"Oh mi doncella,

Hoy te ves tan radiante, con esa sudadera que te queda un poco grande luciendote aun mas tierna de lo que eres, hoy estabas feliz ¡me encanta tu sonrisa! Te deje una gaseosa por si tienes sed

Recuerda siempre sonreír, mi doncella~."

La chica estaba saliendo de la escuela cuando una carta se cayó de su mochila, al momento de levantarla alguien lo hizo antes que ella

¿La pequeña lesbiana, tiene un admirador? A lo mejor solo eres tu tratando de reconfortarte, nunca nadie te querrá entiendelo, solo eres una torpe sencible. -dijo un chico con mayor musculatura y altura que la chica para luego arrugar la carta e irse-

Ni siquiera pudo leer la carta -dijo una chica a lo lejos furiosa y a la vez triste, pero todo se derribo en ella cuando vi a la chica, estaba llorando y se había ido corriendo de aquel lugar.