viii. hallelujah
Ese día lograron salir cuando Filch estaba revisando las habitaciones, salieron sin problemas cuando Tom le mintió diciendo que buscaban un ingrediente para el profesor Slughorn, sin embargo, Isa salió solo con un ingrediente en lugar de los dos, pero con una victoria agidulce.
Desde ese día, ninguno se ha atrevido a hablar o se encuentran y lo único que hacen es saludarse. El plan de Tom era pretender ser una persona leal a más no poder, y convencerla de ello, quería que ella comería de la palma de su mano como una mascota. Por supuesto, la chica ya había empezado a hacer su plan mucho antes que él.
Ambos Slytherin pasaron navidad encerrados en sus respectivas habitaciones. No salieron el día siguiente, uno por temor y la otra persona por tristeza. Era la primera navidad lejos de todo lo que Isa conocía, sus amigos y familia, incluso de su tiempo. Extrañaba las peleas de los mellizos por saber cuál era su regalo ya que siempre los envolvían el mismo color a propósito, o los gritos de la tía Selene al resto de los niños Ragnor e inclusive al cuarteto de plata y el trío de oro. Hasta se podía decir que extrañaba los molestosos de mereodadores segundotes de James, Fred y los gemelos Scamander. También a su amaba prima Arabella, con quien la molestaba debido a su extraño caso con la armotienta.
Extrañaba todo eso y más.
Aunque de pronto escuchó un sonido raro en su ventana, tal como si la estuviesen tocando. La melena castaña revoloteó cuando giró para ver que era, e inclinó la cabeza, curiosa, al ver que es una lechuza café con puntos acercándose al amarillo. Se levantó de su silla, haciendo mil ideas en su cabeza para saber de quien es ese animal; abre la ventana y la lechuza entra sin cuidado. Artemisa nota que tiene un hilo alrededor del cuello, cuidadosamente acerca su mano temiendo que la picoteé pero no hace nada y ella toma el pequeño papel entre sus manos. Extrañamente el búho se llama Hermes, lo cual le da risa a la chica del futuro por tremendo nombre. En los pies de la lechuza sigue colgando un paquete el cual toma y seguidamente va hacia uno de lo cajones de su mesa de noche, lo abre y saca algo de comida para su nuevo amigo.
Gira sobre sus talones y le ofrece la comida con un sonrisa asomándose, la lechuza la acepta y deposita el resto en el asiento de la silla. Al ver que el pequeño animal comía, decide contemplar el paquete que trajo consigo. Estaba en vuelto en un papel plateado llamativo pero opaco, tal vez por el estado del clima que tuvo que atravesar; se sentía pesado y era de forma rectangular, lo primero que pensó es en un libro.
Con un dolor en su alma, rompió del papel y observó los indicios de algo negro; cuando acabó, vio una caja y entonces sacó la tapa. Lo primero que ve es un diario algo desgastado, de cuero café con unas manchas, tal vez por lo usado, rodeado por un hilo grueso café claro que terminaba en un moño en la portada. Enseguida del libro, venía un frasco de tamaño considerable, este lo tomó entre sus dedos y lo gira para encontrarse con una etiqueta que alegraría todo su mes. Era roció de Luna, el ingrediente que no consiguió.
De inmediato supo quien había sido el creador de este regalo. Nada más y nada menos que Narcisse; la castaña solo quería llorar de la emoción, deposito el frasco cuidadosamente de donde lo sacó y decidió agarrar la libreta. Deshace el nudo y el hilo cae por los lados, Isa suspira sin saber porque tan de repente siente una opresión en su pecho. Abre el libro y lo primero qué hay es una nota con la caligrafía casi perfecta del hombre Ragnor.
Querida Hecate,
Este libro me fue transferido a mí después de la renovación del árbol genealógico que mi padre hizo. No sé si en el futuro sea así, pero a mi encanto las "actualizaciones". Bueno, me estoy yendo de la idea principal de esta carta.
Esta libreta contiene pasajes de la vidas pasadas de los ancestros más destacables de la historia de los Ragnor. Pienso qué tal vez puedas encontrar el hecho de porque eres heredera de Slytherin, o cosas curiosas para llegar hasta tu punto en tu futuro.
Espero que te sirva de algo, es valioso para nuestra familia.
Con cariño, Narcisse.
Pd: Felices fiestas y no mates a Riddle, todavía.
Pd2: Encontré en la oficina de mi madre el rocio de Luna, me lo regalo, y sé que tú lo necesitas más que yo.
La castaña medio sonrió con algunas lágrimas queriendo escapar, hace mucho tiempo, técnicamente desde hace tres, que no tenia una regalo así de significativo. La guerra había comenzado y les había arrebatado todo signo de felicidad en sus vidas. Quisiera haberle comprado algo, pero en eso, la chica recuerda que trae algo en su bolsa sin fin.
Salta de su cama, dejando ahí su primer regalo y va hacía el baúl en busca del dichoso bolso. Sacas algunas prendas del uniforme, pergaminos y plumas hasta dar con el bolso. Desde que hizo el pacto con el azabache, decidió esconderlo y guardar en el su gira tiempo, y ahora buscaba otro collar, un tanto diferente. Metió su mano al bolso, sus dedos rozando objetos de cualquier tamaño y textura hasta que dio con un dije que conocía a la perfección.
Lo sacó y sonrió con tristeza, era un largo collar de plata, y su dije es lo que se le llama guardapelo. Esta era de sus bisabuelo, Zeus, el hermano menor de Narcisse; y dentro del medallón contiene una imagen familiar, su tatarabuelo Cronos y Rea eran de pie y sentados están una imagen adulta de Narcisse y Zeus. Isa sabía que este regalo le encantará. Hace algo sencillo con un pedazo de tela e hilos para crear una bolsa donde guarda el medallón y se lo entrega a la lechuza de su amigo.
Cuando la lechuza se va, se queda observando al diario somnolienta pero como si alguien le hubiera dado un pelotazo, se levanta de la silla y camina de nuevo a su baúl. Vuelve a sacar algunas prendas, zapatos y libros, dando con el indicado. Sonreía tanto que daba miedo de verla, miraba al libro de pasta dura y cubierto de negro como si es lo único que existiera en este mundo; siendo seguidora de las tres r, saca el frasco de la caja y pone el libro ahí, agradeciendo mentalmente a un dios de que fueran de las mismas medidas. Transforma una calceta en un moño plateado, y lo coloca encima de la caja negra, contenta con su combinación de colores.
Toma el presente cuidadosamente entre sus manos, sale de su habitación y baja a la sala común rezando a los dioses que Riddle no esté ahí. Ya estaba en el último escalón cuando se asoma y ve que está completamente desolado, suelta el aire que tenía contenido; se acerca al pequeño árbol de navidad que tienen, depositando el tagalo ahí y nota que se le olvidó algo importante. Agarra un pergamino qué hay encima de una mesa, corta una parte y toma la pluma para escribir, lo pone enseguida del moño.
Empezando, por fin, lo que su destino le tiene preparado.
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top