Jimin.

—Te notas muy animado.

Mi madre entro con una bandeja de comida al cuarto donde ensayaba en casa.

—Ha sido una buena semana.

—¿Vas bien con tus practicas con Namjoon?

—Si, realmente es maravilloso, tiene demasiado talento, a veces me siento intimidado pero se pasa cuando me alienta.

—Me alegra.

—¿Te dije que aprende lengua de señas?

—No, vaya se esta esforzando mucho.

—Mira.

Le mostre un cuaderno de notas con dibujos qué hizo Namjoon para memorizar el alfabeto y modismos de la lengua.

—Su letra es horrenda, pero es comprensible si es un genio.

—Madre.

—Solo bromeo, me gusta verte de nuevo feliz, haciendo lo que te gusta.

Asentí mientras empezaba a comer, repase las notas de Namjoon y agregue algunas cosas más, nunca me habia entusiasmado tanto con algo así, repase mucho como escribió mi nombre.

Me sentí ansioso por verlo mañana.

Aunque como siempre no todo podía ser perfecto, el dueto de ambos fue sorpresa para muchos talentos de la empresa, pues en realidad, se rumoreaba que Namjoon no aceptaría que nadie tocara con él de nuevo después de su accidente. Asi que como dije, tenia que seguir practicando como nunca para poder estar completamente seguro de mi al tocar con Namjoon.

Sur le fil.

Si me lo preguntan, mi pieza favorita por mucho en este concierto, me encanta como inicia y el final tan explosivo que tiene, siempre me concentro demasiado al tocarla, puedo sentir el vibrar de las cuerdas, como la melodía me habla a través de cada nota, lo precioso de la tonada. Es una canción que recorre tus sentidos, te llena las venas de pasión y sabes que esta hecha para que la disfrutes de la mejor manera.

—Es muy bueno.

Escuche susurros entre las cortinas, era un ensayo abierto asi que habría mas personas que esperaban su turno para usar el escenario.

—No lo se, no me parece tan bueno.

—Esta celosa porque Namjoon no la eligió a ella para el dueto.

Estaba tratando de ignorar los murmullos mientras guardaba mi violín en su estuche.

—No es por eso, ¿te imaginas? Si Namjoon ya tiene suficiente con su problema al tocar, ahora tener que estar buscando la manera de comunicarse con él, que difícil, creo que lo hace por caridad.

Me paralice ante sus comentarios, son cosas que no suelo pensar pues se que muchas personas, son amables conmigo, solo por el hecho de que no puedo hablar.

—Jimin no habla, pero escucha perfectamente —Su voz.

Me gire al momento que salió de entre las cortinas, alzo la mano para saludarme, entonces empezó a mover sus manos.

—¿Ya almorzaste?

—Aun no.

—Te invito algo, ¿quieres?

—Si, me encantaría.

Mire a las chicas que estaban observando la conversación, Namjoon paso aun lado de ellas cediéndome el paso.

—Jimin es muy amable, tiene mas talento en una uña de lo que poseen ustedes, sus años de prácticas se ven fácilmente opacado a su lado, por eso lo elegi, dicen que no habla, pero en realidad ustedes son las que no escuchan todo lo que dice cuando toca.

Tomo mi mano y me jalo con él, se veía demasiado molesto.

Namjoon.

—No tienes que escucharlas —me puso un pedazo de su carne en mi plato —era la envidia hablando, ellas no tienen idea de lo maravilloso que eres —me observo —¿Cómo voy con la practica?

—Muy bien, me has sorprendido, lo mucho que aprendiste.

—Todavía me cuestan algunas cosas, pero tus notas y los videos que me recomendaste me han ayudado mucho.

—Que bien.

—La melodía que tocabas ¿es de Yann tiersenn?

—Si.

—Me encanta, me parece un gran artista, existe una canción que me gusta mucho, ¿quieres oírlo?

Prácticamente devoramos el almuerzo, corrimos a la sala de ensayos, pero lo hice sentarse en mi banquito.

—Préstame tu mano —obedeció sin más, coloque su dedos en dos teclas y le marque el ritmo —mantenlo asi, tiene buen oído asi que se que no perderás el ritmo.

Empezó a marcar la tonada, yo con mi otra mano comencé la canción.

—No puedo tocar igual que antes —se detuvo —no pares, escúchame.

Suspiro un poco y mientras seguía las notas de porz goret segui hablando.

—Siento los músculos de la mano, rígidos, empiezo a sentir que él aire me falta, que mi mano se entumece y empieza a doler —la melodía fue un poco mas rápida —pero cuando estas cercas, eso no pasa —me miro directo a los ojos —me concentro tanto en ti y en la manera que tocas que el dolor se va, los doctores me había comentado que era mi mente bloqueando todo, que no había un daño real, que yo lo provocaba, parece que es verdad, pues la música vuelve tan rápido cuando como se va cuando tu entras a la misma habitación.

La música paro, su pequeña respiración era lo único que se escuchaba, me incline un poco para rozar sus labios con los míos, él se terminó de acercarse dándome un beso tan dulce como él mismo.

La música volvió a sonar pero no era alguna que jamás hubiera escuchado antes...