Nos encontramos en la sede de la familia Astrea donde cierta pelirroja caminaba con una sonrisa animada por los pasillos en dirección al comedor.

—otro día para repartir justicia —dijo con una radiante sonrisa—. Un día más donde los habitantes de Orario serán bendecidos por ver mi belleza, aun no puedo creer que sea tan perfecta y hermosa, lo siento mucho por las chicas pero siempre terminan siendo opacadas por mi pero ya que, cuando no patrulle con ellas tendrán su momento de brillar.

Después de pensar eso se detuvo frente a un espejo que estaba en uno de los tantos pasillos y vio su reflejo y sonreír orgullosa.

—cada día más hermosa, nada mal Alise.

Y así continuo su animada caminata en dirección al comedor pensando en lo increíble y hermosa que era.

Al llegar a su destino abrió la puerta y entró viendo que algunas de sus amigas ya estaban allí y a su diosa la cual estaba dando vueltas preparando cosas.

Aunque su atención fue a un plato de sándwiches que estaban en la mesa.

—¡Que bien! Ya tenia hambre —dijo feliz llevando su mano al plato.

Pero antes de que tocara uno una espátula la golpeo con fuerza en la mano evitando que lo hiciera.

—auch —se quejo con dolor viendo a su diosa con la espátula en la mano y una expresión seria.

—esos sándwich no se tocan Alise, son para los invitados —advirtió para después seguir preparando más cosas.

Así que triste por no cumplir su objetivo camino hacia sus amigas viendo como Lyra y Maryuu se estaban sobando la mano con un poco de dolor.

Parece que Astrea también las golpeo con una espátula.

—¿Alguien sabe porque Astrea-sama esta preparando tantas cosas? —pregunto la pelirroja curiosa.

—¿Acaso lo olvidaste tonta? —pregunto Kaguya alzando una ceja.

—¿Olvidar que? —pregunto Alise extrañada.

—hoy viene la familia Hestia a firmar la alianza con nosotras —explico Neze comiendo un sándwich que ella misma preparo—. Astrea-sama se levantó temprano para preparar comida, se mira muy ansiosa por ello.

—bueno, la diosa Hestia es su amiga así que es normal que este emocionada —dijo Lyra aún con su mano adolorida—. Aunque aun no entiendo en qué nos beneficia una alianza con una familia tan pequeña, los que salen beneficiados son ellos, no nosotras.

—tú misma lo dijiste, la diosa Hestia es su amiga así que no miro otra razón para esa alianza —dijo la elfa Ryuu sentada en una silla viendo a su diosa preparando una bebida, precisamente jugo de piña—. Mmm sospechoso.

—¡Cierto! —grito Alise recordando eso—. ¡¿No se sienten emocionadas?! Una familia pequeña va a formar una alianza con nosotras, podemos ayudarlos con nuestras grandes habilidades y enseñanzas para convertirlos en una gran familia. Podemos hacerlos brillar.

—lo único que quiere es lucirse.

—si.

Susurraron Noin y Asta ya conociendo como era su capitana.

—creo que Cranel-san necesita unos consejos de como ser un mejor capitán, aun es un novato —dijo Ryuu recordando al albino.

—¿Cranel-san? ¿Quien es ese? ¿Tú novio? —pregunto Lyra alzando una ceja.

—¡¿Que?! ¡No! ¡Claro que no! —grito la elfa avergonzada.

—cierto, él es el pequeño novato, el capitán de la familia Hestia —dijo Kaguya viendo con curiosidad a Ryuu—. No sabía que lo conocías.

—b‐bueno, lo ayude hace unos meses de unos abusones —explico la elfa ya un poco calmada—. Es un tanto inexperto en el rol de capitán.

—¡Yo también lo conozco! —dijo Alise con una sonrisa.

—¿Y como lo conociste? —pregunto Neze terminando su sándwich.

—Astrea-sama me lo presento —respondio tranquilamente.

Al momento en que Alise dijo eso todas las chicas quedaron en silencio procesando esas palabras.

Después de eso todas dirigieron su mirada lentamente hacia su bella diosa la cual seguía preparando cosas en la cocina con una sonrisa.

—no entiendo —susurro Lyra.

—no se mucho los detalles pero creo que él y nuestra diosa son amigos, una vez la estaba acompañando a un restaurante y lo encontramos en el camino, fue en ese momento en que Astrea-sama me lo presentó como un amigo, es alguien gracioso por sus expresiones tímidas y nerviosas —contó Alise con diversión.

—....

—....

—....

—¿Que?.

—¿Sabias que Astrea-sama tenía un amigo masculino cercano y no nos dijiste? —pregunto Kaguya con un tic en el ojo.

—ah.........bueno, se me olvido te‐he —se excuso dándose un golpecito en la cabeza.

—¿Tú lo sabias Lion? —pregunto Lyra viendo a la elfa.

—si —respondio tranquilamente—. Él mismo me lo dijo.

—¿Y tampoco no nos lo dijiste?.

—no lo mire como algo importante, solo es un amigo de nuestra diosa, conozco a Cranel-san y se que no es mala persona —dijo no mirándole lo malo.

—¿Que no es importante? De verdad que eres una elfa ton.....idiota —dijo Kaguya.

—¿Que? —una vena apareció en la frente de Ryuu al escuchar el insulto de la oriental.

—no entiendo ¿Porque es tan importante? —pregunto Alise.

—¿Acaso son tontas? Que tal si ese "Cranel-san" es el famoso chico de las cartas —dijo Kaguya haciendo que más de alguna abriera los ojos sorprendidas.

—ahora que lo dices tiene sentido —susurro Neze con un dedo en la barbilla—. Es alguien cercano a nuestra diosa ¿Que tan amigos son?.

—no estoy segura, creo que se conocen desde hace algún tiempo —respondió la pelirroja—. ¿Porque creen que es él chico de las cartas? Ni siquiera lo conocen.

—vamos Alise, es un humano, un adolescente, ¿Enserio crees que alguien así se acercará a nuestra diosa solo porque quiere ser su amigo? ¡No! Ese tipo quiere quitarle su pureza —dijo la oriental con desconfianza—. Muy astuto.

—Cranel-san no es ese tipo de persona —pero Ryuu salto en su defensa—. Aparte que dudo mucho que sea él.

—¿Porque crees eso?.

—Cranel-san no es una persona lista, jamás podría dejar diez cartas consecutivas en el buzón sin que nadie se de cuenta, es imposible que él sea tan listo como para pasar desapercibido varias veces.

—lo llamo idiota sin darse cuenta —pensó Noin con una sonrisa nerviosa.

—vaya Lion, lo conoces muy bien ¿No será que lo estas negando porque a tí te gusta ese chico y no quieres que este enamorado de Astrea‐sama? —pregunto Lyra con burla.

—¡Claro que no!.

—yo digo que están sacando conclusiones apresuradas —opino Alise tranquilamente—. Ni siquiera lo conocen.

—tienes razón, no lo conozco, cuando lo conozca sacaré mis propias conclusiones —susurro Kaguya aun sospechando del albino.

—¿Que tanto están hablando ustedes?.

En eso Astrea se acercó con curiosidad donde sus hijas.

—¿Sucede algo malo?.

—estamos hablando de los celos de Lion.

—¡Lyra!.

—¿Celos? ¿Que celos? —pregunto confundida viendo como la hobbit reía y Ryuu le raclamaba—. Bueno, no importa ¿Pueden ayudarme a llevar los sándwiches y el jugo a la sala?.

—¡Yo la ayudo! —se ofreció Maryuu poniendose de pie para llevarse los sándwiches.

—¿Uh? Que raro ¿Porque preparo jugo de piña? Nunca hemos tomado ese jugo en la familia —pregunto Ryana extrañada llevando el jugo.

—e‐es para cambiar un poco la bebida, hay que probar distintos sabores —respondio Astrea evitando sonreír de manera nerviosa.

—mmm tiene sentido.

Y restandole importancia Ryana se llevó el jugo también a la sala.

"Ding Dong".

En eso el timbre de las rejas sonó en toda la sede alertando a todas.

Era un nuevo aparato que había inventado Asfi para llamar a cualquier sede, de esa manera los visitantes se ahorrarían en gritar con fuerza para que alguien llegara a recibirlos.

—Hestia y su familia ya están aquí —dijo Astrea volviendo a sonreír.

—¡Yo iré a recibirlos! —exclamo Alise saliendo corriendo del comedor.

—¿Y que hacemos nosotras? —pregunto Lyra.

—hay que esperarlos en la sala, firmaremos la alianza, comeremos los sándwiches y hablaremos un poco para que ambas familias se conozcan mejor, los hijos de Hestia son agradables.

—si......los conoceremos mejor —susurro Kaguya ya teniendo en mente a quien conocer.

Mientras fuera de la sede.

De pie frente a las rejas de la sede estaba la familia Hestia esperando a que alguien llegara a recibirlos.

—¿Welf me miro bien? —pregunto Bell nervioso a su amigo pelirrojo.

—tranquilízate Bell, todo saldrá bien, no hace falta que estés tan tenso —dijo el pelirrojo tranquilamente.

—la familia Astrea es la que se encarga de tener segura la ciudad, siempre las he admirado, me siento emocionada por conocerlas a todas —dijo Mikoto con una sonrisa de emoción.

—esta alianza nos va a venir muy bien, ahora que seremos aliados de una familia tan fuerte no se meterán con nosotros como lo hizo Apolo, bien pensado Hestia‐sama —felicito Lili levantando el pulgar a la pequeña diosa.

—jeje no lo hice por eso, Astrea y yo somos buenas amigas además fue ella la que propuso la alianza, no yo —explico la diosa con una sonrisa—. No se en que le beneficia hacer una alianza con una familia como la nuestra que no tiene nada que ofrecerle pero estaba emocionada por ello.

—vaya manera de decirnos que no somos nada —susurro el pelirrojo dolido por esas palabras.

—además Bell‐kun ¿Porque estas tan nervioso? Ya conoces a Astrea desde hace mucho tiempo y también conoces a su capitana así que no veo razón para que actúes así —dijo la diosa extrañada.

—¿Y si no le agrado al resto de la familia y cancelan la alianza? —pregunto Bell temeroso—. Astrea-sama se esforzó mucho por esto y no quiero arruinarlo.

—tranquilo Bell‐sama, es más probable que no les agrade Welf‐sama —intento animar la hobbit y el pelirrojo frunció el ceño.

—¡Oh! Alguien salió —dijo Mikoto viendo como una chica pelirroja corría a las rejas.

—¡Bienvenidos familia Hestia, los estábamos esperando! —saludo Alise con su clásica sonrisa animada—. Astrea-sama estaba preocupada ya que se estaban tardando pensando que les sucedió algo malo en el camino.

—perdón por la tardanza, lo que pasa es que  la perezosa de nuestra diosa se quedó dormida —susurro Lili viendo de forma acusadora a Hestia la cual sonrió de forma nerviosa.

—¡Pero basta de charla! Pasen a esta increíble sede y por si no me conocen me llamo Alise, la genial capitana de esta maravillosa familia —se presento la chica orgullosa.

—es un gusto conocerla —dijo Mikoto con una sonrisa de emoción.

De verdad admiraba a todas las chicas de dicha familia, algunas más que otras.

Así la pelirroja abrió las rejas dándole paso a los invitados.

—me alegra verte otra vez Bell —saludo Alise dándole un pequeño golpecito en el hombro al albino—. ¿Cómo estás?.

—b‐bien diría yo —susurro aun nervioso.

A pesar de que él albino y la pelirroja sólo se habían visto unas cinco veces desde que se conocieron, Alise lo consideraba como un buen amigo.

—¿Alguna nueva aventura? La última fue con la familia Apolo, perdón por no ayudarte pero todo fue tan rápido que cuando me di cuenta ya habías ganado su sede —dijo con una sonrisa de gracia—. Lion también quiso ayudarte y Astrea-sama obviamente.

—n‐no fue algo tan complicado la verdad —dijo con una sonrisa nerviosa recordando ese "juego de guerra".

—bueno, da igual, lo importante es que ahora tienes una gran sede, es un paso muy grande para convertirse en una gran familia.

—gracias por sus palabras Alise‐san.

Así todos siguieron caminando hasta las puertas de la sede donde Alise les dio la entrada haciendo que Bell se sintiera nervioso otra vez.

Tenía miedo que descubrieran su interés por su diosa, había escuchado que algunas chicas de la familia eran muy astutas e inteligentes, si se descuidadaba podrían descubrirlo.

Solo esperaba que ellas no supieran nada de esas cartas y que Astrea lo haya mantenido en secreto solo para ella, de esa manera estaría más tranquilo.

—vaya, este lugar tiene un ambiente muy agradable —susurro Lili en el momento en que puso un pie en la sede.

—huele a........justicia —dijo Welf.

—increíble —pensó Mikoto viendo lo bien decorado que estaba en todas partes, parecía un museo de lo ordenado y limpio que estaba con cuadros pegados en la pared, la mayoría eran pinturas artísticas, incluso tenían una pequeña estatua de una mujer cargando un escudo y una espada—. Hay una gran diferencia con la sede del dios Apolo.

—ahora es nuestra sede y si, tienes razón, le falta aun unas cuantas remodelaciones —dijo Hestia recordando como aún habían algunas estatuas del dios del sol en la mansión Chimenea, pronto las mandarían a demoler—. ¿Donde esta Astrea?.

—está en la sala con todas las demás ¡Siganme!.

La animada pelirroja siguió caminando mientras todos miraban con curiosidad la sede, principalmente Bell.

—así que este es el hogar de Astrea-sama —penso sonriendo levemente al ver lo ordenado que estaba todo—. No esta tan lejos a como me la imagine la verdad.

Muchas veces tuvo una gran curiosidad de ver como era estando a punto de aceptar una de las tantas invitaciones de la diosa de la justicia pero al final siempre se terminaba negando.

En su mente no parecía buena idea entrar a una sede llena de solo mujeres y que él sería el único hombre.

Sería demasiado incómodo para alguien como él.

Al menos esta vez no estaba solo y su buen amigo Welf estaba con él, era alguien muy confiable

—por cierto Bell, ¿Ya comenzaste a escribir la otra car.....? ¡UGH!.

Alise se detuvo al escuchar el sonido de un golpe atrás de ella dándose la vuelta viendo a Welf de rodillas con una expresión de dolor y a Bell con su puño levantado.

—¿Sucede algo malo? —pregunto Alise extrañada.

—¡Para nada! Welf tenía dolor de estómago —explico Bell con una sonrisa nerviosa.

—¿Y aun así lo golpeaste en el estómago?.

—...e‐es una cura c‐casera de mi pueblo, un buen puñetazo acomoda todo tú estómago y elimina todo malestar, es muy e‐efectivo.

—¿Enserio? Nunca oi hablar de eso —dijo curiosa—. Creo que lo pondré en práctica la próxima vez que le duela el estómago a Neze.

Y con ese susurro Alise siguió caminando y Hestia con Lili la seguían negando levemente al ver la actitud de sus compañeros.

—¡¿Que estas haciendo?! ¡Me ibas a delatar! —susurro Bell con fuerza al pelirrojo el cual se puso de pie con dolor.

—s‐solo era una pequeña broma, no creí que me fueras a golpear —se quejo el herrero.

—Welf‐dono, no debería hacer bromas así, para Bell‐dono es muy importante este secreto —regaño Mikoto a su amigo—. Quedamos en que lo ayudariamos, no en bromear con eso.

—l‐lo siento, no lo volveré a hacer.

—¡Oigan ustedes, no se queden atrás! —grito Lili ya estando cerca de la sala.

—¡Ya vamos!.

Gritaron los tres empezando a caminar aunque el pelirrojo aun adolorido del estomago.

Dentro de la sala.

En el momento en que las puertas se abrieron y la familia Hestia entró vieron a todas las chicas de la familia de la justicia dispersas en la sala y a Astrea sentada en una de los tantos sofás dirigiendo todas su atención a ellos.

Bell sin poder evitarlo se sintió nervioso al ver como más de alguna por no decir casi todas lo estaban viendo a él.

—¡Genial! No quería llamar mucho la atención y es lo primero que hago —pensó Bell intentando ocultar sus emociones.

Mientras cierta oriental observaba fijamente al albino, supo que era él en el momento en que entró.

Y su primera impresión fue.....odioso.....

En el momento en que Kaguya lo vio le cayó mal.

Tenia todas las cosas que detestaba de una persona.

Un chico tímido, nervioso, idiota e indeciso.

Con solo ver sus ojos pudo saber gran parte de su personalidad y lastimosamente era lo que más detestaba de las personas.

Bell no había hecho nada y ya había comenzado con el pie izquierdo.

—empiezo a creer que Lion tiene razón, es imposible que alguien con esa cara de idiota pase desapercibido fácilmente......pero por las dudas lo seguire vivigilando —pensó la oriental.

—¡Hestia! Bienvenida —saludo Astrea poniéndose de pie e ir a abrazar a su amiga.

—gracias por invitarme a mi y a mi familia —agradeció la pequeña diosa—. Y perdón por llegar tarde, lo que pasa es que mis hijos se tardaron mucho en salir.

—mentirosa —pensaron los cuatro al mismo tiempo al escuchar esa clara mentira.

—si, tus hijos —y obviamente Astrea no le creyó pero decidió seguirle la corriente.

Después de eso levantó la mirada y vio a los demás, precisamente a Bell.

—Bienvenidos a ustedes también, espero que se sientan cómodos y no se sientan nerviosos, principalmente tú Bell, veo que estás a punto de tener un ataque de epilepsia —bromeo la diosa soltando una pequeña risa.

—jejeje e‐estoy tranquilo —dijo el albino con una sonrisa nerviosa.

Mientras las chicas de la justicia se sorprendieron un poco al ver a su diosa bromear con alguien fuera de la familia y no era cualquier persona, era un chico.

Talvez a algunos no les parezca gran cosa pero todas ellas sabían que su diosa no era así, no se comportaba de esa manera con casi nadie, tenía que tener una extrema confianza para empezar a actuar así con otra persona.

En pocas palabras era cierto lo que dijo Alise, eran buenos amigos.

—parece que la actitud idiota le agrado a Astrea-sama —pensó Kaguya viendo de reojo a Bell el cual sonreía de forma nerviosa—. Mmm empieza a ser difícil sacar una conclusión.

—¡Bien! Todos tomen asiento, es momento de comenzar esta pequeña y agradable reunión —dijo Astrea viendo al albino y sonreirle calidamente y este le devolvió la sonrisa con un poco de vergüenza.

Obviamente ese pequeño gesto entre ambos fue notado por todas pero decidieron no decir nada por el momento.

Momentos después.

—¡Un gusto! Mi nombre es Mikoto Yamato, es un honor conocer a toda su familia —se presentaba la oriental—. Admiro todo el trabajo que ponen para tener segura la ciudad ¡Son un ejemplo a seguir!.

—muchas gracias Mikoto, me alegra que mi familia sea un buen ejemplo para tí —agradecio Astrea.

—¡De seguro vio mis grandes habilidades como líder y guerrera, es normal que me admire mucho! Es el precio por ser tan perfecta —dijo Alise orgullosa de ella misma.

—que narcisista —pensó Lili siendo la primera vez que miraba a alguien con el ego tan alto.

Kaguya solo observo un poco curiosa a Mikoto llegando rápidamente a la conclusión que era de los barrios pobres del medio oriente, tenía la apariencia de una chica de buenos valores y que se esforzaba por mejorar.

—u‐un gusto, mi nombre es Welf Crozzo —se presento el herrero pelirrojo un tanto nervioso por estar hablando frente a tantas mujeres.

—¿Crozzo? —dijo Celty.

—antes de que me insultes o algo aunque cargue el apellido no tengo nada que ver con lo que hizo mi familia en el pasado así que no me odies o por lo menos haz el intento —pidió Welf ya sabiendo que algo asi sucedería.

—n‐no es eso, simplemente me dio curiosidad el apellido jeje, mi bosque no fue afectado así que no tengo resentimiento como otros elfos —dijo Celty con una sonrisa nerviosa.

—uff menos mal —suspiro aliviado.

—Liliruca Ardi pero pueden llamarme Lili —se presento la hobbit tranquilamente—. Soy como una especie de estratega en la familia, espero que nos llevemos bien.

—oye ponte de pie —pidió Lyra curiosa.

—¿Eh? Claro.

Lili un tanto dudosa se puso de pie y Lyra inmediatamente se acercó a ella y quedo frente a frente pasando su mano por encima de sus cabezas.

—jaja soy dos centímetros más alta que tú —rio Lyra al comprobar su estatura.

—Lyra, eso es una falta de respeto —regaño Astrea.

—que seas dos centímetros más alta que yo no quita el hecho de que seas pequeña —dijo Lili con una sonrisa burlesca.

—jaja es verdad —se burlo Neze haciendo que su compañera frunciera el ceño.

—hablaremos después —susurro Lyra dándole unas palmaditas en la espalda a Lili e irse a su asiento.

Ahora era el turno del capitán de la familia en presentarse.

—u‐un gusto m‐mi nombre es Bell Chanel....digo, Cranel, soy el capitán de la familia jes...Hestia —se presento Bell muriendo de vergüenza por dentro por equivocarse dos veces.

Mientras las chicas tuvieron una gotita estilo anime al escuchar eso.

—Lion tiene razón, parece un idiota, es imposible que alguien así pase desapercibido diez veces con las cartas —fue el pensamiento que cruzo por casi todas al ver su presentación.

No es que les cayera mal, de hecho a sus ojos parecía un buen chico, simplemente ahora les parecía absurda la sospecha inicial que tenía Kaguya hacia él.

—sólo dijo unas pocas palabras y se equivoco, es un completo idiota —pensó Kaguya no teniendo duda alguna que ese era el tipo de personas que detestaba.

Mientras Astrea sonrio con dulzura y un poco de gracia al ver lo nervioso que estaba Bell, siempre le parecía gracioso ese lado de él.

—aun soy un capitán muy inexperto para mi familia, espero que con esta alianza pueda aprender mucho de ustedes —por fortuna las últimas palabras que dijo no se equivoco hablando perfectamente.

—¡No te preocupes Bell! Esta perfecta capitana te enseñara como ser el mejor capitán para tú familia —prometió Alise con una gran sonrisa.

—jeje gracias Alise‐san.

Y con esas palabras Bell volvió a tomar asiento soltando un suspiro de alivio por haber terminado su presentación.

En eso Hestia se puso de pie captando la atención de todos.

—se muy bien que mi familia no tiene nada que ofrecer en esta alianza y entenderé muy bien si a algunas de ustedes les parece absurda pero a Astrea y a mi nos hace mucha ilusión todo esto. Prometo que yo y mi familia nos esforzaremos mucho para ser una gran familia y ser de ayuda cuando ustedes lo necesiten, mientras tanto espero que mis hijos aprendan mucho de todos ustedes.

—¡Salud! —grito Lyra.

—idiota, no estamos brindando —susurro Asta dándole un pequeño golpecito a la hobbit.

—unas lindas palabras Hestia, veo que has mejorado mucho como diosa, si Hefesto te viera en estos momento de seguro estuviera llorando —dijo Astrea con gracia.

—jeje no lo dudo —rio con una sonrisa nerviosa.

Ahora que ya todos habían hablado era el turno de Astrea de hablar.

—chicas, espero que todas ustedes se porten bien con la familia Hestia y ayudarla cuando necesiten ayuda, ellos confian en ustedes para mejorar como familia así que espero no los decepcionen ¿Entendido?.

—¡Si Astrea-sama!.

Después de eso dio inicio a la alianza donde Hestia y Astrea firmaron un papel legal proporcionado por el gremio para después firmar Alise y Bell al ser los respectivos capitanes de dichas familias.

Lo que estaban firmando en dicha alianza era que ahora ambas familias eran como una sola, en el dado caso si una familia estaba en problemas como en un juego de guerra la familia aliada tenia derecho a intervenir y brindarle ayuda sin que nadie pudiera quejarse.

También estaba el hecho que ahora podían hacer misiones y exploraciones en el calabozo juntos, obviamente misiones hasta pisos donde la familia Hestia podría llegar.

En pocas palabras Bell y su equipo eran los que salian beneficiados en dicha alianza pero nadie se quejaba, si su diosa confiaba en ellos entonces ellas también lo harían.

Y así dio cierra a la alianza de ambas familias.

Minutos después.

Ahora las cosas estaban un poco más animadas en la sede teniendo conversaciones entre ellos para conocerse mejor.

En una esquina Lyra y Lili estaban platicando de ciertas cosas riendo ambas de vez en cuando, parecía que ambas se llevarían bien.

En otro lado estaba Welf platicando con Noin y Asta donde ellas le preguntaban por sus espadas mágicas y si era verdad la historia con el espíritu de fuego y este respondía las preguntas tranquilamente o eso intentaba.

Mikoto hablaba con emoción con Neze, Iska, Ryana y Ryuu queriendo escuchar sus historias de todas las aventuras que tuvieron y estas con un poco de gracia relataban algunas cuantas cosas sintiéndose un tanto feliz de que ella las admirara.

Hestia platicaba tranquilamente con Maryuu y Celty las cuales le preguntaban como era su diosa en el cielo llevándose la sorpresa que era la misma personalidad que tenía en ambos lados.

Astrea no era como la gran mayoría de dioses que cambiaban su personalidad en la tierra, la personalidad que mostraba era la verdadera.

Y por último estaba Bell el cual estaba sentado solo en un sofá observando a todos hablar.

Se sentía feliz que todos se llevarán bien aunque él no sabía como unirse a las platicas así que decidió quedarse solo.

Obviamente eso fue notado por Astrea.

—parece que el lado tímido de Bell aún está presente —pensó soltando una pequeña risa—. Por más que pase el tiempo nunca cambia.

Astrea tomó un plato que estaba en la mesa y lo lleno con unos cuantos sándwiches y después tomar un vaso y llenarlo con su jugo favorito.

—que se le va a hacer, tendré que hacerle compañía y animarlo a que conozca a las demás y si no quiere le hare compañía hasta que termine la reunión —pensó feliz de pasar tiempo con él.

Así que tomando el plato con sándwiches y el vaso con el jugo de piña Astrea camino con una bella sonrisa hacia Bell y platicar con él aún no habiendo notado su presencia.

Pero antes de que se acercara más cierta pelirroja se sento rápidamente a un lado del albino estando muy cerca de él.

—¡Hola Bell! ¡¿Porque tan solo?! —pregunto con una gran sonrisa poniendo nervioso a Bell por su cercanía.

—e‐eh...b‐bueno....planeaba acercarme a platicar.

—jajaja eres muy tímido pero no te preocupes, la gran Alise se encargara de acerté compañía —dijo acercándose más a él y darle un pequeño golpecito en su hombro —. Pregúntame lo que quieras, puedo darte muchos consejos sobre mi gran conocimiento como capitana.

—jeje g‐gracias.

Mientras aun de pie Astrea observo la cercanía de ambos aun manteniéndo esa sonrisa en su rostro.

Así que después de unos segundos de eso se dio la vuelta dejando los sándwiches y el jugo en la mesa e ir con Hestia a platicar.

—oh.

Kaguya la cual era la única que no estaba platicando con nadie observo todo sorprendiéndose un poco por la reacción que tuvo su diosa.

Fue por solo un segundo pero por un momento vio como la sonrisa de Astrea pasó a ser una fingida al ver como Alise se acercó tanto a Bell.

Era la primera vez que la miraba sonreír de forma falsa aunque sea por un segundo.

—interesante —pensó entrecerrando sus ojos e ir donde Lyra y Lili para ver que estaban haciendo—. Muy interesante.

Media hora después.

Dado que la pequeña reunión entre familias para conocerse duraría alrededor de una hora y que solo había pasado media hora todos decidieron relajarse un poco.

Lyra se había llevado a Lili a su taller ya que esta le pidió verlo.

Welf estaba viendo el escudo de Asta y la espada de Noin, quería ver de que tan buena calidad eran dichas armas.

Mikoto había sido invitada a jugar a un juego de mesa con Neze, Iska, Ryana y Ryuu, obviamente felizmente acepto de estar conviviendo con ellas.

Hestia seguía platicando tranquilamente con Celty y Maryuu solo que esta vez estaban bebiendo un té y Astrea estaba con ellas platicando.

Y Alise seguía pegada al albino.

—cuando quieras incluso puedes unirte conmigo a los patrullajes, estoy segura que será emocionante —invito la sonriente chica.

—n‐no lo se, no creo que sea de ayuda en algo tan importante —dijo avergonzado.

—¡Tonterías! Si no sabes algo yo con mucho gusto te lo enseñaré, para eso hemos formado una alianza, para ayudarnos —dijo con una radiante sonrisa.

—jeje agradezco la ayuda —rio Bell más avergonzado al sentir como la pelirroja se movió un poco estando más pegada a él—. ¿Acaso no conoce el espacio personal? —pensó nervioso.

—cuando yo inicie como capitana también era muy inexperta pero poco a poco fui aprendiendo, veras que tú también serás un gran capitán como yo, solo tienes que tener confianza en ti mismo.

—eso espero, me he esforzado mucho para llegar hasta donde estoy, si me rindo le estaré fallando a muchas personas —susurro recordando la ayuda que recibió de Astrea.

—¡Ese es el espíritu! —animo inclinándose un poco hacia él—. Llegaras muy lejos y más con ese aumento de nivel rápido.

—jeje.

Mientras ellos hablaban Kaguya otra vez estaba sentada sola en el sofá observando a ambos platicar.

—no se si lo hace apropósito o si solo es una tonta pero lo está poniendo muy avergonzado —pensó la oriental viendo lo pegada que estaba Alise al nervioso albino—. Además....

Kaguya dirigió su mirada hacia su diosa la cual seguía platicando con Hestia aunque cada cierto tiempo volteaba a ver a Alise y a Bell notando la incomodidad en su mirada.

Desde hace rato había estado haciendo eso viéndolos de reojo haciendo que Kaguya entrecerrara sus ojos sintiendo eso cada vez más sospechoso.

—veamos que sucede —pensó viendo a la pelirroja—. ¡Alise!.

—¿Que sucede? —pregunto al escuchar el llamado de su amiga.

—¿Acaso no tenías que dejar tú espada en la forja de tú herrero para que le diera mantenimiento? Recuerdo que solo te dio hasta la mañana para que la fueras a dejar —recordó haciendo que le pelirroja abriera los ojos sorprendida.

—¡Es cierto! Se me había olvidado —exclamo poniéndose de pie—. Lo siento Bell pero tengo que irme.

—n‐no te preocupes, lo entiendo.

—¡Volveré rápido! ¡Lo prometo!.

Y utilizando su velocidad de nivel seis Alise salió disparada del lugar dejando nuevamente solo al albino en ese sofá.

—ahora solo queda esperar —pensó Kaguya acomodándose esperando ver que hacía su diosa ahora que Bell estaba solo.

Esperaba que ella tardará unos cinco o diez minutos en hacer algo.

Pero abrió los ojos sorprendida al ver que en el momento en que Alise abandono la sala Astrea se puso de pie tomando el jugo y los sándwiches y caminar hacia Bell.

No había pasado ni un segundo y Astrea inmediatamente fue hacia él.

—.....¿Que? —por primera vez Kaguya mostró una expresión desconcertada.

—parece que tú y Alise se conocieron muy bien —dijo Astrea con una sonrisa de gracia al estar frente a Bell.

Este se puso nervioso al tener enfrente a la bella mujer de su corazón pero supo tranquilizarse.

—s‐si, es una chica muy animada —respondio con una sonrisa nerviosa recordando como estuvo de pegada a él.

—jeje perdón pero Alise es así —dijo riendo levemente—. ¿Puedo sentarme contigo?.

—¡Claro adelante! —y Bell sin dudar acepto.

Astrea se sento junto a él respetando el espacio personal no como cierta pelirroja.

—ten, es jugo de piña, tú favorito —dijo la diosa extendiendo el vaso con el jugo—. Y aquí hay unos sándwiches por si tienes hambre.

—e‐eh muchas gracias —agradeció tomando ambas cosas.

—¿Cómo estás? ¿Te sientes cómodo aquí?.

—¡Si! Es un lugar agradable y aunque no he hablado con ellas sus hijas son agradables también —respondio rápidamente Bell—. Su familia es maravillosa.

—gracias por el elogio pero no hace falta ser tan formal.

—p‐perdón.

—¿Te gusta el jugo de piña? Es la primera vez que lo preparo y no se si me quedo bien —pregunto un tanto nerviosa.

—¡Esta delicioso! Aunque me sorprende que lo sepa, no recuerdo habérselo dicho.

—Hestia me lo dijo —confesó con una sonrisa inocente—. Me alegra que te guste.

—g‐gracias....por cierto ¿Hay algo que le guste? Si llega de visita a mi sede puedo tener lo que le guste preparado —pregunto nervioso.

—no es necesario pero me gusta mucho el jugo de manzana.

—anotado.

Mientras ellos platicaban Kaguya los seguía observando de reojo sorprendiendose un poco de la manera de comportarse de su diosa.

Se comportaba de una forma muy relajada, era la primera vez que la miraba actuar así con alguien que no era de la familia.

—interesante.

Además que no pasó ni un segundo para acercarse a él en el momento en que se fue Alise, casi parecía que estaba deseando que se fuera.

Al principio creyó que esa reunión entre familias sería aburrida pero al final terminó siendo mucho más interesante de lo que creía.

—siento que aquí hay más de un secreto escondido —pensó Kaguya entrecerrando sus ojos viendo a su diosa reír y a Bell sonreír de manera avergonzada—. Y yo me encargaré de descubrir cada uno de esos secretos.

Sin darse cuenta Bell había captado la atención de alguien peligrosa, si no cuidaba sus pasos todo su secreto sería descubierto en un abrir y cerrar de ojos.

La asesina oriental había puesto sus ojos en el conejo empeñada a descubrir que estaba sucediendo.

Y no descansaría hasta lograrlo.

===Fin del capítulo===

Bueno aquí termina el capítulo de hoy espero que les haya gustado si es así voten y comenten que les pareció ya que eso me motiva a seguir escribiendo.

Sin más que decir me despido adiós cuídense y no tomen drogas.