Su medico le dijo que esto podía pasar en cualquier momento sin previo aviso, podía pasar de día, de noche o como fuera y si no recibía la ayuda necesaria algo muy malo podía pasar.

El dolor agudo en el pecho y la falta de oxigeno comenzaba a hacerse notar, no era como los dolores normales que solía tener, este era fuerte, lo sentía en lo más profundo de su pecho. Eran casi las cinco de la mañana, y pasaría por esto solo, terminara bien o terminara mal lo haría solo.

Krest dormía a su lado completamente ajeno al dolor que él mismo estaba sintiendo. Era increíble como a pesar de los años su habitante de Liliput parecía envejecer muy poco. Aunque más maduro su bello enanito seguía teniendo esos rasgos algo infantiles que siempre le encantaron.

Aún recordaba demasiado bien cuando empezó a mirar a su mejor amigo con otros ojos, a sus cortos catorce años de edad.

"El profesor frente suyo hablaba sin parar de un tema que no le interesaba, en cambio Krest  tenia su atención puesta al frente, tan concentrado que ni cuenta se daba de esos ojitos  violetas que lo miraba sin perderse ningún detalle.

Le gustaba ver como fruncia el entrecejo cada vez que le costaba entender algún detalle de la materia, como brillaban sus ojitos azules cuando lograba resolver un ejercicio o pregunta a la primera oportunidad. Amaba sin darse cuenta cada gesto de ese pequeño francés que se gano su corazón si que él lo supiera.

- Labelle, ¿Entendiste lo que acabo de explicar?

El profesor lo hizo despegar la vista de Krest  el que también lo miraba tratando de disimular que se dio cuenta de como lo observaba  antes.

- Claro profe, por supuesto que entendi.

Krest lo más rápido que pido y sin que nadie se diera cuenta, escribió en un papelito un pequeño resumen de la materia todo para salvar, de nuevo, a Zaphiri de un castigo. Tantas veces lo había salvado de esa forma y lo seguiría haciendo de ser necesario. El profesor ni cuenta de dio de su pequeña trampa.

- Te debo...- comenzó a contar- con esta 15, ¡¿Que haría sin tí!?

- Reprobar. Quedar repitiendo el curso. Dejarme solo con mi aburrimiento en otra clase.

- ¡Eso jamas!

- Lo sé.- le sonrió de una forma que sin saber hacia latir el corazón del mayor con demasiada fuerza."

El dolor aumento, ahogo un quejido lo mejor que pudo. Decidió acostarse mirando el techo era la posición más cómoda por el momento.

Respiraba lento en un intento de que esa situación fuera más llevadera, algo inútil al parecer pero era lo único que podría hacer. Krest se movió a su lado pegándose a él, haciendo su tarea de no despertarlo más complicada cuando su mano se poso en su pecho, con su mano izquierda sujeto la de su esposo con cariño y amor.

"- Krest tengo algo que decirte.

Desde lejos Ilias le daba ánimos, ¡No podía arrepentirse ahora!  Estaba más nervioso que nunca antes en su vida, ese mismo nerviosismo aumento aun más cuando tuvo toda la atención de ese habitante de Liliput puesta en él.

- ¿Que pasa?

Por alguna razón intuía lo que le iba a decir, esperaba no equivocarse porque si no lo hacia pronto, le diría el mismo lo que le estaba pasando a su corazón. 

Zaphiri se arrepintió, termino diciéndole cualquier otra cosa. Ilias desde lejos también se dio cuenta de la idiotez de su amigo, pero ninguno de los dos se espero lo que haría ese pequeño enanito.

- Zaphiri no me voy a callar esto más tiempo y estoy seguro es lo mismo que de verdad me ibas a decir. También me gustas y si quiero salir contigo.

Su pobre bicho solo pudo boquear como un pecesito hasta que reaccionó. Solo pudo dejarle un beso que casi fue un roce en los labios, el primero de muchos que se darían en la vida"

Su vida fue mucho mejor de lo que pudo desear, formo una familia hermosa, su hijo y sus nietos eran su mas grande orgullo y sabia que estaba en las buenas manos de esa Blanca Nieves salvaje.

Ladeo un poco su cabeza para ver por una ultima vez el rostro de la única persona que pudo ganarse su amor. Lo vio dormir por última vez,  apreto su calidad mano entre la suya con las pocas fuerzas que le iban quedando. Con su último alimentos le susurro:

- Fuiste, eres y seras lo mejor que me ha pasado en mi vida... no fue casualidad que me enamorada de ti...

Hizo un ultimo esfuerzo para dejar un beso en esos cabellos castaños que comenzaban a llenarse de canas. Krest sonrió entre sueños, regalandole sin saber su ultima sonrisa a esos ojos violetas que ya no lo volverían a admirar.

- Lo siento por dejarte...

"- ¿Vienes conmigo? Papá"

Vio a una pequeña personita que le sonría con cariño apoyado en la cama.

~•~

El despertador no dejaba de sonar obligandolo a abrir los ojos. Cuando lo hizo le pareció extraño que su amado bicho siguiera dormido siempre era el primero en estrellar ese aparato del demonio contra la pared para que se callara.

Sonreía con una calma que nunca le había visto y aferraba una de sus manos contra su pecho, en la que también estaba su mano derecha.

Entendió lo que ocurrió cuando sintió esa misma mano helada. Acaricio esas cabellos negros que tanto ama con cariño y con temor a despertarlo, aunque eso no fuera a suceder. Dejo un beso en su frente.

- Siempre seras lo mejor de mi vida, Zaphiri...

~•~

Dégel terminaba de poner la mesa para que su familia desayunaba cuando su celular sonó, vio la pantalla con extrañeza era muy raro que su mamá lo llamara tan temprano. No supo porqué pero sintió su pecho apretarse. Contestó.

- Hola mamá.

- Dégel...

Lo único que Kardia alcanzo a escuchar y ver cuando bajaba las escaleras fue a su cubito decirle a alguien que iría lo más pronto posible y dejar el celular sobre la mesa. Vio su mano temblar. Se le acerco preocupado.

- ¿Paso algo?

No recibió una respuesta con palabras, Dégel simplemente se aferro a su cuerpo y comenzó a llorar como si fuera un niño. Entendió lo que ocurrió. Solo pudo abrazarlo con fuerza.

🍎

¡Llevo llorando casi todo el capítulo!
😭😭😭

*C va al rincón emo*

ScorpioNoMilo.💔