*PDV MIRTELIANOL*

...En todo el camino no ha dejado de temblar. Ya estamos aquí, no hay vuelta atrás.

-M-mite- me llamó con una voz asustada y tierna. Sus mejillas están rosadas y sus ojos aguados, el abrigo que llevaba le quedaba grande y su pelo despeinado, se vé tan tierna.

-¿Si, mi princesa?- apreté su mano la cual estaba sosteniendo desde el que estábamos en el carro.

Se apego a mí tapando un poco sus labios con la manga de su abrigo.

-...tengo miedo... ¿y si intenta hacerte daño, o a tu familia?- ....no puedo creer que la que este en peligro sea ella y solo piense en mi y mi bien estar.

La acerqué para besar su cabeza sosteniendola entre mis brazos.

-Estaré bien al igual que ellos, lo que importa ahora eres tú y nada más- ella subió su mirada, aproveché para besarla, un beso dulce y suave es lo que necesita para saber que no esta sola.

Al separarnos juntamos nuestras frentes, ella tenía una preciosa sonrisa en sus labios. Mejor será que vayamos entrando.

Tomé su mano para guiarla dentro del cuartel. El recepcionista nos vió curioso.

-¿En que puedo ayudarles?- preguntó amable.

-Venimos a denunciar a un hombre que se fugó de la cárcel hace poco- el choco pareció saber de que hablaba.

-Enrique Rosa, supongo- asentimos- pasen a la oficina de la jefa de policía, es un tema bastante grave y importante- le hizo un ademán a un policía que se encontraba allí.

-"e importante"- escuché murmurar a Aledia. Jaja, siempre es lo mismo, núnca puede quedarse callada cuando alguien hablá mal, siempre los tiene que corregir.

Seguimos a el policía hasta una oficina.

-Ya se le ha avisado que vienen, suerte, esperó atrapen a ese cabrón, no puedo hacer nada porque no es de mi unidad- rodó los ojos y se fué. Tocamos la puerta un par de veces hasta que recibimos un "adelante". Pasamos, Aledia parece que recobró la fuerza porque no hay rastro de miedo o nerviosismo en ella.

-Son los de el caso de el desaparecido Enrique Rosa, ¿no?-asentimos- Siéntense entonces para que me puedan dar un informe detallado- nos sentamos delante de ella.-¿Quiénes son y qué ese hombre tiene que ver con ustedes?-

-Yo soy la chica cuya familia fue asesinada por él y la que lo metió a la cárcel, supongo que eso lo explica ¿no?- ella la miró con asombro para luego sonreír.

-Eres fuerte, eso me gusta, lo siento por lo de tu familia. Bueno, sigamos, ¿dónde lo encontraron y cuándo exactamente?-

-No se preocupe, ya ha pasado mucho tiempo de eso. Él vino a nuestra casa, iría a preguntar por mi, supongo, fué ayer a las 5 de la tarde- ella iba anotando. Dejaba que Aledia respondiera pues solo estoy aquí de apoyo moral, claro qur cualquier cosa la ayudaré.

-¿Porqué no lo avisaron en el mismo momento?-

-Honestamente, no nos dió la gana de pasar tanto trabajo, también porque yo... Emm... Supongo que la reacción más normal de uno al ver a alguien que jodio tu vida entera luego de muchos años cuando al fin lográs ser felíz te afecta en gran manera y yo prefiero pensar con la cabeza fría y calmada a que estando histérica- el admitir que se dejó controlar por sus emociones la avergüenza por más simples que sean ella siempre le gusta tener el control de ellos.

-Cada vez me agradas más, ¿Sus nombres y su relación? ¿Cuántos años llevan juntos?-

-No creo que eso sea relevante pero buano, somos novios aunque desde solo hace 4 días, noa conocimos hace 4 años. Él se llamá Mirtelianol Abades y yo Aledisaneu- creo que no dijó du apellido por el simple hecho de que su familia es algo conocida por las personas.

-Oh, pensaba que llevaban más, ¿qué calse de relación tuvo con el asesino de su familia?-

-Él y yo fuimos novios en noveno grado, muy estúpidamente me dejé llevar y al año descubrí que me engañaba, al poco tiempo de eso mi hermana se suicidó y él me pidió volver, le dije que no y el en venganza mató a mis padres y luego al resto de mi familia- contaba con una sonrisa sarcástica.

-Gracias por ahorrarme todas las siguientes preguntas. Siento que haya sido así siendo tan jóven, sin importar la edad realmente pero... Bueno, ¿qué piensa que hará después?-

-Creo que en unas semanas vendrá armado y con unos ayudantes, no tengo demasiadas razones para creer esto, solo sé que es como se vengaba de alguien antes- sentía como apretaba un poco mi mano. Le apreté de vuelta la mano y la miré con una dulce sonrisa...
espero. Ella bajó la mirada un poco sonrojada, los nervios de verdad que la ponen tan... Ah.

Noté como la mujer nos miraba con una tierna sonrisa. Le sonreí con algo de vergüenza.

-El resto de preguntas estan en el formulario, son preguntas como cual edad tienen, su dirección y así, porfavor, cualquier movimiento o dato que sepan de él avisen de inmediato- asentimos, nos levantamos y nos despedimos. Ahora íbamos de camino a Wendy's para almorzar, no habíamos hablado en todo el camino.

Aún sostenía su mano. Ya no tiembla, eso es de verdad bueno.

-¿Te sientes mejor?- ella me miró, supongo que estaba en su mundo. Le sonreí un poco.

-Eh, sí, aún estoy tratando de procesar todo, disculpa-

-No tienes porque disculparte, es normal, no todos los días un asesino que metiste a la cárcel se escapa para vengarse y más siendo el asesino de tu familia y tu primer amor fallido- pude escuchar como reía.

-Buen punto- abrimos la puerta para pasar al Wendy's- Me alegro de tenerte, dudo que lo hubiese podido afrontar sola- me dió una media sonrisa.

-Estaré aquí para lo que necesites así que quita esa cara de perro asustado, sabes que soy fuerte y que puedo protegerte- hice que los músculos (casi nulos) de mis brazos se marcasen haciéndola reír a carcajadas.

-PFAJAJAJA, pero que idiota, jaja- nos pusimos en la fila para, obviamente, saludar a el que nos atiende. Tan solo le sonreí.

Cuando ya era nuestro turno pedimos unos 40 nuggets en total, 20 para ella y 20 para mi, con papas fritas y dos refrescos grandes, luego pediriamos dos 'frostis' de chocolate.

Nos sentamos en una mesa al fondo pegada a la ventana. Era temprano, 11:56 am exactamente. Solo espero que los días pasen rápido. No quiero que sufra por más tiempo del que es necesario, claro que si se pudiese evitarlo por completo encantado lo hago.

-¿Como te va en la escuela? Ayer no te pude preguntar- otra vez la sorprendí.

-Bueño, aler eabamos haendo un... Un bizcocho de siete pisos para una boda, mucho más difícil de lo que puedas creer. Hoy estabamos decorando. Tampoco es fácil. Estoy muy emociona y nerviosa porque vienen unos reposteros famosísimos y algunos críticos. En la otra clase de cocina regular estamos trabajando con unos platillos asquerosos pero es por que tienen muchos vegetales y eso sabes que no me gusta, lo haremos mañana porque hoy no nos dió tiempo- solo callé para dejarla hablar, lucía muy felíz.

-Mmmh, eso núnca parece que cambiará, pf. ¿Sobre las clases de moda?- suele tomar unas clases de costura una o dos horas, tan solo es una afición pero ella de verdad esta felíz por poder hacerse la ropa como le de la gana.

-Ah, sí, a la maestra cada vez se le nota más la barriga, dice que será un niño y me preguntó que si lo quería cuidar cuando cumpliera los dos meses, claro que le dije que sí. Una vez cuidé un niño y, Dios, si me enamoré de él, era tan chiquito, gordo y adorable. Cuando se quería dormir se acostaba en mi pecho y se chupaba el dedo hasta quedar dormido. Soo espero que no sea como la nena gritona esa, no se podía hacer nada porque ella rápido gritaba, no lloraba, gritaba y de la manera más tosca, era horrible, y para colmo era muuuuy seria, no se reía con nada, al contrario de él que uno ladraba o se reía y el se empezaba a reír a carcajadas, tan bello- se metió un nugget y tres papas para seguir hablando- bueño, el pungto e que a genal, me a paso mu ben y omo e... amagado e Aliaga a ño egta me a pao megor-

-Ehhh...¿qué?- ella me miró con una sonrisa dejando ver lo que comía, siempre hace eso.

-...que como Arriaga el amargado no esta me la paso mucho mejor-

-Ah, ok, no comas con la boca llena, no quiero que te me mueras-

-Bleh, ¿y tú? ¿Cómo te fué hoy y ayer?- me sacó la lengua la cual tenía un poco de comida aún.

-Puerca- la miré con el ceño un poco fruncido- Me fué muy bien, como ya te dije los chicos y el director estan locos por que vuelvas. Ayer estaba hablando con ellos sobre que era lo que querían para navidad, las respuestas fueron en verdad cómicas y algunas muy lindas-

-¿Qué quieres para navidad tú?- preguntó curiosa.

-Nada, porque ya lo tengo todo- la miré con lo que espero fuera dulzura.

-Bah, que cursi, yo quiero....¡Muchos dulce y un viaje a Japón!- la miré sorprendido.

-¿Núnca has ido a Japón?- me negó con la cabeza un poco baja- tsk, entonces iremos cuando todo se resuelva-

-¿No es muy caro? Honestamente no creo tener el tiempo ni el dinero necesario-

-Tú eliges; conocer a mis padres o ir a Japón- estoy más que seguro que elegira ja...

-Padres, tengo curiosidad- me sonrió inocente. Supongo que no puedo decir nada con anticipo si se trata de ella.

-¿Me quieres?- pregunté. Mi familia es adinerada, bastante adinerada y por es no quiero empezar a desconfiar de ella.

-¿Son de la mafia?- preguntó entre nerviosa y emocionada.

-No- la miré con cara de "no, idiota".

-Ah, ok, ¿entonces?- comió de nuevo lo que quedaba, es rápida.

-Solo quiero saber si me quieres, no es para tanto-

-ji, aa-

-¿Qué?- rodó los ojos para masticar un poco más rápido. Al tragar habló.

-Que sí, baka- solo la ignore para seguír comiendo.

Rápido pasó el tiempo y ya nos encontrabamos en casa. Ella se había ido directo a el baño mientras que yo me puse a barrer, no solemos limpiar muy seguido.

Al ella salir del baño me avisó y cambiamos de roles, yo estaba en la ducha y creo que ella esta barriendo.

El agua esta algo fría... mejor lo dejo así, me relaja más el agua fría que la caliente. Me pregunto porque no pudimos estar tranquilos al menos un mes. Solo tuvimos 4 días en los que fuímos novios sin problemas. Ella lucía tan felíz de todas formas supongo que nada puede ser color de rosa para siempre pero hubiese deseado que la cosa no fuera con ella.

Tomé la toalla para secarme y salir desnudo al cuarto. No hay nada que ella no haya visto ya y las ventanas estan cerradas así que no me importa.

Tengo que ir a ver como esta, esta muy callada. Ale hubiese gritado cualquier cosa, un insulto probablemente... ¿Porqué estoy tan ansioso ahora? Estaba tranquilo pero de repente me dió un mal presentimiento. No es como si hubiese pasado ahora es más... como si fuera a pasar.

Me puse mi ropa interior mientras que en la mano llevaba mi camisa y pantalón. Mientras iba por el pasillo me puse mis boxers. Al mirar al salón mientras me ponía mi camisa la ví tirada en el sofa, al verme me sonrió de manera haragana.

-Sha terminé, ¿me llevás a la cama?- estiró sus brazos como bebé.

Con un suspiro la cargué en brazos hasta la habitación. Al acostarla en la cama le dije lo que tenía en mente, esto no puedo permitir que pase.

-Pequeña, ¿mañana podrías quedarte conmigo en las clases? O, como sé que estan haciendo algo importante, ¿me puedo quedar contigo? Lo que pasa es que tengo un mal presentimiento y no quiero que te ocurra nada- acaricie su mejilla ante su atenta mirada.

-Pero tienes que dar clases y yo no puedo permitirme faltar, mejor te mando un texto cada 20 minutos o cada hora para que estes tranquilo, van a ser cosas muy random como closet o solo una letra, ¿qué te parece?-

-...Bien, pero si ocurre algo me escribes V.D.A.E.P, me lo acabo de inventar, a que soy original- comenté orgulloso gracias a la tensa atmósfera que se estaba creando.

-Vida de Aledia En Peligro, ¿enserio? No es nada original, de todas formas ya acuestate que tengo sueñito- me acosté a su lado con una sonrisa para que al rato ambos cayeramos dormidos abrazados.

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Espero lo hayan disfrutado. En más de una ocasión en este cap me quedé sin imaginación así que... Se.

Que tengan una linda semana