Domingo, 14 de abril de 2024.

❤ Hola, mi amado Layne, ❤

Hoy fui al Jardín Japonés con una amiga y tú fuiste conmigo. Hacía mucho que no iba a aquel lugar y en cuanto llegamos, me pareció increíble y hermoso. Sacado de una bonita historia de amor.

Desde esa altura, se podía ver toda la ciudad de Santiago, y mientras caminábamos por el cerro, rumbo al jardín, yo miraba los lejanos edificios y el Costanera Center y te veía a ti, mi tierno Layne.

Llegamos al jardín japonés y te dije con regocijo "Aquí estamos, mi Layne, este es el Jardín Japonés"

El agua escurría por el pequeño rio, el que estaba con peces nadando y el viento era tan relajante, como tu dulce presencia, la que estuvo latente todo el momento en mí.

Corrí por el pequeño puente de madera, mi amiga me tomó una foto y yo te imaginé ahí, junto a mí, sosteniendo mi mano; miré al cielo y sentí que estabas viéndome.

Caminamos por un camino de arena, el que por sus costados tenía pasto y unas cuantas flores y plantas y me hice un video contigo caminando por él. Quería tenerte conmigo.

Te recordé feliz y con cariño y sonreí amándote, como te amo día a día y volví a mirar el cielo, para buscar tu sonrisa allí.

Entramos a una pequeña cueva de bambús, y ahí volví a imaginarte sosteniendo mi mano y que me mirabas con tu dulce sonrisa, porque estaba un poco oscuro.

Cuando íbamos bajando por el cerro, pasó un avión por el cielo, el que miré con atención, y volví a recordarte y pensarte con amor.

Luego de que salimos del jardín japonés, nos fuimos al barrio Franklin, el que ya lo hemos visitado los dos, para la expo de Barbies.

Nos pasamos a comer unas ricas hamburguesas con mi amiga y ahí volví a pensar en ti. Sé que te hubiesen encantado las hamburguesas.

Recorrimos casi todos los galpones y allí nos encontramos con unos amigos de la misma expo y nos pusimos a conversar y a reír con ellos.

Cariño, fue un día perfecto y agradable y tú fuiste participe de él.

Te amo mucho, mi Layne.

Siempre tuya
Stephanie.