Se que estás enfermo por fumar tanto. ¿debo de creer que a eso se debe que te acerques?. Realmente no lo sé. Me hablas cada tanto, como si nada hubiese pasado, como si nunca nos hubieses dejado. Haz puesto nuestra foto como contacto, (gracias a ti) es la única que tenemos los seis juntos, nos juntamos por el cariño que nos tenemos y gracias a que tu hermana, nuestra tía y tú madre, nuestras querida abuela, han hecho siempre todo a su alcance para vernos unidos y felices. Por suerte, hoy nos hablamos todos y nos la pasamos bien juntos, ya no son saludos forzosos (por desconocernos completamente) en reuniones familiares.
Dices que te hacemos falta, que nos quieres, y que somos la parte que falta en tu corazón; pero sinceramente no se si creerte o no. Me cuesta pensar que es en serio, que realmente te arrepientes.

Cuando fui a ver a mi hermano al trabajo (lugar donde trabajas tambien) me presentaste como si nada a tu jefe, diciendo: "ella es mi hija", yo no dije nada, solo pense en lo hipócrita que había sonado eso. Mi hermano me dijo, en una de nuestras conversaciones (por suerte hablamos seguido), que el en lo personal no te hubiese perdonado en nuestro caso, que no nos culpaba si no queríamos saber de ti, y que no estaba obligada a preguntar por tu estado de salud; y yo tan tonta como de costumbre le dije "me sentiría mala persona si al menos no le hubiese preguntado como estaba". Quiero confiar en ti, lo intento, pero no quiero más decepciones.