En la sede de la familia Astrea la diosa de dicha familia estaba en su habitación cepillando su cabello con una leve sonrisa preparándose para salir.

¿Su objetivo del día de hoy? Nuevamente ir a la mansión Chimenea.

Al principio se sentía un poco insegura e incomoda al saber lo que estaban haciendo Kaguya y Bell y no se animaba a preguntarle sobre ello a su hija la cual siempre salía todas las tardes de la sede, había llegado a la conclusión que iba a la mansión Chimenea.

Era un poco incomodo saber que se estaba reuniendo todos los días con él pero ese miedo desapareció un poco cuando se encontró con Hestia el día de ayer y esta le explicó que le pidió personalmente a Kaguya que le enseñara a bailar al albino para la próxima fiesta que realizaría Freya.

Sabía que cuando Kaguya aceptaba cumplir un favor no descansaría hasta lograrlo así que se estaba tomando enserió lo de convertir a Bell en un gran bailarín.

Además que se sentía ahora un poco más emocionada al saber que Bell iría a esa fiesta deseando que llegara a suceder algo que a ella le encantaría mucho.

-bien, ya estoy lista -pensó viendo su reflejo en el espejo con una leve sonrisa-. ........mmmm no, falta algo más.

De su cajón sacó un pequeño brillo para los labios y se lo coloco. No era mucho de maquillarse de esa manera pero su hija Iska se lo había regalado así que se sentiría mal si no lo utilizara.

-hoy si ya estoy lista -pensó volviendo a sonreír dándose la vuelta y salir de la habitación.

Como siempre iba a la sede de la familia Hestia para platicar con su amiga pero esta vez también iba para ver como iban las practicas de baile con Bell y Kaguya.

Sería algo interesante de ver.

-volveré más tarde -dijo Astrea saliendo de la sede a Noin y Asta las cuales venían caminando por el pasillo.

Estas al ver a su diosa se quedaron congeladas viendo como se alejaba más y más de la sede.

-.......¿Viste eso? -pregunto Noin en shock.

-.......si.

Ambas se voltearon a ver perplejas no creyendo lo que acababan de ver.

-Astrea-sama se coloco brillo en los labios -susurraron las dos no pudiendo creerlo.

No era algo para sorprenderse ya que a las mujeres les gustaba arreglarse pero ellas conocían a su diosa desde hace muchos años y sabían muy bien que ella jamás utilizaba ese tipo de cosas, ni siquiera cuando iba a alguna fiesta en la que fue invitada se colocaba eso.

Pero ahora.......

-ella se está viendo con un chico -susurraron las dos.

-¿Quien se esta viendo con un chico?.

La que hizo esa pregunta fue Alise la cual se iba a acercando junto con Ryuu, Neze y Maryuu curiosas por las palabras de sus amigas.

-¡Astrea-sama se está viendo con un chico! -exclamaron las dos.

Las demás al escuchar eso abrieron los ojos sorprendidas.

-¡¿Que?! -grito Alise perpleja.

-Astrea-sama -susurro Maryuu en shock.

-s‐será.......él chico de las cartas -dijo Neze.

-nah no creo.

Las demás al escuchar la respuesta segura de la elfa la voltearon a ver extrañadas.

-¿Y tú como estas tan segura de eso? -pregunto Noin.

-............¿Intuición? -susurro Ryuu su respuesta apartando la mirada-. Además lo dudo, ustedes siempre exageran las cosas, la última vez dijeron que Celty se estaba reuniendo todos los días con un hombre ya que salía todas las tardes pero al final resultó que solo estaba yendo a la nueva biblioteca de la ciudad.

Ambas chicas sonrieron nerviosas al escuchar esas palabras sabiendo que tenía razón, en ese momento exageraron quizás un poco pero no podían culparlas, era muy raro que Celty saliera todos los días así que eran justificadas sus sospechas.

-b‐bueno, no nos culpen por sospechar -dijo Noin con una sonrisa nerviosa.

-todo lo que hacía Celty era sospechoso -se defendió Asta.

-Lion tiene razón, es probable que ustedes estén exagerando otra vez -dijo Neze tranquilamente.

-si Astrea-sama se estuviera reuniendo con un hombre de manera romántica ya lo sabríamos -dijo Maryuu con una sonrisa tímida.

-y estoy segura que no es el chico de las cartas -susurro Ryuu.

-¡Bien! Misterio resuelto, solo es otra equivocación de ustedes dos -y por último hablo la sonriente Alise dudando también de ello.

Y con eso dicho las cuatro se disponían a irse cada quien por su lado.

-Astrea-sama se puso brillo en los labios antes de salir.

Pero las últimas palabras de Noin hicieron que las cuatro se congelaran.

-¿Brillo....

-en.....

-los.....

-labios?.

Dijeron las cuatro con expresiones perplejas no pudiendo creer eso.

Todas conocían a su diosa y sabían que jamás utilizaba algo así ni para ocasiones importantes.

Eso lo cambiaba todo.

-¡Astrea-sama se está viendo con un hombre! -grito Alise en shock.

-aja ahora si nos creen -dijo Asta.

-p‐pero ¿Están seguras de lo que vieron? -pregunto Neze perpleja.

-¡Claro! Vimos claramente como sus labios brillaban, es obvio que se arreglo de esa manera para ver a alguien -respondió Noin-. Yo creo que por fin conoció al chico de las cartas.

-n‐no creo que sea ese chico -susurro la elfa.

-¿Y como estas tan segura? -pregunto Maryuu.

-..........¿Intuición? Además que Astrea-sama recibió hace unos días una carta, es imposible que sea él -respondió notándose cierta angustia en sus ojos, algo raro ya que en esos momentos estaría hirviendo de ira como era normal en ella diciendo que querían aprovecharse de su diosa.

-entonces.........¿Se está viendo con otro hombre que desconocemos? -agregó Neze.

-.....

-.....

-.....

Ese pasillo quedó en completo silencio después de que Neze dijera esas palabras viéndose entre ellas con expresiones que no podían creerlo.

Y todo por un brillo en los labios, algo normal para muchas mujeres pero no para su diosa.

-.......hay no....... -susurro la elfa.

-¿Lion? ¿Que sucede? -pregunto Alise al ver como su amiga se alejaba.

-i‐iré a mi habitación, tengo que hacer algo ¡Nos vemos más tarde! -y con esas palabras la elfa se fue corriendo por los pasillos dejando a sus amigas confundidas.

-¿Que le pasa? Normalmente empezaría a gritar que tenemos que protegerla o algo así -dijo Noin extrañada.

-probablemente el shock fue tanto que fue a encerrarse a su habitación para gritar -dijo la opción Maryuu.

-b‐bueno, volviendo al tema principal......¿Astrea-sama viéndose con un hombre? -dijo Neze aún no pudiendo creerlo.

-y es alguien que no es el chico de las cartas........o al menos Lion esta segura de eso -dijo Asta.

-esto empieza a ser preocupante -dijo Alise-. Lo mejor será mantener esto en secreto de las demás hasta estar completamente seguras de nuestras sospechas, no queremos crear otro malentendido como sucedió con Celty.

-creo que eso sería lo correcto........pero que Astrea-sama se coloqué brillo en los labios ya deja mucho en que pensar -dino Asta.

-¿Y si se coloca brillo simplemente por querer arreglarse un poco para ella misma? -dio la opción la loba.

-......

-......

-......

-......

-tú cállate Neze -dijeron las cuatro haciendo que una gotita estilo anime apareciera en la loba.

Ese día y en los próximos esas chicas tendrían de mucho en que pensar sobre su diosa.

Mientras con Astrea.

-buenos días Hestia -saludo la diosa de la justicia al ya estar frente a las rejas de la mansión Chimenea viendo a su amiga en el jardín regando las flores.

-¡Oh! ¡Astrea!.

Y la pequeña diosa emocionada dejó lo que estaba haciendo y fue hacia las rejas para darle paso a su amiga.

-perdón por venir sin avisar -se disculpo Astrea con una amable sonrisa entrando al lugar.

-¡Para nada! Ya sabes que esta es como tú casa y siempre seras bienvenida aquí -dijo Hestia sabiendo que todo eso que tenia era gracias a su amiga ya que todo comenzó cuando le presento a Bell-. ......¿Uh?.

-¿Que pasa? -pregunto la diosa de la justicia extrañada al ver como Hestia levanto una ceja extrañada.

-¿Soy yo o tienes brillo en los labios? -pregunto confundida.

-¿Eh?......a‐ah eso, si, me coloque brillo en los labios -respondio con un poco de gracia dándose cuenta que eso era muy raro en ella.

-mmmmm ¿No estarás haciendo eso para seducir a Bell‐kun? -pregunto la pequeña diosa entrecerrando los ojos.

-c‐claro que no ¿Q‐Que te hace creer eso? -pregunto empezando a sentirse nerviosa.

-jajaja obviamente son bromas, eres Astrea ¿Tú enamorada de un hombre? Imposible, es casi lo mismo con Artemisa -dijo Hestia con gracia por lo tonta que sonó esa broma.

-j‐jajaja, si, imposible -rio Astrea intentando disimular un poco.

-¿Y que te trae por aquí? -pregunto curiosa caminando otra vez al jardín para regar las flores.

-obviamente vine a visitarte -respondió siguiéndola.

-jejeje últimamente vienes a visitarme más seguido pero no me quejo.

Astrea si iba de verdad a visitar a Hestia pero la verdad es que siempre iba también por otro objetivo.

Ver a Bell......

Siempre lo había hecho, desde que vivían en esa vieja iglesia, esa era una de las tantas razones por la cual ambos se habían vuelto cercanos, gracias a esas visitas de Astrea.

Y claro, también por las salidas que tuvieron algunas veces que la gran mayoría fueron por cosas del destino planeadas a último segundo cuando se encontraban por casualidad en la calle.

-pero como puedes ver en este momento estoy ocupada con el jardín -dijo al diosa regando las flores-. Si quieres puedes ayudarme o también puedes ir a esperarme a la sala, te recomiendo lo segundo ya que allí están Kaguya y Bell‐kun.

-¿Kaguya y Bell?.

-¡Si! Como ya sabes Kaguya le esta enseñando a Bell‐kun a bailar y esta aprendiendo bien, ¿Porque no vas a dar un vistazo y ver como van las clases?.

-.......

-yo no me tardaré mucho y adelantate, siempre es entretenido verlos jeje.

-b‐bien, si tú lo dices -acepto un poco nerviosa y ansiosa por ver como eran esas clases de baile.

Quería saber como era Kaguya como maestra ya que le había dicho que detestaba enseñarle cosas a los demás ya que era estresante.

-perfecto, llegare en un rato, si tienes hambre o algo ve a la cocina con confianza.

-gracias.

Y con eso dicho Astrea dejo a Hestia en el jardín y se adentro a la sede y caminar por los pasillos en dirección a la sala.

A pesar de que sabía que ambos sólo estaban practicando baile aun así no podía dejar de evitar de sentirse un poco nerviosa, por más que quisiera borrar todo eso le era imposible.

Además que desde ese entonces, desde que Kaguya había empezado a entrenar a Bell no había tenido mucha comunicación con este, sentía que se habían distanciado un poco y eso la entristecia aunque también lo entendía ya que el albino se estaba esforzando mucho para aprender a bailar y según Hestia también se la pasaba mucho tiempo en el calabozo con sus amigos recolectando dinero y esas cosas.

-si puedo invitaré un día de estos a Bell a cenar al bar de Mia, desde hace un tiempo no vamos juntos -pensó la diosa deseando tener otra salida así que no la tenían desde hace mucho tiempo.

Y todo porque Bell desde hace unos dos meses y medio empezó a comportarse distinto con ella como más nervioso y reservado contrario al principio que aunque era con respeto la trataba como una buena amiga.

A veces deseaba que volvieran aquellos días en los que salían muy a menudo y que le fue gustando cada vez más la compañía de él.

-bueno, espero que pronto volvamos a tener otra salida así -pensó con esperanza llegando a la puerta de la sala y tomar el pomo dispuesta a entrar.

Pero antes de que abriera la puerta.....

-te mueves muy bien.

Justo cuando iba a abrir la puerta escucho la voz de Kaguya al otro lado con un tono de voz algo agitado.

Eso la puso nerviosa.

-¿Enserio me muevo bien?.

Y después se escucho la voz del albino también algo agitado haciendo que la diosa se pusiera mucho más nerviosa.

-claro, tus movimientos son muy buenos pero eres muy brusco en algunos momentos

-¿Y que hago? No quiero lastimarte.

La mano de Astrea empezó a temblar sin soltar el pomo mientras más escuchaba.

-intenta moverte con más tranquilidad y verás que tendrás más energía y relaja un poco más tus caderas, yo me encargaré del resto.

-......¿Asi?.

-si, así, sigue moviéndote de esa manera y manten el ritmo.......estas aprendiendo muy bien.

-p‐pero es un tanto difícil, estoy más acostumbrado a ir más rápido.

-muy mal, tienes que aprender a moverte mejor o incomodaras a tú pareja.

-entonces me esforzaré.......pero me empieza a doler un poco la cadera, te estas moviendo algo rápido.

-es normal que te sientas así las primeras veces pero mientras más lo hagamos tú cuerpo se irá acostumbrando más.

-b‐bien....

-entonces sigue, ya casi llegamos al final........ya casi terminamos.......si así.......más lento.......no apresures las cosas........así.......

-¡Esto es increíble!.

Astrea ya no pudiendo resistirlo y con su rostro completamente rojo abrió la puerta de un portazo.

-¡¿Que es lo que están haciendo?! -grito avergonzada y con miedo de lo que pudiera ver al entrar así nada más empezando a dolerle el corazón.

Pero cómo era obvio vio otra cosa de lo que estaba pensando.

-¿Uh?/¿Uh?.

Frente a ella en medio de la sala estaban Bell y Kaguya de pie, con el albino con una mano en la cintura de la oriental y con la otra tomando su mano mientras la oriental lo tenía tomado del hombro.

Y junto a ellos había un pequeño aparato el cual sonaba música muy suave para que solo la escucharan ellos dos.

Era más que obvio que estaban practicando el baile.

-¿Astrea-sama?/¿Astrea-sama? -dijeron ambos a la vez extrañados por la repentina aparición de la diosa.

-.......

Las mejillas de Astrea se fueron sonrojando más y más al ver que había malinterpretado por completo la situación y saco conclusiones apresuradas.

Obviamente Kaguya se dio cuenta inmediatamente del porqué de la actitud de la diosa recordando como estaba platicando con Bell, si un ciego los hubiera escuchado hubiera pensado otra cosa.

Y Bell, pues él no entendía de la actitud de Astrea.

-y‐yo.....

Lentamente Bell soltó la cintura de Kaguya y esta lo soltó del hombro sabiendo que su clase de baile había terminado por ese día por la repentina aparición de la diosa justiciera.

-soy una tonta -pensó Astrea avergonzada por tener una mente sucia.

-Astrea-sama, no sabía que iba a venir hoy a la sede de la familia Hestia -dijo Kaguya acercándose a ella.

-e‐eh bueno, fue algo que se me ocurrió en el último momento -respondió intentando hablar normalmente.

-¿Porque entro de esa manera? ¿Sucedió algo malo? -pregunto Bell curioso.

Las mejillas de la diosa se sonrojaron un poco al recordar lo que ella estaba pensando.

-p‐por nada.

-......je -mientras Kaguya solo rio levemente con diversión al ya saber lo que pensó ella.

Le sorprendía mucho que ella pensara cosas así pero ya tenia más de diez mil años, aunque sea virgen sabía de ese tema.

-a‐adelante, tome asiento -invito Bell recordando que Astrea estaba frente a él empezando a actuar de manera nerviosa como ya era normal.

-g‐gracias -y ella obedeció y se sento un poco tímida y apenada por lo que había pensado.

Mientras Kaguya queriendo aligerar un poco el ambiente se sento en otro sofá y platicar.

-como puede ver le estaba dando clases de baile a Bell -explico la oriental viendo al albino el cual sonrió avergonzado sentándose en el mismo sofá que ella.

-.......

Astrea solo vio el sofá donde estaba sentada ella habiendo espacio para uno más y a pesar que él estaba cerca decidió ir a sentarse con Kaguya.

Pero solo eran pequeñeces sin importancia.....

Eso es lo que repetía en su mente.

-ya veo ¿Y ha mejorado? -pregunto la diosa curiosa.

-mmmm si soy honesta al principio pensaba que iba a ser una basura de principio a fin.

-¡Hey!.

-pero tengo que admitir que estos últimos días ha mejorado, me ha sorprendido -elogio viendo al albino.

-eso es gracias a que tú me has enseñado -dijo Bell con una leve sonrisa-. Si no fuera por ti dudo mucho haber aprendido.

-pero tienes que admitir que fue una completa molestia los primeros días ya que siempre me pisabas el pie, incluso con tus malditos suplex.

-l‐lo siento -se disculpo apenado por esos sucesos.

-pero bueno, al menos esta vez ya no pisas mi pie, es un gran avance -dijo la oriental soltando un suspiro-. Pero aun tienes mucho que aprender ya que aún eres muy lento en muchos pasos y tardas en reaccionar, hacer eso solo perjudicará el baile de tú pareja.

-intento mejorar ese aspecto pero me es difícil sincronizar ese paso contigo ¿No será que tú eres la que lo está haciendo mal?.

-pequeño conejo idiota, yo soy la que te está enseñando -dijo dándole un pequeño golpecito en el hombro haciendo que Bell soltara una leve risa-. Tú eres demasiado lento, si tan solo fueras bueno en el baile como eres cantando.

-aja haz vuelto a admitir que soy bueno cuando dijiste que no lo harías.

-cierra la boca, no es como si fuera una apuesta o algo así.

-si como no.

-solo por eso seré dura contigo mañana en las clases.

-ugh p‐perdón, no quise molestar.

-.......

Mientras ellos platicaban, reían y bromeaban Astrea se había quedado en silencio con una leve sonrisa viendo la interacción de ambos.

-.......

Sin darse cuenta ambos la habían ignorado y centrarse en ellos dos y en la platica aunque no lo hicieron apropósito, fue algo que hacían sin darse cuenta, ayer ignoraron a Welf en todo el día.

-........se llevan bien -pensó la diosa sin dejar de sonreír siguiendo sintiendo ese raro malestar en su corazón.

Eran otra vez los celos.

-.....m‐me alegro por ustedes, se han vuelto muy buenos amigos -felicito Astrea captando otra vez la atención de ambos dejando su platica y verla.

-.......amigos.

Susurraron ambos volteando a verse.

¿Eran amigos?.

Ahora que Astrea había dicho esas palabras empezaron a pensar sobre qué clase de relación tenían.

Al principio solo eran simples conocidos para después ser alumno y maestra en el baile.

Pero sin darse cuenta habían empezado a comportarse de ese manera entre ellos.

¿Cuantos días habían pasado desde que comenzaron los entrenamientos? ¿Cinco días?.

Ni siquiera se dieron cuenta en que momento empezaron a hablar tanto, incluso Kaguya había dejado de insultarlo y golpearlo a cada momento por algún error, también reían, platicaban de cualquier tema al azar y demás.

Sin darse cuenta su relación había evolucionado a amigos.

-podría decirse que si -susurro la oriental ya que tenía que admitir que le agradaba el nervioso conejo.

Pero aunque le agradará y empezará a considerarlo un amigo eso no significaba que su objetivo principal haya desaparecido.

Ese objetivo aun seguía en pie.

-jeje -y Bell río levemente avergonzado y feliz al ver que ella admitió ser amigos.

A Astrea cada vez le resultaba más incómodo estar allí con ellos.

-¡He vuelto!.

Afortunadamente la animada pequeña diosa entro a la sala haciendo que Astrea suspirara aliviada, ver a ambos así de cercanos le causaba incomodidad.

Muy raro ya que al principio quería que sus hijas se llevarán bien con el albino pero ahora le incomodaba, sentía que le estaban robando algo.

-perdón por la tardanza Astrea pero el jardín es muy grande -se disculpo Hestia llegando al sofá y sentarse junto a la diosa justiciera.

-no te preocupes, te entiendo, cuidar el jardín requiere mucho trabajo y cariño si quieres que se mantenga hermoso, yo trato el mio de la misma manera.

-¡Exacto! Me estoy esforzando para que mi jardín se mire muy bien, se que tomara mucho trabajo pero valdrá la pena al final por los resultados.

-bueno, nosotros nos vamos.

Y en eso Kaguya y Bell se pusieron de pie captando la atención de ambas diosas.

-¿Eh? ¿Irse? ¿A dónde? -pregunto Astrea extrañada y cada vez más grande ese malestar.

-el tonto de Bell también me pidió ayuda para entrenar con la daga y yo acepte, al menos en los entrenamientos para pelear aprende rápido.

-jeje -rio el albino avergonzado por esas palabras-. La verdad es que nunca he entrenado con alguien con mucha experiencia en batalla y siento que Kaguya-san será una buena maestra, si quiero ser un gran aventurero.

-......

Astrea mejor se guardo esa molestia ya que ella misma le dijo que si algún día necesitara ayuda para entrenar y esas cosas que le pidiera ayuda a sus hijas.

-bien vamos, solo entrenaremos por una hora ya que ya es tarde -dijo la oriental empezando a caminar y el conejo la seguía un poco emocionado por el entrenamiento-. Pero te advierto que no seré nada blanda en el entrenamiento.

-entendido, me esforzaré para no decepcionarla.

Y con esas palabras ambos salieron de la sala dejando a ambas diosas solas.

-Kaguya y Bell se han vuelto muy amigos desde que comenzaron esas clases de baile -dijo Hestia feliz.

-se nota -susurro la diosa.

-incluso Kaguya lo ha invitado a patrullar de vez en cuando para mostrarle a Bell como es su trabajo en la ciudad.

-s‐si, ya me lo ha dicho.

-jejeje no se los digo directamente pero los dos hacen buena pareja -dijo Hestia con diversión-. Siento que en un futuro tú y yo seremos consuegras, lo presiento.

-......

-......

-......

-......

-Astrea.....

-¿Que?.

-me estas apretando el brazo, me duele.

Astrea al darse cuenta de lo que estaba haciendo rápidamente aparto la mano e inmediatamente Hestia empezó a acariciar su brazo.

-p‐perdón -se disculpo ya que ni siquiera se dio cuenta en que momento tomó el brazo de su amiga.

-auch ¿Acaso no te gusta la idea de que seamos consuegras? Se que Bell se mira poco confiable pero tú sabes que es un buen chico -dijo Hestia extrañada-. ¿O en vez de Kaguya prefieres que este con Alise? Ellos dos hacen también muy buena pareja.

-......

-¡Ya se! Hagamos planes para que se vayan acercando más y más sin que se den cuenta, seremos como unas diosas del amor en las sombras.

-Hestia......nosotras no tenemos que interferir en esas cosas, seria una falta de respeto......quizás ellos solo son amigos nada más.

-pfff amigos.....¿Haz visto como se miran? Hay como una chispa entre ellos.

-mira, mejor cambiemos de tema y hablemos de otro tema como la economía de Orario o algo más -pidió Astrea sintiendo que faltaba poco para empezar a tener un tic en el ojo.

De verdad que estaba detestando esos sentimientos negativos pero por más que quería evitar que salieran no podía controlarlos.

-mmmm bien pero este tema lo retomaremos en otro momento -acepto Hestia un poco inconforme por no seguir esa interesante platica-. ¿Que tal si vamos a la cocina a preparar un poco de café?.

-me parece perfecto -acepto con una amable sonrisa intentando olvidar esos celos que habían aparecido por esa platica.

-jeje Kaguya y Bell‐kun después de cada clase de baile van juntos a la cocina a preparar un poco de café juntos, no se dan cuenta pero por momentos parecen una pareja, Kaguya ya es como parte de la familia.

-eso es increíble -dijo la diosa sin dejar de sonreír-. ¿Podemos ir a preparar el café?.

-incluso ambos saben como le gusta el café al otro y demás, parecen sincronizados.

-Hestia, el café.

-no se porque pero desde hace un tiempo Bell‐kun se comporta de forma sospechosa, como alguien enamorado, yo siento que él está enamorado de Kaguya desde hace un tiempo.

-mi café solo lo quiero con dos cucharadas de azúcar.

-sin querer los unimos más con esta alianza, me emociona ver como terminara las cosas entre ellos, Bell‐kun es muy preciado para mi y quiero lo mejor para él y siento que Kaguya es una buena chica.

-¿Tienes algún pan para acompañar el café? -y Astrea seguía intentando ignorar las palabras de su amiga aunque le era muy difícil.

Conocía a Hestia y por un momento pensó que sería muy posesiva con Bell pero allí estaba emparejandolo con Kaguya, no se espero eso de su amiga.

Parece que había juzgado mal a Hestia.

-¡Oh! Y ayer Bell‐kun hizo reír a Kaguya por una tontería, de verdad me sorprende lo buena pareja que hacen ambos.

-......

Astrea ya empezaba a arrepentirse de haber hecho esa visita.

Solo esperaba que ella no se la pasara hablando solo de eso ya que ese tic en el ojo amenazaba con aparecer.

Mientras en el patio de entrenamiento.

-por alguna razón siento que están hablando de mi -susurro el albino con la mirada baja.

-¿Porque crees eso? -pregunto la oriental curiosa con su katana en su mano.

-no se pero me siento incomodo y cuando me siento así es porque alguien esta hablando de mi......o eso era lo que me decía mi abuelo.

-tú te sientes incómodo por todo -dijo Kaguya negando levemente-. Mejor comencemos este entrenamiento, quiero ver como eres peleando.

-b‐bien.

Mientras Bell se alistaba para pelear Kaguya recordaba la actitud de su diosa cuando la vio bailando con él.

Era interesante verla actuando celosa, por que si, Astrea estaba celosa, se le notaba claramente en su expresión.

Aunque quisiera divertirse un poco con eso no quería crear algún tipo de malentendido para que después ella estuviera deprimida así que retendria sus ganas de querer hacer algunas bromas.

Lo mejor sería centrarse en seguir investigando al albino que en esos días se había centrado tanto en enseñarle a bailar que había olvidado por completo su objetivo principal.

Aun quedaba tiempo para esa fiesta así que estaba segura que descubriría algo.

-¡Estoy listo! -exclamo Bell con su daga en mano.

-bien, vamos -y con esas palabras Kaguya se lanzo al ataque y atacar con todo lo que tenía al albino.

-¡AAAAAAAAH!.

Kaguya no sabía que pronto las cosas tomarían un rumbo que ella no esperaría.

===Fin del capítulo===

Bueno aquí termina el capítulo de hoy espero que les haya gustado si es así voten y comenten que les pareció ya que eso me motiva a seguir escribiendo.

Ahora les haré una pregunta seria sobre la historia y quiero que respondan.

Y antes que nada déjenme decirles que no tengo ningún problema con la decisión que tomen, yo tengo pensado escenarios para cualquier cosa así que díganme que es lo que quieren.

¿Les gustaría que esta historia sea un trío amoroso? ¿KaguyaxBellxAstrea?.

Los estaré leyendo.

Sin más que decir me despido adiós cuídense y no tomen drogas.