Diario de ¿Zobek?, Última entrada: 

"Y así se acerca la batalla final. Akame te está esperando, amigo mío. Sabe lo que has hecho. Lo sabe todo. Akame ha anhelado todo este tiempo que salvarías el mundo, y ahora estás a punto de lograrlo. Estás al filo de conseguirlo. Ella mantuvo su fe en ti a pesar de todo, debes cumplir tu destino y la verdad saldrá a la luz. Yo te ayudaré, viejo amigo. ¡Estaré contigo en este momento, tu momento de victoria!"

...

https://youtu.be/oXcdSLcxkEU

Gabriel había caído en la zona donde el último fundador de la Hermandad de la Luz había ascendido a las alturas, creando también al 3er Señor Oscuro, caminando poco a poco hacia el círculo azul donde una gran luz estaba tocando el suelo. Cuando llega dice poniéndose de rodillas.

Gabriel: Oblivium sempiternum daemonis.

Una gran luz aparece en el lugar, Gabriel observaba cómo estaba delante de él la última parte de la máscara. Cuando la luz desaparece, la toma en sus manos, apareciendo después las otras partes de la máscara, empezando a juntarlas poco a poco hasta formar la máscara completa.

Ahora, teniendo la forma de traer Akame de vuelta, tras todo el duro camino que tuvo que pasar... finalmente todo lo que hizo, valió la pena.

Hasta que entonces escucha la voz de Zobek.

Zobek: Felicidades. Has hecho bien amigo mío.

Delante de él estaba Zobek, quien al parecer en sus manos tenía una máscara, pero él mismo se mostraba con una sonrisa hacia el Belmont.

-Veo que has reunido los poderes. ¡Excelente! -Gabriel dice seriamente en ese momento-

Gabriel: Podemos poner fin a esto de una vez por todas. Ven.

Zobek dice perdiendo su sonrisa teniendo una actitud calmada y neutral.

Zobek: Sí. Acabemos con esta... farsa.

Hablo el extendiendo la mascara que tenia en sus manos la cual Gabriel se le hacía conocida

-Finalmente, es la hora de la verdad. Deshagamonos de... nuestras máscaras.

Dijo para después ponerse la máscara en su frente, la cual empezó a sacar unas luces verdes, confundiendo a Gabriel hasta que de repente una luz cubre el cuerpo de Zobek, y cuando la misma desaparece...

Gabriel ve la verdadera forma de Zobek, siendo quien había venido a buscar. El último Señor Oscuro.

El Señor Oscuro de los Nigromantes.

Gabriel: ¿Tú? ¿Tú eres el Señor de los Nigromantes? ¿El último Señor?

Zobek ríe al escuchar las palabras de Gabriel quien se notaba en shock.

Zobek: ¡Ahora comienzas a entenderlo! Él sube sus brazos y dice recalcando lo dicho. -Sí, Gabriel, fui yo el que lanzó el hechizo que separó a la Tierra de los Cielos.

El dice girando su cuerpo hacia atrás mientras que muchos rayos aparecían en la zona.

-Sabía que esto obligaría a mis hermanos en el Cielo a contactar con la Orden aquí en la Tierra.

Gabriel no dice nada, mientras que sigue viendo al que antes fue su aliado y quien quizás considero un amigo tras tanto tiempo que solo tenía Akame.

-¡La profecía fue su pequeño rayo de esperanza en la oscuridad!

Él gira su mirada donde estaba Gabriel para seguir hablando

-Nosotros los Señores Oscuros, como tú nos llamas, hemos estado impotentes demasiado tiempo... atrapados en una incómoda tregua durante siglos; cada uno poseyendo nuestra parte del poder, pero cada uno incapaz de dominar al resto... Hasta ahora.

Gabriel pone una mirada molesta, dándose cuenta que había sido manipulado todo este tiempo por Zobek para que matara a sus hermanos.

-Acabe tan cansado de estos años de inutilidad. -Hablo el bajando sus brazos al decir eso. -Una tregua entre nosotros tres. Cada uno incapaz de ceder, o de cooperar con los demás.

Gabriel no dice nada, pero Zobek dice con frustración recordando esos momentos en su mente.

-Ellos estaban tan ciegos antes el potencial del poder que teníamos... si pudiera ser combinado.

Gabriel se acerca poco a poco hacia el Vampire Killer con la intención de matar a Zobek antes de que se dé cuenta de lo que estaba pasando.

-Deseé ese poder infinito, y estaba preparado para llegar a las profundidades del infierno en busca del conocimiento para conseguirlo.

Dijo cerrando sus puños recordando su hazaña con demasiado honor.

-Luché contra legiones de demonios y me hice más fuerte; entonces, una colosal y terrible fuerza entró en mi, ampliando mi conocimiento de las artes oscuras hasta que alcanzaron alturas inimaginables.

Él mira de nuevo a Gabriel y dice revelando una dura verdad.

-Todo lo que necesitaba era alguien para restaurar el poder luminoso de los espíritus, según la profecía... Y tú has sido el perfecto tonto.

Gabriel se molesta cada vez más cuando Zobek sigue diciendo que lo usó como a una marioneta... a un maldito esclavo.

-Por supuesto, no podía despertar sus sospechas de que era yo quien deseaba el poder para mí mismo... No... Usé la profecía como tapadera... y a ti... ¡Mi brillante caballero!

Gabriel dice cuando finalmente Zobek termina de hablar.

Gabriel: No te permitiré meterte en mi camino, Zobek.

Zobek dice riendo un poco.

Zobek: Estoy seguro de que no, lo harás.

Dijo empezando a caminar en círculo alrededor de Gabriel.

-Pero la verdad es que no tienes voz en este asunto, querido amigo. Podría fácilmente matarte por tu irrespeto, pero afortunadamente... no hay necesidad de eso

Él estaba confundido al escuchar las palabras de Zobek.

Gabriel: ¿Qué quieres decir?

Zobek responde señalando una parte del cuerpo de Gabriel.

Zobek: ¡El Guantelete lo hará por mí!

Gabriel mira donde estaba el Guantelete Oscuro donde estaba sosteniendo la máscara, recordando cómo la consiguió, notando también como el mismo estaba brillando sin que él lo ordenara.

-Como ya dije... el poder Oscuro es mi dominio. Forjado en las entrañas del infierno, nada menos.

Gabriel estaba intentando mover su cuerpo para atacar a Zobek pero notaba que por lo del Guantelete, estaba paralizado.

-Tan solo faltaba el pequeño asunto de la niña y su protector, ¡pero lo superaste excelente!

Dijo, pero Gabriel grita cuando una energía verde sale del Guantelete.

Gabriel: ¡No! -Él cae de rodillas sintiendo el dolor que estaba tocando su cuerpo-

Zobek dice con una de sus manos liberando energía mientras que caminaba alrededor de su ahora inútil marioneta.

Zobek: Necesitaba tu fuerza de voluntad y tu valor para completar la misión; pero no podía arriesgarme a que te volvieras demasiado poderoso.

Gabriel no dice nada, sintiendo cómo la energía que salía del Guantelete Negro no le dejaba pensar en una forma de liberarse

-Necesitaba controlarte al final... una vez que los asesinaras. Sabía que nunca serías capaz de enfrentarte a mí mientras lo tuvieras puesto.

Gabriel solo se estaba llenando mas de ira al escuchar cómo Zobek había influido en la muerte de Claudia y el Caballero Negro.

-Pobre y pequeña Claudia... era tan dulce.

Gabriel dice teniendo en su mente la imagen muerta de Claudia atravesada por una de sus dagas.

Gabriel: No.

Zobek dice hablando ignorando la reacción de Gabriel.

Zobek: ¡Incluso superaste mis más ambiciosas expectativas! ¡Abriéndote paso hasta la victoria, matando y masacrando!

Él dice deteniéndose frente a Gabriel diciendo de nuevo.

-Hay una terrible oscuridad en ti, amigo mío... ¡Tu ardiente deseo de resucitar a tu amada Akame te ha impedido verlo!

Él abre sus ojos impactado al escuchar las palabras de Zobek, no queriendo realmente escuchar de lo que se trataba

-Mientras dormías, pude influirte con esta máscara, pero incluso yo fui incapaz de ver la bestia que dormía en ti.

Gabriel recuerda ese día, a todos los que masacró cuando se dio cuenta que Akame estaba muerta y que se había quedado solo.

-Fue muy sencillo conseguir que la mataras. Tu inclinación por el asesinato y la muerte eran insaciables.

Gabriel baja su mirada al escuchar que él había matado a la persona que más amaba, influenciado por Zobek.

-Tan sólo necesitabas un pequeño empujón, y correrías en busca de la única cosa que podría traerla de vuelta.

Gabriel no dice nada, mientras que sólo se quejaba del dolor en su cuerpo, y en el dolor mental y emocional de lo que estaba hablando.

-Si, Gabriel, finalmente lo entiendes.

Aparece la imagen de Akame cerrando sus ojos antes de recibir el ataque de Zobek, hasta que el mismo desaparece confundiéndola, abriendo sus ojos observando a Gabriel con un hacha frente a ella el cual la mueve decapitándola.

-Fuiste tú... quien asesinó a tu esposa. 

Gabriel dice finalmente perdiendo la poca cordura que le quedaba

Gabriel: ¡NOOO!... ¡Mientes! ¡Bastardo!

Zobek dice al haber notado el pésimo estado mental y emocional del portador del Vampire Killer.

Zobek: Busca en tu alma, Gabriel. ¡Sabes que es cierto! Me preocupaba que ella te revelara mi identidad en el lago, pero parece que tenía la falsa esperanza de que incluso un asesino como tú podía redimirse y salvar el mundo.

Gabriel sólo estaba teniendo todas las imágenes que tuvo con Akame desde que la conoció, hasta cuando se casaron.

-Incluso la niña, Claudia, pudo ver su propia muerte a tus manos, y aún así confió en ti hasta su trágico final.

Él sube sus brazos subiendo su mirada observando el cielo arriba de ellos, como si observara a su hermano viéndolo.

-Glorioso, ¿no es así? ¡El mismo Dios te ve como realmente eres... un asesino a sangre fría... más allá de la redención, y de la esperanza!

Gabriel se levanta ya harto para atacar a Zobek, quien se voltea estirando una de sus manos deteniéndose, empezando a elevarlo mientras que Gabriel estaba gritando de dolor.

-Déjame liberarte de tu pesada carga... adiós... viejo amigo.

Unos rayos de Zobek impactan donde estaba el cuerpo de Gabriel, quien grita más fuerte del dolor, hasta que cuando los mismos desaparecen Gabriel cae finalmente al suelo... muerto.

Zobek caminaba hacia su posición, tomando de su mano fría la máscara con los tres poderes de él, Cornell y Carmilla.

Dando una risa que se escuchó por todas partes, incluso en las zonas más alejadas donde la población humana estaba asustada, escuchando esa risa.

https://youtu.be/Pnc8ATfJVlY

Hasta que entonces Zobek deja de reír escuchando algo.

???: Saludos, poderoso Zobek.

Zobek dice confundido mirando a todas partes esa voz.

Zobek: ¿Quién está ahí? ¿Quién...?

La voz dice de nuevo, cuando Zobek sentía que por algún motivo la temperatura estaba subiendo.

???: ¿No me recuerdas? En el vacío, yo vine a ti, te otorgué conocimiento y poder. Poder que nunca habrías sido capaz de obtener por tu cuenta.

Zobek sigue mirando a todas partes, notándose cómo poco a poco se estaba asustando, al igual que la temperatura sigue creciendo.

-¿No te habrás olvidado? De hecho, yo implante la idea de todo este elaborado plan en tu diminuta mente, de forma que sirviera a mi propio propósito mayor.

La voz se notaba que estaba burlándose de Zobek, pensando que conseguiría todos sus planes.

-Ya no necesito tu ayuda. ¡El poder es mío!

Zobek empieza a quemarse empezando a gritar el mismo intentando apagar las llamas.

Zobek: ¡No! ¡¡Nooooo!!

Gritó quemándose hasta finalmente caer al suelo, muerto, soltando la máscara. Cuando el fuego desaparece, una figura estaba encima de él, observando la zona de la máscara para caminar hacia la misma, tomándola en sus manos. Sólo tenía una sonrisa que significaba que cada uno de sus planes salieron a la perfección.

No se necesitaban presentaciones para saber que este ser era nada más y menos... que Satán. Quien dice subiendo su mirada hacia el cielo.

Satán: ¡Padre! Voy por ti... ¡Y antes del final, tú te arrodillarás ante mí!

Gritó señalando luego con su lanza al cielo, exigiendo que Dios lo escuchara, unos momentos antes de que destruyera su reino a él. Y gobernará sobre toda la existencia, y luego procedería a hacerlo más allá de su dimensión, hasta que todo el multiverso se ponga a sus pies.

...

Mientras que en una zona donde todas las almas muertas que seguían en la Tierra tras lo que hizo Zobek, estaban volando encima de Gabriel. Estaban diciendo unas palabras para que el alma de Gabriel se una a ellos.

Hasta que de repente, Akame llega al lugar, poniéndose de rodillas viendo a su esposo sin vida en el suelo, doliéndole el corazón demasiado.

Akame: ¡Aléjense de él! ¡No lo despierten!

Dijo la fallecida portadora de Murasame poniéndose de rodillas para tocar el pecho de su esposo notando que su corazón no estaba latiendo.

-¡No lo toquen! No se lo pueden llevar.

Dijo empezando a caerle unas lágrimas, viendo el estado de la persona que ama y el padre de su hijo.

Cayendo las lágrimas en el rostro muerto de Gabriel.

-Si se lo llevan, estaremos perdidos. La oscuridad triunfará y nunca jamás habrá paz o esperanza.

Las almas no dicen nada al escuchar la voz de la pelinegra mientras que se siguen moviendo en todas partes.

-Permaneceremos atrapados aquí para siempre. ¿No lo ven?... Debemos darle el poder para volver.

Todas las almas sólo estaban confundidas por lo que habían escuchado y preguntaban si podrían ver la luz que se les prometió.

-Yo creo en él. Su corazón es puro. ¡Es nuestra última esperanza!... Nuestra única esperanza.

Dijo limpiándose las lágrimas de los ojos, separándose del cuerpo de su esposo cuando todas las almas en el lugar empiezan a rodearlo, empezando a elevarlo poco a poco, el corazón de Gabriel volvía a latir hasta finalmente atravesar una luz blanca.

Abriendo sus ojos, el Belmont de repente ve que estaba acostado en el suelo, hasta que escucha una nueva voz que no era de Zobek.

Satán: Así que... ¿Él te ha abandonado también?

Gabriel no dice nada, tomando el Vampire Killer del suelo.

-Únete a mí. -Gabriel empieza poco a poco a ponerse de pie, observando a ese hombre. -Te amaré más que Él.

Gabriel seguía callado, viendo a su nuevo enemigo el cual dice girando su cuerpo hacia él.

-Fui adorado por encima de los demás. No merecía ser expulsado... abandonado.

Gabriel no dice nada, revelando su arma contra quien tenía la máscara que le daría el poder de recuperar a su esposa.

-Ahora sabes lo que se siente, ¿no es así...? -Gabriel no dice nada mientras su cabello se mueve.

-El odio puede apoyarnos, darnos fuerza. ¡Abrázalo!

Gabriel responde de forma seria.

Gabriel: Es el interior del corazón del hombre de lo que Él se preocupa. Él te ama como me ama a mi. Sólo tenemos que pedir el perdón en lo más profundo para ser recibidos de vuelta.

Su enemigo dice extendiendo la máscara hacia su posición mientras que empieza a caminar al lado.

Satán: Ustedes simios, no merecen redención. Es MI derecho divino gobernar a su lado como igual... O quizás más que eso.

Gabriel dice seriamente al escuchar lo dicho por su enemigo.

Gabriel: ¿Preferirías gobernar con poder y grandeza que ofrecer perdón y amor?... ¡Es por eso que eres un paria impuro!

Su enemigo dice con una voz molesta al escuchar las palabras de Gabriel, quien lo había señalado.

Satan: ¿Quieres retarme? Morirás por tu blasfemia ¡Tu alma me pertenece!

https://youtu.be/Kvzhoq2SHuk

Dijo poniéndose la máscara en aquel instante sacando unas alas negras de su espalda mientras que Gabriel saca las suyas saliendo los dos de repente a volar.

*¡Boom*!

Ambos habían chocado en ese preciso instante, causando que en todo el lugar se viera unas luces azules y negras chocando entre sí por muchos momentos, hasta que en el aire Gabriel se detiene chocando puños con su enemigo.

Diciendo su enemigo observando a Gabriel

-Inclínate ante mí. ¡Es Satán quien te lo ordena!

Dijo para ambos caer de nuevo donde estaban antes diciendo lo mismo en aquel instante.

-Sé quién eres Gabriel Belmont, sé quién fuiste Tatsumi. ¡Ciertas almas me comentaron quien eres!

Gabriel ignora sus palabras corriendo hacia su dirección rápidamente activando la magia de luz, Satán lanzó muchas sombras donde estaba el portador de la Vampire Killer, quien mueve su arma destruyendo cada una de las sombras que estaba en su dirección iluminando todo el campo de batalla.

Y cuando la luz desaparece, la cadena y el arma de Satan chocan entre sí sacando muchas chispas.

-¡Imposible!... ¿Es... este.. ¿El poder de Dios?

Dijo confundido viendo cómo un humano estaba empezando a superarlo en fuerza, el choque de sus dos armas lanzándose, Gabriel cae donde estaba Satán, cayendo los dos de donde estaban luchando hasta que de repente los dos vuelan a máxima velocidad hacia arriba golpeándose mutuamente, provocando que en muchas partes de Europa los terremotos ocurran.

Hasta que Gabriel da un giro golpeando a Satán, quien se estrella en el suelo provocando un agujero empezando a salir del mismo y dice subiendo su mirada furioso hacia el Belmont en el aire.

-¡Cuando te mate, torturaré las almas de tu esposa y tus amigos por toda la eternidad!

Dijo siendo cubierto por las sombras, al mismo tiempo que Gabriel cae al suelo, siendo cubierto por una gran energía de luz, pareciendo el mismo sol debido a su brillo

Lanzándose los dos con gran fuerza chocando a una gran velocidad sus armas, provocando que ciertas zonas del campo de batalla se destruyan por sólo los choques.

Hasta que en ese momento. Satán retrocede por un corte de la cadena de Gabriel retrocediendo unos pasos, su sangre sale, la cual un simple humano, un maldito humano... le había provocado.

-¡Borraré el apellido Belmont de la faz de la Tierra, para siempre!

Gritó al mismo tiempo que en otras zonas del planeta como la aún no descubierta Asia estaban sucediendo tsunamis en todas partes, hundiendo pueblos y aldeas que tenían la desgracia de estar en la costa.

En África y Oriente Medio muchos rayos estaban cayendo destruyendo todo lo que estuviera a su paso, eso incluía a las civilizaciones que estaban en medio de lo que poco a poco se convertía en el día del juicio final. Hasta que Satán se estrella con una columna.

-¡No! ¡Aléjate de mí!

Dijo viendo cómo Gabriel estaba caminando donde estaba él, activando la magia de luz y oscuridad de forma rápida atravesando todas las barreras que estaban en su camino.

Y con los pasos que daba, en Oceanía todas las zonas estaban empezando a quemarse debido al calor que se había sentido.

Y en la otra punta más lejana del mundo, estaban sucediendo desastres naturales tan grandes que incluso las personas intentaban evacuar lo más rápido posible.

Estando una vieja mujer en un campo despejado con su mirada en el aire, observando cómo en el cielo se mostraban cambios entre azul, negro y rojo, al igual como una pelinegra de ojos verdes estaba haciendo lo mismo, estando en una sala del trono protegiendo a un hombre debajo de ella, y una joven pelirrosa hacia lo mismo mientras que se evacuaba una aldea.

Gabriel llega donde estaba Satán, quien intenta atacar con su arma, pero Gabriel la bloquea con una sola mano, dándole luego una patada a Satán quien cae al suelo un poco debilitado.

Al mismo tiempo que Gabriel con su mano, rompe en pedazos la lanza como si fuera papel hasta que Gabriel aparece detrás de Satán tomándolo del cuello con sus dos brazos.

https://youtu.be/xrhXp3DiAb4

-¡Quítame las manos de encima asesino! ¡Tu alma está condenada!

Gabriel responde aumentando su agarre de su enemigo, sintiendo como si su amada y sus amigos pudieran estar viendo lo que estaba haciendo por el destino de la humanidad, la Tierra y el Cielo. Pero sobre todo por ellos.

Gabriel: Pido perdón y clemencia por aquellos a los que he hecho algún mal.

Satán estaba intentando liberarse con todas sus fuerzas, pero simplemente no podía hacerlo, pero lo haría si pudiera.

-Lo que hice, lo hice de forma inconsciente, y aun así lo cambiaría todo si pudiera.

Satán dice con dificultad mientras que Gabriel sigue aumentando el agarre.

Satán: Él no te está escuchando, Gabriel. ¡Tu destino está escrito!

Gabriel responde al escuchar las palabras de Satán.

Gabriel: Todo humano posee el poder para arrepentirse. Tengo fe en eso.

Dijo aumentando más el agarre y activando sus dos magias al mismo tiempo cuando Satán aumentaba mucho su poder, sacando luz oscura de su cuerpo.

Perdóname, perdóname... mi Dios.

Satán dice en aquel instante con una voz burlona.

Satán: Me divertiré tanto con tu Akame. Le mostraré tantos placeres.

Él dice enojado por las palabras de Satán

Gabriel: Su alma sólo irá con Él. ¡Una vez que haya acabado contigo, Ángel!

Dijo subiendo su mirada hacia el cielo, abriendo su boca saliendo una energía hacia el cielo, saliendo también sus alas de su espalda, las cuales brillaron de una forma que se extendió a todo el mundo, cubriéndolo por completo.

Hasta que cuando la misma desaparece, Satán había desaparecido, viéndose la máscara en el suelo cayendo Gabriel de rodillas, sintiéndose demasiado débil, ni siquiera la energía de luz podría ayudar con eso.

Hasta que en todas partes donde estaba él, estaba viendo muchas luces azules subir hacia el cielo rápidamente, y cuando sube su mirada ve una luz encima que estaba absorbiendo las luces.

Dándose cuenta que lo logró... lo había conseguido... La Tierra y el Cielo de nuevo estaban unidas.

Pero él gira su mirada hacia un lado, viendo a Akame que estaba sonriendo.

Akame: Amor.

Gabriel intenta poco a poco pararse mientras que su amada se acerca a él.

Pero el dice cuando se para subiendo una de sus manos confundido.

Gabriel: ¿Estoy... vivo? -Dijo confundido sintiendo como si sus fuerzas regresaran -No... no deseo esto. ¿Por qué se me ha dado la vida de nuevo?

Ella le dice llegando donde estaba él, notándose con una mirada decaída con lo que sabía, ambos no podrían volver a estar aunque le doliera.

Akame: Es tu destino. Se te ha devuelto aquello que te fue injustamente arrebatado.

Ella pone una mano donde estaba el pecho de su marido subiendo su mirada hacia donde estaba él.

-Para que te arrepientas... y arregles tus pecados.

Gabriel dice con la mirada baja al escuchar eso.

Gabriel: ¿Pero sin ti?

Ella lo interrumpe antes de que pueda continuar.

Akame: Has liberado a todos. Nos has salvado a todos, Gabriel.

El solo dice aun con la mirada baja.

Gabriel: No pude salvarte a ti.

Ella dice poniendo su cabeza en su hombro, apunto de llorar recordando el destino de su esposo y el cual aunque intentara, no podría evitarlo.

Akame: Sabía que no debía decírtelo o el desánimo habría bajado tu resolución, y todo habría estado perdido.

Ella sube su mirada viendo fijamente a su esposo diciendo en aquel instante.

-Tenía fe en ti, esperaba que fueras lo suficientemente fuerte como para liberar el mundo, y no me decepcionaste.

Él se aleja de donde estaba ella diciendo con su cabello cubriendo sus ojos diciendo con una voz vacía.

Gabriel: No soy digno de tu fe. Tu amor... no soy nada.

Ella dice agachándose poco a poco hasta tomar la máscara que estaba en el suelo.

Akame: Eres un buen hombre, Gabriel... Tatsumi. Como Dios quiso, mortal y aún así capaz de grandes cosas... te amé entonces como te amo ahora.

Ella empieza a caminar poco a poco donde estaba Gabriel quien solamente tenía su mirada baja siendo aún cubierta por su cabello.

-Veo ante mí a un hombre que ha recuperado el favor de Dios, y que tiene mi perdón, aunque nunca me hiciste daño. Y el perdón de todas las almas perdidas de este mundo.

Ella se pone delante de él subiendo con una mano su cabeza para que ambos puedan verse fijamente.

-Nos has salvado a todos y... te has salvado a ti mismo.

Ella empieza a acercar la máscara a la cara de su esposo y dice de nuevo.

-La máscara es un poderoso instrumento. Nos permite ver a través de los ojos de Dios.

El dice cuando finalmente su esposa pone en su frente la máscara.

Gabriel: ¿Realmente puede traer a los muertos de vuelta?

Ella dice que sintió un nudo en su garganta por lo que se iba a revelar.

Akame: Sí... mira.

Gabriel abre sus ojos viendo cómo delante de él estaba su esposa, en carne y hueso como los meses antes de que la perdiera, saliéndose unas lagrimas a Gabriel que bajan de la máscara hasta su cuello.

Para luego ambos besarse, simbolizando el amor que se tienen y siempre se tendrán por toda la eternidad.

Pero cuando termina el beso ella se separa quitándole la máscara a Gabriel quien dice cuando nota que ella no revivió.

Gabriel: La esperanza de un tonto.

Dijo recordando las palabras de Carmilla, pero Akame dice sintiendo que estaba siendo arrastrada.

Akame: Es demasiado tarde para mí, amor mío. No puedo volver.

Gabriel abrió sus ojos viendo como ella estaba empezando a desaparecer delante de él.

Gabriel: No.. no... no te vayas.

Dijo extendiendo una de sus manos para alcanzarla, pero ella dice cuando una lágrima cayendo de sus bellos ojos rojos.

Akame: Es mi hora. La Luz llama... no tengo miedo.

Gabriel dice sintiendo su corazón romperse, viendo que la perdería para siempre

Gabriel: No... por favor. Quédate. ¡Quédate conmigo!

Ella solo empieza a ser cubierta por la luz y él solo dice extendiendo una mano, sólo queriendo que ella lo aceptara y regresara a la vida y poder tener la vida que ambos querían.

-Te amo... Akame... te amo. Perdóname.

Ella desaparece por completo en aquel momento, pero cuando Gabriel siente una mano en su hombro gira su mirada observando a Claudia, quien estaba sonriendo, correspondiendo su sonrisa para luego desaparecer.

Pero Gabriel sólo cae de rodillas, mientras que el resto de almas suben al cielo. Empezando a llorar y a gritar, escuchándose su sufrimiento por todo el planeta. Cada ser viviente lo estaba escuchando.

...

La última fase de la profecía aún no se cumple...

Presencien la caída de Gabriel Belmont en...

Contemplen... el nacimiento del Dragón...