CAPITULO 4
¿ES UNA CITA?
*PDV MIRTELIANIOL*
...Ayer fue un día muy largo, ah, esta chica me saca de mis casillas. Bueno, da igual, la verdad... quiero invitarla a un lugar pero-- MALDITA SEA.
-OSTIA- reconocería esa manera de expresarse y esa voz donde fuera.
-¿En serio? ¿otra vez?- cierto, se me olvido, ando en la parte trasera de la escuela, un bosque "artificial", por así decirlo, y como estaba sumergido en mis pensamientos... choque de nuevo con esta insolente. Al prestarle atención, me fije que tenía un rasguño y.. je, estaba haciendo un puchero... como siempre.
-IDIOTA, bujuju, na', si duele pero no es para tanto- decía pero... pff, su cara es otro cuento.
-Ja, bueno... no me importa- dije de manera fría la verdad es... no sé porque estoy tan molesto por esa estupidez.
-...Lo lamento- dijó casi en un susurro.
-¿Qué?- obviamente escuché pero... quiero escucharla decirlo de nuevo.
-Nada, sé que lo escuchó y si no, pues, su problema- dijó parándose con cara tímida y molesta a la vez, limpiando su uniforme... esa herida es peor de lo que parece, agh.
-Ven- dije sin más rodeos, arrastrandola por el brazo.
-SUELTEME, VIEJO DECRÉPITO, IMBÉCIL, PEDÓFILO..... MIRTELIAN- estuve aguantando todos los insultos pero cuando dijó mi nuevo apodo... no sé porque pero... perdí el control.
La acorrale en el árbol.
Quedamos muy cerca. Ella estaba muy roja y... ¿asustada? ¿exitada? ¿emocionada? no lo sé pero... quisiera verla así más seguido, roja y nerviosa.
-¿Qué dijistes?- dije de manera coqueta ante su mirada... comiendome entero.
-Q-que, ah, m-me suelte, viejo decrépito, imbéc-cil, p-pedófilo...- decía mientras yo solo sonreía victoriosa y coquetamente, acercándome cada vez más, recibiendo como respuesta de ella... un sonrojo y un movimiento hacia el lado pero... miró hacia abajo, para ser exactos... mi entrepierna, gracias a mi agilidad le atrapé las piernas con la mía.
-Je, no lo creo- dije... no me había fijado pero... la chiquilla esta buenísima, agh, pasar tiempo con ella me hace daño, jeje.
-S... ah, suélteme, maldito uke de mierda- pfff, si no lo saben "uke" es un término del yaoi el cual es el... cute, por así decirlo... VAMOS, el fragil y... ella parece ser del tipo "sin romanticismo, sin gentileza, sin paciencia, sin delicadeza" las 4 'S'.
-Je, para verme como un uke... te pongo demasiado caliente-.............. ¿qué diablos estoy diciendo?
-...- solo se quedó mirándome a los ojos de manera intensa, pero esta vez era diferente como si... estuviese descubriendo o sospechando de algo en ella- porfavor, s-suélteme-
-Con una condición-
-¿C-cuál?-
-... Que hagas lo que yo quiera por un día o... que me beses- dije, claro, esto segundo solo lo decía por fastidiar pero...
-Y-yo... ¿acaso le gusta esta zenzual y hermosa y sexy y inteligente y talentosa chica?- sé que dijó todo eso a propósito, tratando de que me irritara por la manera tan horrenda de hablar ahora pero... falló.
-Je, ¿acaso quieres comprobarlo?- dije mientras me acercaba más a su cuello, ganando un pequeño suspiro al sentir el rosé de mis labios.
-P-pare, ah, haré lo que me pida- ella no estaba gimiendo solo estaba respirando hondo para tratar de controlar esos impulsos que, estoy seguro, la estaban torturando en su mente.
-Bien, ahora iremos a la enfermería para que te curen esa herida- dije alejandome de ella mientras hiperventilaba.
-Jeje, de acuerdo... mi amo-... ah, ah, ah, uff, d-dijó con un tono muy provocativo, sonriendo de manera coqueta mostrando sus dientes caninos, mordiéndose ligeramente los labios, poniendo una mano en su espalda y otra en su pecho.
-Gulp, solo vamos- nos dirigimos a la enfermería donde dijeron que todo estaba bien, que solo se tendría que vendar en donde se espetó un vidrio que salió de la nada.
-Am, Aledi-san ¿q-quieres ir al mercado?- pregunté nervioso ante su respuesta.
-...Sip, pero no hasta muy tarde ya que quiero terminar... mis asuntos- dijó claramete ocultando algo pero no son mis asuntos.
-Bien- dije con una sonrisa ancha... ¿esta chica es bruja?
- Bueno, usted es el que tiene el control, mi amo, tengo que obedecer cada cosa- dijó con lo que parecía ser su voz real grave pero aun así femenina a la par que sensual, sexy y coqueta.
-Habla como lo haces realmente, tu voz real, esa es mi orden- al decir eso ella se sorprendió aun con la pose que usó la primera vez.
-¿Porqué?- dijó con la voz que siempre ponía.
-... Porque es hermosa- no soy del tipo romántico o que se ponga nervioso o celoso pero ella... sip, es bruja.
-Je, gracias pero... --
-Y es una orden- interrumpí antes de que dijera otra cosa.
-Agh, de acuerdo, mi amo, apesar que la deteste y me traiga malos recuerdos- dijó susurrando desde "mi amo"...
-Bien, vamos- dije tomándola de la mano pero ella me detuvo y me dijo que tenía que ir a casa(a la puta la escuela) y así la esperé un rato hasta que llegó en donde decidimos encontrarnos.
Pasó poco tiempo. El viaje fue muy callado. Los dos nos mirábamos de vez en cuando de reojo, al hacer eso nos poníamos rojos ligeramente. Llegamos y en lo primero que ella se fijó fue en ropa... Mentira, lo primero fue la comida. Sin embargo se estaba controlando en salir corriendo para probar.
-Bueno, voy al baño de Burger King así que... me tienes que esperar aquí- dije para que cuando me fuera y no la estuviera viendo, o eso creyera, se fuera... haber si se atreve a desafiarme. Cuando me alejé lo suficiente, osea entré a el sitio, salí y la miraba de lejos para ver que hacía. Estuvo dudando un poco pero... perdió contra su apetito.
-Jaja, parece que tenía razón- susurre a lo que ella mirándola con una sonrisa mientras ella tomaba la comida...
Ella se había vestido de una manera tierna, claro, más que antes, más con la lujuria que miraba a la comida... ah, es linda. Ella siempre esta llena de vida, es tan extrovertida pero a la vez tan introvertida... no lo sé, siento como si solo lo hiciera para... agh, dá igual solo son cosas mías.
-Je- reí para que me mirará. Al hacerlo se pusó tan roja como un tomate- dá igual, puedes comer, te ví mirandolo y quería ver si me hacías caso y si lo hacías... te invitaría para comer eso pero...- dije admitiendo mi plan.
-Aaagh, que cruel, yo sufriendo porque no podía comer de esta delicia pero... gracias de todas formas-
-Jaja, ¿qué pensabas? ¿qué no te lo voy a pagar de todas formas? no soy tan descortés, después de todo fuí yo quien te invitó en primer lugar- dije pagándole lo que ella había gastado y dándole a ella la cantidad.
-... No, no quiero que haga tales cosas por mí- dijó calladamente.
-Sabes que soy testarudo- dije refiriéndome a cuando hablábamos por la página.
-Jeje, sí pero... - decía sonrojada, moviendo la punta del pie derecho de lado a lado y sobando el brazo derecho de arriba a abajo.
-Que linda te ves así...- susurre en su oído de manera picarona.
-Gulp, no haga eso- decía alejandome suavemente de ella.
-Aledi-san, me tienes que dejar pagar tu comida y... darme uno- al decir eso último se pusó alerta.
-NO, CON LA COMIDA NO SE META, ES MÍA- dijó poniendo la comida trás ella, ah, que linda.
-Jeje, solo juego- comenté ganandome que me sacará la lengua como la niña que es- bueno, ten- dí el dinero que le dije que le daría a lo que ella lo tomó tímidamente. Es sorprendente como puede ser tan bipolar.
-Gracias- dijó con su voz normal.
-En serio, me encanta, es demasiado sexy- dije para mis adentros.
-¿Qué le encanta?- preguntó curiosa.
-Nada, la comida- dije ocultando la realidad, sin siquiera sonrojarme o tartamudear ante la pequeña confesión.
-Mmm, no le creo pero dá igual, si lo oculta es por algo- dijó haciendo caso al mandato que le dí hacía un rato, osea, con su voz real.
-Bueno, ¿que haremos ahora?- dije. Pasó el rato. Reímos, hablamos, bromeamos, provabamos de todo, básicamente hicimos de todo.
Vamos caminando de vuelta en silencio. Ella hacía, de mala gana, todo lo que yo le decía que hiciera pero de vuelta me decía el "mi amo" de manera coqueta, sabía lo que me provocaba.
-Oiga... - rompió el silencio, ganando mi atención.
-¿Mm?- pregunté, mirandola.
-Me alegra haber aceptado, me relajó este día- dijó calladamente, mirando al cielo, tratando de esquivar mi mirada por la vergüenza, tomando su helado con ambas manos y recubiertas por un abrigo de tela que le compré.
-Je, me alegró... aparte de conseguir mi objetivo, pude conocerte mejor, reírme bastante, provar de todo y... vaciar mi billetera- dije de la misma manera, callada, y mirandola de reojo de una manera burlona.
-Je, oiga, fué usted quien decidió pagar todos mis caprichos- dijó mirándome con una pequeña sonrisa.
-Sí... - nos volvimos a quedar en silencio, sin embargo, no era un silencio del todo incómodo.
-Ne... - volvió a pronunciar después de unos minutos.
-¿Mm?- volví a preguntar.
-¿Esto es una cita?... siempre e leído que son así pero... jamás he estado en una- dijó sonrojandose y mirando hacia abajo avergonzada...
-No lo había pensado de esa manera, espera... ¿qué? ¿tienes 15 años y jamás has tenido una cita?... así que eres realmente mi niña, Digo, digo, y-yo...- al ponerme tan nervioso ella río... es hermosa.
-Jaja, entonces sí que es una cita- dijó mirandome sonrojada.
-Sí, sí que lo es- dije mirándola, igualmente, sonrojado.
-Ne... ¿no se ha preguntado porque somos así estando con el otro?- preguntó, ella sabé que no soy así pero me mostraba así con ella.
-Sí... pero mi respuesta es que tú eres una bruja- dije bajando la mirada avergonzado.
-Jaja, yo creo que sé la verdadera respuesta y... realmente no me gusta- dijó con el rostro color carmesí.
-¿Y? ¿cuál es?- pregunté admirando tal hermosura.
-...No puedo decirlo- dijó desviando la mirada nuevamente.
-De acuerdo pero... ¿porqué?-
-No lo quiero decir... porque me dá miedo y es demasiado temprano-
-Oh, por eso esa cara que habías puesto hace horas...- dije calladamente, creo que sé a lo que se refiere y... tampoco me gusta... así que... ese es el porque del otro drama y mi comportamiento... ¿por ese sentimiento? si es así... no me gusta nada...
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