Capítulo 36: No confíes en lo que dicen ser tus amigos
Utilice mi sentido amplificado de la vista para observar si se encontraba alguien dentro de la habitación, pero no había nadie en ella, lo cual me tranquilizo un poco. Sin embargo aún seguía estando alerta, abrí la puerta lentamente y entre a la habitación, me quede paralizada al ver que la habitación era un total desastre.
Camine hacia el centro de la habitación, habían papeles por el suelo, cenizas cubrían las paredes y el resto de las cosas. Mientras observaba algo llamo mi atención una caja pequeña plateada, cuando la agarre me tomo por sorpresa ver que era la que me había obsequiado uno de los amigos de mi padre el día de mi cumpleaños.
— Como es que esto llego aquí —murmure abriendo la caja.
Cuando la abrí, cosa que no había hecho, había un anillo cuadrado que tenía una media luna y algunos detalles, daba aparecer un sello, y a un costado decía Muller. También había una nota.
Feliz Dulce 18 Alexandra.
Ya estás en una etapa la cual muchos no han alcanzado.
Este es el anillo de tu familia y es algo que a tu tío Jack le fuera
Gustado darte, sin embargo yo te lo doy de su parte,
Eres la sombra de él, en su comienzo en esta vida.
Debes tener cuidado con quienes dicen ser tus amigos, eres especial, muchos buscaran de hacerte daño, de tratar de matarte, pero tú eres más fuerte que los demás.
No dejes que te controlen, pueden usar tu poder contra los que más quieres.
Si alguna vez visitas Rusia, puedes buscarme y responderé a todas tus preguntas.
-Sebastián B.
Estaba en peligro y ahora lo sabía, como es que Sebastián me lo dijo por medio de esta nota y no me lo dijo el día de mi cumpleaños— pensaba pasando la mano por mi cabello desesperada.
—Alex — dijo alguien en la puerta.
Guarde la nota en mi chaqueta y me di la vuelta, y vi que era Chris quien me había llamado.
— Hola Chris — dije ladeando una sonrisa, mientras me colocaba el anillo.
— Pensaba que te habían expulsado — dijo Chris mientras miraba la habitación y fruncía el ceño.
— Pues, no aun no lo han hecho — dije encogiéndome de hombros.
—¿Que ocurrió aquí linda? —pregunto Chris entrando a la habitación.
—No tengo ni la más mínima idea, estado inconsciente dos días así que, no sé qué habrá ocurrido — dije mientras lo miraba.
— Cierto, como has estado — dijo Chris mirándome — veo que aun tienes los ojos rojos, ¿aun tienes sed?— pregunto.
— Un poco, pero ya bebí de mi donador y de dos personas hace unas horas, así que no puedo beber más, al menos hasta que mi donador se recupere un poco— comente un poco disgustada.
— Puedes beber de mi sangre — dijo Chris detenidamente y me sorprendí— Claro, si quieres — dijo riendo levemente al ver mi cara.
—Gracias, pero estoy bien así Chris — dijo sonriendo— debo irme, Milord me debe estar esperando, al parecer encontraron a la chica lobo que habían secuestrado el día del baile.
— Y por qué Milord quieres que vayas, no te puedes quedar un rato más conmigo— dijo Chris tomándome de la mano.
— No sé para qué me quiere Milord en el área de lobos — dije mirando mi mano, para luego mirar el rostro de Chris— ¿Para qué quieres que me quede contigo Chris? —pregunte mirándolo.
— Para conversar un rato más — dijo Chris, mientras pasaba una de sus manos por mi rostro— o terminar lo que no pude hacer la última vez— dijo acercándose.
Lo mira extraña y lo detuve en seco con mi mano en su pecho
—Sabes que estoy saliendo con Scott, Chris— anuncie.
— ¿Y eso que? — pregunto Chris indiferente, mientras se acercaba más.
Empecé a caminar hacia tras y me topé con la pared, Chris se había acercado lo suficiente colocando su mano en la pared al lado de mi rostro, y la otra mano en mi cintura.
—No dejare que escapes esta vez Alex — susurro Chris en mi oído.
—Chris, me tengo que ir— dije seria y el empezó a reír por lo bajo.
— Oh vamos Alex, me vas a decir que no te atraigo — dijo Chris a milímetros de mi boca.
Me quede callada mirándolo para luego mirar hacia la puerta
—No me atraes Christian — dije volviendo a mirarlo.
— Dudaste linda — dijo Chris sonriendo y se acercó a darme un beso.
Lo empuje haciendo que impactara contra el otro lado de la habitación, vi cómo se tocaba el cuello y se quejaba.
— Joder Alex — se quejó Chris.
— Eso es para que lo vuelvas a intentar — dije amenazante.
Salí de la habitación y fui directo hacia el área de lobos. Llegue en cuestión de segundos, algunos lobos me observaban, otros estaban atentos a mis movimientos. Si hacia un movimiento en falso no dudarían en atacarme.
A lo lejos vi a Milord que estaba con Miguel y Scott, me acerque y pude ver el cuerpo de la chica lobo que ya la estaban arreglando para ser cremada. Aún seguía sin entender porque Milord quería que estuviera aquí.
— Hey ¿estés bien linda? — pregunto Scott mirándome detenidamente.
—Eh si, si estoy bien — dije colocando un mechón de mi cabello tras la oreja y le sonreí un poco.
— ¿Por qué tardaste tanto Alex?— pregunto Miguel acercándose y Scott presiono su mano en un puño.
—Cálmate Scott —dije mirándolo y él suspiro— Me tarde, porque me encontré a Chris pasando por mi habitación luego de que yo había entrado.
— ¿El príncipe? — pregunto Scott y yo asentí.
— ¿Que hacia ahí? ¿Te dijo algo? — pregunto Miguel.
— No, no me dijo nada de porque estaba ahí — dije pensativa— pero ahora que lo dices, el dormitorio de Chris no está ahí, seguro iba a ver a Camila — dije sin importancia.
—Bien ¿Tienes alguna idea de quien pudo hacer eso a tu habitación? — pregunto Miguel.
— Bueno, no exactamente pero encontré algo que puede decir mucho —dije y saque la nota de mi chaqueta— esta nota estaba en una caja pequeña donde estaba el anillo de mi familia que me lo obsequio un amigo de mi padre, quizás Milord lo conozca— dije dirigiendo la mirada hacia Milord.
—¿Quién te lo dio Alex? — pregunto Milord con cierta curiosidad.
—Sebastián Boulding, es un amigo de la familia conoció a mi tío Jack —dije mirándolo.
—Sí, es uno de los primeros vampiros —dije Milord pausadamente— Me permites leer la nota Alex.
—Por supuesto —se la tendí — la verdad es que me puso a dudar mucho esa nota Milord— declaré.
Pude notar que los pensamientos de Milord se volvían un poco confusos y se cuestionaba muchas cosas que no tenían sentido para mí. Empezó a dar unos pasos de un lado a otro y fruncía el ceño. Inicio de que estaba empezando a tensarse un poco.
—Esteban tuvo una visión de esto— dijo Milord dirigiéndose a Miguel perplejo— sino detenemos esto ahorita, será peor.
— ¿Que podemos hacer al respecto?— pregunto Scott.
Había una visión de esto ¿por qué se pondría peor? — pensaba miles de cosas, mi cabeza daba vueltas literalmente. Pasaba mis manos frustrada por mi cabello y había empezado caminar de un lado a otro, veía como Milord hablaba pero no escuchaba nada mis sentidos se habían nublados por sentirme frustrada, desesperada, molesta, y con ganas de venganza.
— ¿Que visión? — pregunte casi en murmuro y Milord no me prestó atención.
—Tenemos que proteger al castillo y armar los escudos de protección — decía Milord sin mirarme.
— ¿Que visión? — volví a preguntar.
—Hay que decirle entonces a la profesora Cecile — dijo Miguel sin prestarme atención.
— O me dicen de que visión hablan o les juro que explotare en llamas — grite molesta y todos voltearon a mirarme.
—Alexandra cálmate —dijo Miguel desesperado— todos estamos angustiados, no solo es por la visión, es por lo que ocurrirá sino evitamos que ocurra eso.
—No digas que me calme — lo señale mientras me acercaba a él— por esa nota se pusieron así ¿Qué es lo que saben que yo no lo sepa? —pregunte molesta.
—Miguel no sigas hablando — dijo Milord tenso y gire rápidamente hacia Milord.
—¿Por qué? ¿Por qué no puede seguir hablando Milord? — gritaba, poco a poco mis manos empezaron a volverse fuego naranja con tonos azules.
Milord estaba tenso pero callado al mismo tiempo, podía ver el miedo en sus ojos, podía sentir la angustia en sus pensamientos, no sabe qué hacer al respecto, no sabe cómo actuar ante mis preguntas. Suspire profundo para tratar de calmarme pero hubo una explosión cercana en unas de las casas de los lobos.
Hubieron gritos y muchos se empezaron a transformar, unos aullaban llamando a su manada, otros empezaban a gruñir para empezaron a correr a hacia donde había sido la explosión. Los vampiros que estábamos presentes nos pusimos alerta, íbamos a ir hacia donde hubo la explosión pero hubieron dos explosiones más seguidas en otros lados de la misma área de lobos.
Hola pequeños mortalees :3
Espero que les guste este capítulo, dos capitulos mas para el gran final de este primer libro :D
Comenten que les parecio y den le a la estrellita si les gusto.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top