El tercer capitulo de esta historia la cual me esta empezando a emocionar. Es divertido darle nuevas facetas a Genos.

Se que Saitama no ha tenido mucho impacto pero eso es mas delante, son de aquellos personajes que prefieren "curar" a "prevenir".

Ojala les este gustando este fick que con tanto amor hago. Disfruten la sensual lectura

Ojala les de epitaxis (*u*)

Este es un capitulo largo, asique lo dividi en dos para evitar cansarles (y dejarles con las ganas (risa malvada))

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Ya era de noche, inusualmente tranquila en la muy golpeada ciudad Z, mas específicamente En un complejo de apartamentos, un grupo de chicos organizaban sus cosas para irse pronto a dormir.

Vaya inicio de semana. Su representante los había mandado lejos de su ciudad natal, error, país natal (sin tomar en cuenta a Crow que provenía de alguna de esos pueblos) para que consiguieran alguna inspiración musical aunque sospechaban que era por otra cosa porque se veía muy ansioso de que se fueran.

Por sugerencia del mas bajo, se alojaron en la ciudad Z porque era ridículamente barato vivir ahí, la razón, la insana aparición de monstruos a toda hora, que milagrosamente que no les había tocado un evento así.

El chico pelirrojo usaba una pañoleta blanca en su cabello y cubriendo sus orejas concentrado en lo que cocinaba un poco de arroz y algo de pescado.

Rom ordenaba las habitaciones usando un pañuelo en la cabeza y un delantal blanco, las limpiaba un poco de la tierra y polvo acumulado por el desuso, preparaba las camas y sacudia un poco los muebles.

Mientras en la sala ya limpia y disponible para el uso humano. Yaiba investigaba sobre los alrededores con su computadora completamente concentrado. Necesitan un trabajo eventual en su rango, si bien podrían vivir con el dinero de Rom, no podían dejarle toda la carga.

Mientras Aion miraba por el balcón completamente ausente en sus pensamientos.
-oi Aion-le hablo el ojicarmin levemente molesto. Sin cambiar su pose se gira a ver quien le había llamado interrumpiendo su apreciación por la ciudad Z, tan devastada y caótica que es hermosa.

-¡ayuda en algo pedazo de vago!!-ordena señalándole con una cuchara de madera.
-un demonio oscuro me susurra al oído que no coopere-nuevamente vuelve a mirar la ciudad que en su mayoría esta muy apagada pero a cambio las estrellas brillaban mejor. Que mejor forma de distraerse ignorando las protestas del pelirrojo detrás suyo.
-¡ala mierda!!!!-escuchan exclamar al rubio de su banda, debía ser algo grande. Usualmente no dice obscenidades o se altera con facilidad.

-¿Qué sucede Yaiba?-se acerca Rom dejando la escoba de lado y sacudiendo sus manos. Los tres chicos se acercan y miran la pantalla donde ven que esta el mismo ciborg de esa tarde en unas fotografías en las noticias de internet.
-esteee... el héroe local conocido como "Ciborg Demon" clase S rango 14 nuevamente salva el día de una amenaza tipo Ogro, un kanji bestia parecido a oso... bla blaa...-termino de leer el pelirrojo y se quedaron callados procesando la información hasta que se escucho un grito intenso proveniente del departamento por la impresión.

-vamos a enseñarle a cantar a un héroe clase S-Yaiba trato de reponer su compostura con técnicas de respiración, no es gran cosa se repetía. No lo es, es solo un héroe ciborg clase S popular por lo que decían los comentarios, no debía pensar en la mirada gélida como el hielo tan opuesta al plasma y fuego que usa como armas. Se alboroto el cabello completamente desesperado.

Por su parte, Rom le encuentra a sentido. cuando el ciborg se excuso cuando se marchaba, por lo que veía era un héroe solicitado y su sentido del deber era notorio. Sonrió entusiasmado, seria interesante pasar su tiempo con el.

Aion estaba sumergido en sus pensamientos. No podía ignorar que estaba un poquito interesado en conocer mejor a su nuevo aprendiz. Pero es un dios, no puede rebajarse a mostrar curiosidad por el ciborg, aunque... levemente desvía la vista hacia la computadora mirando la imagen sin dejar de posar.

¿Por qué le decían "Demon ciborg"?

Crow miraba la pantalla donde estaba la fotografía del rubio de ojos dorados. Nunca diría en voz alta que deseaba conocerlo desde que su familia hablo de el y como salvo a la granja. Una de las primeras cosas que haría cuando fuera famoso seria encontrarle y ver que clase de sujeto era.

Lo cual lo hizo pensar, significa que ya eran lo suficientemente famosos y el destino se interpuso para que le conociera o simplemente paso.

-así que un héroe...-susurro y sonrió extasiado. Agradecería a ese "cabeza de huevo" por haberles enviado ahí.
-oi ¿que es ese olor?-Yaiba interrumpe sus pensamientos con esa pregunta inocente.

Empezaba a oler a quemado y un sospechoso humo negro salía de la cocina.
-¡aaah joder la cena!!!-comenzó a correr el pelirrojo alterado y sus amigos le hicieron segunda para rescatar la cocina.

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Al día siguiente.

Una mañana especialmente fresca recibió a Saitama mientras se despertaba y estiraba un poco perezoso, vio el reloj y eran las 9am.

Seguiría durmiendo pero le despertó el apetito y el delicioso aroma a desayuno que preparaba su aprendiz. Sonrió suavecito alcanzado a ver la cabellera rubia desde ahí, poco a poco su sonrisa se borro. Sabia lo mucho que se esforzaba Genos para complacerle aun cuando no fuera necesario. Una parte de el quería agradecerle adecuadamente por sus atenciones pero por otro lado, sabia que Genos lo hacia por interés, incluso sus palabras de aliento, a veces dudaban que fueran sinceras.

Como Un muñeco que pretendía ser de verdad.

Pero mientras, seguiria disfrutandolo, sea verdad o mentira.

-Maestro, ya esta el desayuno-salió de sus pensamientos y se concentro en el rubio. El menor estaba a su lado porque el quería y el lo permitía porque se había acostumbrado a el, nada más.

Entonces si eso era, porque se sentia insatisfecho con eso.

-le prepare Huevo con arroz ¿le parece bien?-hablo algo apenado el ojidorado.
-esta bien Genos, se me estaba antojando desde ayer. Gracias-agradece Saitama pero antes de empezar a comer ve el rostro acomplejado de Genos.
No de nuevo.

-me disculpo maestro, de haber sabido que quería de desayunar esto ayer, se lo hubiese preparado-se disculpo muy avergonzado por su "falla".
-eh corta el rollo. No lo dije por eso... se me antojo mucho después del desayuno. Además, estaba delicioso también-hablo con leve fastidio. Le aburrían las constantes disculpas de su alumno pero no podía hacer nada para remediarlas.
-gracias-
-mejor acompáñame a desayunar-animo el calvo mientras separaba los palitos, Genos acepto gustoso mientras tomaba su plato sin antes hacer sus típicas notas en su libreta.

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Pasaron unas horas. Genos aprovecho para ir a sus clases cuando su maestro le dijo que iría a jugar videojuegos con King, solo con la advertencia de cerrar bien la casa si iba a salir y tal vez saldrían a cenar udon esa misma noche.

Antes de irse del complejo de apartamentos, se vio en uno de los reflejos de las ventanas. Usaba una camisa blanca sin mangas, pantalón de mezclilla negro y sus usuales botas, su ropa de diario básicamente.

Recuerda que en su investigación, la imagen es un buen recurso para dar a entender el estilo de música que interpretan. Ahora Comprendía mejor a los ShigancrimsonZ, su estilo físico reflejaba su tipo de música y su nombre proviene de la palabra "shinigami" o "dios de la muerte" por eso sus orejas y cola para dar a entender que eran criaturas místicas y su insana obsesión por el rojo.

Ahora que recordaba, la señorita Fubuki entre los muchos regalos que le mando al maestro Saitama, venia ropa. Pero a este ultimo no le gustaban o no era su talla, así que la guardo hasta saber que haría con ella. No creía que le molestaría a su maestro si tomaba algunas prendas...

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-¡no seas estúpido Aion!! ¡esta letra es horrible y no combina con nada!!-reclamo el líder mientras le señala a una hoja de papel ante el inmutable rubio de cabello largo que seguía posando.

Hace dos horas estaban practicando sus canciones, todo iba perfecto hasta que Aion le muestra la letra para una posible nueva canción y empezaron a discutir, bueno, el mas bajo empezó a echar pleito. Mientras Yaiba afinaba muy dedicado su bajo y Rom terminaba de atender una llamada telefónica ignorando la discusión del dúo.

-ratoncito, al parecer tu estatura no es lo único diminuto que tienes, tu frágil mente no es capaz de comprender la belleza de estas estrofas. Tienes suerte que este dios oscuro y melódico te acompañe y escriba para ti-el hablar serio y la falta del tono de burla, casi parecía verdad lo que decía.

-¡hijo de...!!-
-de hecho, Crow no es bajo de estatura, esta dentro del promedio. Además según las estadísticas, las personas entre 1.55 a 1.69 metros se consideran mas atractivas y creativas en los medios artísticos-los 4 chicos se quedaron en piedra al ver llegar a su pupilo en la música. Se había cambiado de ropa, bueno no sabían si cambia de estilo de ropa o no, pero lucia atractivo para decirlo en una sola palabra.

Genos usaba una gabardina color gris sin mangas con detalles en oro y negro, una camiseta gris oscura y un pantalón de vestir negro con mocasines negros con detalles dorados, su cabello estaba mas alborotado.

(Ese es el estilo, despues hago un dibujo basado en Genos, con mi trabajo y escuela me es dificil darme el tiempo)

No sabían si era a propósito o un viento fuerte soplo y le despeino, aunque no importaba, no le restaba atractivo.

-Genos bienvenido-recibió el ojiazul recuperándose de la impresión con leve sonrojo. Se acerca a el mientras Yaiba le da un leve codazo a Crow para despertarle y quitarle la cara de estúpido.

En la mente del ojicarmin no dejaban de sonar las palabras de Genos. le había dicho que era atractivo, de forma sutil aclarando. Bueno, el sabia que es guapo pero la forma como lo dijo, Tan frio y serio, que hasta el dudo si era verdad. Pero lo más importante... Era la primera vez que alguien decía algo bueno de su estatura. Sin querer, hizo que se emocionara un poco y sonriera.

Mientras Crow estaba en su mundo sin desear ser rescatado por las insistentes sacudidas del rubio bicolor. Rom hacia de profesor hacia Genos que se sentaron en unas sillas cerca del escenario de practica.

-Bien Genos ¿Qué sabes de la música? O tienes alguna noción. En base a eso veremos por donde empezar-Genos le pareció buena idea y afirmo.
-se que hay varios estilos y que todos estan basados en 5 elementos: tono, ritmo, letra, sonido y emotividad. Si una de esas falla, todo se pierde-respondió el Ciborg completamente interesado y mirando fijamente los ojos azules del moreno, provocando que este se pusiera algo nervioso.

-a cabron, ¿en serio?-Crow interrumpió saliendo de su mundo. antes de que pudiera seguir hablando rápidamente fue interrumpido por una mano en su boca por parte del blondo de lentes provocando que estos empezaran a forcejear.

-si por su puesto-sudo una gotita nervioso Rom. Recupero su postura y se acomoda para mayor confort en la silla.
-¿Por qué no cantas algo? Como un testeo en que debes mejorar-animo Rom. Los demás dejaron de pelear y se detuvieron a escuchar que tan bueno era el rubio, rogaban al cielo que si, no querían lidiar con alguien que cantara sin gracia.

-no se ninguna canción-
-¿eh? No sabes ninguna. Bueno, una de esas canciones de niños que nos enseñan en la primaria-
-tampoco-todos se quedaron mudos. ¿pretende tomarles el pelo? el ciborg nunca había cantado.

-espera, osea nunca has cantado ni tocado música cuando eras niño.-mas que preguntar, afirmo Rom mirando sorprendido al chico frente a el. Genos solo ladea un poco la cabeza haciendo que sus cabellos taparan su ojo izquierdo.

-así es... aprendí a tocar el pandero cuando era niño, pero después de que un ciborg me arrebatara todo y a todos...- Retira esos cabellos con la mano izquierda haciendo una leve expresión de placer al sentir que ya no le picaba la mejilla.
-solo he conocido el odio y la venganza-

Aion quien sostenía a un ya calmado Crow lo soltó de golpe al ver como posaba y hablaba de su pasado de forma natural y fría que lo sorprendió. No había drama ni lamentaciones, todo tal cual es.
Incluso los sentimientos de odio y venganza se oían hermosos si los aclamaba el rubio.

Tal como el

Incluso ignoro los reclamos del "ratoncito" por dejarlo caer porque una idea se ha germinado en su cabeza.

-oh... vamos a intentar algo. Canta esta cancioncita como te salga mejor-Rom sin mejores ideas, se pone frente a el y mueve sus dedos como si estuviesen haciendo una escalera.

-witsi, witsi araña subio su telaraña. Vino la lluvia ¡y se la llevo! Salio el sol. Y witsi, witsi araña otra vez subio-canturreo algo sonrojado. Hacia años que no cantaba eso y escuchar la risa de sus amigos no ayudaba mucho. Quería golpearlos, al menos el estaba empezando a instruirlo.

Genos no entendía el porque de las risas, si estaba aplicándole una prueba de canto. Se quedo callado analizando la voz de Rom. Era agradable para el, suave y grave, con un tono infantil por la melodía. Quizá debía empezar copiando ese patrón, adaptarlo a su voz y cantar.

-witsi, witsi araña subió su telaraña. Vino la lluvia ¡y se la llevo! Salió el sol. Y witsi, witsi araña otra vez subió-los cuatro se quedaron de piedra. La voz de Genos era suave y armónica tal como se esperaba de una computadora aguardando ordenes, tan carente de vida, sin ritmo.

-estee... Genos-Yaiba se rasco la cabeza apenado ¿Cómo decirlo sin que lo tome a mal? No quería ofenderlo o la poca primer impresión que tenia sobre el se fuera al caño, se sonrojo un poco ¿le importaría si el ciborg pensara mal de el?

-¡¿pero que mierda acabas de hacer?!!!-exclamo sin mediar palabras de advertencia Crow, se acerco al rubio a pasos indignados y rápidos.
-¡fue horrible!! ¡carece de todo? ¿Qué fue eso? Si te atreves a decir que fue cantar, te pateare tu metálico tra...-Yaiba fue el único que fue lo suficientemente rápido para taclear a su líder y taparle la boca. Este por su parte empezó a forcejear contra el rubio bicolor muy enojado por su abrupta pero necesaria interrupción. Genos por su parte, se puso de pie serio llamando la atención del cuarteto, miro fijamente los ojos del escandaloso pelirrojo. Este ultimo sentía que se iba a partir su alma por la mirada tan aguda.

-por eso, enséñame-nuevamente se acomoda el cabello brindando una mirada pétrea a Crow. Este ultimo solo sintió su cara enrojecer, aunque no era el único

-quiero perfeccionarme-
-por supuesto-este se levanta entusiasmado dejando tirado al bajista. La idea de pasar mas tiempo con el ciborg de alguna manera lo animaba mucho, incluso quería enseñarle de forma lenta para pasar mas tiempo con el.

Se dio cuenta para donde iban sus pensamientos, no podía hacerse el ciego.

-de mi parte, te enseñare a marcar ritmos-le indico Rom acercándose al rubio de ojos dorados y escleróticas negras. Pone su mano en el hombro metálico como señal de camarería, por el momento lo seria hasta que la proximidad fuera mayor.

-¿Quién sabe? Quizá te enseñe a tocar la batería-animo el ojiazul levantando el pulgar.

-si en esas vamos... generalmente no me molestaría pero no puedo dejarte a merced del mundo sin enseñarte la divinidad de las letras en la música. Yo, Aion dios oscuro, me comprometo a enseñarte dicho arte-hablo por primera vez el rubio de cabello largo. Tenia que hacer algo, sus amigos estaban tomando ventaja muy rápido, se había dado cuenta por sus gestos y el excesivo entusiasmo por participar, no podía darse el lujo quedarse estancado.
-de mi parte, te enseñare a como interpretar las melodías y adaptarlas-hablo Yaiba acomodándose los lentes sin mirar directamente a Genos. Se sentía un poco incomodo por la situación que se había formado.
-me parece perfecto, si cada uno se enfoca en un tema especifico, la duplicidad de información disminuye y aumenta la productividad-habla en voz alta el "Demon Ciborg" cruzando los brazos en su pecho, analizando y creando una estrategia de practicas que no afectara demasiado en su rutina.

Mientras Genos estaba en su mundo felizmente ignorante de lo que estaba pasando con los chicos de ShigancrimsonZ que se miraban con desconfianza mutua.

Al menos eso hacían hasta que Genos se despidió prometiendo volver al día siguiente. Agradeció sus atenciones y se marcho sin dar vuelta atrás. Una vez que se aseguraron que el ojidorado y escleróticas negras se haya marchado y estuviese lejos (no sabían que tan fino era su oído) empezaron a verse feo entre si. Se conocían desde hace tiempo, eran amigos como el pan a la mantequilla y siempre estaban juntos, por lo tanto, era natural conocer sus reacciones y formas de actuar. Crow camino al centro del escenario inusualmente serio, enfrento a los tres miembros de su banda apuntándoles con su guitarra.

-escuchen desgraciados. Genos es mío, mejor no metan sus narices.-se señalo el pelirrojo de forma confianzuda y sonriendo al recordar las palabras del rubio cuando defendió su estatura.

-¡¿quee?!! Por supuesto que no. Si lo dices por lo de la estatura, déjame recordarte que hablaba de estadísticas. Además...-interrumpió Yaiba enfrentándose a su líder un poco molesto, se acomodo sus lentes recuperando su serenidad.
-nunca podrías comprender la clase de hombre que es Genos. Tiene honor y disciplina y apenas puedes controlar tu labia-cruzo los brazos dispuesto a no ceder mirando fijamente a sus amigos y ahora rivales.

-¡déjense de pelear!!!-la voz fuerte y autoritaria de Rom se hizo presente haciendo estremecer a Crow y Yaiba hasta las orejas y la cola. El moreno se había molestado por tanta pelea ese día. Primero por quien no lavo los trastes, que dejaron la ropa en el baño o quien apago el calefactor de agua.

-primero que nada, somos una banda y también amigos. Que la atracción que sienten por Genos no los haga olvidar eso-hablo con sabiduría logrando calmar los dos chicos mirándose apenados. Rom tenia mucha razón, estaba su banda y amistad sobre todas las cosas y...

-además, creo que yo tengo más probabilidades de estar con el-hablo casual mientras se rascaba la mejilla algo sonrojado recordando las facciones del ciborg al hablar con el.

-¡¿pero que mierdaaa?!!!-los otros volvieron a su explosiva batalla ahora reclamando al ojiazul por usar esa bajeza contra ellos. Mientras ellos peleaban entre si, Aion estaba muy callado. Sentía muchas cosas, entre ellas inseguridad y la insana obsesión de acercarse al rubio cibernético. Le causaba curiosidad conocer todo de el, saber que piensa incluso componer una canción para el.

Sacudió la cabeza energético, No estaba bien sentir todo eso, el es un dios tenebroso. No podía caer bajo los encantos de unos ojos bonitos... ¿acaba de llamar bonitos a unos trozos de vidrio??

-será mejor... que lo deje fluir-cuando no sabia que hacer, veces dejaba que sus instintos lo guiaran, a veces, eran buenos otros era mejor no mencionarlos.

-oi Aion-gira su vista hacia el mas bajo de la banda. Quien le miraba con desconfianza ya mas calmado al igual que Yaiba y Rom.
-¿también estas interesado en Genos?-un aura oscura rodeo al ojicarmin. Ya se sentía traicionado con los otros idiotas roba-prospectos de novios como para añadir al guitarrista y compositor.

-soy un monstruo oscuro, no puedo caer en algo tan bajo como el amor... aunque esta interesando demasiado-dijo lo ultimo para si mismo. Dejo de posar para acercarse a sus amigos-rivales, debían aclarar puntos importantes sobre su invitado y las clases que iban a impartir

.-.-.-.-.-.-.-.-

Habían pasado 3 semanas.

Tres largas semanas donde Genos había cambiado su comportamiento desde el comercial de los soniclois... como se llamen, esos robots cantarines.

Saitama dejo de leer su manga para ver al menor que investigaba en su computadora, absorto en sus pensamientos.

Algo estaba pasando con Genos y era importante.
Quizá no era el hombre más interesado y era muy despistado en muchas cosas pero al vivir tanto tiempo con el, no podía ignorar esos cambios.

Primero. La ropa. No había ningún inconveniente que el rubio cambiara de estilo, pero si antes era llamativo ahora mucho mas. No podían ir por las calles sin que mujeres de diferentes edades los detuvieran para acercarse y hacer bullicio e interrumpir sus sagradas compras.

Segundo. El estaba la mayor parte del tiempo en la computadora haciendo quien sabe que cosas, esta bien tenia curiosidad pero no era metiche para husmear en las cosas del blondo. Aunque muchas veces usaba unos audífonos y se concentraba al punto de quedarse quieto.

Tercero, casi no pasa a tiempo con el. Al principio, le parecía genial ya no tener al rubio tanto tiempo pegado a el, tener su propio espacio y agradecía infinitamente sea lo que sea que lo mantenía ocupado, al menos eso fue en los primeros 4 días.

No le gustaba la sensación de ser ignorado por el menor. Le daría igual si fuera cualquier persona pero en su aprendiz le afectaba. Se había planeado muchos escenarios: una nueva mejora a su cuerpo tan extraordinaria que necesitaba toda su atención a conjunto del Doctor rarito que atendía a Genos cuando estaba malherido.

Tal vez, una estrategia para hacerlo mas popular. El menor sabia cuanto lo frustraba no ser reconocido como héroe, aunque últimamente no le daba tanta importancia.

Una novia...

Esta ultima opción le desagrado. No era que le gustaba la idea que el menor tuviese una pareja antes que el, sino que le estaba quitando atención. No es que... bueno, si extrañaba los acosos de Genos.
-maestro, voy a hacer la cena, ¿gusta algo en especial?-salió de su burbuja de pensamientos y miro al rubio que esperaba una respuesta.

Ya había cerrado su computadora tenia la completa atencion del ciborg.
-mmh, vamos a hacer sopa de alga-este se pone de pie y sacude su ropa de algunas migajitas que tenia.

-no se moleste maestro. Yo...-
-anda que estoy hambriento y quiero cocinar con... buaaaaah... la intención de des-aburrirme también-logro cambiar el curso de sus palabras con un bostezo.

¿Qué iba a decir? ¿quería cocinar con Genos? ¿Para pasar un rato con el? No tenia nada de malo pero el curso de sus pensamientos no le estaba gustando como esa colonia que estaba usando el menor...

Espera...

Genos no usa colonia ni perfume.

El menor se ponía su delantal rosa para empezar a cocinar, fue a las alacenas y refrigerador para sacar los ingredientes necesarios para la sopa junto con los sartenes.

Cuando sintió una presencia muy cerca de el, se da la vuelta y prácticamente el maestro calvo estaba a un paso de tocarle y no se miraba muy contento.

-Genos, ¿Qué ese olor? Es desagradable-el ciborg comenzó a examinar a su alrededor, la cocina, la habitación principal, el baño. No podía ser algo pudriéndose, el había limpiado todo pulcramente.

-creo que no comprendo maestro... mis escáneres no detectan anomalías en...-claramente confundido Genos mirando directamente el ceño fruncido del mayor.

-eres tu... hueles a esos perfumes caros que promociona Mask-miro con sospecha a Genos casi temiendo que la idea de una novia fuera verdad, sin saber exactamente porque le disgustaba.

Aunque quizá si lo sabia.
-hoy que fui de compras y había mucha gente, talvez tope contra alguien y no le di realmente importancia... si este aroma le es desagradable, iré inmediatamente a bañarme-se quito el delantal, lo doblo pulcramente y se alejo un poco confundido por la actitud de Saitama.

Mientras este ultimo no estaba muy convencido de las palabras de Genos, levanto los hombros restándole importancia. El menor no tenia razones para mentirle y estaba exagerando las cosas.

Mejor empezaba a cocinar, que ya tenia mucha hambre.

Dentro del baño, el vapor remolineaba de forma traviesa en el cuerpo del Ciborg mientras este se tallaba el cuerpo, se sentía extraño viendo y sintiendo la piel clara e irrealmente perfecta en sus dedos y brazos. La textura era correcta y no había fallos en sus sistemas por el agua.

Cuando fue a su actualización con el Doctor Kuseno, le propuso utilizar nanotecnología para reparar daños pequeños en su cuerpo de forma automática, ahí Genos sugirió añadir en su programación la reagrupación para formar un tejido similar a la piel en casos de mojarse accidentalmente. Una parte para aumentar la seguridad de sus allegados como la suya de un electroshock y la otra porque el maestro le hacia bulla por su cuerpo metálico cada vez que le veía así.

Se extraño que el doctor no pusiera objeciones porque la idea era muy ambiciosa hasta lo noto mas animado.
Los nanobots que cubrían su cuerpo tenían una gran capacidad, lograba percibir el calor, el frio hasta texturas, el dolor y placer estaban también, la ventaja era que el podía controlar la aparición de estos, sino, seria incomodo que cada vez que algo húmedo lo tocara apareciera una mancha color beige claro en su cuerpo.

Dejo de autoexplorarse y se concentro en la eliminación de colonia que había impregnado su cuerpo y haciendo molestar al maestro.

Mientras se metía ala tina y lavarse de forma meticulosa con jabón trataba de ubicar donde cuando ocurrió.

Ahora que lo recordaba...

-tengo que regresar, es hora de preparar la cena y debo ir por unos ingredientes-Genos dejo con cuidado en uno de los estantes una de las guitarras que le había prestado la banda. Los chicos dejaron de tocar y afirmaron un poco tristes por la partida del rubio.

Había sido una tarde especialmente provechosa, perfecciono su arte de la guitarra en los acordes indicados por Aion y el ritmo marcado por Rom.

-vale, te vemos mañana Genos-se despidió "chocandola" con el ojiazul con una sonrisa encantadora por parte de el.
-esta bien Rom-afirmo amable. Estar con el moreno de ojos azules le relajaba y podían discutir temas financieros y dar con nuevas ofertas. El era de los pocos que comprendían su admiración por el maestro junto con Yaiba.

-esta bien Genos, te veremos mañana-Yaiba se despidió con una leve afirmación con la cabeza mientras guardaba su katana. El rubio bicolor le había enseñado el mundo de la música y como sugerencia que se pusiera a buscar canciones para practicar en la guitarra y canto. Su relación con el era amena, hablar con el chico de lentes sobre enseñanzas y ser disciplinado en varias artes, le ayudaba a mejorar como alumno.

En una de ellas, era bueno dejar solo al maestro para ayudar en su concentración. (Si Yaiba es el culpable de que Genos ya no pase tanto tiempo con Saitama)

Giro su vista hacia el pelilargo, el cual no decía nada y ocultaba su rostro con el cabello. Aion y su persona mantenían una relación extraña, sabían del dolor y la comprensión era parte elemental junto con la letra que el ojirubi le proponía en cantar. A el le gustaban sus canciones, la mayoría tenían grandes verdades pero cuando las entonaba, el rubio cenizo se volvía tan arrogante como Amai o se mantenía callado mirándole de forma intensa.

-¿y Crow?-pregunto Rom al notar el ambiente inusualmente tranquilo. Todos miraron alrededor del cuarto extrañados hasta que el chico de lentes hace un gesto de recordar algo y aumenta con el ademan de chocar su puño contra su mano.

-ahora que recuerdo, dijo que le habían faltado unas cosas por comprar-
-aah, esta bien. Supongo que le veremos en casa-Rom se rasco la cabeza más relajado al saber el paradero de su amigo.

Genos por su parte nuevamente se despidió y salió del edificio.
Mientras caminaba examinando una lista de papel de sus compras y las direcciones, logro escuchar que alguien le hablaba, guardo el papel en su pantalón deteniéndose y mirando detrás suyo. Justo iba a alcanzarlo el chico pelirrojo de la banda.

-Genos...-este se arroja a la espalda del ciborg dándole un abrazo de camarería, este no correspondió al gesto pero tampoco lo alejo, simplemente lo dejo ser. Ya se había acostumbrado.

Crow era muy explosivo tanto que chocaba con la serena personalidad del rubio cibernético. Muchas veces el ojicarmin terminaba explotando de furia porque Genos no lograba cantar como debía. Su entonación era perfecta pero la falta de emociones en ella le pateaba.

Otras estaba así, siempre cerca y sonriéndole.

Genos termino de bañarse y empezó a emitir calor en su cuerpo para secarse, muchas gotitas recorrían su muy inhumano y perfecto cuerpo tratando de escapar del calor emitido. dándole una apariencia de una estatua perfecta recién pulida.

Así de poco a poco fue desapareciendo su piel hasta quedar como siempre su ya conocida estructura metálica, una vez asegurada todas sus partes y quedar satisfecho que ya no había rastro de ese perfume prosiguió a vestirse e ir a cenar con el maestro.

.-.-.-.-.-.-

Habían pasado ya 3 semanas y no tenían ni idea que mas enseñarle a Genos y continuar con su compañía. Nunca se imaginaron que el Ciborg superaría sus expectativas, aprendía increíblemente rápido.

Ya dominaba la guitarra y la batería, junto con el bajo y la flauta (algo sacado de la manga por parte de Yaiba).

Todos estaban un poco deprimidos en la sala pero también había enojo contenido hacia Crow.

El aludido estaba recostado en la mesita de te jugueteando con un lápiz con un gesto deprimido y leve mohín.

No quería que terminara tan pronto, ¡aun no lograba que Genos se fijara en el!

Cerro los ojos recordando la casi cita que tuvo con el emitiendo un suspiro nostálgico.

-¿ya te vas?-
-si, tengo que hacer algunas compras y hacer la cena para el maestro-esto ultimo hizo que Crow frunciera el seño. Le recomía la envidia la forma tan devota de dirigirse hacia su maestro y tenia la completa atención del rubio.

Una que otra vez, le llamaba por celular y el rubio no le importaba dejar sus clases a medias para ir con el. Según decía porque el maestro estaba sobre todo, incluso sobre sus propios deseos.

Eso a Crow lo enfurecía. El día que se topara con ese sujeto le haría saber todas sus verdades y aclararía de una vez por todas que el rubio seria su pareja.

-entonces vamos juntos- dejo de colgarse de la espalda del rubio y se coloco a su lado esperando empezar a caminar hacia su destino.
-pensé que habías ido-empezó a caminar hacia delante.
-no, olvide mi cartera en casa y fui por ella.-respondió pasando sus manos por la cabeza y caminando a su lado mirando discretamente a Genos, quien pareció aceptar la respuesta dejando acompañarle.

Mientras el ciborg leía nuevamente la lista del mandado no se percataba de la sonrisa tan grande que profesaba Crow.

Si bien fue a casa por su cartera, también se puso la colonia que guardaba celosamente en su cuarto.

Generalmente usa muy poco por lo costosa que es y porque le gustaba mucho ese olor, Esta vez se puso una porción extra para hacer que el ciborg lo notara o mínimo se impregnara en la ropa.

Así cuando lo oliera pensara en el.

Hasta que una idea salvaje apareció en su mente. Era casi como una cita.

Estaban los dos solos para comprar lo que les faltaba para su hogar. Sin poder evitarlo imagino una vida casera con el como sus padres.

Ir de compras juntos, cocinar, dormir en la misma cama. Incluso podía ser un héroe como el y acompañarle en sus misiones.

Tan encimado iba en su mundo que no se dio cuenta que habían llegado a mini supermercado. El ciborg tomo una canasta e inicio a buscar sus cosas ignorando totalmente a Crow que iba en su mundo, o eso hacia antes de que este ultimo chocara contra un estante haciéndolo tropezar hacia atrás y caer de forma vergonzosa. Eso creyó hasta que sintió un par de brazos sosteniéndolo por los hombros por la espalda y este voltea esperando ver su héroe, para su dicha así fue. Le ayudo a mantener el equilibro, lo soltó y le miro extrañado.

-estee... gracias-hizo un mohín avergonzado por su torpeza. Tomo una canasta que estaba por ahí cerca y se alejo completamente rojo adentrándose a la tienda.

¿que estaba haciendo? Se supone era su "no-cita" y estaba haciendo el ridículo. En fin, decidió ir por sus cosas y regresar a casa.

Iba por los cereales y busco con la mirada un cereal de aritos con la figura de un conejo, el preferido de los 4. Llego a verle y noto que estaba en el peldaño mas alto del estante lleno de otras marcas y tipos de cereales.

Se puso de puntitas y trato de alcanzarlo. Se estiro lo mas que podía pero no lo alcanzaba, el cereal se burlaba de el por su bajita estatura y este gruñía de frustración. Como le jodia ser tan enano. Hasta que una mano mecánica tomo el cereal y se lo paso.

Una vez más, Genos se volvió su héroe.

-.-.-.

Por primera vez experimento los celos en vivo. Una cosa era sentir celos de un tipo que hablaba el rubio y no conocía pero otra era ver como un montón de fans se acercaban al rubio y empezaban a gritonear.

A el no le importaba ser admirado de la misma forma que Genos, ¡de eso vivía demonios!!. Las y los fanáticos sobre uno era parte de la fama pero la cosa cambiaba al ver los tratos hacia el rubiales y como los apartaba de forma cortes.

Como deseaba tener en ese momento su guitarra para sácales a patadas a punta de madrazos y que alejaran sus pezuñas del rubio.

En su camino de regreso a casa estaba furioso, caminaba por las desoladas calles de la ciudad sin miedo, que apareciera un maleante y se descargaría contra el.

Miro a su derecha y ahí estaba el rubio como si nada cargando sus compras y otras bolsas llenas de regalos, cartas y quien sabe cosas, le irritaba un poco pero no tenia derecho a reclamarle. Ahora que lo piensa, ¿a donde iba?

Entonces vio el edificio donde vivía, entro subiendo las escaleras y Genos aun le seguía. Sin poder evitarlo, empezó a emocionarse. Lo estaba siguiendo, que tal si era para declararse con el en privado o... o... espera se esta pasando de nivel, el vivía en el 4 piso.

-¿a donde vas?- pregunto casual Crow mientras miraba a donde se dirigía el rubio.
-a casa con el maestro-respondió girándose a ver al ojicarmin. Este no pudo evitar sorprenderse al saber que el vivía en el mismo complejo de departamentos que el. Era una coincidencia maravillosa.

-¿en que piso vives? Nosotros nos alojamos en el cuarto-
-nosotros en el sexto-
-nos vemos Genos-se despidió alegremente ingresando al pasillo del cuarto directamente la puerta numero 5. Una vez adentro, emitió un suave suspiro y sonrió a libertad.
No había sido un día tan malo: tuvo una casi cita con Genos y ahora se enteraba que vivían en el mismo lugar le emocionaba mucho.

-¡siii! Solo poco más...-murmuro sonriendo o eso hacia hasta que escucha a alguien Toser fingidamente frente a el. Tarde se dio cuenta que 3 pares de ojos miraban amenazadores.
-¿Dónde estas y porque tardaste tanto?-Rom se acerco a paso rápidos.
-estee-
-imbécil nos tenias preocupados, la próxima vez carga tu celular o algo-le regaña suavemente.

Crow suspiro relajado. Era eso.
-ah, no hay problema. Estaba con Genosssss...-lo habia liado, ahora los mismos ojos que le miraron preocupados ahora querían matarle.
Si salía vivo de ahí, usaría mas las canciones de Aion, dejaría de burlarse de Las plasmagicas, le daria de comer a las vacas de su granja, le bajaría a las malas palabras pero por dios ojala le diera otro día para vivir.

Suspiro saliendo de sus recuerdos. Aun le dolia la paliza propinada por Rom y la cruel tortura que le aplicaron Aion y Yaiba: poner la música de Ronmeo Saint en sus delicadas orejas por medio de audífonos. Como odiaba ese artista y su música.

Aun se estremecía al recordar eso.
Lo bueno fue que salió vivo de eso.

-¿Qué vamos a hacer?-se escucho la voz lejana de Aion, apenas un susurro mientras veía por la ventana sin dejar de posar.

La habitación de la sala estaba en silencio, sabían a lo que se refería. Genos aun no estaba listo para cantar, le faltaba una parte importante pero lo lograban dar con ella o la manera de hacer que reluciera.

La emotividad.

Aun sonaba como una contestadora perfecta y no como un ser vivo.
-aun podemos visitarle, según Crow, el vive en el sexto piso-intento a animar el chico de lentes.

-no es suficiente... hasta donde sabemos, su profesión de héroe y estar con su maestro son sus máximas prioridades, no aceptara tan fácil una salida con nosotros por placer-remato Rom analizando unas cuentas sin estar muy concentrado en ello.

-supongo que... lo sabremos mañana-susurro Yaiba con tristeza.

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Si alguien le atina los porques del titulo les doy una galleta :D

Nos vemos ♡