El fin de curso llego antes de lo anticipado, se termino sin conflictos y las reuniones de los caballeros finalizadas. Ya iban en el tren, en un compartimento descansando Ara, Narcisse, Abraxas y Artemisa discutían sobre banalidades.

— Entonces, ¿la boda cuando será? — hace la pregunta del millón Artemisa.

Ara y Abraxas se comprometieron durante las vacaciones de invierno, pero realmente no era algo que hablasen mucho ya que es un matrimonio arreglado por parte de ambos padres y una unión para seguir con las tradiciones puras. Sin embargo, para Artemisa, pareciera que a Ara realmente le gusta el heredero Malfoy, pero sabía que a Narcisse le gustaba la rubia, un secreto que guardaría por qué no es algo que se fuese a divulgar, ni por el mismo Ragnor.

— Según los preparativos de la matriarca Malfoy, serán el próximo año, por estas fechas, quiere que nos esperemos a que ambos salgamos de Hogwarts para poder yo dedicarme a tiempo completo en el hogar — habla Ara.

— Eso si mi padre está de acuerdo — interviene el primogénito Malfoy

— Que lo está — replica la rubia del grupo — No se por que lo niegas Abraxas, ya casi estamos por casarnos —

Y Artemisa no evita mirar de reojo a Narcisse, dejando a los comprometidos discutir solos; desde que empezaron el tema de la boda, el castaño ha estado mirando por la ventana del vagón con una seriedad y tristeza mezclados, Isa, sin pensarlo, coloca su mano alrededor del brazo del hombre y le da un apretón, sacándolo de su trance y que voltease a verla.

Ella lo entendía.

No se podía sanar de la noche a la mañana un corazón roto. Más si la persona de la que estás enamorada es un amigo.

Son interrumpidos por la entrada de Riddle, a lo que Artemisa, feliz, retira la mano del brazo del chico y se hace a un lado acercándose más a Narcisse para dejarle un espacio a Tom. El susodicho toma el lugar e inmediatamente toma la mano de la castaña a lo que ella se pega ahora a él.

Hasta donde sabía la chica castaña es que el plan de vacacionar en Suecia se cambio, debido a que Tom ya no haría más horrocruxes, por lo que buscar la diadema de Rowena ya no venía al caso en sus planes. Y con ello, Abraxas lo invitó a quedarse en este receso escolar en su hogar.

También lo hacía para aprovechar las fiestas que los señores Malfoy hacen en su mansión para usar esto como una presentación más abierta a la sociedad mágica de Inglaterra, más que las reuniones del profesor Slughorn.

Mientras Artemisa se quedaría con Narcisse, siendo recibida amablemente por los señores Ragnor, Cronos y Ailann, sabía que para esta época su abuelo Herácles ya había nacido y tal vez ya tenía algunos años, aunque el mayor de los hermanos Ragnor no hablaba mucho de él. En el resto del camino estuvieron discutiendo sobre cómo pasarían las vacaciones y poniéndose de acuerdo para verse algunos días antes de regresar a Hogwarts para el siguiente ciclo escolar. El último para ellos.

La castaña decidió recostar su cabeza en el hombro del azabache y cerrar los ojos; desde la confesión de Tom se han visto envueltos en otra fase de su relación, el azabache muestra su amor ahora con el contacto físico, la toma de la mano, la abraza, de vez en cuando la citaba en un rincón de la biblioteca o en la habituación que va y viene solo para discutir cosas sin sentido. A ella no le daba miedo los toques repentinos que mostraba el chico, pareciera que siempre estuvo hambriento por el contacto físico de alguien más, añorando algo, y sospechaba que fue ese amor de madre que le hizo falta. Criarse en un orfanato donde te traban de raro por unas habilidades que desconocías y luego llegar al colegio dando muestras de poder para que te metan, si te limitan a ciertas cosas aunque tengas una apariencia física de cien.

Con el arrullo de las voces de sus amigos y del tren andando, Artemisa durmió todo el camino hasta Londres, cuando fue despertada por unas caricias en su frente; somnolienta, abre los ojos lentamente para ver una mano y se mueve de donde estaba tan cómoda durmiendo observando a Tom.

— Tenemos que bajar, todos ya están en el andén con sus cosas — le dice Tom — Ragnor ya tiene tus maletas así como sus padres ya están aquí; yo tengo que retirarme con Malfoy —

— Uhm — es lo único que responde la chica.

Se levantan ambos, siendo primero el azabache, seguido por Artemisa pero ambos sujetados de la mano. Bajan del vagón y encuentra a su grupo de amigos con sus respectivos padres.

— Vaya — exclama una mujer pelirroja — Lucen muy bien juntos Tom, ¿es tu pareja? —

Tom sonríe ante el cumplido y aprieta más la mano de la chica.

— Asi es Señora Ragnor — responde el chico.

— Mamá — interrumpe Narcisse — Ella es Artemisa, la chica que se quedará con nosotros —

— Es un placer conocerles señores Ragnor — saluda la chica — Gracias por dejarme estar en su hogar —

— Llamame Ailann, es un placer conocer más amigos de mi queridisimo Narcisse — sonrie la mujer pelirroja — Son unos hijos más para mi —

Por lo que podría recordar Artemisa, Narcisse fue un primogenito muy deseado por parte de sus padres, y por ende la gran diferencia de edad entre su bisabuelo y Narcisse, pero despues del nacimiento de Zeus, dejaron de intentar tener hijos.

— Es un gusto conocerlos, pero debemos apurarnos — interrumpe el señor Ragnor — Dejamos a Zeus solo en la mansion con Hela, y es un problema, porque le esta inculcando tradiciones occidentales que no necesitamos — dice burlonamente.

Artemisa asiente y esta apunto de seguirlos, cuando recuerda que su mano todavía siendo sujetada por Riddle, con una mirada le dice a Narcisse que espere un poco y este asiente para luego seguir platicando con sus padres.

La castaña gira un poco sobre sus talones sin soltar la mano del chico solo para tenerlo de frente. Le gustaba mirarlo así, sentía que estaban en sintonía sin estar uno sobre otro; desde hace tiempo el contacto con el slytherin era cálido, y esperaba que nada cambiara. Poco a poco estaba cayendo por esos ojos castaños, olvidando que por ellos su futuro se destruyó. Y sin pensarlo, lo abraza, sorprendiendolo.

Pasa sus brazos sobre los hombres del chico, y siente las de él rodear sus cintura, asi que sin más acomoda su cabeza entre sus brazos y el cuello de Tom.

No quería admitirlo.

Tal vez ya estaba enamorada de él.

Y él tenía el poder de destruirla.

— Por favor — pide — Escribeme todas las semanas — susurra la chica — Probablemente la mansión Ragnor tenga conexión con la red floo de los Malfoy, aún asi preguntaré para que puedas visitar y —

Se ve interrumpida con los labios de Tom sobre los de ella. Artemisa podría derritirse en ese momento.

Ella realmente es de él.

Hola, mucho tiempo sin estar por aquí. Espero que hayan pasado unas lindas fiestas y feliz año nuevo.

Quise actualizar después de agosto, pero me vi muy interrumpida por motivos de mi universidad; noticia, ya me gradué, felicítenme (risas).

No puedo prometer que actualizaré pronto, pero he estado muy inspirada y probablemente pueda. Sin embrago, ya conseguí un trabajo (buuuh) y tengo que organizar mis tiempos.

Muchas gracias por darle amor a este fic que ha estado en toda mi etapa universitaria.