-¿Sebastián qué es tan importante?

-Siempre tan apresurado ¿No? Tu abuelo ha dividido la clínica en cinco partes.

-¿Qué? No sabía.-Dice sorprendido

-Necesito que llames a Rocío, es importa.

-¿Para qué? No entiendo.

-Tu abuelo ha estado enfermo, ha decidido dividir todo en vida, entré Tu padre, Tu hermana, tú, a Matías, los hijos que llegues a tener, a Rocío la cual es la albacea de Matías.

-¿Dejo a Kimberly por fuera?

-No sé que es lo que está pasando, pero si, el problema es que con que sea el albacea más su parte, ¿Sabes lo que significa?

-No- Suspiró.

-Si ella lo decide dejaras de ser el director de la clínica, ella sería la socia mayoritaria de esto hasta que Matías tenga dieciocho años.

-¿Dejarás esto así? Pienso y te recomendó que deberías hacer algo.

-No puedo dejárselo a ella, esto es mi vida.

-¿Dime que hago?

-No sé, Sebastián, aún no sé

-Te dejaré pensarlo, sabes que esto lo hizo para que tu esposa no obtuviera nada.

-No lo entiendo, te juro.

-Últimamente piensa que ella se casó contigo por tu dinero y piensa que ella provocó el accidente de las escaleras que tuvo hace dos años.

-Voy a llamarla, Kimberly debe estar por llegar.

Llamo a mi secretaria para que se comunique con mi esposa y espero que lleguen ella y Kimberly.

-Para que soy buena- Pregunta Kimberly al entrar.

-Sebas te llamo más tarde, ¿Me dejas solo con ella?

-Claro- Él se levanta y se va.

-¿Hice algo?- Suspiró y le cuento todo- ¿Qué piensas? ¿Sientes eso de mí? ¿Crees que me case por eso?

-No- suelto un bufido.

-Me molesta que tu abuelo piense eso de mí, me jode de verdad, así te está pidiendo otro bisnieto.

-¿Qué debería hacer?- La mira.

-Es tu clínica.

-No, no es mía, es de tú hermana.

-Aún no, tu abuelo no ha muerto, pero ¿te molesta eso no? -Se sienta en mis piernas -Porque a mí me parece ridículo que esta clínica deje de ser de tu familia, por un capricho de tu abuelo y más que sea de una nena que no sabe donde esta parada, es de tu familia no de la mía.

-Sí que me molesta, mi familia y yo trabajamos por eso u no le digas así a tu hermana- pongo sus manos en la cintura de Kimberly.

-Digo lo que, sé que nos distanciamos por esta clínica, nos separamos una vez, tenemos un tiempo porque no tienes tiempo y lo entiendo a veces ni para Matías te ve por esta clínica y que sé la dé a alguien que solo trabaja acá porque se lo pidieron es otra cosa, lo de ella es la guitarra nada más, la música.

-¿Cómo está, Matías?- Cambio de tema.

-Bien lo voy a buscar no fui ante porque me caí y me golpee -Le miro la cara

-Mi amor- Acaricio la parte lastimada- ¿Cómo te lo hiciste?

-Me golpeé con algo, sabes como soy

-Debes estar más atenta eh- beso su mejilla.

-¿Te quiero sabes? -Revisa su celular- Te tengo una sorpresa

-Yo te amo- La miro fijamente- ¿Qué sorpresa?

Ella se levanta y abre la puerta, veo a mi hijo correr hacia mí.

-Papi.

-Mi pequeño- lo alzo y lo hago volar en aire sonriendo.

-Ríe- Te amo, me cae bien el amigo de mami.

-¿Amigo de mami?- Miro a Kimberly con una ceja levantada.

-Si él juega mucho conmigo

-¿Ya me cambiaste?- Le digo Matías triste- ¿Ya me cambiaron?

-Nunca, papi yo te amo

-¿Mucho, mucho?- Lo abrazo.

-Mucho ¿Y tú a mí?

-Mucho- Sonrío.

-Quiero ir al parque con ustedes y mi amigo

-¿No quieres que vayamos tu, tu mamá y yo? ¿Los tres juntos?

-Sí.

-Pensé que podrían tener un día de chicos.

-¿Vamos mamá? - La observó.

-Tengo que ir a hablar con tu mamá cielo.

-Bueno, pero sin ti no es lo mismo.

-Eres el mejor hombre ¿Sabes?

-Hablas con ella después, dale ven. Dile Matías- La miro

-Dale mami así como hemos salido con tu amigo

Narra Kimberly:

Me sienta presionada en todos lados, sentía que engañaba a todos, salgo un rato con Bruno y Matías, por un rato, no me siento bien así que decidí irme, tomo mi celular y veo un mensaje de Mauricio.

CHAT DE M.

Te extraño, Quiero verte.

¿Dónde estás?

Estoy en el apartamento.

Voy en camino.

Cambio mi rumbo y me dirijo a su departamento, dudo en subirlo, pero lo hago, los segundos en el ascensor se hacen lentos, pero llegó y tocó la puerta, él abre y sonríe.

-Hola, ¿Todo bien con esposo.? -Va hacia la sala y lo sigo