Sobre la cama yacía dos cuerpos muy acaramelados, dándose e incontables besos y a veces lamiendo lascivamente las diferentes marcas en sus cuerpos, hacen todo eso mientras sus miradas siguen conectadas eso los emociona.

—Nmng~—Deja salir un suave gemido al sentir los dientes del contrario mordiendo ligeramente su labio inferior.—¿Quieres arrancarlo?—Pregunta "supuestamente" enojado.

—Si vas a fingir que estás enojado por lo menos no sonrías de esa manera.—Pasa lascivamente su lengua por los labios de Luciel.—Sé cuánto te encanta que de haga cosas como estás.—Muerde el pecho desnudo el más joven.

—¡Ugh!—Saborea sus propios labios.—Tienes razón.—Sube arriba de Elijah.—Me gusta cuando te pones feroz sobre todo con esto.—Mete sus manos entre medió de las piernas de Elijah, el yace desnudo y marcado alrededor de los muslos como enmedio de ellos.

No hace menos de cinco minutos ellos llegaron al clímax por quitan vez, han estado haciendo el amor desde que despertaron y ya están por dar a las diez de la mañana.

—Es fascinante cuando me aprietas tan fuerte que me hace pensar que me la cortarás, pero sigue siendo emocionante más cuando tu interior se va calentando.

—Ni se te ocurra ponerte vigoroso.—No es que no quería seguir siendo suyo solo que haya trabajo que hacer.—Ya es tarde y tengo hambre... ¡Ni sé te ocurra decir "comete está"!—Le advirtió justamente cuando Luciel estaba por frotar su miembro contra los muslos de Elijah.

—Le quitas lo divertido a la vida.—Deja caer su rostro en el pecho del contrario.

<¿No piensa ir ayudarle a su hermano con los deberes?> Preguntó 066 sin mirarlos desde un rincón, con auriculares contra el ruido. Leyendo un libro "¿Cómo vengarte de tu amo?" Era el título de dicho libro.

[No me hagas desear coser tu boca y deja de leer un libro con un título tan mediocre.] Niega con la cabeza. [Ni volviendo a nacer podrás vengarte y para empezar, fuiste tú el que apareció frente a mí.] Se desliga.

<Solo estoy leyendo un libro que me encontré por ahí.> Se excusa. <No le preste tanta atención al título solo quería distraerme un rato nada más eso.> Niega todo lo que Luciel este pensando. [Quieres vengarte de mí cuando ni siquiera te he hecho nada... ¿Quieres que de verdad te haga algo que aún siendo una máquina desearás estar muerto?] Sugiere con su sonrisa perversa.

"¡Qué persona mas viciosa!" Exclamó en su mente 066, alejándose lo mas lejos posible de su anfitrión que sigue sin descifrarlo.

Muchas cosas habían transcurrido en los últimos días atrás, una de esas cosas es; el hecho de que toda la familia Winslow decidió mudarse al campo. Comprar una propiedad bastante cara y lujosa del todo el pueblo, era mas una finca en la cual ellos dos tenían pensado invitar a vivir a la familia de su yerno. No era necesario vivir separados cuando en la finca había el suficiente espacio para vivir todos.

Elijah se negaba a vivir con sus padres alegando que ya era un adulto y tenía que hacer su vida lejos de ellos, ese era el ciclo de la vida. Sin embargo, la familia de Luciel también pensaban iguales que los señores Winslow, no querían estar viviendo lejos de su querido Luciel por lo que aceptaron el vivir en la finca.

La pareja se resignó porque entre mas se oponían mas feroces se volvían sus padres por lo que aceptaron, pero con una condición; vivirían en la misma propiedad pero en una casa no muy lejos de la principal, querían su privacidad porque eran consientes de lo loco que se podían poner mientras tenían relaciones sexuales y no es su intención traumar a nadie.

Sus familias lo encontraron justo por lo que ese mismo día, los señores Winslow enviaron a construir el nidito de amor de ellos dos. Creyendo que mudarse al campo después de vivir tanto tiempo en la ciudad no era tan malo, disfrutaban el aprender nuevas cosas junto a la madre de Luciel. Los consuegros se cayeron muy bien desde el instante que cruzaron palabras.

La madre de Luciel estaba dudosa de que personas como ellos fueran así de buenos, era irreal porque ella había tratado con todo tipo de gente rica cuando trabajaba en la ciudad que el tratar con los señores Winslow era como un sueño tan irreal.

—Elijah.—Va en busca de la mano izquierda del ya menciono, acariciando un dedo en específico.—Ya perdí la cuenta de cuántos años he cumplido a lo largo de mi existencia, dejé de contarlos en algún punto como emocionarme por ello.—Levanta su rostro de esa manera poder mirar fijamente a su pareja.

Sus corazones se vuelven uno solo al igual que sus miradas, diciéndose tantas cosas; lo perdidamente enamorados que están uno por el otro.

—No había emoción en mi vida mas que solo una aburrida rutina de la cual no podía salir, pero entonces apareciste tú.—Sonríe.—Un hombre que no le tenía miedo ni a la muerte mismas más que solo dejarme a atrás, Temeroso de no volverme a ver nunca luego de partir.—Estaba hablando de su primera vida.

—¿De que estás hablando?—Pregunte, habla como si ya nos conociéramos desde antes.

—Solo escucha que no soy alguien romántico pero cuando se trata de ti hago lo que puedo.—Ahora entiendo a mi tío y padre lo estúpido que se vuelven con sus parejas.—Eres el único con la osadía de destronar todas las barreras construidas al alrededor de mi corazón el cual consideraba muerto.—No sé en qué momento empezó a palpitar como lo hace, quizás desde el instante en que conocí a Elijah.—Las rompiste con impertinencia y persistencia hasta que lograste sostener mi corazón en tus manos.

Sonriendo ampliamente y con cuidado deslizó un bonito anillo que por más loco que parezca parte en el tenía alas blancas ligeramente separadas, ahí tenía un pequeño corazón dos colores diferentes, (anaranjado como las llamas del fuego y un gris entre amarillo.) Eran los colores de sus ojos.

—Odio y me desagrada todo lo que tengan que ver con los dioses, sin embargo, debo de admitir que eres mi resplandeciente luz en un mundo que en su momento era gris negro.—Limpia la humedad en las esquinas de los cristalinos ojos de Elijah.

<¡Qué deslumbrante! Es agrade ver que la explicación laboral se ve así de hermosa.> 066 tuvo que hacer ese anillo justamente como lo quería y con los materiales que describió Luciel. Tuvo que ir a buscarlos y le tomo tres días encontrarlo.

[Sí, no puedo negar que te quedó estupendo, buen trabajo.] Niega con la cabeza al ver a 066 desplomado en el suelo, no esperaba que su anfitrión le dijera eso

—Para mi eres tanto como el angel mas puro que puede llegar existir, pero también el más oscuro y perverso lo que me encanta de ti. Nuestra locura se completamente.—Besa los labios del contrario humedecidos por sus lágrimas.—Te amo, ¿quieres casarte conmigo?

—Y dices que no eres nada romántico.—Maldición, mis lágrimas no paran de brotar... ¡Él dijo que me ama!.. Estoy tan feliz.—Mil veces sí.—Arrulla en sus brazos a Luciel, escondiendo su lloroso rostro en el cuello del ya nombrado.—¡Sí quiero casarme contigo!

¿Cómo es posible que un adulto se vuelva un adolescente en momentos como estos? Pero, ¿qué puedo hacer? Estoy feliz, es como si hubiese estado esperando este día desde hace mucho tiempo y por fin llegó, siendo para siempre suyo como él mío.

—Desde que te conocí ya no podía seguír viviendo una vida sin ti, fue como si al fin había encontrado lo que tanto había estado buscando a ciegas porque ni sabía que estaba buscando en primer lugar.—Sostiene en sus manos el rostro de Luciel.

066 en algún punto se puso agravar creía que una confesión como esa por parte de los dos no debería ser olvidada, también porque esperaba otro "buen trabajo" por parte de su anfitrión.

—Pero entonces te vi, ví tus ojos lo que los sacudieron mi corazón tan violentamente y solo quería abrazarte, besarte cuando eso era tan irracional porque ni siquiera te conocía pero ya quería acerté mío.—Confesó.—Te amo.—Dijo mientras iba por los labios de su amado.

Mientras ellos se confesaban apasionamiento en otro lugar yacía sentando en una llanta colgante como si fuera un columpio, un joven de fornida figura como de negros y despeinados cabellos que cubría parte de su perfilado rostro, pero sobre todo, sus grandes ojos marrones verdosos.

Al trabajar por tanto tiempo bajó el solo le ha pasado factura lo que llevo a su piel ser bronceada hermosamente pero aún, sigue siendo muy suave porque se la sabe cuidar todas las noches.

—Ren.—Le llaman desde lo lejos.

—¿Sí?—Giro ligeramente su rostro hace dirección.—Mamá.—Una brillante sonrisa adorno sus labios.

Ren no era otro que el segundo protagonistas masculino, hermano de Luciel y el cual fue excluido de la historia principal porque Luciel no iba a permitir que cayera en las garras de Frey.

—Si ya terminaste de trabajar vete a descansar.—Observa su alrededor y era un agradable el paisaje frente a sus ojos.

‹Con una vista así es válido lo que costaba estaba propiedad y gracias a los suegros de mi hijo podemos apreciar tal vista.› Pensó y agradeció la madre de Luciel y Ren, mirando a lo lejos el océano.

—Ve primero, estaré aquí un rato más.

—Bien.—Antes de irse le da un beso en la frente.

—El próximo año ya no tendré la oportunidad de ver una vista como está.—Ren tendrá que mudarse a la ciudad para poder ir a universidad.

‹Mi hermano no vino a ayudarme porque a de estar ocupado, preparándose pidiendole matrimonio al cuñado. Estoy tan feliz por él.›

Luciel se lo comentó unos días antes a su hermano y como esperaba recibió las felicitaciones por parte de Ren, dándole su bendición aunque eso le hizo fruncir porque no quería ser bendecido porque sonaba a cosas relacionadas con Dioses.

—Bueno, iré a comer porque trabajar solo me hace sentir hambre.—Se levanta y se dirige a su destino.—¿Eh?—Se detuvo al ver que alguien venía corriendo a toda prisa.

—¡Corre!—Le grita.

—¿Qué...?—Se sobresalto al tener tan cerca del suyo el rostro de una persona que nunca había visto, estremeciendose al instante en que sus miradas se volvieron una sola.-—...¿Usted es?

—¡Dije que corras!—Lo toma de la mano y lo jala.

Ren estaba confundido pero aun asi siguió el ritmo de la otra persona sin quitarle los ojos de encima, esa persona le daba mucha curiosidad.

—¡¿Desde cuándo las vacas son tan violetas?!—Cuestiona.—¿Por qué mi hermano mayor y mis tíos decidieron mudarse a este lugar tan peligroso?—Se queja nada menos que Dagmar.

—¿Disculpe?—Solo entonces se percató que en definitiva venía una vaca detrás de ellos y también entendió del porque los persigue.

Dagmar traía una camisa roja y para su mala suerte esa vaca parió el día de ayer por lo que es más difícil de tratar, y que Dagmar lleve una camisa con ese color es peor.

—Jajajaja.—Solto una carcajada que sin quererlo atrajo e hipnotizo al contrario.

Olvidando que esta siendo perseguido por una vaca y que en el proceso tomo sin permiso la mano del otro joven, lo que se podía considerar ofensivo.