a través del cristal de esta y luego de abrió rápidamente.

Pudo ver a Chuuya, estaba sudado y respirando fuertemente.

-¡Dazai! - Se acercó a abrazarlo - Mierda estaba tan preocupado, y se había hecho tan tarde que no pude quedarme quieto - Dijo y Dazai se quedó paralizado.

-¿Q-qué? - Dijo incrédulo, no lo odiaba.

-Dazai... lamento no haber respondido antes, no sabía que decir, me tomaste por sorpresa - Dijo mientras apretaba sus mejillas con sus palmas y obligaba al otro a agachar la cabeza.

-Te quiero, joder te quiero muchísimo, te has vuelto la persona más importante para mí es solo un par de meses - Dazai se quedó en shock.

-Y-yo también te q-quiero - Dijo y Chuuya lo acercó bruscamente para besarlo.

El beso era dulce y torpe, sus labios se rozaban libremente y con ganas, esta vez sin que nadie los interrumpiera.

Poco después, cuando el aire les empezaba a faltar, se separaron.

-¿Ahora qué somos? - Preguntó Dazai.

-¿Qué quieres que seamos? - Le devolvió la pregunta Chuuya.

-¿Novios? - Dijo nervioso.

-Pues eso, a partir de hoy somos novios - Dijo y volvió a besarlo.

Una llamada interrumpió el beso.

Chuuya cogió la llamada, no se pudo escuchar muy bien lo que decía la otra persona al teléfono, pero al ver que la cara de Chuuya se volvía pálida supuso que algo bueno no sería.

-¿Qué pasó? - Preguntó una vez hubo colgado la llamada.

-Son los cachorros, están pasando por un momento crítico - Dijo con un tono asustado y preocupado.

Continuará...

¿Qué les pareció?

Para serles sincera, no me gustó mucho como escribí algunas partes, pero creo que quedó algo decente.

Por cierto, más publicidad, subí un conjunto de One-shot para el día de San Valentín. Los pueden encontrar en mi perfil como "Couples".

Espero que estén bien y que hayan disfrutado el día de San Valentín.

O quizás hayan usado el fierro golpeador de parejas felices.

Bueno en todo caso tengan un buen día y nos leemos en la próxima actualización.

Fecha en la que se escribió el capítulo : 19/02/2022

Fecha en la que se publicó : 19/02/2022

1294 palabras.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top