Hoy es la reunión de la empresa en la que trabaja JungKook. TaeHyung está emocionado notando la alegría de su compañero. JungKook le ha hablado sobre muchos de sus proyectos, cómo estos podrían ayudar a las personas de bajos recursos y como de ese modo podrían vivir en mejores condiciones, pero por cuestiones de la propia compañía habían estado eligiendo otros proyectos que ya se estaban ejecutando en Seúl y Daegu.

Era el sueño de su alfa ayudar, quizás desde antes que estuvieran juntos, JungKook había sido desde el primer instante una persona bondadosa y que prefería la paz para todos en vez de la guerra.

Y TaeHyung se sentía cada vez más enamorado de aquella actitud.

Hace media hora había terminado de ducharse, y ahora estaba observando uno de los trajes que había mandado a preparar para la reunión, consiste en una camisa color perla, un pantalón de vestir color café y finalmente un chaleco de vestir color marrón junto a unos zapatos de vestir del mismo color.

Está seguro que se verá bien con ello. Cuando comienza a vestirse, la camisa cae por sus brazos hermosamente, la manga aprieta un poco más arriba de la muñeca y luego cae, se pone ropa interior, y coloca el pantalón que se ciñe a su piel como una segunda piel, termina colocando al final el chaleco y los zapatos en sus pies, agradece mucho que estos sean un poquito más altos.

"Te vez precioso, amor."

El omega se sobresalta y gira su rostro para observar a quién le pertenece la voz tan familiar.

"Gracias, pero aunque traiga la cara maquillada como un payaso, seguiría siendo precioso a tus ojos." El alfa asiente de acuerdo.

"Es que lo eres, Tete."

TaeHyung ríe dejando un beso en los labios de JungKook, alejándolo cuando intenta envolverlo en sus brazos.

"Primero cámbiate, recién has salido del baño."

El alfa resopla ofendido quitándose la toalla y envolviendolo alrededor de su espalda, TaeHyung no puede evitar reír divertido al ver su trasero balancearse exageradamente.

"Eres un minino." Grita asegurándose que su compañero lo oiga y proteste.

Retorna a su vestimenta cuando finalmente oye el grito de JungKook. Peina su cabello hacía un costado y maquilla levemente su rostro antes de finalmente sonreír hacia el espejo, complacido de como se ve.

JungKook aparece un rato después por la puerta del baño, está vestido en sincronía con su propia vestimenta, se coloca la parte superior del terno y modela para el omega, quién besa su mejilla antes de reír aferrándose a su brazo.

"¿Me veo bien?" JungKook pregunta luego de un rato.

"Luces muy guapo, estoy seguro que te darán el ascenso Kookie." Responde TaeHyung acariciando las mejillas de su compañero.

JungKook rasca instintivamente su nuca, nervioso.

"Ojalá que sí."

TaeHyung sonríe moviendo sus manos hasta las orejas revoloteantes de JungKook, él se inclina instintivamente buscando el calor de sus caricias.

"¿Tienes el regalo de Yeonnie?" JungKook asiente notando la sonrisa florecer en los labios del omega de ojos mieles.

"Creo que tenemos que irnos, se nos hará tarde." TaeHyung susurra entre ambos, su mirada fija en la dulce mirada destellante de pequeñas estrellas y galaxias en los ojos de su alfa.

"Está bien, pero antes—"

Él alfa no demora en capturar los labios del omega, lo acerca lo suficiente para asegurarse que estuvieran así un momento, que poco a poco se extiende y las manos de JungKook recorren las caderas acentuadas del rubio.

"¿Sabes?, me acabo de dar cuenta que tengo al hombre más hermoso" beso "adorable" beso "y guapo del mundo... Que jodidamente afortunado soy de tenerte conmigo." JungKook canturrea, jalando las manos de TaeHyung hacia su boca, dejando un beso apenas la contraparte de la palma.

"Yo también, JungKookie, soy él ser más afortunado por tenerte conmigo y apoyarme siempre."

El aire dulce se percibe y se separan rápidamente cuando notan el dulce florecer de sus aromas, JungKook lo guía suavemente por la cintura, se asegura de agarrar las cosas de ambos y seguir su camino hacia el auto.

Luego de un rato TaeHyung habla.

"Creo que debí traer maquillaje, debo estar con los labios hinchados." JungKook sonríe estacionando el auto antes de doblarse hacía atrás y pasarle al rubio sus pertenencias, que por cierto, ambos comparten.

TaeHyung chilla agradecido, sacando rápidamente los productos, quita algunas de las imperfecciones que tiene el rostro de su compañero y luego se asegura de hacer lo mismo con él.

El auto avanza en retorno por las calles, el frío de la brisa pasa por la ventana abierta y la sonrisa se abulta en los labios de JungKook mientras maneja y una canción se reproduce animadamente, la voz de ambos inunda cada pequeño lugar del auto. Llegan a la gran mansión en pocos minutos y cuando finalmente la canción de Katy Perry termina. JungKook se estaciona y respira antes de sentir como TaeHyung le da la mano.

"Vamos." Dice TaeHyung.

Y no demora mucho que ambos estén frente a la puerta, JungKook toca y son recibidos al segundo tocado por una mujer adulta que les sonríe cálidamente, que reconocen rápidamente como ayudante del hogar al notar su vestuario.

"Sírvanse de pasar, todos están en la sala, sírvanse lo que gusten." TaeHyung puede reconocer rápidamente que se trata de una beta, su aroma es una muy relajante asemejado a la de una mañana en la playa.

"Muchas gracias." Susurra la pareja entrando, los dos caminan agarrados de la manos y sonrientes, cuando están por entrar a la sala una pareja se acerca, TaeHyung resopla notando que JungKook se tensa.

"JungKook, buenas noches." Saluda el hombre mayor, TaeHyung sonríe y hace una reverencia que es seguida por su alfa.

"Buenas noches, Señor Lee" aclara rápidamente, TaeHyung se presenta y finalmente la esposa del mayor lo hace también.

"Encantado de conocerlo joven TaeHyung, déjeme decirle que su compañero a logrado lucirse mucho en la compañía, trabaja muy duro."

TaeHyung asiente sonriente volteando su rostro fugazmente para ver el rostro sonrosado de JungKook.

"Muchas gracias, ambos nos esforzamos mucho para mantener nuestro hogar, pronto yo también volveré a retornar a mi trabajo para ayudarlo con los gastos." TaeHyung dice mientras enreda su brazo contra el de JungKook, que ahora sonríe mirándolo.

"Son una pareja encantadora." Interrumpe la mujer. "Pueden decirme JiHye, a osito a veces le molesta, pero no sé preocupen, él no puede decirme que no." Dice la mujer guiñando un ojo.

La pareja se mirá un poco confundidos notando solo segundos después que ella se refiere a su esposo que la sostiene del brazo con delicadeza, él la regaña aunque luce contento. TaeHyung y JungKook se dan cuenta que son una pareja alfa y alfa, pero el amor no pasá por alto mientras creen que hablan bajo.

"Cuídense mucho, pueden pasar y hablar con los demás, nosotros debemos seguir saludando." Canturrea la mujer con una gran sonrisa, TaeHyung cree que aquel labial rojo que usa la hace resplandecer.

"Bueno, son encantadores." TaeHyung dice.

JungKook ríe bajo retomando su camino.

Llegan a la sala y son rodeados por los amigos de JungKook, TaeHyung se mete en los temas con facilidad y comienza a creer que todo pasó cuando estaba siendo cortejado por JungKook, cada narración lo hace acordar a esos momentos, uno en particular lo hace reír nostálgicamente; ya que, recuerda que aquel día fue el culpable de que su compañero se sintiera un poco deprimido.

La noche pasa entre risas, anécdotas de trabajo y vida, la cena de navidad se realiza solo un rato después, agradecen la comida y luego cada uno se dispone a comer con tranquilidad. Al terminar algunos se ofrecen ayudar a limpiar la mesa, JungKook acompaña y deja a TaeHyung con un beso en los labios sentado en una de las sillas acompañado de algunas de las parejas y amigos.

JungKook regresa pronto y acompaña a TaeHyung en cada conversación hasta que su jefe aparece y le pide ayuda para que todos vayan al jardín. TaeHyung ayuda y sonríe cada que JungKook lo mira por mucho tiempo.

El omega se ofrece ayudar a JiHye que luce un poco cansada, no se molesta en caminar lento cuando ella comienza a relatar que le recuerdan mucho a su juventud con aquel amor joven, pero maduro, ella cuenta sobre lo cuan difícil fue enterarse que no podrían tener hijos propios, pero que al final pudieron adoptar a seis pequeños niños, dos omegas, dos alfas, y dos betas que venían constantemente, pero como aquella fecha habían ido a visitar a las familias de sus parejas para darles la noticia que serían abuelos y tíos.

TaeHyung finalmente también se atreve a contarle su desafortunado destino, pero que poco a poco iba volviéndose una luz en su vida. Ella termina diciendo que no todo parece malo, porque consiguió a alguien que lo amara totalmente, que lo apreciara y que en poco tiempo volverían a ser una familia, que nunca dejaron de ser aunque un pedazo de su corazón se fue.

La mujer adulta está a su lado hasta que llegan afuera y ve a uno de los compañeros omegas de JungKook aferrado a su cuello, muy pegado a él.

TaeHyung no disfruta la vista y cuando se mira fijamente con la mujer nota que ella tampoco.

"Anda, muestra a quién le pertenece ese alfa." Ella anima.

Y TaeHyung no entiende como terminó besando profundamente a su compañero en medio de tanta gente, como terminó en una escena de celos de posesividad contra JungKook, sabiendo que lo disfruta cuando lo apega más y cuando está a punto de separarse y este dice "déjame disfrutar un poco más, amor."

Sí, quizá solo lo dejaría disfrutar un poco más; ya que, quién sabe JungKook dormiría los últimos días del año en el sofá.

Además, la señora JiHye no deja de animar.

La noche es preciosa y la sonrisa del alfa no se despega, tiene su labial removido y los ojos viendo literalmente estrellas mientras maneja y estaciona el auto. TaeHyung gruñe bajito cuando JungKook toca su brazo para llamar su atención, como un cachorro herido.

"¿Me ayudas con mi maquillaje?, ¿Porfis? No quiero que Yeonnie me vea así, pollito." Parece funcionar cuando el rubio se voltea y asiente con un resoplido, moviendo su pequeña nariz con incomodidad.

Y JungKook termina robandole un pequeño pico.

"¡JungKook!" Las mejillas del omega muestran un fuerte rosáceo. JungKook arquea una ceja preocupado cuando escucha el grito.

"¿Qué?"

"Eres un idiota" chilla antes de jalar la camisa de su compañero y besarlo, su dulce lengua no demora en explotar la boca del alfa que se derrite en los labios ajenos, aceptando gustoso como le come la boca.

Quizá un poco de privacidad antes de llegar con su hija.

Llegar hacia el orfanato les toma menos tiempo de lo que creen, están más arreglados, quizá un poco despeinados, pero no mucho de lo que preocuparse.

Caminan apegados con sus colas enredadas sensualmente, JungKook ríe cada que siente el cuerpo de su compañero estremecerse en sus brazos gracias a su cola. Cuando la puerta es abierta notan como todos los niños ya se encuentran con sus futuros padres, YeonHee aparece corriendo apenas los ve, ella trata de amarrarse sus dos coletas mientras ríe.

JungKook gime con gusto olfateándola, su pequeña huele a canela fresca, TaeHyung se acerca y también la abraza olfateándola, él besa sus mejillas y JungKook no duda en repetir su acción, ayuda a la menor con su vestuario, ella lleva un antifaz y grita que parecen modelos.

Ellos pasan la noche tomando el té y compartiendo de la comida en la que prometieron ayudar, el banquete se sirve para los niños, quienes disfrutan gustosos antes de que los fuegos artificiales comiencen y YeonHee grite emocionada llevándolos hacia el jardín, ella agradece dulcemente entre pequeñas lágrimas y un tartamudeo.

TaeHyung y JungKook la sorprenden al entregarle una caja de regalo que contiene una linda caja musical, ropa de princesa de algodón y unos pantalones jean negros flojos junto a una playera y zapatillas.

La pequeña llora más besando las mejillas de ambos muchas veces, les regala un peluche a cada uno, finalmente aquella noche se quedan hasta tarde, bañan a Yeonnie en su aroma y ella repite lo mismo con ellos diciendo que también quiere que huelan a ella.

Terminan retirándose en la madrugada con una nueva esperanza.

Tener a YeonHee pronto en sus brazos.

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