Te quiero
—Realmente es muy gracioso, Jimin... ¿cómo llegaste a esa conclusión?— Namjoon no había dejado de reír desde que comenzaron su largo caminar, porque verdad era un situación sumamente divertida y tonta, ese chico de verdad no se daba cuenta, ni de cerca, lo enamorado que se encontraba de él.
—Bueno esto es vergonzoso, pero yo estuve allí... El día que Jungkook confesó sus sentimientos. Ví como te abrazó y luego como tú lo besaste. Estaba claro que iba a llegar a esa conclusión...— Las mejillas de Jimin se tornaron de un intenso rojo al hablar, no sabía si por la idea de ser descubierto o por recordar, tontamente como Namjoon besaba —¿Ocurre... Algo?— Su voz se cortó al preguntarlo, porque de un segundo a otro, Namjoon ya se encontraba invadiendo su íntimo espacio personal, como si no lo notara.
—¿Por qué querías saberlo?— Sintió un fuerte temblor pasear por todo su cuerpo al escucharlo, y temió por un segundo haber sido descubierto por una tonta pregunta.
Jimin planeaba confesarse a Namjoon, eso ya era un hecho, y por eso quería asegurarse de que Jungkook y él no mantuviera una formal relación, pero no esperaba que ese molesto chico comentara con tanta naturalidad sobre su íntima pregunta, justamente a la persona de quien se trataba.
—Sentía... Curiosidad. Ya sabes, somos amigos, quiero saber sobre ti... Iba a preguntartelo, pero justo me encontré con Jungkook y solo lo hice...— Pudo ver como repentinamente el se alejaba, sin saber que intentó ocultar un sonrojo tonto por el simple hecho de que Jimin sintiera un genuino interés en él.
—¿En serio quieres saber sobre mí?— la repentina seriedad de su voz, le preocupó, pero no dudo ni un segundo en asentir de acuerdo ante su pregunta —Jimin, la verdad es que yo... Bueno, no sé cómo empezar— Su voz temblaba; a cada segundo de silencio que pasaba, se arrepentía más de siquiera querer intentar confesarse, y todo empeoraba aún más, al ver esa linda mirada confundida, acompañada de esos gestos adorables, que apenas le permitían respirar —Yo debo seguir por aquí... Cuídate, y envíame un mensaje cuando llegues a casa. Te quiero.
Namjoon no le permitió despedirse por lo alterado que se encontraba y lo rápido que caminó en dirección contraria, pero aunque lo hubiera hecho, no obtendría respuesta, porque la conmoción que le causó a Jimin con la simplicidad de esas dos palabras, fue totalmente paralizante.
Su mejillas enrojecieron, sus pequeñas manos cubrieron la pena de su rostro, y no podía dejar de sonreir atontado por ello.
Realmente Namjoon le gustaba tanto.
💐
Otra vez un capítulo tranquilo y bonito, de los niños avanzando en su relación, para calmarnos un poco y recordar que Jungkook es la mejor persona del mundo. 😭
Gracias por leer.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top