Kim Taehyung despertó en una cama de hospital, lo sabía tan bien porque conocía el aroma singular que rodeaba la estancia como el olor a desinfectante, pero no lograba recordar qué día era, ni qué hora y el lugar exacto en donde se encontraba. Sólo le dolía la cabeza como si algo invisible se la estuviera exprimiendo como una naranja para hacer jugo y apenas podía abrir los ojos o mover el rostro sin que le doliera. Se tocó la cabeza y se dio cuenta que tenía vendas enrollándola, con algo más grueso puesto en la parte izquierda.

Vio a su alrededor donde solo una cortina celeste le separaba del lugar, no tenía puesto nada más que una bata de hospital, en el dorso de la mano derecha tenía una vía intravenosa cerrada y en la otra mano un brazalete con su nombre y número de identidad. Empezó a sentirse cada vez más angustiado mientras lo último que recordaba aparecía en su mente como imágenes gastadas.

...

Hoseok comiendo frente a él, Soonshim queriendo salir, Hoseok diciéndole << ya vuelvo, bebé >>, Hoseok besándole y yéndose por la puerta, él lavando los trastes, él abriendo la puerta, dos hombres golpeándolo, el sonido de una cámara, una puerta abriéndose, Jin apareciendo de ella y luego voces que se mezclaban, el sonido de un disparo, algo tocándole la frente, un cuerpo borroso sentado en una silla a su lado y luego... nada. Solamente la más pura oscuridad.

...

Entonces se dio cuenta que tal vez le había pasado algo a Jin y se aterró ante la idea, por lo que no halló nada mejor que tratar de sentarse logrando marearse en el proceso, aferrándose a las sábanas y viendo como todo daba vueltas a su alrededor. Parecía que el mundo no dejaba de girar o él no dejaba de girar.

- ¡¿Alguien puede decirle al puto mundo que se detenga?! -exclamó con impulsividad, callando los quejidos que salían de su boca cuando vio que en ese instante la cortina se abría y de ella aparecía una mujer de la edad de su madre. Los mareos cesaron y pudo lograr ver la credencial colgada en el cuello de la mujer, comprobando que era la enfermera Song del área de urgencias.

- Veo que ya ha despertado, joven Kim -dijo la enfermera, con una coleta en la cabeza, de tez blanca y delgada, con un porta ficha en la mano y un lápiz en la otra. La apoyó en su pecho como si fuera a ponerse a escribir-, ¿Cómo se encuentra?

Taehyung la ignoró. No tenía tiempo de pensar en el mismo o en sus preguntas, poco le importaba.

- ¿Dónde está Jin hyung?

- Me temo que no conozco a ningún Jin, lo lamento -contestó ella, totalmente serena a como estaba él. Sentía que la sangre golpeaba fuertemente su cien-, ¿Usted recuerda lo que le pasó?

- Fui atacado por dos hombres en mi casa... -musito Taehyung, arrugando el rostro cada vez que el dolor palpitaba con fuerza en su cabeza-... me golpearon en la cabeza. Mire, yo de verdad necesito...

No acabo de terminar. La enfermera lo interrumpió, mirando la hoja en sus manos y a él, como si estuviera haciéndole un cuestionario. Taehyung supuso que lo estaba haciendo.

- ¿No recuerda nada más?

- No... 

-  ¿Qué tanto le duele la cabeza? -le preguntó y Taehyung se encogió de hombros, pensativo y gruñendo ante la molestia-, a ver, el 1 al 10, siendo el 1 como que no tiene dolor, el 5 como un dolor soportable y el 10 como el máximo dolor, ¿Podría decirme que tanto le duele?

- Creo que un cuatro coma cinco o tal vez un cinco... -medito, relamiéndose los labios secos y sintiendo rasposa la garganta. Tenía sed- ¿Sabe que tanto he estado aquí?, ¿Quién me trajo?

- Lleva un día dormido, llego ayer en la tarde como a las seis y lo trajeron junto a otro chico que también estaba lastimado. Su familia se enteró después y está esperando afuera para la hora de visita.

- ¿Cómo dice? -logró articular Taehyung, sólo pensando en el << otro chico lastimado >> y la angustia creció con tanta rapidez que estiró la mano hacia la mujer y le agarro el brazo sin fuerzas -, ¿Qué otro chico?

- Cálmese -le pide la enfermera, acercándose más a él y mirándole directamente a los ojos-, si se altera le dolerá más. Trate de respirar hondamente, relájese. El otro chico se llamaba Jung Hoseok, pero sólo estuvo internado unas horas porque tuvo una luxación en la rodilla, una muy leve así que no se preocupe, él está bien.

- ¿Una luxación de rodilla? -arrugo el rostro Taehyung, sintiendo una punzada dolorosa en su pecho que le hizo lagrimear-, ¿Cómo paso eso?

- Dijeron que fueron los mismos hombres que le atacaron a usted.

- ¿Qué? Pero él... -balbuceo desviando la mirada hacia sus manos, pensando en su pierna y en todas las cosas malas que eso conllevaría, sacando conclusiones apresuradas como siempre y sintiéndose más angustiado. Sin darse cuenta empezó agarrar con más fuerza el brazo de la enfermera y su respiración se hizo más rapida e irregular- ¿Entonces no podrá bailar nunca más?, ¡Él es bailarín!

- No es así -negó ella, mirándole horrorizada al ver que Taehyung empezaba a llorar despacio. Había olvidado lo asustado que se sentía y todo le había llegado de golpe-, no llore, tranquilo, no...

De repente sus sollozos se ven interrumpidos por alguien que corre la cortina y hace intromisión, carraspeando ruidosamente. Podía ver, a través de su vista borrosa por las lagrimas, que era Jimin con un vaso térmico en la mano.

- Taehyungie, ya deja de lloriquear como una nena.

Inmediatamente Taehyung dejo de agarrar el brazo de la enfermera y se inclinó hacia él, alzando ambas manos y apoyándolas en sus hombros cuando Jimin se acercó velozmente a él al ver que estaba a punto de caerse de la cama de hospital. La enfermera lo agarraba de la bata con una mano para que no perdiera el equilibrio.

- ¡Jiminnie! -exclamó conmocionado-, ¿Sabes cómo está Hobi?

- Está bien, tonto, sólo se le salió un poco la rodilla, eso es...

- ¡¿Cómo que se le salió un poco?! -le interrumpió Taehyung exaltado, aumentando las lágrimas que caían en sus mejillas. Jimin lo miraba con una sonrisa, feliz por verlo despierto y divertido por ver el puchero que hacían sus labios y su exageración-, ¡Es mi culpa, no volverá a caminar!

- Señor Kim, por favor no grite -advirtió la enfermera, justo cuando Jimin iba hablar, llamando la atención de los dos-, estamos en urgencias y usted debe estar lo más tranquilo posible, ¿O quiere que le duela aún más la cabeza? El joven Jung está bien, no fue una luxación grave, entiéndalo. 

Taehyung asintió, tratando de calmar la opresión en su pecho, de todas formas podía ver en la expresión tranquila de Jimin que no había sido nada grave, porque si lo hubiera sido, el primero en verse preocupado sería él. Suspiro con alivio cuando Jimin asintió dándole la razón a la enfermera, pasando la mano conciliadoramente por su espalda. Taehyung dejo de agarrar con fuerza los hombros de Jimin y lo miró con un puchero en los labios, secándose las mejillas con las manos.

- ¿Qué pasó?

- Si te calmas te lo diré, Taehyungie.

- Ya estoy calmado.

- Bien, primero acuéstate -le ordenó, justo en el momento en el que la enfermera les había dicho que volvería más tarde para dejar que hablasen, pero sin sobresaltos o tendría que administrarle un calmante. Taehyung se acostó con cuidado, ayudado de Jimin, en la cama y volteó la mirada para verlo sentarse en un banquillo a su lado, tomando sorbos de lo que supuso sería café y con la otra mano acariciar la suya con el brazalete de identificación-. Por lo que supe de Jin hyung, él había entrado a su departamento cuando vio a dos sujetos que no conocía para nada. Uno de ellos te estaba golpeando mientras el otro tenía un arma apuntándote, me dijo que él había luchado para quitarle el arma y que Soonshim llegó detrás de él mordiendo al otro sujeto, el que te estaba golpeando.

- ¿Qué? -otra vez la angustia volvió a su cuerpo con fuerza, e hizo ademán de volver a pararse, pero Jimin le advirtió con la mirada y con su mano que no lo hiciera, que estaba bien. Pensó en Soonshim, sintiendo como las lágrimas volvían a él al pensar que le habían hecho daño o algo peor-, ¿Cómo está mi bebé?, ¡Jimin, cómo está Soonshim!

- Está bien, Taehyungie, no le paso nada,  ¿Me dejarás terminar?

- Dispara -dijo ansioso, luego pensó en esa palabra y se rectificó, recordaba que había escuchado un disparo y trato de no entrar en pánico por eso-. Digo, adelante.

-Luego llegó Namjoon y Hoseok hyung -siguió contando, con la mirada más preocupada a medida que hablaba-, Namjoon peleó con el tipo del arma que luchaba con Jin hyung y logró noquearlo y Hoseok hyung fue directamente al tipo que estaba peleando con Soonshim, pero el maldito le piso la pierna con tanta fuerza que se la luxó, y bueno...

Jimin ya no lo miraba, solo veía sus manos unidas, haciendo una mueca que iba preocupando más a Taehyung. Se sentía tan temeroso y aterrado que estaba a punto de pararse de la cama e irse de ahí para buscar a Soonshim y a Hoseok para poder comprobar que estuviesen bien con sus propios ojos.

- ¿Qué más pasó?

- Hoseok hyung vio que el sujeto sacaba una navaja e iba apuñalar a Soonshim -ante eso, Taehyung apretó con más fuerza la mano de Jimin, conteniendo el aliento y esperando a que continuara-, pero gracias a Dios, no lo hizo porque... porque alcanzo a tomar una pistola que se le había caído y le disparó en el hombro.

Taehyung se quedo mirándolo anonado, verificando en sus ojos que Jimin decía la verdad. Podía ver su propia preocupación en ellos.

- ¿Mi Hobi le disparó a ese... sujeto?

- Sí, Jin llamó a la policía para que se los llevaran e hicieran la denuncia, y a una ambulancia porque empezaste a sangrar por una herida en la cabeza y ellos te trajeron aquí junto con Hoseok hyung -Taehyung iba a preguntarle en dónde estaba, pero Jimin se le adelantó- Sé que preguntarás dónde está, tranquilo, él no está aquí porque fue a declarar a la policía, como le tuvieron que poner la rodilla en su lugar no pudo declarar ayer. Se quedó toda la noche contigo.

- ¿Y... mi familia sabe que estoy aquí?

- Claro que sí, ellos tampoco están aquí porque también fueron a declarar.

- ¿Cómo? -preguntó extrañado.

- Taehyungie -se detuvo, exhalando con pesar-, ¿Por qué piensas que esos hombres fueron a golpearte?

- No... no sé -siseó, demasiado abrumado para pensar en otra cosa que no fuera Hoseok y su pierna, demasiado abrumado para pensar en la verdad-, ¿Tal vez se equivocaron de departamento?

Tal vez quería que Jimin le mintiera, pero sabía que eso nunca pasaría. Jimin jamás haría lo que él se hacía así mismo.

- ¿Estás seguro? -Jimin se acercó más a él, mirándole aún más preocupado. Taehyung sabía el porqué, sólo quería que no fuera cierto, pero era momento de aceptarlo, porque estaba seguro que si no fuera en ese momento entonces nunca lo haría-, ¿Quién destrozó tu vida hace años? Tú lo sabes, tú sabes quien los mando.

Taehyung quería volver a llorar. A llorar de tristeza, de rabia y mucha impotencia por el mundo entero, por todas las personas podridas en el mundo. No sabía si era lástima u odio, o tal vez una mezcla de lo mismo, sumándole un profundo cansancio.

- Entonces... fue él, ¿No? -Taehyung sonrió con amargura, pensando que en realidad la vida sólo era un mal chiste que te destrozaba el corazón-. Él volvió para vengarse de mí.

...

Hoseok salió de la sala de declaración que tenía la policía, terminando de decir todo lo que sabía y caminando con cuidado con una muleta para no poner peso en su pierna. Él les contó como esos hombres habían golpeado a Taehyung y a ellos, el como Hoseok le disparó en el hombro al hombre que se llamaba Choi cuando iba a apuñalar a Soonshim (en vez de eso, solo alcanzo a hacerle un tajo en la nariz), el como Namjoon y Jin se encargaron de amarrar sus cuerpos con sábanas y cuerdas gruesas -que tenía Namjoon en su camioneta- para que no escaparan.

Eran hombres fuertes y en ningún momento dijeron algo, incluso cuando Jin los amenazó con una de las pistolas y les dijo << les meteré esto en el culo si no hablan >>. Hoseok sabía que lo haría, si no fuera porque la policía ya había llegado.   Namjoon les sacó el celular y vio las fotos que tenían de Taehyung, enviadas a un número desconocido.

Para Hoseok, lo peor no fue que Soonshim recibiera un tajo en la nariz o él disparándole a un hombre, lo peor fue cuando por fin pudo ver el estado de Taehyung. Tenía el rostro hinchado por los golpes, respiraba despacio y la sangre empezaba a brotar de su cabeza haciendo un charco de sangre en la alfombra. Pensó que se iba a morir y jamás en su vida había sentido tanto miedo como en ese instante, ni siquiera se comparaba al fuerte dolor en su pierna. La idea de perder a Taehyung le dolió tanto que, si no fuera por el conocimiento de Namjoon sobre las heridas, de seguro hubiera perdido la cabeza por el pánico.

A pesar de que ambos hombres estuvieran vigilados y encerrados, seguía teniendo un mal presentimiento corroerle el cuerpo. Se quedó toda la noche cuidando de Taehyung (tuvo que darle lástima a las enfermeras para hacerlo) pero aun sentía la necesidad angustiante de estar al lado de él para tranquilizarse. Lo único que lo ayudaba un poco era el hecho de que tenía a Soonshim esperándole a fuera, junto a Namjoon quien le acariciaba el lomo y se detuvo al momento de verle, porque Soonshim corrió hacia él tirando de la correa. Estuvo a punto de tambalearse cuando Soonshim llego a su lado, pero contrario al salto que esperaba, ella sólo le lamió la mano y movió la cola con alegría. Era una perra inteligente. Namjoon le palmeó el hombro y paso la mano por su espalda para ayudarle a caminar más rápido por el pasillo hacia la salida.

- ¿Ya está?, ¿Qué dijeron?

- Van a investigar el número de la persona a la que le enviaron las fotos, aún no logran sacarle gran cosa a esos sujetos, dijeron que iban a darles una larga condena si no ayudaban -dijo Hoseok con desprecio mirando sus pies para no tropezarse con algo, apoyándose en el hombro de Namjoon-, por mí que se queden siempre en la cárcel. Es lo mínimo que se merecen esos bastardos.

- Aún no entiendo qué querían, podrían haberse llevado todo lo que quisieran, pero sólo golpearon a Taehyung hasta dejarlo inconsciente -dijo Namjoon con intriga y desagrado, volviéndose a mirarle-, Hoseok, sé honesto, sabes que yo sé más de cosas ilegales que todos los que conocemos y no diré nada, así que dime, ¿Taehyung-sii hizo algo malo?

- Claro que no -negó Hoseok haciendo una mueca dolida. El único que hizo algo mal fue el maldito ex esposo de la hermana de su chico, porque Hoseok estaba seguro que había sido él el culpable de todo y en ese momento se encontraba detestándolo con todas sus fuerzas-. Es algo difícil de explicar, pero Taehyung no hizo algo para merecer esto. Él sólo está sufriendo por los errores de alguien más.

- Se escucha realmente complicado, ¿Qué harás ahora?, ¿Quieres que te lleve al hospital?

- Sí, quiero ver a mi Taehyungie... -musito Hoseok, haciendo un puchero mientras el pecho se le contraía. Pensar en su chico lastimado hacía que le doliera horriblemente el corazón-. ¿Sabes, Namjoon? No quiero ser cursi... pero ahora siento que me falta el aire si no está cerca de mí, sólo puedo pensar en los segundos que faltan para llegar al maldito hospital y desear que esté despierto ya... -luego dirigió la vista hacia el reloj en la muñeca de Namjoon- A lo que sería una hora si sigo caminando como Yoongi hyung.

- Tranquilo, por lo menos llegaremos sanos y salvos... -lo tranquilizó con un deje de diversión, ayudándolo a bajar dos escalones que daban hacia los ascensores- Y con respecto a lo otro, eso es normal, ¿No? Cuando la persona que quieres está lastimada, es obvio que quieras  vigilar su culo todo el tiempo. Lo que en ti no sería raro, ya vigilabas su culo antes, si lo haces más a menudo, es una suerte que te convirtieras en su novio, sino terminaría por demandarte.

- Ventajas del noviazgo, ¿No? -dijo Hoseok alzando las cejas, satisfecho con oír las palabras de su amigo, porque realmente había estado detrás de Taehyung por tanto tiempo que ser su novio ahora le hacía increíblemente feliz. Caminaron hacia los ascensores y Namjoon apretó el botón, esperando a que se abrieran las puertas. Soonshim se sentó a su lado, alzando la cabeza hacia ellos, como si estuviera atenta a su conversación-. ¿Y qué hay de tú y Jin hyung? Han estado muy juntos últimamente, si no fueras un pervertido pensaría que...

 - Antes de que digas algo tonto, tengo que decirte que SeokJin y yo estamos saliendo -le interrumpió Namjoon, con una sonrisa risueña y mirándole devuelta. Hoseok no se lo esperaba-, ¿Sorpresa?

- Oh, vaya, te refieres a, bueno... ¿Saliendo... como dos chicos besándose y esas cosas?, ¿Como Taehyung y yo? -Namjoon asintió, arrastrando a Hoseok que seguía un poco desconcertado dentro del ascensor cuando se abrieron las puertas. Su amigo siempre había salido con chicas y aunque nunca hablaron sobre la sexualidad de cada uno, era bastante obvio que no era homosexual. Namjoon apretó el botón del primer piso del ascensor y las puertas se cerraron detrás de Soonshim, quien se puso a raspar las puertas cerradas, así que la atrajo hacia él y empezó acariciarle el lomo para que se tranquilizara-, ¿O dos chicos yendo por una bebida...?

- Sé que me estás tratando de decir -río su amigo. Hoseok se soltó de su agarre y se apoyo en la pared del ascensor, observando sorprendido a un Namjoon sonrojado y tímido frente a él. No era que nunca lo haya visto así de tímido, sino que nunca lo había visto así por un chico en vez de una tierna chica. Namjoon tenía debilidad por las chicas tiernas y no por chicos igual de altos que él-. Sé que SeokJin no calza conmigo, él es como una canción de Eric Clapton y yo como una canción de 50 Cent, pero creo que esa es la razón del porqué me encanta tanto. Es por eso que sé lo que sientes, cuando vi a Jin siendo golpeado, juro que quise asesinar a ese tipo por hacerle eso -Hoseok vio como sus puños se cerraban y uno de ellos golpeaba la pared del ascensor con coraje, provocando un salto a Soonshim y a él, que paso desapercibido para su amigo, que arrugaba la frente y no dejaba de ver un punto invisible frente a él-. En ese momento, en esa milésima de segundo, pensé en lo miserable que se volvería mi vida si SeokJin no estuviera en ella, porque antes de conocerlo mi vida era normal, hacía cosas ilegales y vivía mi día a día sin preocuparme, creí que era feliz así pero si lo pierdo -Namjoon le dirigió la vista, más serio que nunca-, ¿Qué me queda? Una vida sin ese chico es una vida miserable. 

- Así que estás tan perdido como yo -sonrió Hoseok comprensivamente hacia él, para luego dirigirse hacia Soonshim-: ¿Quién crees que está peor, este idiota o yo?

Soonshim ladró hacia él, con la lengua hacia fuera colgada hacia un lado.

- ¿Yo?, ¿En serio?

Soonshim volvió a ladrar moviendo la cabeza afirmativamente, meneando el rabo como si esperara una recompensa. Namjoon se largo a reír y Hoseok resoplo, volviendo acariciar el lomo de la canina.

Ambos llegaron al primer piso y salieron hacia el pasillo, encontrándose y casi chocando de frente con la familia de Taehyung. Ambos se quedaron mirando a los cuatro par de ojos que le miraban de vuelta, sin saber qué decir. Hoseok pensó que se los encontraría en el hospital y no ahí, ¿Qué tendrían ellos que declarar exactamente? La última vez que los vio fue en la noche de ayer, no había querido llamarlos para no preocuparles pero Jin lo regañó diciéndole << No puedes tener a Taehyung para ti solo y menos podrás pagar las dos cuentas del hospital, no seas idiota >> y al final tuvo que hacerlo. Quiso preguntarles sobre ese sujeto, pero todos se veían tan mal que no pudo hacer nada más que decirles que él cuidaría de Taehyung porque ellos no podían quedarse. 

- Hola, Hobi-ssi -le saludó la madre de Taehyung, sonriendo incómoda.

- Hola, señora Kim -dijo Hoseok inquieto, dirigiéndose a ella luego de que Namjoon volviera a saludarles-, ¿Fueron a ver a Taehyung?

- Sí, sí -dijo con rapidez, como si quisiera deshacerse de él y no quisiera parecer grosera-, está despierto y se quedó con Jiminnie, no te preocupes.

- Bueno, yo voy para el hospital ahora -dijo Hoseok, ignorando las miradas incómodas o pasando de ellas-, ¿Saben cómo está la abuela Kim? No he podido ir a verla, no me contestó el celular anoche y debe estar muy preocupada por Taehyung, pero ahora iré a ver cómo está.

- Está bien, sólo un poco cansada -sonrió ella con debilidad y cuando creyó que se iba a ir para dejarlo solo, suspiró y poso una mano en su brazo, acercándose a él-, ya que vas a ver a la abuela, por favor, no le digas a Taehyung, pero hemos decidido que el tratamiento que seguía ya no lo seguirá más.

Hoseok se quedó paralizado procesando aquel aviso que le heló la sangre. Si la abuela de Taehyung no seguía con ese tratamiento, era un hecho que ya no le quedarían mas días de vida. Y eso, en ese momento, le hizo sentir como si le echaran un balde de agua fría.

- ¿Cómo? -musito incrédulo- Perdón, pero no pueden hacer eso, menos a escondidas de Taehyung.

- Sé que aprecias a la abuela, Hobi-ssi -suspiro la mujer, con una expresión totalmente hastiada-, pero es... una decisión familiar que no creo que puedas comprender ahora. Ella está sufriendo y...

- Hoseok-ssi, no tenemos tiempo para esto -intervino el padre de Taehyung, pasando una mano por la espalda de su esposa. Tenía una mirada decisiva y afable-. Nos están esperando.

- ¿Por qué? -enarcó una ceja, sintiéndose tremendamente ofendido-. Lo siento, pero no creo que no pueda decirle a Taehyung, él tiene derecho a saber qué están haciendo con su abuela. Lo sabrá de todas formas cuando le den el alta, así que...

- Sólo no se lo digas -le interrumpió esta vez Jinjae, poniéndose frente a él con esa mirada seria que le caracterizaba-, déjanos a nosotros decírselo. 

Hoseok los miró, a cada uno, y se dio cuenta que en sus ojos sólo había tristeza. Por eso terminó asintiendo con la cabeza, volviendo apoyarse en el hombro de Namjoon, quien había estado mirando todo expectante e incómodo.

- No diré nada, pero sólo por hoy -musito mirándoles de reojo, cabizbaja-. Nos vemos luego.

Le hizo una seña a Soonshim para que les siguiera y con Namjoon a su lado siguieron caminando hacia la salida. Hoseok vio los diez escalones y los cinco metros para llegar al auto y un gruñido se le escapó de la garganta.

- ¿Quieres que te lleve cargando como una princesa? -dijo Namjoon con naturalidad y Hoseok lo miró con mala cara, haciendo una mueca. A veces no sabía si su amigo bromeaba o decía la verdad.

-  No, déjalo, yo puedo. 

Pero antes de que bajara el primer escalón con ayuda del hombro de Namjoon y su muleta, la voz de la hermana de Taehyung se escuchó a sus espaldas. 

- ¡Hobi-ssi, espera! -le detuvo, sosteniendo su chaqueta por la espalda mientras Hoseok la miraba por encima del hombro. Traía un sobre en una mano y, sorprendiendo tanto a él como a Namjoon, le tendió el sobre y espero a que este lo tomara dudando y a punto de preguntar sobre el contenido-. Es una carta de la abuela para Tae, por favor, tú... tú sabrás cuando dársela.

- ¿Por qué no se la das tú? -Hoseok la miró extrañado, rectificando- De hecho, ¿Por qué no se lo da ella misma?

- La abuela Kim quería que tú se la dieras, dijo que Taehyung confía más en ti que en nosotros ahora -le sonrió con tristeza, para luego suspirar con pesadez-, así que... no quiero mentirte, a ella no le queda mucho tiempo, esta carta es una despedida para él.

Hoseok volvió a quedarse inmovilizado, observando incrédulo a la chica que no dejaba de tocarse el cabello de una forma nerviosa y tenía los ojos brillosos.

- ¿Me estás diciendo que le de una carta de despedida de su abuela a Taehyung luego de que ella mu... se vaya? -sacudió la cabeza, como queriendo despejarse del manojo de pensamientos en su cabeza sobrevolando como si fueran abejas- Eso es... cruel, no los entiendo, ella...

- La abuela Kim quiso esto, ¡No nosotros! -exclamó ella exaltada, con ojos dolidos- Ella quiso dejar el tratamiento.

- Esto es demasiado -alzo la voz, sintiéndose repentinamente enojado no con ella, sino con todo el mundo que hería al chico que amaba-, ella no puede hacerle eso.

- Ella no sabe lo que está pasando, no queremos empeorar su estado. Sólo dijo que es el momento, que con o sin tratamiento se irá de todas formas y yo... solo quiero pedirte que estés al lado de Taehyung cuando pase.

- ¿Y ustedes?, ¿Por qué no están a su lado?

De repente, ambos vieron como aparecía Jinjae, diciéndole con la mirada a su hermana que tenía que irse. Ella se volvió hacía él y se acercó mucho más, con la mirada llena de tristeza fija en sus ojos.

- Créeme que si tuviera el tiempo, te lo diría. Estar al lado de Taehyung es lo único que queremos, sólo nos hace falta un poco más de tiempo -ella se detuvo solo para inhalar y exhalar profundamente, con la voz temblorosa-, en algún momento sabrás lo que pasa, sólo espera un poco.

Hoseok quiso patear, golpear, insultar algo, pero lo único que hizo fue asentir, guardarse el sobre en el bolsillo del pantalón y bajar las escaleras con ayuda de Namjoon y Soonshim, que los esperaba en el último peldaño. 

Cuando llegaron a la camioneta, estaba Jin esperándolos mientras comía un sándwich con la vista hacia el cielo para luego posarla en Namjoon, luego en él, Soonshim y otra vez en Namjoon. Vio como ambos se sonreían, la forma en la que se miraban y estuvo seguro que lo que sentían era real y verdadero. Se preguntó cómo reaccionaría Taehyung ante lo que él sabía, y supo que nada bien. Habían tantas opciones que decidió no pensar en ellas.

Él sólo quería estar a su lado y nada más.

...

Cuando Hoseok llegó al hospital, lo primero que hizo fue dejar a Soonshim con Namjoon y Jin en el auto. Sólo permitían que una persona entrase a verle, por lo que se tardó bastante en entrar solo con la muleta. Se sentía ansioso, quería ver a Taehyung, abrazarlo, besar todo su rostro y decirle que lo amaba muchísimo, que tal como había dicho su mejor amigo << una vida sin ese chico sería una vida miserable >>.

Hoseok nunca se había sentido miserable luego de que su madre se fue, tal vez lo sintió por algunas semanas, pero lo había aceptado. La muerte no es lo peor del mundo. Lo peor del mundo es cuando dejas de querer a alguien, es cuando te alejas de la persona que quieres, es cuando ya no quieres a nadie más, ni siquiera a sí mismo. Eso es lo más triste.

Lo más triste para Hoseok en ese momento, fue que se sintió miserable.

Porque cuando llegó a la recepción donde estaba la enfermera para entrar a ver a Taehyung, ella dijo algo que en ningún momento se le pasó por la cabeza que podrían decirle.

- El joven Kim Taehyung fue dado de alta hace una hora y media, se suponía que estaría aquí más días pero luego de una revisión rápida insistió en irse y no pudimos hacer que se quedara. Exigió el alta y se fue, dijo que si venía cualquiera de su familia les dijera que no se preocuparan, que él estaría bien y...

Hoseok ya no quería escuchar. No entendía nada de lo que pasaba.

Jadeo y gruñó entre dientes por el dolor en su pierna cuando camino dando zancadas hacia la cama donde estaría Taehyung, sintiéndose tan miserable cuando no encontró nada más que sábanas desoladoramente limpias. Salió del hospital sintiéndose mareado, a punto de tener un ataque de pánico y angustia que lo ahogaba.

Lo llamó a su celular diez veces, con su alma balanceándose en un hilo delgado y sólo pudo evitar caer cuando por fin Taehyung contestó.

- ¡¿Dónde estás?! -gritó sin tapujos, a punto de echarse a llorar.

Hubo un silencio, luego la dulce y triste voz de Taehyung.

- Lo siento por no esperarte.

- No importa eso, no importa, sólo dime dónde estás -suplicó.

- No te puedo decir, Jung Hose...

- ¡No digas mi nombre completo! -le interrumpió. Tuvo que morderse el labio inferior para que no le temblara-, ¡No lo hagas! Dime dónde estás, por favor.

- Tranquilo, estoy bien. Estoy bien, estoy vivo y... estoy bien. No te asustes, Hobi hyung.

- ¿Sabes el puto susto que me he pegado al no encontrarte aquí?

El miedo se había vuelto rabia de repente, Hoseok se sentía a punto de explotar si no lo veía, si no veía que estaba bien con sus propios ojos. Se sentía tan enfurecido que terminó por tirar la muleta al piso, apoyando la espalda en la pared del hospital y deslizándose por esta hasta sentarse en el piso.

- Lo sé, lo siento mucho, lo siento mucho -repetía con rapidez, con un tono de voz cada vez más grave y tembloroso, como si estuviera llorando-, ¿Sabes que eres muy especial para mí, verdad? Eres muy importante, eres...

- Cállate, ¿Qué estás diciendo? No digas esas cosas con ese tono de voz, no me gusta, me hace sentir como...

Se hizo el silencio otra vez, un silencio que hizo que el alma saliera de su cuerpo y se le cayera a los pies.

- ... me hace sentir como si te estuvieras despidiendo de mí. Pero eso no es posible, ¿Verdad? Taehyung, dime dónde estás, no me gusta esta broma.

El silencio crecía hasta un punto en donde Hoseok pensaba que estaba solo y no era tan doloroso. Se volvió doloroso cuando Taehyung volvió a hablar, clavando sus palabras como una daga en todas esas partes que le hacían sentir vivo. 

- No es una broma, lo siento -su voz era tan baja, tan débil, que tuvo que dejar de respirar para escucharle-. Lo siento, pero quiero que nos demos un tiempo, un tiempo... alejados del otro.

<< Darnos un tiempo >> esa frase la escuchó tantas veces de varias personas, nunca dirigidas a él. Jamás a él y siempre sonaba como algo tan lejano, algo imposible que alguien pudiera decirle. Para él, era terminar la relación o nada. Tal vez por eso se alivió, pero de todas formas fue igual de doloroso a que le hubiera dicho un << Terminamos >>.

- ¿Por qué... estás haciéndome... esto? 

Hoseok estaba llorando, incluso desde antes de darse cuenta que sus mejillas estaban completamente húmedas. Se preguntaba que había hecho mal, ¿Era porque no había vuelto un poco antes?

No hallaba ninguna respuesta que calmara esa tristeza que le inundaba los ojos, pero sí fueron suficiente las palabras que le dijo Taehyung en un hilo de voz.

- Porque te odio.

Hoseok dejo de llorar, las lágrimas se esfumaron y entonces supo porqué lo hacía y pensó que era estúpido, que era tan estúpido que una risa desdeñosa se le escapó de los labios.

- Yo también te odio -musito y se detuvo unos segundos, sin importar que Taehyung le haya colgado o no, porque había silencio por todas partes, hasta en él mismo-. Te odio ahora como no tienes idea.

....

Taehyung veía a su abuela durmiendo en la cama del hospital, sentado a un lado de la cama y sosteniendo su mano entre las suyas. Le gustaban las manos de su abuela, pálidas, arrugadas pero suaves y con ese olor a crema de frutilla, le encantaba cuando ella le acariciaba el rostro con sus manos o todo lo que hiciera con ellas, como su comida favorita o tejer una bufanda para él. La quería tanto que no pudo evitar picarle la mejilla para que despertara de ese sueño que la tragaba y no tenía intención de escupir. Dio un salto de felicidad en el asiento cuando sus ojos se posaron en él y sonrió como siempre lo hacía, porque ella era lo único que necesitaba en esos momentos.

- ¡Hola, bella durmiente! -exclamó emocionado, bajando la voz con rapidez aunque las demás ancianas estaban en lo suyo, algunas hablando con parientes y otras durmiendo-. Estás radiante hoy.

- Cada día te vuelves más mentiroso -río la abuela, más parecido a un bufido cansado mientras llevaba la mano a la mejilla de Taehyung, quien se arrimó a ella y le acariciaba con el pulgar-, pero gracias por tu intento de animar a esta vieja. Eres un nieto adorable.

 - Acepta que soy el mejor nieto del mundo -instó Taehyung, bromeando con ella. La abuela Kim sonrió con dulzura y asintió con lentitud.

- Eres el mejor nieto del mundo.

- No -negó desconfiado-, mi Abu no diría eso, voy a llamar a la enfermera para saber que droga te están dando.

- ¡Oye, no seas grosero! -refunfuño ella, haciendo reír a Taehyung-, ¿Por qué tienes puesto ese gorro tan feo? Pareces un sultán.

- Que graciosa, Abu -dijo Taehyung poniendo los ojos en blanco, tratando de no tocar demasiado ese gorro feo rojo de lana que le había prestado Jimin para ocultar sus vendas y el maquillaje en su rostro para ocultar los moretones-. ¿Sabes? Mañana es el concurso del que te hablé.

- Oh, verdad, ¿Eras tú el que bailabas o tu novio?

- Eh, bu...bueno -tartamudeo, tratando de no sonar tan dolido ni nervioso-, él... él era quien bailaba.

- ¡Verdad! -exclamó sonriente, volviendo a bajar la mano de su rostro y apretando la suya. A Taehyung le sorprendió un poco escuchar como le hablaba tan animada, como si estuviera haciendo un gran esfuerzo en poder hablar y sonreír a la vez -Tú cantarás, porque cantas hermoso, estoy tan orgullosa de ti. Serás un artista grandioso, ¿Puedes cantar algo para mí?

Taehyung sonrió y acercó su rostro mucho más al de ella.

- Sabes que por ti cantaría todas las canciones del mundo.

¿Puedo recostarme a tu lado, a tu lado?
¿Y asegurarme que estás bien?
Cuidaré de ti
Y no quiero estar aquí si no puedo estar contigo esta noche.

Taehyung quería llorar, pero no lo hacía porque le hacía feliz ver a su abuela tan animada, tarareando esa misma canción en voz baja, con energía y como si todo fuera como antes. Llego un momento en donde los movimientos de ella se hacían más lentos, solo pudiendo darse cuenta que seguía oyéndole cuando le apretaba la mano con los ojos cerrados. Tenía el rostro tan relajado que él también se relajó. Lo único que podía escuchar era la respiración de su abuela y su propia voz por encima de todo el ruido del mundo.

Estoy llegando a ti.
¿Puedes escuchar mi llamada?, ¿Quién puede decir que no me oyes?
Este dolor por el que he pasado...
Te extraño, te extraño como loco. 

Taehyung se preguntó mil veces si lo que estaba haciendo estaba bien, si estaba bien irse a esconder a la casa de Yugyeom, el novio de Jungkook, porque sabía que sería el único lugar donde Hoseok nunca lo buscaría. Sólo tenía pensado como una solución esconderse y quedarse el tiempo suficiente como para dejar de sentir y empezar a pensar. Eran tanto los sentimientos contradictorios en su cuerpo que no podía pensar con claridad. Solo quería un lugar lejos de todos, donde nadie saliera herido por culpa de él.

En especial, que Jung Hoseok no fuera herido por su culpa.

Aunque en el rincón de sus pensamientos, de esa conciencia cruel, sabía que él mismo lo había lastimado. Y que seguiría haciéndolo de todas formas, por más que se empeñara en evitarlo. A veces no se tenía la culpa de lastimar a alguien, solo era un efecto colateral de los momentos difíciles. 

Cuando terminó de cantar y comprobó que su abuela dormía profundamente, se dio el lujo de ser sincero. De no mentir.

- Ya no sé qué hacer, abuela... ya no sé qué hacer.

...

ESTE CAPÍTULO ME QUEDO RE SAD, y los próximos se vendrán también sad, así que preparen pañuelos y...

DEMONIOS YA PASÓ EL CUMPLEAÑOS DE TAEHYUNG XDD iba a publicar el capítulo antes de las doce pero no alcancé, de todas formas...

El bebé está tan grande <3 TT ¿Y vieron el vídeo que publicó Hobi? Ay, si se AMAAAAAAN ASLKDJAKSJD 

https://youtu.be/i80FcsYxVDE

Miren a ese bebé tan avergonzado <3

(Lamento haberlas puesto triste con este capítulo y feliz navidad atrasada <3)

lxs amo <3