Esta es una serie de OS llamada Casino, y constará con 6 OneShot's, cada uno de ellos con la letra del principio formando la palabra C A S I N O. No están conectados en acontecimientos, únicamente por el nombre.

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Casino.

Jimin estaba aburrido, ni siquiera sabía por qué había accedido a venir con su mejor amigo y su novio.

Taehyung y Yoongi estaban metidos en su propia burbuja, ambos estaban hechando un juego de póker contra otros dos chicos, parecían divertirse y eso era bueno pero él estaba demasiado aburrido, nunca le habían llamado la atención los casinos ni las apuestas, mucho menos los juegos, era más del tipo de encontrar la diversión en fiestas o simplemente de otras maneras, no le encuentra la gracia a gastarse el salario en máquinas trucadas en las que nunca ganas nada, es una mierda, prefiere gastárselo en ropa o en algo productivo, no alimentando una cantidad de un tragamonedas.

Los vítores se hicieron presentes y un par de maldiciones, Jimin levantó la vista luego de mucho tiempo de la pantalla de su teléfono viendo a los chicos que jugaban contra Taehyung y Yoongi levantarses con mala cara mientras sus amigos celebraban animados, entre la emoción Taehyung tomó la nuca de Yoongi para tirar de él y engancharlo a su boca en un beso intenso, Jimin juró haber visto sus lenguas.

Hizo una mueca, sus amigos siempre vivían a su manera sin importarle nada, ellos se estaban comiendo la boca en medio de un casino en dónde varias personas le miraban mal por su demostración pública y ellos ni por enterados.

Por eso les caían tan bien. A Jimin le agradan las personas así, que no se guían por prejuicios u opiniones, le agrada que las personas sean naturales y etéreas consigo mismas y con el mundo, es refrescante de ver.

Que lo hagan sentir como un adicto viendo una dosis es aparte, no es culpa de ellos que él tenga estándares altos con los tipos.

─Wah, que calor hace─dijo,más alto y exagerado de lo normal y sus amigos finalmente se separaron riendo─son de lo peor ustedes dos, no vuelvan a invitarme a venir aquí, soy el mal tercio.

Dramatizó y Taehyung se rió alto, en lo que ambos volvían a acomodarse correctamente en sus asientos.

─Deberías ser más agradecido─dijo Yoongi─con tu presencia aquí garantizas que no tenga momento de pasión en el coche.

─Deberías agradecerme tú a mi, así le evitas a Taehyung problemas con la policía─se defendió─aunque bien podríamos hacer un trío, ¿o te asusta que tu novio se cautive por los fantásticos movimientos de mi lengua?.

─Pues te recuerdo que salieron en secundaria y yo no lo veo muy cautivado que digamos.

Taehyung rió de fondo.

─Oye era jóven, no sabía lo que hacía, no me juzgues fácil, Gigi~─Jimin hizo sonar su voz más aguda y los tres terminaron riendo, era divertido estar con esos dos, su relación con Yoongi podía ser de esas amor/odio pero se apreciaban mucho, a pesar de que Jimin y Taehyung salieron por un tiempo, Yoongi lo odiaba en serio al principio pero luego captó que él y Tae solo eran mejores amigos así que habían "arreglado" las diferencias.

En realidad Yoongi se le había trepado encima borracho y lo había besado.

Bueno, tenían 18 en ese entonces ¿quién no vive los 18 al límite?.

─Bueno, tal vez te deje cautivarme al salir con esa fantástica lengua tuya─molestó Yoongi a lo que Taehyung negó sonriendo.

─Dejen de molestarse y Jimin deberías jugar con nosotros, verás que es divertido─invitó por decimoquinta vez en la noche.

─Sabes que no me gustan estas cosas, Tae.

Él asintió.

─¿Están jugando dos contra dos? ─preguntó alguien.

─Oh, si, ¿te interesa jugar? ─respondió Taehyung al hombre que fácilmente se ganaba el puesto al hombre más hermoso que Jimin había visto.

Bueno, Taehyung era guapo también, era muy atractivo pero ese chico al entender de Jimin era hermoso, era como si hubiera sido creado, demasiado lindo.

Alto y se veía musculoso bajo la ropa, cabello castaño y una voz encantadora.

Era jodidamente su tipo.

Cuando esos ojos negros lo observaron Jimin se sintió como un adolescente hormonal otra vez, esa era la mirada más profunda que le habían dado jamás, los nervios se apoderaron de él, obligándolo a controlar su respiración, temía que si no estaba conciente esta flaqueara y delatara cuan anonadado había quedado por un hombre, era bochornoso pero no sería un arrepentimiento.

─¿Tú juegas? ─le preguntó.

Bueno, se había quedado en silencio mirándolo por más segundos de los requeridos para responder una pregunta, Jimin era un idiota.

─No─negó por fin─este tipo de juegos no son lo mío.

No sabe por qué, pero una parte de él le hizo decir eso, a pesar de que el castaño no lo preguntara, es que tal vez, solo tal vez tenía un malévolo rayito de incertidumbre que estaba babeando por ese hombre y lo hacía decir estupideces, bueno, y pensar estupideces también.

─Sinceramente no son lo mío tampoco, ¿puedo invitarte a una copa?.

Vaya.

Eso fue inesperado.

Jimin estaba seguro de que su rostro reflejaba su sorpresa pero daba igual, ese tipo guapo se le estaba acercando para invitarlo a tomar una copa con él, se sentía como si hubiera ganado la lotería o algo así, era como si su yo adolescentes estuviera de vuelta.

─Mmm, no estaría mal.

Terminó por decir y el castaño sonrió.

Su sonrisa era hermosa.

─Bien, ¿me acompañarías a la barra?

Jimin asintió y se levantó, caminando lo más normal posible hacía ese chico castaño, no sabía cómo manejarse era todo un manojo de nervios. Mientras los seguía miró hacía atrás, viendo que Tae y Yoongi lo observaban también, el pálido hizo gestos obscenos con sus manos provocando que su novio riera, Jimin apresuró el paso, abochornado a más no poder, no era un santo pero sus amigos lo hacían pasar vergüenza en momentos así.

─Soy Jungkook por cierto, ¿Qué deseas pedir?.

─Encantado de conocerte Jungkook y me gustaría pedir un whisky.

─Dos vasos de whisky por favor─le pidió al hombre a cargo y volteó hacia Jimin, acomodándose en su asiento─¿me dirás tú nombre?.

─Soy Jimin.

─Bueno Jimin, me alegra haberte encontrado esta noche─dijo el castaño con simpleza y Jimin se sintió como una cría bebé, completamente desorientado.

Fue todo un milagro divino que en ese momento les entregaran las bebidas, tomar el vaso y darle un sorbo era una buena excusa para retrasar una respuesta.

─Verás Jungkook,─dijo tomando su bebida con toda la paciencia del mundo, se veía imperturbable pera estaba nervioso─soy hetero.

Un latido pasó.

Jimin soltó una carcajada.

─Debiste ver tu cara, hombre, creo que te volviste pálido─señaló divertido.

Jungkook seguía mirándolo como si estuviera procesando información.

─Eso me tomó por sorpresa sinceramente.

─Era broma, se sentía tenso el ambiente─explicó y volvió a beber, mucho menos nervios.

─Sería muy decepcionante para mí si fuera verdad.

─¿Lo sería?.

─Eres el chico más lindo que he visto y acabas de demostrar que tienes buen sentido del humor─dijo con una sonrisa.

Jimin pudo sentir su cara ponerse caliente.

─Pienso que también eres el chico más lindo que he visto.

─Eso es bueno entonces.

─Lo es.

─¿Qué edad tienes?, ¿unos 21?.

─22─corrigió─¿Qué hay de ti?.

─Estoy cumpliendo 23─comentó, bebiendo del vaso.

─Oh, ¿si es tu cumpleaños no deberías estar con tus amigos o familia o algo así?.

─Mi hermano mayor y mis amigos me han traído a este casino, digamos que me les escapé.

─Oye no es lindo escaparse cuando eres el cumpleañero─señaló, aunque parecía más una recriminatoria que algo que mencionas.

Jungkook río.

─Con un hermano y unos amigos como los míos es lo mejor, creeme─aseguró─además ví a cierto chico lindo de cabello púrpura, tenía que acercarme.

─¿Eres del tipo halagador eh?.

─Me considero del tipo directo.

─Pues Señor Directo acaba de voltear su vaso.

─¡Mierda!.

Jimin rió y estuvo riendo muchísimo por el resto de la noche y así, entre tragos y risas pasaron las horas, el alcohol hacía efecto para mantenerlos risueños pero estaban al tanto de todo.

─¿Tú cabello púrpura es natural? ─preguntó Jungkook en algún momento, haciendo que Jimin lo mirara como si estuviera loco.

─Claro, es la cualidad distintiva de mis ancestros de Marte.

Jungkook soltó una carcajada.

─Tengo que garantizar esas genes en la familia entonces.

Volvieron a reír, estaban idiotas por el alcohol y hablaban gracioso, se estaban divirtiendo y el hecho de que bebieran además solo fomentaba las risas.

─Lo que dices no tiene sentido, Jungkook.

─Has sido tú quién ha hablado de ancestros extraterrestres.

─Si pero es que-

─Ten una cita conmigo.

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Un pequeño OS Kookmin porque todo en exceso hace daño menos estos 2. Esto se me ocurrió mientras estaba literalmente en un casino, la idea era un poco diferente pero terminó saliendo esto y pues aquí está.