Capítulo 30💌

Noah

Mi jefe como tiene amigos empresarios que son un poco más grande que la de él, entre todos hacen una fiesta de bienvenida al año nuevo, que todos los empleados de esas empresas pueden asistir con sus familias y nosotros iremos, le daré una noche inolvidable a Ashley... Y no en el mal sentido ni en el pervertido.

— Noah ¿Vas a ir? — hablo Manuel sacándome de mis pensamientos.

— Sí, claro que iré, me llevaré a Ashley y Alyshi.

— Creo que eso era algo un poco obvio. — sonrió viéndome — Me alegra que vengas, hay anuncios que no te puedes perder.

— ¿No hay adelantos?

— No, sabes que no. — exclamó en tono burlón. — Así que serás padre...

— ¿Ya no lo era ya? — pregunté entre animado y burlón.

— Sí, pero Alyshi no es de sangre tuya quiero decir ¿Cómo se tomó la noticia?

— Bastante bien de hecho, hasta se ha puesto a tejer ropita, medias y ese tipo de cosas.

— Debe estar muy emocionada.

— Sí, lo está, a veces me pregunto si tejer le hace olvidar lo terrible que fue Carolina como madre.

— ¿Cómo están con ese tema?

— Al principio, no sabíamos mucho que hacer respecto a eso, Alyshi fue superándolo de a poco y Ashley aún a veces llama cuando estoy fuera para asegurarse de que estoy bien, aunque sabe que Carolina está en la cárcel, el miedo está ahí latente, incluso las primeras semanas se ponía ansiosa cuando Aly estaba en clases, porque decía que en la casa iba a estar más segura.

— Desarrollo apego y dependencia emocional a ustedes...

— Sí... Aunque creo que las aguas se están calmando un poco y más con lo del embarazo ella no quiere que el bebé salga con una enfermedad o algo, se ha estado cuidando mental, psicológica y físicamente.

— Eso me alegra ¿Y tú cómo estás con todo eso?

— Pues... Mi objetivo era encontrar a Ashley salva y sana, cuando vi que arrestaron a Carol, me relaje y me preocupe más por Ashley, eso era lo que me importaba en ese momento y aún lo sigue siendo, supongo que por eso se me fue más fácil superarlo.

— Me alegra oírlo, la verdad, los días que te tomaste libres para cuidarla, no se consideran vacaciones Noah.

— ¿Qué... Pero?

— Dejame terminar. No se considera tus vacaciones, porque hubo días en las que enviabas trabajos por Gmail, aún así estuviste trabajando, así que tienes tus vacaciones completas, para que las pidas cuando quieras.

— Gracias, aún tengo que hablar con Ashley de eso para saber cuando pedirlas.

— Está bien, tranquilo.

— ¿Sabés que eres un increíble jefe no?

— Gracias por el recordatorio — sonrió levantándose de la silla. — Tengo trabajo que hacer, nos vemos en la fiesta.

— Vale, allí nos veremos.

***

— Me gustaría ir a Venezuela a los cinco o seis meses de embarazo ¿Quieres conocer paises no ¿Por qué no empezar por allí? Quiero volver a ver a mis padres y también quiero que tu y Alyshi los conozcan.

— Si ese es tu deseo así será. — susurré en sus labios, a lo que ella corto la distancia que nos quedaba con un beso.

— ¿Cómo se me ve el vestido?

— Te queda hermoso, pero más preciosa es la que tiene el vestido puesto.

— Haces que me sonroje.

— Y me encanta que te sonrojes. — le regale una sonrisa ladina.

— ¿Hola? — Aly se hizo presente, con un vestido un poco volado blanco igual que Ashley, con unas botas rojas tejidas tipo navidad.

— Te ves hermosa mi princesa. — la pequeña entro lentamente a la habitación.

— ¿Quieres que te peine?

— No, gracias mami, me gusta tenerlo así suelto.

— Vale está bien.

— Mauu — maullo Kero entrando al cuarto, con un suerte rojo navideño que Alyshi le quiso regalar.

— No podrás venir con nosotros pequeño, cuidarás la casa. — hablo la pequeña acariciando la cabeza del felino, este sólo se acurruco en sus piernas, moviendo su cabecita.

— Es hora de irnos. — anuncié viendo la hora en mi reloj.

***

El salón de fiesta es grande y en una esquina de la entrada hay una pequeña casita de madera donde los niños están jugando, parece a la tienda y Alyshi es la vendedora.

Las luces están apagadas, pero hay unas luces de colores que iluminan un poco el lugar y en fondo del salón hay un pequeño escenario donde está un DJ haciendo la música, atrás de esa tarima también está una gran pantalla grande que está completamente blanca, mi jefe subió haciéndole una seña al chico que quite la música.

— Me alegra mucho que estén todos aquí reunidos. — los niños corrieron dónde estaban sus papás incluyendo Alyshi que en un parpadeo está aquí junto con nosotros. — ¿Todos tienen sus copas? — preguntó alzando la suya. — Está vez es mi turno de hacer el brindis y dar algunos anuncios. Brindemos por este año que pasó, que a pesar de las dificultades, pudimos avanzar, también por el año entrante, por tener más cosas fructíferas, y seguir creciendo como empresa. Como un equipo.

— ¡Salud! — alzamos nuestras copas al mismo tiempo y empezó a decir los anuncios.

— Y por último y no menos importante, hay un empleado que a pesar de todos las dificultades que tuvo no paro de trabajar, sino que lo hizo con más entusiasmo por su familia, un empleado que desde el primer día dio lo mejor de sí, haciendo que tuviéramos muchos más clientes y ahora será el jefe de su departamento de trabajo ¡Noah, a partir de ahora vas a dirigir todo lo que pase en marketing! Claro con mi supervisión. Ven sube a buscar tu estrella del empleado del mes.

Miré a Aly y Ash que estaban aplaudiendo felices.

— ¡Tienes que ir! — exclamó Ashley haciendo un gesto para irme caminando.

— ¡Si papi ve, ve! — apoyó la pequeña empujándome para avanzar a lo que yo reí.

— Ya vuelvo. — sonreí viéndolas.

***

— Este año esta empezando bastante bien ¿No crees? Me ascendieron en el trabajo y tendremos un bebé. — sonreí viendo a Ashley mientras bailamos.

— Está empezando de maravilla este año. — sonrió abrazándome por el cuello. Estamos en el patio del club que es como un pequeño bosque donde hay una pequeña pista de baile y cerca una cámara en un trípode que está tomando fotos, en los árboles hay luces guindadas haciendo una bonita escena. — Amo está canción. — comentó al escuchar las primeras notas de “Yellow” .

— A mi también, ¿Me permites este baile?

— Con gusto, señor. Bailas bien. — comentó sorprendida.

— Hay algo que te he querido decir, no sé si estoy siendo muy apurado, o tal vez no, no tengo la certeza de saberlo, pero lo que si tengo le certeza es que me quitaste ese miedo, y estoy completamente seguro que es contigo.— hable terminando la canción, ella abrió la boca en un intento de hablar, pero fui más rápido y seguí con mi discurso. — Ashley ¿Quieres ser mi esposa? — me arrodille sacando la cajita con el anillo, está en shock, su expresión es una mezcla de sorpresa, emoción y miedo, o eso creo yo.

— ¡Claro qué quiero casarme contigo! — exclamó abrazándome con entusiasmo.

— ¿Sabés qué me haces el hombre más feliz del mundo?

— Y tu me haces la mujer más feliz y afortunada del mundo. — suspiro uniendo nuestros labios a la vez que nos pusimos de pie.

— Te queda hermoso el anillo ¿Te gusta?

— ¡Me encanta! — gire la cabeza hacía la puerta donde está la camara y me encontré a Alyshi con mi teléfono grabando o tomando fotos del momento, no lo sé, bajó el teléfono y vino corriendo hacia nosotros.

— ¡Vengan aquí! — sonreí al tenerlas a las dos no sólo en mis brazos, sino que en mi vida. — ¿Saben que son lo más preciado que tengo?

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