La esperanza del príncipe azul
La esperanza de la princesa
La esperanza del dragón. La esperanza de la mentira, su esperanza de ser creíble a ojos del príncipe. Así el dragón se convirtió en princesa.
Pero las mentiras no son eternas
Ni con la bendición de la luz, las mentiras blancas oscurecen con el mismo manto de noche que cubre el día. Y pasó mucho tiempo. El príncipe dejó de ser el tonto crédulo y la princesa dejó de ser la indefensa. Atravesó la primera puerta del castillo, la puerta hacia la seguridad. Atravesó la segunda, la puerta de la tristeza, así está quedó atrás. Y atravesó la tercera, y todavía no decide cuál es. La libertad o el amor, o ambas. Pues logró encontrar y salvar al príncipe, irónico. Pero también logró ser libre.