Carta Nº53 a mi querido Layne Staley

Miércoles 10 de abril, 2024.

Hola, cariño,

El sábado fui a una expo Barbie y con cariño quise que me acompañaras y me puse una de mis playeras favoritas de ti.
No sé si te lo había contado, pero soy Coleccionista y amo las Barbies.
Desde noviembre que no hacían una expo. La última fue en Noviembre y ahí también te llevé
Vi a unas amigas que desde ese entonces no veía y me quedé con ellas a compartir y a reír en su stand de tiendas.
Llegó mucha gente, mi amor, lo que era genial para mis amigas, ya que podían ofrecer las Barbies y accesorios que estaban vendiendo. Una de mis amigas tenía su mesa llena de Barbies, cuadernos y mochilas.
Yo te vi con regocijo en mi playera y sonreí vibrante. Siempre estas junto a mí, mi Layne, lo que me hace más amarte.
Estábamos hablando con mi amiga, cuando se acercaron dos jóvenes, eran coleccionistas y uno de ellos vio una Barbie que es muy icónica en nuestro mundo y justo mi amiga la estaba vendiendo, no a un precio barato y él se la compró. Las dos quedamos anonadadas, y agradecidas a la vez, que él la comprará y se fue muy feliz con su compra, ya que esa Barbie la había estado buscando por mucho tiempo y justo mi amiga la tenía. En cuanto los dos muchachos se fueron, nosotras dimos un grito de alegría y nuestra otra amiga nos sonrió.
Fue una gran compra, tanto así que, gracias a ella, mi amiga salvó todo el día.
Contenta, pensé en ti con amor y quise darme una vuelta por todos los demás stands de la expo.
Ahí me puse a conversar con otros amigos y luego seguí mirando.
Volví a verte en mi playera y te dije "Vamos, mi Layne. Caminemos un rato para ver que Barbie puedo comprarme."

Vi toda la Expo a mí alrededor y sonreí. Me parecía un palacio maravilloso, lleno de Barbies.

Volví a mirarte en mi playera, y te sentí mi Layne. Sentí que en verdad estabas caminando a mi lado. También sentí que me mirabas y veías todo lo que yo hacía. De verdad creo que, si me viste sonreír, mi Layne.

Yo estaba tan contenta, es que me fascinan estas expos, ver a mis amigos y comprarme todas las Barbies que pueda, siempre disponiendo del dinero que tenga jejeje.

Llegué a un stand y se me fueron los ojos al ver una bonita y tierna Barbie, la que hacía años que había visto, pero que, por su alto costo, además de ser escasa, no la había comprado. La vendedora muy simpática, estaba con su hija pequeña y me sonrió. Me dio el precio de cuanto la estaba vendiendo, y yo sorprendida por su barato costo, dudé por unos segundos de comprarla o no, y quise darme otra vuelta. Tal vez podría hallar otra por ese mismo precio y que me gustará más.

Me detuve en otro stand, donde acostumbraba a comprar, pero ahora no tenían mucha variedad y no me podía dar el lujo de gastar tanto, como las veces anteriores, y solo pensando en aquella dulce muñeca, me di cuenta de que no encontraría ninguna más barata y preciosa, que valiera la pena y me di la vuelta y regresé con la niña y su hija. Ella me sonrió, yo le pedí la muñeca y se la compré. Layne, fue la mejor inversión en Barbies que pude haber hecho ese día y muy feliz, nos pusimos a conversar con la vendedora y su hija y luego más que contenta, regresé junto a mis dos amigas en sus stands.

Con ilusión y alegría les mostré mi nueva Barbie y ambas me sonrieron y me dijeron que en efecto había sido una muy buena inversión, lo que más contenta me puso y volví a pensar en ti, mi tierno Layne. Me acompañaste a comprar esa bonita muñeca y luego vimos los dos toda aquella genial expo de Barbies.

Mi amiga hizo un par de ventas más y las dos sentadas, mientras mirábamos gente llegar, seguimos conversando, riéndonos y disfrutando de ese perfecto día. Aun más perfecto porque tú estuviste presente en todo momento.

Te amo, mi Layne.

Siempre tuya
Stephanie. 

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top