6* "Phantom of the Opera (3* parte)

Esta es la tercera parte. Tuve que fraccionarla mas de lo que esperaba. Estaba quedando muy larga y no queria cansarles (si claro) jajajaja

Quiero agradecir de ante mano sus mensajitos, aunque son pocos, me animan mucho y me dan nuevas ideas savy :3

En fin
Este capitulo es algo Hot ojala les guste ♡
y el que sige mas xD

-.-.-.-.-.-.-.-.-.-

Un trio muy peculiar iba caminando por la calle con varias bolsas en las manos, ese dia les toco las compras para su hogar a ausencia de gente por ese lugar nadie se daba cuenta de la profunda conversación que mantenían.

-¡aaaah maldito Aion! ¡¿Por qué mierdas le diste mi numero a esas tipas?!! ¡me están jodiendo cada minuto con sus mensajes!-el pelirrojo le gritaba al mas alto aunque no importa a mucho porque aun así era ignorado. Hacia unos minutos se habían topado con unas fanáticas mientras regresaban a casa y les pidieron su autógrafos, números de teléfono, tipo de sangre, incluso la talla podálica (pie).

-a pesar que la piedad no esta en mi, algo en esas damas me hizo hacerlo. Además, yo no podía darles el mío, es un sacrilegio que ellas lo sepan algo tan sagrado, si ustedes lo tienen es por deber-
-Aion, no es una sucia treta para hacer creer que tenemos a alguien mas ¿o si?-Yaiba miro con sospecha al rubio mas grande mientras este se tapaba la cara ocultando una sonrisa maliciosa. Si lograba hacerle creer a Genos que ellos ya estaban saliendo con alguien, el tendría mas oportunidad.

Bajo las orejas con pena, si no hubiese sido tan cobarde... quizá...

....

Abrazo al rubio como si su vida dependiera de ello, cosa que no estaba lejos de la verdad. Nunca antes en su vida se había expuesto tanto. Entrecerró los ojos mientras acunaba su rostro en el cuello del ciborg.

Olía a vainilla y brazas. Algo peculiar pero no imposible.

Su corazón divino temblaba de miedo de soltar a Genos y este se esfumara en el aire o le odiara para siempre. No sabia cual era peor, no podía vivir con la idea de ser rechazado por el pero tampoco creía que estaría bien sin el.

Odiaba admitirlo y vaya que lo hacia, estaba enamorado del Genos. Algo fuera de todo pronostico. Desde sus ausentes padres, las citas que tuvo en el pasado incluso sus dementes amigos jamás se había apegado tanto. Un dios jamás se deja atar por cosas así menos uno oscuro, el amor no pasaba mas de si mismo.

Pero su necio corazón le susurra a cosas al oído como un fantasma con sus psicofonías que el rubio no contaba, que era un ciborg que cantaba como la lira de Orfeo. No tenia nada de malo, cada dios tenia a su amante como la hermosa historia de Hades y Perséfone. Sonrió al imaginar el curso de su mortal vida volviese celestial si Genos aceptara ser su Musa.

Quizá tanto tiempo solo sumándole que era la primera vez que se sentía amor por otro ser vivo le estaba cobrando factura.

-Aion-su musa le hablo y con lentitud se separo y quedo a espadas de el mientras se cubría el rostro pensando que decir para justificar su impulso. El rubio cibernético voltea a ver al mas alto si cambiar mucho su expresión facial pero un suave sonrojo cubría sus mejillas. A pesar que no conocía muchas cosas, los mangas que tenia en casa que de vez en cuando leía a escondidas de su maestro con el propósito de encontrar el secreto de su fuerza. Sabia que había diferentes tipos de abrazos: amigos, camaradas, familia, amantes y definitivamente ese abrazo encajaba en el ultimo perfil.

-me deje llevar-se excuso aparentando tranquilidad.
-dentro del hermoso arte del canto, la interpretación corporal hace que tome mas fuerza y se explique mejor las intenciones que cantas-logra articular contra su voluntad, como si un demonio hubiese tomado el control de sus labios y hablara por el para destrozar sus esperanzas.

-entiendo...-el rubio parecía satisfecho por la explicación sin darse cuenta del dios que fue domando tenia ahora un corazón destrozado.

-Oi Aion ¿Qué carajos te pasa?-subían las escaleras ya mas relajados pero el líder noto el decaimiento del rubio ojirubi. Crow podrá ser un loco impulsivo mal hablado pero apreciaba a sus amigos aunque no supiera como, intentaba ayudarles.

-nada que tu pequeña mente de roedor entienda-
-¡cabron!!-se detuvieron frente a la puerta de su casa y empezaron a discutir ruidosamente. Yaiba estaba como si nada mientras dejaba las compras en el piso y buscaba las llaves en su cuerpo o eso hacían hasta que escucho un ruido dentro del departamento.

-trata de no moverte-
-al parecer Rom esta en casa-dejo de buscar y se dispuso a abrir la puerta y escucha otra vez pero esto lo congela lo que llega a oir, haciendole a abrir los ojos con una desagradable mueca de sorpresa.

Los otros dos dejaron de pelear al ver como se quedaba quieto el bajista.

Crow le mira a la cara y se sorprende al ver la desolación tan marcada y unas finas lagrimas se negaban a salir.

-¿pero que?-esta a punto de preguntar que le pasaba, cuando lo escucha también.

.-.-.-.-.-.-.

-aah se esta tardando mucho-Saitama saco del sartén la cuarta y ultima empanada, con cuidado la deja junto a las otras para que se enfriara. Ya todo estaba listo, se limpio las manos con un trapo y sonrió satisfecho. Apaga el fuego de la estufa y va guardando los ingredientes sobrantes en las gavetas, mientras guardaba la harina recordó que no había comprado refrescos o algo mas para beber.

Tomo su cuponera, se calzo sus tenis y se dispuso a salir sin antes cerrar la casa. Mientras caminaba a la salida muy animado, no recordaba que se sentía así de bien cocinar motivado, talvez por eso Genos le cocinaba. Iba en el sexto piso y alcanza a ver de reojo tres figuras que recordaba bien, cosa extraña porque no es muy bueno recordando personas.

Motivado por la curiosidad, se acerco a estos y se sorprendió que cada uno tenia su propio conflicto dirigido a la misma puerta.

-¿ocurre algo?-pregunto monótono mientras levantaba una ceja extrañado. Yaiba respiraba con dificultad y veía la desolación en su rostro, se negaba a llorar e intentaba aferrarse a la perilla de la puerta como si su vida dependiera de ella.

-no es real, no lo es.-Crow se arrodilla mientras se cubre las orejas completamente angustiado su rostro estaba en completa negación y frustración, no quería creerlo. En rubio mas alto estaba cubriéndose el rostro con fuerza al mismo tiempo se abrazaba y suspiraba con dolor y murmuraba una serie de cosas que el calvo no entendía bien. Decidió terminar con eso y ver que ocurría hasta que lo escucha también.

-aah... aaah... aaha-levanta una ceja extrañado ¿Gemidos? Bueno era normal que alguno de ellos tuviese la necesidad pero porque sentía su cuerpo temblar cuando parecía reconocer esa voz.

-debe ser una porno-se intento convencer emitiendo una sonrisa algo trastornada, de que la supuesta actriz detrás de la pantalla tuviese una voz muy semejante a...

-Genos quédate quieto, debo entrar mas-Un silencio un poco prologado.

-aaaah Room-un ronco, suplicante y erótico gemido exclamo su alumno detrás de la puerta. Saitama sintió algo como el cristal rompiéndose dentro de el, sus pupilas se contrajeron hasta ser finos puntos al imaginar las escenas de cama que protagonizaba el menor con el moreno amigo de los otros tres detrás suyo.

Suplicando por mas mientras este le complacía

Abrió la boca pero no dijo nada.

El rostro descompuesto del cyborg de placer mientras era tocado por manos ajenas.

-aaah... aaaah...-

La ansiedad le estaba carcomiendo, la ira y su imaginación no le ayudaban mucho, se sentía traicionado y no entendía el porque.

El rubio era libre de estar con quiera y si quería acostarse con Run era asunto suyo pero... si así era, porque estaba levantando su puño mas que dispuesto a destrozar la puerta y separarles, llevarse al rubio a donde nadie mas interfiriera.

O eso iba hacer cuando el pelirrojo en un ataque de ira toma a Yaiba de la ropa y lo arroja contra la puerta destrozándola violentamente sin mucha resistencia y haciéndole volar dentro de la habitación. Sin saber si eran masoquistas o idiotas entran al departamento a paso veloz completamente fuera de si.

-¡ROM BASTARDO CABRON!!! Quita tus asquerosas manos de mi Héroe-saco su guitarra-hacha dispuesto a machacar al ojiaguamarina aun sabiendo que tenia la desventaja de ser un poquito menos fuerte que el pero eso importaba si se metían con su héroe cibernético.

-¡¿Cómo te atreves a profanar la divinidad de mi Musa?!! Rom recibirás el peor de los castigos divinos-exclamo furioso el ojirubi mientras sacaba su guitarra dispuesto a golpearlo. Tenia pensamientos parecidos con respecto a Crow sobre la situación. Perdonaba a Rom porque el mas de una vez lo golpeo pero esto era diferente, se había metido con alguien que realmente quería más que si mismo.

-Rom... te has atrevido a tocar has allá de lo que debías a mi nirvana. Es algo que yo ni la legendaria Ryukenden estamos dispuestos a permitir... ¡Rom prepárate para recibir el castigo que mereces!-a pesar de los tres estaban furiosos, ninguno se comparaba con la severidad que reflejaban los ojos del mayor. Pero se quedan quietos esperando que se despejara el poco humo causado por la puerta destrozada.

Si había un dios, realmente le divertía con su sufrimiento tal como teatro griego.

Efectivamente era Genos sentado en una silla con el respaldo en frente a el, estaba aun con sus pantalones y zapatos pero no tenia camisa mostrando su tórax metálico. Tanto sus hombros como el tronco del cuerpo aunque eran de metal, emitía un suave brillo de gotas, como si fuera sudor. Su rostro no ayudaba mucho, era la representación del erotismo.

Jadeaba con los ojos cerrados con extremo placer, el marcado sonrojo en sus mejillas no ayudaba mucho. Cuando entreabrió los ojos, se veían empañados, logro enfocar a donde estaba su maestro.

-¿m...maestro...?-

Eso fue una apuñalada al pecho para Saitama y un rubor apareció en sus mejillas, hacia mucho tiempo que no se sonrojaba y había olvidado la sensación que producía. Le costaría mucho sacarse de la cabeza esa imagen de Genos. Jamás había visto un rostro lleno de placer y excitación ni en los videos pornográficos que veía de vez en cuando o en sus mangas. Aun conmocionado se acerco al rubio olvidándose de su enfado y celos ante la idea de sentirse amenazado de que alguien llegara a apartarle de su lado. Con cuidado toma el frágil rostro y en el acto el menor vuelve a abrir los ojos. Saitama se Olvido del mundo exterior cuando se atrevió a ver atreves de esas irises doradas.

Se quedo contemplándoles un rato ¿Desde cuando Genos tenia ese color tan vivo o desde cuando podía sonrojarse? Es mas ¿Cuándo lo había dejado de ver como un chico de metal?
Y ¿que era ese cosquilleo en sus labios que le producia al ver el rostro del menor suplicante? Le exigia acercarse mas y comprobar si realmente Genos estaba asi, sino...

Provocarle

La atmosfera era variada, se inspiraba confusión y excitación, la furia aun presente amenguada con la ternura. Eso era hasta que Rom exclamo triunfante apareciéndose detrás de la espalda, se habían olvidado por completo la razón de la destrucción de la puerta era el moreno que actuó como manzana de la discordia.

-ne Genos-se saca de los oídos un par de audífonos y le mira sonriente al rubio mientras le da leves palmaditas al hombro. Por su parte el héroe clase S salió de su estado "provocando al maestro" volteando con leve brusquedad soltándose de la manos del calvo y a la vez sacándose de los oídos otro par de audífonos.

-¿Qué era?-
-este arete-le muestra un arete estilo candelabro de varias puntas ya maltratado por la manipulación de Rom para sacarlo. Genos toma el objeto con cuidado y lo examina, no pensó que esa cosa tan pequeña y meramente decorativa le causaría tantos inconvenientes al mismo tiempo este incidente le ayudaría a mejorar su armadura. Le brindo una discreta sonrisa de agradecimiento provocando un leve sonrojo a Rom.

-¡¿PERO QUE MIERDAS ESTA PASANDO AQUÍ?!!-el pelorrojo harto de tanta confusión se contuvo de atacar, la pequeña burbuja que rodeaba al moreno y el rubio se rompió haciéndoles volver a la realidad. Rom se puso de pie tirando unas pinzas finas y uno que otro separador completamente sorprendido al ver la puerta destrozada en el suelo sumándole el ensangrentado rostro y brazo del bajista.

-¿pero que chingados hicieron?-confundido y enojado prepara sus puños esperando una respuesta.

-.-.-.-.

Jamás había tenido un día tan confuso y variado en toda su aburrida existencia.

Una parte de el suspiraba aliviado de que todo había sido un malentendido.

Debido que una horda de chicas fanáticas suyas lo acosaron y literalmente se montaron arriba suyo dándole regalos y números telefónicos, en el forcejeo para escaparse de una que pretendía desnudarlo a plena vía publica debió colarse el accesorio.

Rom en muchos de sus empleos que tuvo fue mecánico y manicurista así que usando ese par de talentos y unas pinzas se ofreció a retirar lo que sobraba en su cuerpo. En el proceso, estaban escuchando música a alto volumen completamente absortos en sus pensamientos. Durante la extracción (según entendió porque ignoro gran parte lo que dijo Genos) Rom manipulo uno de sus nervios provocándole placer pero no se percato de lo que su cuerpo hacia por estar concentrado en la música y el baterista tampoco por estar enfocado en su trabajo y los audífonos ayudaron a no darse cuenta de los armónicos sonidos incitadores del pecado que emita el rubiales.

El delicado brillo en el cuerpo de Genos era provocado por el lubricante que Rom habia usado para facilitar la extraccion, lo malo fue que estaba demasiado caliente la sustancia y el envase exploto su contenido sobre el, les tomo tiempo limpiar la mayoria aun dejando pequeños rastros en su cuerpo.

Una vez aclarado las cosas se dispusieron a irse a casa, antes de, Genos tuvo la amabilidad de curar las heridas del bajista. El cual encantado estaba de ser tocado por el, no como quisiera, pero es algo, provocando una vez mas los celos posesivos del resto.

Una vez mas, Yaiba era el que tenia el mejor resultado.

Cuando llegaron a casa en completo silencio, entrar y quitarse los zapatos con lentitud. Genos lucia completamente abatido cosa que llamo la atención del calvo, no se molesto en preguntar que le pasaba, el menor solito lo decía, solo era cuestión de esperar.

-maestro. Perdóneme. por mi ineficiencia ya es tarde para preparar la comida. ¡cocinare algo rápido para usted!!- después de quitarse los zapatos se dirige a paso veloz a la cocina completamente seguro.

-no importa Genos, hice de comer. Mejor sentemos ya. Seguramente ya se enfrió pero naaa-le resto importancia el héroe clase B mientras señalaba los platos ya preparados, se acerco y tomo los platos dirigiéndose a la mesa.

-maestro yo...-
-¡oh cállate, te dije que no importa!-un poco irritado reclamo mientras suspiraba fastidiado, vaya día, ajetreado y sin comer.

Desacostumbrado a sentir estaba mas que fastidiado por liderar con esas emociones que no comprendía.

Mas bien, se resistía a comprender.

Sacudió de su cabeza esos pensamientos peligrosos y El hombre tomo asiento mientras dejaba los platos en la mesa. Por su parte, Genos aunque intentara aparentarlo aun estaba algo avergonzado de sus fallas pero no declino la invitación de su maestro a comer. Vio en el plato un montón de lechuga, tomate como acompañamientos y dos empanadas doradas de tamaño mediano.

Olvidándose de sus pensamientos flagelantes opto por dejarse llevar por la alegría de ver que su maestro había cocinado, una parte de el, quería imaginar que lo hizo únicamente para el y al vez la nostalgia se apodero de su mente. Tomo la empanada y comenzó a comer dándose cuenta del tipo de relleno dejo de hacerlo sintiendo el peso completo de pasado y su añoranza, cosa que no paso de ser percibida por Saitama.

-¿Qué pasa? ¿no te gusta?-
-maestro... cuando mis padres vivían, mi madre cocinaba con atún los viernes-respondió completamente ausente y nostálgico como si hubiese vuelto en el tiempo.

-cuando mi madre preparo unas empanadas iguales a estas fue cuando regrese a casa triste... desde entonces le agarre gusto al atún-termino hablar despacio, como si temiera que ese recuerdo desapareciera o como si no quisiera volver a la realidad. Saitama por su parte se quedo callado observando a su alumno y luego a la comida.

-entonces, desde hoy serán viernes de atún-declaro mientras comía un poco mas. Esto dio un vuelvo en el imaginario corazón del ciborg, sintió su rostro enrojecer, tratando de no romper su compostura hablo.

-maestro pero a usted casi no le gusta-hasta el mismo se sorprendió escuchándose. Pidiendo que no fuera una broma de mal gusto pero su maestro no es de los que bromean con cosas así.

-ese día significaba mucho para ti... ¿porque no retornarlo?-sonrió quedito el calvo al ver el rostro iluminado del rubio, era un gesto pequeño pero tenia gran valor sentimental para el menor, además, Saitama se estaba volviendo adicto a las sonrisas del menor y sus escasos momentos que se mostraba como un ser humano normal.

-¡muchas gracias maestro! Usted siempre tan generoso-exclamo entusiasmado Genos mientras comía mas animado haciéndose promesas internas.

Porque se sentía mas que vivo cuando lograba sacar a la luz el lado sensible del ciborg.

.-.-.-.-.-.-

La tarde desaparecio para volverse noche. Una tranquila para alivio de todos los que vivian en ese edificio.

-mmmhg-en una oscura habitación apenas iluminada con la luz amarilla de una lamparita de noche con forma de calabaza. un joven pelirrojo rodaba en su cama por 4° vez tratando de conciliar el sueño. Se levanta de golpe frustrado y gruñe por lo mismo. Sentía su corazón latir con fuerza y miedo y claramente sabia porque pasaba eso.

Sabia que lo ocurrido con Rom fue un malentendido pero... la idea de que hubiese sido real era demasiado fuerte. Aprieta los labios claramente asustado mientras sus puños aprensan la sabanas color lavanda con flores blancas.

Tenia miedo de perder a Genos.

Era el mayor temor que había experimentado, mas que fallar ante un concierto o echar a perder el almuerzo de los 4 cuando le tocaba cocinar. Tenia miedo que nunca tuviera una oportunidad, por lo menos, de confesarse. Tomo uno de sus mayores tesoros que esta en la mesita de noche junto a la cama, siempre velando su sueño. Era un peluche de "Demon Cyborg", lo compro un día que le toco hacer surtir la despensa y no se resistió en llevárselo con la excusa de ser un regalo para su inexistente hermana.

Se le quedo viendo un rato acariciando con cuidado los rasgos del muñeco como si fuera el real. Sus camaradas bromeaban de vez en cuando de sus sentimientos por el rubio porque creían que era admiración tipo fangirl pero no era estúpido, se conocía muy bien. Era muy pasional con sus emociones en especial con lo que le importa y estaba 100% de que sus sentimientos sobrepasaban la admiración cada vez que el rubiales cibernético estaba cerca suyo.

Abrazo con cuidado el muñeco mientras se acostaba y se tranquilizaba con lentitud, mañana seria el gran día y debía descansar lo mejor posible. Mientras se arrullaba con la tibieza de las sabanas esperaba un día poder dormir con el verdadero.

...

Aion no podía dormir. Miraba por la ventana entreabierta sentado cerca de ella, esperando que Genos empezara a cantar, ya que por donde esta su habitación esta la esquina donde el suele cantar en el tejado. así fue como descubrió que el ojidorado su inclinación de "gato cantarin" por las noches, suspiro por tercera vez, deseaba tanto distraerse, subir al tejado solo no le atraía si no estaba su musa ahí. Hasta que recordó que mañana seria la guerra de bandas y su concentración debía estar al máximo pero no, ahí estaba, sintiéndose impuro.

Impuro por ahora desearle de forma carnal. Antes de, estaba enamorado de su belleza, gracia de canto, paso a segundo plano al encontrar en el la comprensión que tanto ansiaba, tornándose un amor puramente mental hasta el día de hoy que su mente lo traiciono al oír los suaves sonidos del placer emergiendo del ciborg.

Sin despegar la mano izquierda de su rostro vio con vergüenza el bulto en sus pantalones y la sospechosa mancha que oscurecía la tela. sabia lo que era, no es tan inocente.

Pero nunca le había ocurrido, ni en la escuela que alcanzo a ver accidentalmente a una pareja follandose en uno de los salones. Un dios jamás se rebajaba a sus instintos carnales, así también nunca experimento el deseo sexual haciéndole pensar que era asexual ¡Qué equivocado estaba!

Con su mano libre baja su pantalón de seda rozándole con doloroso placer su plenitud. Seria una noche interesante.

Nada ha sido igual desde que decidió enfocar su mirada a esos hechizantes ojos color dorado. Jadeo de placer ante el primer toque y un suave rubor se apoderaba de su rostro.

definitivamente el ciborg seria su musa y amante.

...

Con una sonrisa tierna miraba sus vendajes en el brazo. Era un poco tonto encariñarse de unas heridas pero si no fuera por ellas, no hubiese recibido las atenciones de Genos. No podía evitarlo, era la primera vez que se enamoraba de verdad.

Antes de la banda, sus padres lo comprometían a casarse con señoritas de alta sociedad y el se las arreglaba para terminar con el trato sin quedar como un patán o el culpable del rompimiento del compromiso. No le llamaba la atención las joyas ni el dinero, solo deseaba llegar a la cima de MidiCity con sus camaradas ShigancrimsonZ por su talento, bueno, eso era hasta que empezó a sentir atracción por un chico que literalmente les obligo a enseñarles pero poco a poco se fue encariñando con el.

El ciborg tenia ese "algo" que lo hacia sentir seguro y donde podía formar un hogar. Su imaginación voló mas alto al soñar que estarían juntos, visitarían a sus padres y tendrían una casa propia. No sabia cocinar y hacer quehaceres no se le daba muy bien pero podría aprender, no le importaría ser la "esposa" en la relación si su "Nirvana" le quería.

Cerro los ojos con lentitud quedándose dormido mientras se hacia bolita abrazándose con su cola.

...

En la habitación del Baterista, era iluminada por la luz del la lámpara de noche aun no dormía porque estaba revisando algunos recibos de su trabajo y enviar dicha información. No estaba atrasado pero no quería que se acumulara para finales del mes, eso es la muerte segura.

Pero no estaba concentrado, veía los papeles de vez en cuando y hacia anotaciones pero cometía errores muy básicos como repetir información. Juraba querer concentrarse pero lo único que llenaba sus pensamientos eran los gritos reproches de Crow

-"maldito Rom, no te percataste que estabas tocando los nervios de Genos, pudiste hacerle daño, lo bueno fue que solo... gemía... ¡aun así eres cabron!"-no presto mucha atención en lo que le reclamaba, se quedo en la parte de "placer" "gemidos" y "Genos". Era muy surreal imaginar al rubio cibernético con el rostro descompuesto por las descargas eléctricas por el estimulo causado por su persona.

No lo diría en voz alta pero mientras trataba de sacar el arete incrustado, acariciaba de vez en cuando la estructura metálica del ciborg con mucha devoción, era una rara oportunidad así que decidió aprovecharla al máximo. El era una belleza matemática y de bioingeniería pura.

Aun recordaba el tacto del metal en sus dedos.
Cálido y pulido a la perfección.

Dejo los papeles en la mesa mientras suspiraba y un sutil sonrojo barría sus mejillas, era inútil, su mente insistía en divagar en el momento que estuvieron a solas. Se recriminaba de cierto modo por haberse aguantado las ganas de abrazarle en ese estado pero debía ser profesional en el ese momento. De cierto modo, valió la pena. El rubiales después de que lo ayudara le pregunto si estaba capacitado para ayudarle en algunas reparaciones menores en caso que el no pudiese coordinar o moverse para repararse solo.

Seria estúpido si declinaba.
Eso significaba que ya tenia confianza en el y eso era un gran paso. Sonrió emocionado al encontrar un punto en común y la forma de acercarse mas. Volvió a la realidad cuando uno de sus recibos se cayo debajo del escritorio en el momento que hacia ademan "porras", mejor se concentra en su trabajo para irse a dormir.

-.-.-.-.-.-.

Era Sábado por la mañana, especialmente nublada y fresca, el gran día para los ShigancrimsonZ por la guerra de bandas de esa noche y planeaban llevarse el oro a casa, debían esforzarse mucho y pulirse una vez mas para perfeccionarse.

-¡oi Crow Despierta es hora de desayunar!!-el pelirrojo estaba desparramado en su cama durmiendo a pierna suelta ignorando el llamado de Rom que golpeaba la puerta con insistencia. Lo único ordenado en esa cama era su peluchito de Genos que descansaba arriba de su estomago.

-cabron... ¡Crow!!-vuelve a golpear la puerta. Era lo mismo de siempre, Crow es muy perezoso para despertarse y podía dormirse hasta dar las 6pm. De forma lenta y tanteando terreno abre la puerta dispuesto a echarle agua para despertarle. Con una sonrisa traviesa y con vaso en mano se acerca mas al joven durmiente.

Sonrió con ternura como estaba dormido el mas joven de la banda pero deberes eran deberes. Justo cuando iba a mojarle, ve el peluche descansando cómodamente en el abdomen descubierto del pelirrojo. Rom se sorprendió, no sabia que vendían esos muñeco, deja el vaso de lado y dispuesto a tomar el peluche para examinarlo.

Todo fue tan rápido, Crow estaba levantado de su cama como si nada abrazando el muñeco como niño pequeño haciendo un mohín con los labios.

-feh... de haber sabido que lo único que bastaba para levantar tu trasero de la cama era quitarte ese muñeco, lo hubiese hecho hace semanas-cruzo los brazos con una sonrisa burlona Rom. Crow solo emite un gruñido furioso con un sonrojo marcado en su rostro. El moreno sale de la habitación con esa sonrisa en los labios, no podía evitar ver al ojicarmin como su hermanito menor.

Mejor iba a la cocina, Yaiba le tocaba cocinar y no era muy diestro en ello.

Después de una hora de esperar haciendo fila frente al baño porque Aion se toma bastante su tiempo para ducharse. Van a desayunar bastante tranquilos aun sabido que les esperaba ese dia. Esto llamo la atención de baterista, mientras terminaba de servir los panes de frijol noto que cada uno estaba en su mundo.

Yaiba lucia como un borreguito a medio morir o un dopado de la calle mientras se veia las vendas y murmuraba cosas incoherentes.

Aion no paraba de hacer gestos. Unos eran relajados pero cambiaban bruscamente a furia o confusión y susurraba entre dientes.

Crow aun seguía con ese sonrojo avergonzado de ser pillado con su peluchito y comía con brusquedad buscando disimular su incomodidad. Harto de tanta pasividad, da un golpe fuerte en la mesa llamando la atención de los otros tres miembros.

-oi Rom es muy temprano para estar violento-reclama Yaiba con serenidad.

-no se que mierdas pasan por sus cabezas pero sáquenlas en este instante. Hoy tenemos un concierto importante y hay que estar al 100%-exclamo muy seguro y firme el moreno ignorando las palabras del ojiambar.

-esto nos ayudara a subir a la cima y estar mas cerca de ser la mejor banda de Medi City.-exclama entusiasmado aun ante el poco animo de sus compañeros. Rom se rasca el oído izquierdo despreocupado, como si supiera algo que los otros desconocían.

-además, es el primer concierto de Genos, no podemos quedarle mal- los chicos gritaron de asombro obteniendo el efecto que buscaba el "chico-cheeta".

-¡Es cierto carajo! ¡es el primer concierto que Cantara Genos en publico! ¡soy el vocalista maldición! debo dar el ejemplo-Crow termina de desayunar rápido para irse a arreglar su ropa para el concierto, sin antes agradecer la comida.

-¡no podemos darnos el lujo de fallar!-El chico de lentes va su cuarto rápidamente a hacer lo mismo y practicar en privado un poco. Aion se levanto y dejo su plato en el fregadero mientras caminaba susurraba.

-esta noche los simples mortales conocerá la verdadera belleza de los acordes de este dios oscuro resonando con fuerza junto a la celestial voz de mi musa-este camina de regreso a su habitación para prepararse para el concierto dejando un poco shokeado a Rom por la forma que se dirigía a Genos.

-¿Musa?-

-¿de que chingados hablas? No te estas refiriendo a MI héroe verdad-asomo la cabeza el vocalista de la banda junto a su peluche especial abrazado con posesión desde su cuarto mirándole con el seño fruncido y ansias asesinas.

-pequeño roedor eres demasiado joven para comprender los lazos de los amantes-

-¡¿Qué mierda?!!-

Rom suspiro con amargura, iba a ser una larga mañana. Bueno por lo menos logro hacerles entrar en razón. Ojala no sea necesario llevarlos a urgencias por los golpes que estaba dispuesto a darles.

.-.-.-.-.-

El día empezó desde muy temprano para el dúo de héroes. De hacer los quehaceres de la casa entre ellas lavandería, mandado, lavado de trastes y desmantelar un negocio de narcotraficantes (claro que Saitama tuvo que mandar a Genos a hacer otra cosa para que no le quitara crédito) para tener la tarde libre.

El rubio tenia la expectativa de que entrenarían juntos o algo parecido, incluso que saldrían a buscar el rival perfecto para el mayor. Lo que sea la idea de pasar tiempo con su maestro le brindaba calidez a su Core.

Algo que lo inquietaba mucho y lo hacia pensar ¿Qué sentía realmente por su maestro? Sabia mejor que nadie que lo admiraba y respetaba mas que a nadie en el mundo pero a veces sentía que su relación de maestro-alumno no le parecía suficiente, incluso su amistad no parecía bastarle.

-Genos apura que se nos hace tarde-apresuro el calvo mientras se terminaba de cambiar de ropa, su traje de héroe por una civil y se dirigía a la salida de su casa.

-¿a donde vamos maestro?-sin evitar el timbre de emoción en su voz, pregunto el ciborg mientras se vestía con la gabardina grisácea e iba detrás del mayor. Se había acostumbrado a vestirse como suele andar con la banda incluso empezó a usar uno de los collares que le regalo Yaiba; una sencilla cadena dorada y larga con una pequeña placa de oro.

Al igual que la comodidad de estar cerca de su maestro, la necesidad de agradarle a la vista al mayor era mayor

-iremos con King, compro un nuevo videojuego y nos invito a probarlo. Además, Fubuki también ira-esto ultimo lo dijo con un poco mas de exaltación provocando sin querer incomodidad en el rubio menor. El buen humor de Genos se esfumo al oír el nombre de la Psíquica. No le caía mal pero tampoco le agradaba del todo. Le daba igual que pasara con su vida pero últimamente se estaba involucrando demasiado en su rutina con el maestro. Eso le irritaba, muchas veces cuando ella venia de visita a tratar de convencerlo de unirse a su asociación se quedaba mas de lo esperado, incluso le ha tocado servirle de cenar; cosa que hacia por pura cortesía.

Ella estaba empezando a meterse demasiado en la vida de su maestro.

Y eso lo odiaba.

Era otro punto importante dentro de sus sentimientos dirigidos hacia el, la posesividad a veces era demasiado fuerte, muchas veces se desahogo cantando en el techo junto a Aion. ¿Qué le estaba pasando? Temía a la respuesta, a pesar de que aun no sabia cual era.

-Genos, vámonos. Andas muy distraído-regaño suavemente el calvo. El ciborg se disculpo brevemente y fue tras el.

-.-.-.-.-.-

Pasaron unas horas que para Genos fueron minutos.
No pensó que la pasaría tan bien aun con los constantes coqueteos de la pelinegra hacia su maestro. Quizá sea porque Saitama estaba mas concentrado en jugar y pelearse con King que no le prestaba atención.

comieron golosinas que los cuatro trajeron para compartir mientras jugaban Lario Rush, un juego de carreras con "go-karts" con diferentes modalidades y personajes, hasta el momento King y Genos iban ganando, seguidos de Fubuki y al ultimo Saitama que era un poco torpe para conducir.

-Saitama podrías dejar de hacer que el escenario explote, cada vez que chocas contra el volcán despedazas el suelo y lastimas a Monoko-sin distraerse hablo King mientras manejaba a su loli virtual tratando de evadir los daños.

-¡me lleva el...! Genos ¿porque activaste el rayo? ahora menos puedo conducir-se quejo el calvo viendo como su personaje con gorrita roja no podía conducirlo bien por la parálisis causada por la trampa.

-lo lamento maestro, no sabia que tenia ese efecto...-el rubio vio el reloj con forma de sirena arriba del televisor marcaban las 6:35pm. Lo había olvidado, ese día era la guerra de bandas y su primer concierto. a su pesar, pone en pausa de el juego para molestia de los otros 3.

-Maestro, me tengo que ir-dejo el mando en el piso y se puso de pie sin dejar de ver al mayor.

-¿ah? ¿ahora? Pero nos estábamos divirtiendo-se quejo el calvo.

-usted quédese maestro y sígase divirtiendo. Tengo una tarea que cumplir y es probable que Regrese tarde a casa-esto ultimo no le gusto a Saitama. Sea lo que esa le tomaría tiempo y su mente traicionera le hizo imaginar que esa tarea involucraba a uno de esos chicos raros con orejas de animal.

-puedes postergarlo-intento no sonar muy ansioso que se quedara ahí. Saitama detestaba esas salidas que poco a poco se volvían distancias que empezaban a notarse. Antes, según veía en el blog de héroes, decían: "el calvo y Demon Cyborg" o "prince Cyborg y Baldy cap" pero siempre salían juntos ahora lograba leer de vez en cuando "Baldy cap" o "Demon Cyborg".

-no maestro, es algo que ya esta premeditado. Si me disculpa.-sin esperar mas respuesta sale de la casa agradeciendo la hospitalidad del héroe de la cicatriz. King reinicia el juego para ahora jugar los tres. Aprovecho el espacio vacío dejado por el rubio Fubuki para acercarse apoyarse amistosa en el hombro de Saitama.

-déjalo, ya es un chico grande y se sabe cuidar solo-alentó la hermosa morena.

-ojala se haya llevado condones-bromeo King. El calvo apretó tanto el control del aparato que lo destrozo. Otra vez el sentimiento de posesión le atacaba.

-¡heeey! Solo estaba bromeando-chillo el héroe de la cicatriz.
-oh, lo siento-se disculpo un poco seco mientras dejaba de lado el control roto y tomaba otro. Necesitaba distraerse y rápido.

.-.-.-.-.-.-.-

Genos por su parte empezó a correr, activar sus propulsores para tomar la vía aérea llamando la atención de mas de un transeúnte que creyeron que iba a una misión y le dieron ánimos.

El rubio mientras volaba hacia cálculos del tiempo-distancia para llegar al escenario "Madoka" en la ciudad F iba a tomar tiempo, estaba bastante lejos de la casa de King. Si aumentaba la velocidad un 35% llegaría antes de las 7:15pm o eso planeaba hasta que una de sus alarmas se activo, un Kanji con forma de Anguila con una monstruosa boca atacaba un centro comercial. Se detuvo en un edificio, era su prioridad derrotar a ese monstruo a como de lugar, solo debía hacerlo con rapidez.

--.-.-.-.-.-.-

Eran las 7:45pm.

El gran escenario conocido como "Madoka" resplandecia de luces y musica de fondo acompadado de gritos y murmullos de la gente. estaba abarrotado de fanáticos y uno que otro artista. "Madoka" era conocido por su estilo callejero a pesar de su tamaño y su forma que permitía que el sonido se expandiera de forma envolvente, pero esos detalles poco importaban a los 20 grupos musicales que buscaban el éxito en esa guerra sin cuartel.

Crow miraba nervioso el reloj por decima vez sentado en una silla metálica mientras movía el pie con ansiedad y tenia su guitarra a la mano.

(Perdon pero me mata esa cara xD)

Vio su celular y abrió la sección de mensajes para ver si había noticias del rubiales, pero nada, el ultimo mensaje que tenia decía.

"Voy en camino, se atravesó un improvisto."

los cuatro estaba en su camerino, un sencillo pero amplio cuarto donde había una mesa y otras sillas, un tocador junto a un espejo y un televisor. Todos y cada uno estaba nerviosos, por no decir a punto de caer en una crisis de histeria ante el menor estimulo.
Yaiba afinaba su Bajo-katana por sexta vez para canalizar su ansiedad en algo. Le angustiaba que le pasara algo a su "nirvana" quizá es un héroe poderoso pero nunca faltaba el villano aprovechado y sin honor que jugara sucio. Sacudió su cabeza para olvidar sus pensamientos, confiaba que llegaría a tiempo y darían juntos su primer concierto.

Lo bueno era que tenían aun tiempo, eran las presentaciones de las bandas. Según la temática, el juez y presentador del evento. Un tipo alto y cabello azul con cara de muñeca perfecta (que Crow ya odiaba) hacia la introducción para la banda y estos se exponían mediante una canción representativa para ganarse al publico. Hasta ahora algunas lucían prometedoras como "Off-On" y "Alexis Proyect". Pero para su mala suerte, eran los sextos en pasar y faltaban por lo menos 2 mas para su turno.

7:55pm

-¡Shingacrimsonz! ¡en 10 minutos salen a escena!-una voz femenina les informa mientras tocaba la puerta. Esto crispo los nervios de los chicos y de impacientaron mas.

Rom marco por quinta vez el celular del Rubio cibernético pero sin respuesta.

-Genos... ¿donde estas?-susurro el moreno con las ganas de salir corriendo y buscarle. Hasta que ve al pelirrojo levantarse y colgarse la guitarra. Camina muy decidió hacia la puerta, Aion leyó sus intenciones y le habla con firmeza.

-¿A dónde vaz ratoncito?-pregunto de forma elegante y fría, ocultando la necesidad de hacer exactamente lo mismo.

-feh ¿Qué no es obvio? Iré por Genos-Crow se oía completamente seguro de su decisión. Rom que aun conservaba su mente fría le detiene con la mirada y firme le exclama
-¿has perdido la cabeza? Eres el vocalista, no podemos el lujo de nos faltes también-

-¡no hables como si no fuera venir! El llegara... lo se...-Yaiba se levanta con brusquedad haciendo tambalear la silla donde estaba sentado. Su voz se debilitaba mientras se aferraba a su valiosa katana. El resto de los chicos bajaron las orejas con pena. También tenían la pequeña esperanza que llegaran pero el tiempo corría deprisa y no había señales del blondo.

-escuchen-el baterista hablaba con la mayor firmeza que podía tratando que no se flanqueara su voz.

-ya hemos llegado hasta aquí sin Genos. Podemos hacerlo nuevamente ¡tenemos una meta. La cual es llegar a ser los mejores y alcanzar la cima en MidyCity y en esta ciudad también! Ese es el objetivo de este viaje-los otros miembros sintieron que su confianza volvía. Se miraron entre ellos mas decididos.
-¡Rom tiene razón! Tenemos un objetivo y vamos a cumplirlo como equipo. Si nos falta Genos, tocaremos en su honor-el bicolor de lentes afirmo con la cabeza suavemente.

-una vez mas, tus palabras lograron conmover a un dios.-una vez que termino de hablar, se acomodo el cabello con su mano mientras sonreía con pretensión.

-¡venga ya, hay Ganado que conquistar!-exclamo nuevamente energético Crow. Estaba decidido, si el rubio de escleróticas negras faltaba, el se esforzaría el doble por los dos.

...

-esa fue la maravillosa interpretación de "sins of the divine son". Son eternos enamorados y el corazón es su bandera, Reciban con un caluroso aplauso a la apasionada banda "in love 20"-el modelo-héroe se aleja del escenario para darle el protagonismo a esa banda. Se estaba cansando de tanto músico sin talento y su estilo tan muerto que no le provocaba ninguna emoción. Se acomodo el flequillo de forma elegante con el dorso de su mano.

-señor Amai todo va en orden. Tenemos una ventaja de 10 segundos-uno de los coordinadores del evento se acerco a el reportando la situación mientras hacia una leve inclinación respetuosa. El hombre de traje y tabla con varias hojas siguio de cerca al modelo mientras este se acomoda a cerca del escenario tranquilo y emitiendo sonrisas cordiales a quien le viera pasar.
-esta bien...-al llegar, miro el escenario con aburrida expectativa esperando que terminaran de cantar. La letra es buena mas no le conmovía. El no estaba desprovisto de sus emociones, simplemente no le gustaba.

Esa clase de belleza no debía existir.

-¿quien sigue?-pregunto mientras cruza los en su pecho mirando con elegante desdén el escenario y sus ocupantes.

-según la programación, los "Shi-gan-crim-sonZ"-deletreo con cuidado tratando de leer tan complicado nombre mientras el hombre se rascaba la cabeza algo confuso. Amai suspiro, otra banda de raritos. Acepto el trabajo de presentador para darle mas amplitud a su carrera y encontrar nuevos talentos pero hasta ahora nada fructífero.

Creia recordad a esa banda en particular. Cuatro chicos con orejitas y cola de animales con obsesión al rojo y negro, para su desagrado demasiado ruidosos en especial el mas bajo. los vio llegar muy tarde para su "desgracia" choco contra el pelirrojo y este se atrevió a gritonearle como si fuera cualquier persona hasta que amenazo con descalificarles logrando que este se callara y se disculpara.

Era hermosa la sensación de poder que podía ejercer.
Frunció el seño al recordar a quien no había logrado amedrentar ni un poco. La joven promesa clase S que mucho antes de que la asociación le buscara el ya estaba interesado en el.
Dejo sus pensamientos de lado cuando vio que terminaron de cantar, era hora de continuar con el circo.

-esa fue una fantástica presentación "in love-20" mucha suerte en la siguiente ronda. Ahora un grupo que busca enamorar bajo su mirada carmesí, reciban con un caluroso aplauso... shingancrimsonz-apenas termino de hablar y las luces se apagaron intercalando luces doradas, rojas, naranjas y una y otra luz azul. Los acordes de las guitarras de Aion y Crow hacían eco en la oscuridad y con cada destello de luz, se presentaban uno a uno

-Un milagro vestido de carmesí, ¡ha llegado Crow!-el escenario se torna carmesi con la presencia del vocalista, tras el cambio la luz a purpura.
-sacudido por la oscuridad y desapareciendo en ella. El monstruo negro, Aion-el rubio claro sacudió su cabello para posar cubriendo su rostro al finalizar, la luz amarilla cubrió el escenario dando a entender el cambio de personaje.
-el que persigue el espiritu para dominar sobre los salvajes por el camino de Ryukomuso Kamui, aparece Yaiba y su legendaria Ryukenden-al finalizar, se hizo a un lado relevando la luz naranja y con voz varonil, Rom hizo su aparición.
-los hombres llevan con ellos un misterioso atractivo ¡esa es la realidad! Yo soy Rom-
Los cuatro posaron con sus instrumentos y justo cuando iban a cantar su himno, una quinta voz y el destello dorado con luces azules se relevo llamando la atención de los cuatro y de la audiencia quedaba en Shock.

...

Hasta ahi, criaturas de dios.
Ojala les haya gustado porque me costo un bueeen hacer esto c:

Abrazos

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top