— ¿Han visto a Will?.

Blakk aun en su meca preguntó al grupo de padres que esperaban fuera de la escuela el timbre de salida. Sabía de sobra que Will se hizo amigo de la mayoría de los padres, casi siempre esperan junto a ellos a sus hijos y siempre entabla una conversación, a diferencia de él que siempre mantiene su distancia.

El grupo se miró entre sí por un momento antes de negar o alzar los hombros. Blakk frunció las cejas y los labios, eso es nuevo, Will nunca llega tarde a la hora de recoger a los niños, no importa el tipo de misión que tenga ese día.

— ¿Estan seguros?, ¿no lo han visto por aquí o lo han visto entrar a la escuela?.

— Yo salgo temprano de mi trabajo, pero igual vengo mucho antes que todos los padres y espero la hora de salida. —la pelirroja de cabello suelto con traje de enfermera se acercó con una meca dientes de sable:— Te lo aseguro, Will no ha venido.

Blakk llevó una mano a su mentón pensativo, pero antes de idear alguna situación por la que el Shane adulto no llegará el timbre de la escuela resonó por toda el área. Casi al instante las puertas fueron abiertas por el anfibianoide de siempre y los niños entre gritos salieron disparados, un grupo se acercó a los padres correteando, entre los primeros llegaron Eli y Tad.

Los niños divisaron a Blakk por estar a un lado de los padres, pero se dieron cuenta de inmediato de la ausencia del otro.

— ¿Donde está papá Will?. —el primero en preguntar fue Tad que miro alrededor.

— Se le hizo tarde en su misión, no se preocupen.

Por suerte los niños no hicieron más preguntas. Una breve despedida de quienes son los amigos tanto de Eli como los de Tad para marcharse en dirección al refugio. La verdad es que tampoco es para darle tantas vueltas al asunto, seguramente es tal cual había dicho, se le hizo tarde al Shane en la misión de hoy, hay una primera vez para todo, eso incluye no llegar a tiempo para recoger a los niños.

Pero eso no evita sentirse preocupado, pese a no querer sentirse así. Trato de no darle tantas vueltas al asunto, no mientras estaba en la meca con ambos niños, debía concentrarse en el camino.

— Eli.. ¿no crees que deberías pensarlo mejor?.

— ¡¡No, quiero ser un gran lanzador cuando sea grande!!.

Blakk solo pudo negar con diversión ante el entusiasmo de Eli. Ahora estaban en la mesa del comedor cenando con ambos niños, tenía que distraerlos de la ausencia de Will, por lo que un par de preguntas estarían bien.

— Bueno.. ¿Y qué hay de ti Tad?. —miro expectante al pelimarron, el niño estaba más concentrado en comerse su cena hasta que lo llamo:— ¿Que quieres ser cuando seas tan grande como yo?.

— .. La verdad es que no se aun papá. —dijo con pena mientras dejaba un momento la cuchara:— Me gustan muchas cosas. Me gustaría ser ingeniera para construir cosas, me gustaría ser un gran empresario como tu papa, pero también me gustaría ser un gran lanzador como papá Will, y veterinario porque me gustan los animales, y también..

— Ya ya, entiendo. —parando la frustración del niño:— Piensas que debes elegir una, pero te aviso desde ahora Tad, puedes hacer todo eso.

— ¡¿Tu crees papá?!.

— Tómame de ejemplo. Soy un empresario exitoso, bioquímico, ingeniero, y un gran lanzador como Will... Incluso hasta mejor. —eso último lo dijo con el pecho alto y con orgullo.

Los niños se miraron incrédulos ante lo último para después mirarlo con dudas.

— ¿En serio papá?. —pregunto Tad.

— ¿Eres un lanzador?. Jamás te vi usando la lanzadora como papá Will.

Blakk quedó indignado ante las miradas y palabras de los niños, ¿que sí es lanzador?, claro que lo es, le han visto con su lanzadora encima. Se levantó de golpe y señaló a ambos niños.

— ¡¡Terminen su cena para que hagan su tarea, si no la terminan antes de las 8 no verán Tv!!.

Ante la advertencia los niños se tragaron la poca comida para salir corriendo escaleras arriba a su habitación compartida. Blakk llevó ambas manos a su cintura y dejó salir un gruñido, tomando los platos sucios para dirigirse a la cocina.

— Que falta de respeto. —dijo para sí mismo mientras rodeaba la cocina para ir al lavadero:— Es culpa tuya Will, los malcría demasiado.

Al mencionar al pelinegro miro la hora y vio que ya se estaba haciendo tarde y aún no sabe sobre él. Al terminar de lavar los platos y secarse las manos sacó su celular para marcar al Shane, pero después de 4 intentos este no respondía a la llamada.

Ahora si estaba preocupado por lo que pudo pasar, no ha tenido noticias de Will desde que fue a esa misión en la zona montañosa de la caverna Lomo Astillado para ayudar y cuidar de bandidos a una carga de Fandangos en una pequeña zona poblada de la caverna desierta. Una misión fácil para Will, ya sabía de sobra que solo eran ladrones de poca monta que querrían un poco de las preciadas Fandango para venderlas.

Trato de buscarle alguna razón coherente a la ausencia del Shane, pero al no tener contacto con él o saber donde estaba, simplemente era sublime. Antes de entrar a la sala echó un vistazo para asegurarse que los niños estaban arriba, sentándose en el sofá marco unas veces más sin tener respuestas.

Bufo molesto mientras dejaba de lado el celular, algo no está bien, pero no puede hacer nada con los niños con el, asi que de mala gana le dio una media hora más al Shane para que aparezca, sino, tendrá que llevar a los niños a la fortaleza con Maurice y con sus guardias salir a buscar a Will.

— ¿Podemos ver esta papa?.

— Eli, ¿cuantas veces te he dicho que no veas películas de terror?. —arrebatando el control de las manos:— Luego tendrás pesadillas y no dejarás dormir ni a tu hermano ni a nosotros.

— ¡Pero ya soy grande para verlas!.

— Tienes 8 años. —el Shane menor se cruzó de brazos con un puchero y le dio la espalda.

Tad que estaba del otro lado de Blakk río a lo bajo:— Papá, tengo hambre.

— ¡¿Pero acabas de cenar?!.

— Es que me dio apetito.

— ¡A mí también!. —recalco Eli alzándose junto a Blakk:— ¿Podemos comer galletas con leche?.

— ¡No van a comer nada, acaban de cenar!.

— Pero papá, tengo hambre. —Tad inflo las mejillas y miró con tristeza.

— Si papá, tenemos hambre. —Eli hizo lo mismo.

Por favor.

Blakk sonrió de par en par con maldad:— Pueden hacer sus ojitos de cachorro y sus súplicas todo lo que quieran, pero yo no caigo tan fácil como Will en sus engaños. —levantándose del sofá para ir a uno de los estantes más altos, abriendo una saco una pequeña bolsa con galletas, tomando un par para volver a meter la bolsa y cerrar la gaveta:— Soy inmune. —dijo antes de comerse las galletas.

Como era de esperar ambos niños chillaron por el descaro del castaño, en cambio Blakk rio ante esto, a veces es divertido molestar o mortificar a los niños, de cierta manera le recuerda cuando le hacía lo mismo a Will... Solo que sus travesuras eran más Adultas.

— ¡No es justo!. —hablo Eli mientras se cruzaba de brazos y hacía un puchero.

Tad siguió su ejemplo:— Extraño a papá Will. —de cierta manera el pelimarron recordó que el Shane adulto aun no llegaba, por lo que soltó los brazos y miró a Blakk preocupado:— ¿Donde esta papa Will?, ¿por qué no a llegado?.

— Ya les dije el porque. —solto Blakk con indiferencia:— Se le hizo tarde en su misión. —decidio darle la espalda a los niños mientras se adentraba a la cocina.

A diferencia de Will que no es de saber actuar o mentir, él sí puede mantener la mentira o actuar, pero en el fondo estaba preocupado. Saco su celular para ver la hora, gruño al ver que se cumplio el tiempo acordado, ya no podía mentirle a los niños y más ahora que los llevara a la fortaleza.

Chasqueo la lengua ya harto, así que busco en sus contactos el nombre de su ayudante para acordar el plan en la búsqueda del Shane. Pero justo en ese momento que marco y llevo el celular a su oído la puerta principal fue abierta y cerrada con suavidad, los niños estaban distraídos en la Tv y no se percataron, pero al estar más cerca lo escucho.

Cuando el pelinegro cruzó el pasillo y se adentro a la sala se dio cuenta, debido a su mirada perdida que algo no estaba bien. De todas formas, su enojo lo supero, por lo que a pasos rápidos y pesados rodeo la cocina para alcanzo al Shane en las escaleras.

Lo sujetó del brazo no muy fuerte, deteniéndolo en el primer escalón:— ¡¿Donde estabas?!. —exigio enfadado, pero más preocupado que otra cosa.

— Thaddeus, no quiero hablar de eso ahora. —retrocediendo con la intención de que el castaño lo suelte, pero no solo no lo soltó sino que lo sujetó con ambas manos por sus hombros.

— ¡Pero claro que hablaremos de esto ahora!. —pese al enfado, susurro para que ambos niños no se dieran cuenta aún:— ¡Estuviste todo el dia fuera, no supe de ti, no respondías a mis llamadas!. ¡Por las elementales, estaba por dejar a los niños en la fortaleza para ir a buscarte!.

— ¡Es en serio Blakk!. —haciendo un movimiento brusco se soltó del agarre:— ¡No estoy de humor, no me siento bien!.

El Shane no controló su voz, por lo que ambos niños miraron por sobre el sofá, al ver que el Shane regresó saltaron del sofá para ir y abrazarlo, pero sobre todo para chillar y hacer berrinche por lo de antes.

— ¡Papa, volviste!. —exclamo Tad.

— ¡Papa, papa, te tenemos que contar algo sobre papa Blakk!.

El Shane suspiro agotado:— Niños, no es el momento, ahora solo quiero descansar.

— ¡Pero papá, él fue muy malo con nosotros!.

— ¡Si!.

— Niños, ya escucharon a su padre. —los niños no le hicieron caso, tomando del brazo al Shane para jalarlo.

— ¡¿Donde estabas papá?!.

Tad noto el ceño fruncido del Shane:— Papa, ¿estas bien?.

— ¡¡Estoy bien!!. —alzando los brazos logró que los niños lo soltaran:— ¡¡¿Podrian dejarme en paz por una vez?!!.

Antes de darse cuenta el Shane subió con rapidez las escaleras, azotando la puerta de la habitación dejando entender que se había encerrado en la misma. Blakk dejó caer los hombros y miró a los niños que estaban más confundidos y preocupados que tristes por la reacción de Will.

Colocando una mano en el hombro de los niños, estos reaccionaron y lo miraron:— Vamos niños, prepárense para dormir. —ambos menores se miraron un momento antes de subir las escaleras en silencio a su habitación compartida. Al ver que los niños entraron a sus habitaciones dejó salir un gran suspiro mientras llevaba una mano a su nuca.

Este día ha sido muy extraño.

— ¿Por qué papá Will está enfadado con nosotros?.

Blakk le dedicó una mirada neutral antes de sonreír despreocupado, se acercó y se sentó en el borde de la litera, Eli que estaba en la de arriba se inclinó al escuchar la pregunta, claramente intrigado también por la misma.

— Will no está enojado con ustedes.

Eli bufo desde arriba:— Pero, ¿por qué está molesto?.

— Bueno... Es algo que nos pasa a los adultos a menudo. —haciendo una mueca de desagrado:— A veces tenemos días malos o muy malos, nos sentimos pesados o irritados, así que preferimos estar solos por un tiempo. —acercandose mas a Tad para arreglarle la pijama:— Su papa a tenido un muy mal dia hoy, por lo que se siente incómodo. Solo necesita estar a solas.

— ¿Y qué debemos hacer papá?. —pregunto con inocencia el peli marron.

— En este caso, les pediré que no le dirijan la palabra a su padre, no lo llamen o ignorenlo. Se que cuando su padre se sienta mejor el mismo se acercará a ustedes. —la propuesta fue extraña y confusa para ambos niños, pero aceptaron. Sonrió complacido a ambos antes de levantarse y acercarse a la puerta:— No se preocupen, estoy seguro que mañana su padre estará mejor.

Ambos niños asintieron para acomodarse en sus camas. Blakk salió y cerró la puerta tras de si, se asomo en los barrotes de la escalera y miró un momento el refugio, ya había asegurado todo, desde la seguridad, apagó las luces por lo que estaba a media oscuridad y ya acostó a los niños.

Miró un momento la puerta de la habitación donde el Shane se ha encerrado, ya sabía de sobra que ese era su refugio dentro del refugio cuando no se sentía bien. También sabía que lo debía dejar tranquilo, Will jamás se ha enfadado o ha mostrado ese tipo de rebeldía, por lo que era mejor dejarlo en paz.

Así que era mejor tomar las escaleras para ir a la sala y dormir en el sofá por esta noche, lo malo es que no tendrá su almohada o la cobija, tendrá que conformarse con las almohadas del sofá y que esta noche no haya frío. Pero justo paso la puerta se abrió, no del todo pero lo suficiente para dejar ver al Shane en su franelilla, pantalones hondos y sandalias, el cabello desordenado y con expresión cansado.

El guardó silencio y se dedicó a mirarlo en espera de alguna palabra. Con pena y mirando al suelo por fin habló.

— .. ¿Los niños.. Estan durmiendo?.

— Los acabo de dejar en las camas, si. —el pelinegro asintió, hubo otro momento de silencio antes de que hablara de nuevo.

— Tu.. ¿No vendrás a dormir.. Ahora?.

— Pienso dormir en el sofá.. Por lo que veo. —al ver que Will volvió a quedarse en silencio no quiso esperar más:— Buenas noches. —tomando el rumbo a las escaleras.

Como supuso, el Shane salió de la habitación y lo sujetó del brazo, en este caso se aferró al brazo. Esto llenó de preocupación a Blakk, este no es un comportamiento usual en el Shane, ¿que había pasado en esa misión para dejarlo en este estado tan sensible?. Sea lo que fuera no era el momento para hablar de ello, de todas formas presionar a Will no sería lo ideal. Por lo que hizo que soltara su brazo para rodear sus hombros y sujetarlo del brazo y darle un ligero apretón.

— .. Vamos a dormir.

En silencio el Shane aceptó la propuesta, rodeando la cintura del Blakk con ambos brazos para aferrarse a este. Simplemente en un abrazo suave llevó a Will de vuelta a la habitación, cerró la puerta y fueron directo a la cama para acostarse y acomodarse.

Solo eran ellos dos mientras el Shane abrazaba y reposaba su rostro sobre su pecho, en la comodidad de la noche, la suavidad de la cama y el confort el uno del otro. Al poco tiempo y ya más tranquilo el Shane se rindió primero, dándole un respiro de alivio a Blakk que le siguió su ejemplo.

— ¡No quiero, es domingo!. —exclamo Eli aun en la cama y somnoliento.

Ambos niños chillaron al escuchar los aplausos, ocultándose bajo las mantas y dándole la espalda al adulto, Blakk siempre los despertaba haciendo ruidos fuertes, y si eso no funcionaba literalmente los sujetaba de los pies y los arrastraba fuera de la cama, después de todo para Blakk los niños eran como muñecas de trapo que podía mover fácilmente.

Los niños ya esperaban ser sujetados de los pies para ser jalados, por lo que al sentir que el mayor se acercó se sujetaron de las cabecera de la litera.

— Si no bajan su padre se comerá sus desayunos.

Al escuchar la voz del Shane adulto ambos niños se sentaron de golpe y miraron con una sonrisa, pero recordando las palabras del castaño su sonrisa desapareció y permanecieron en silencio.

Will ladeo la cabeza un momento antes de reír con diversión:— Niños, no se preocupen, su padre me dijo lo que les propuso anoche.

Tad frunció los labios pero decidió hablar:— ¿Ya no estás enojado papá?.

— No.. Ya no. —forzando una sonrisa, se acercó a la litera y miró a ambos menores:— No quise alzarles la voz anoche niños, es solo que... No me siento muy bien.

— ¿Estas enfermo?. —pregunto Eli con curiosidad.

— No hay que estar enfermo para sentirse mal. —aun sin entenderlo del todo ambos niños solo sonrieron:— En fin, será mejor que bajen a desayunar, y dense prisa, saben que su padre es impaciente y glotón.

Dicho esto salió de la habitación para dejar a ambos menores asearse mientras se bajó al primer piso, ya en la sala se acercó al sofá donde las babosas jugaban libremente, llevó ambas manos a su cintura he hizo una mueca, no quería meterlas en la jaula pero sabía que Blakk estaría molesto si no lo hace.

— Está bien, dejalas afuera.. ¡Por esta vez!. —el pelinegro pudo mirar al Blakk del otro lado de la encimera, esté aún en pijamas lo señalo con la espátula con cara serie antes de volver a la estufa.

Las babosas rodaron los ojos o ignoraron al castaño, Will solo pudo negar con diversión mientras rodeaba el sofá para ir a la cocina.

— Muy amable de tu parte Thaddeus.

— Si, a veces soy demasiado generoso. —a veces no sabe cuando Blakk es sarcástico o lo dice en serio, a veces es tan serie o neutral que no sabe en qué está pensando.

No pasó mucho cuando los niños bajaron, tomando asiento para empezar a desayunar. Mientras desayunaban un pitido corto pero fuerte alertó a ambos adultos que se miraron curiosos, pues eso indicaba la alerta de seguridad del refugio.

— Sigan desayunando, iré a ver. —dijo despreocupado el castaño mientras se levantaba, guardó silencio al ver que Will se levantó y lo siguió. Ambos fueron al monitor y activaron la cámara de la puerta principal que parpadea que había visitas. Al activarla el castaño quedó sorprendido:— ¿Con quien vino Gimo?, no logro verlo.

¡¡Oye, lava dinero, abreme ya!!.

¡Viejo decrepito, es temprano en la mañana para empezar a fastidiar!.

Tanto Will como Blakk se miraron al escuchar a Gimo empezar a discutir con el que tiene tras de sí, tratando de evitar que la seguridad del refugio lo detecte y le dispare. Will trotó hasta la puerta principal para abrirla, Gimo y su invitado entraron de inmediato.

— ¡¿Karl?!. —el pelinegro quedó sorprendido al ver al troll junto a Gimo.

Antes de que el troll pudiera saludar el Shane más viejo sujeto de los hombros a Will y lo miro por todos lados alarmado:— ¡¿Estas bien mi muchacho?, vine tan pronto supe lo que pasó!.

— S-si, tio Gimo, estoy bien.. —el pelinegro miro a Blakk que se cruzó de brazos y alzo la ceja expectante:— .. Solo decepcionado por lo sucedido.

— ¿Y qué fue lo que sucedió exactamente?. —pregunto Blakk, estaba claro que quería saber qué estaba pasando.

— ¡Tu no te metas!. —el viejo miró enfadado al castaño, soltando a Will para señalarlo:— ¡Es asunto de familia!.

— ¡¡Gimo, el que no se debe meter eres tú!!. —Karl golpeó la mano de Gimo, enfadado el troll llevó ambas manos a su cintura:— Este asunto es entre Will y Blakk. Además, es un tema que ya no se puede ocultar entre ustedes los Shane, te guste o no. —Gimo no dijo nada, simplemente sobo la mano golpeada mientras gruñía para sí misma:— ... Por lo menos, solo nosotros sabemos la verdad.

Hubo silencio entre todos por unos momentos, un silencio incómodo y pesado, era de esperar cuando Blakk tenía la mirada clavada en el Shane en espera de alguna respuesta mientras este trataba de evitarlo.

— ¿Pasa algo malo?. —los adultos miraron a Tad que junto a Eli miraron muy preocupados a todos.

Will soltó los hombros junto a un suspiro antes de responder:— No, no es nada.. Solo algo sobre una misión niños. —tratando de calmar los ánimos, se acercó a ambos niños:— Eli, Tad, les presentó a Karl. —señalando al troll:— Es un buen amigo de su tío Gimo, asi que seria bueno que ambos junto con tio Gimo y Karl se conozcan, pueden ir al campo de entrenamiento. Mientras su padre y yo limpiamos la cocina y la casa.

La excusa no convenció del todo a los niños, pero no tenían más opciones que aceptar conocer al troll. Gimo sujeto a ambos niños para llevarlos junto con Karl fuera del refugio, el pelinegro se acerco y se asomo en el portal para asegurarse de que se alejaran del refugio, ya cuando vio que estaban a una distancia segura cerró la puerta.

— ... Aunque no lo creas Thaddeus, los Shane somos una familia.. Numerosa. —solto de la nada el Shane, miro con melancolía al castaño antes de continuar:— Las personas piensan que al ser los protectores de las cavernas, todos los Shane somos perfectos... Tenemos reglas, otras necesarias, otras completamente fuera de lugar, y una de ellas es que el primogénito de la generación próxima debe ser el protector de las cavernas, hoy en día no es la gran cosa, si quieres ser el protector o no es nuestra decisión.. Pero no hace mucho no había peros.

Blakk soltó los brazos y negó confundido:— ¿Que tiene que ver esto con lo sucedido ayer?.

— Yo no era el próximo protector Thaddeus. —al escuchar eso el castaño se sorprendió:— Yo.. Tengo tres tíos, pero soy el segundo de esta generación, el primero era quien sería entrenado para ser el próximo protector de Bajoterra, pero... —el Shane desvió la mirada con enojo.

— ¿Que fue lo que pasó, Will?.

— El.. El no quería ser el protector de Bajoterra, pero hablamos de Shane que tiene la mentalidad muy reducida a los viejos hábitos.. Por lo que lo obligaron. —aun con el ceño fruncido se cruzó de brazos:— Lo obligaron a entrenar, a participar en duelos, a prepararse pero su forma de entrenamiento era una total calbarie, lo humillaban por ser débil, ser la vergüenza de la familia al no tomar el privilegio de ser el protector, lo maltrataban. Hasta que ya harto se escapó, y por mero rencor lo tacharon de la familia, le quitaron el apellido y jamás lo volvieron a mencionar... No fue hasta hace no mucho que supe de su existencia.

— .. Espera, espera. —recalco Blakk mientras alzaba ambas manos:— ¿Me estás diciendo que hay otro Shane andando por ahí el cual lo desheredaron del apellido?.

— No solo eso. —menciono melancólico el Shane:— Desde que supe de su existencia he intentado encontrarlo.. Hasta que ayer lo encontré, pero.. No era lo que esperaba.

— ¿Asi que es por eso que has estado pésimo desde ayer?. —mirando curioso al pelinegro, puede que sea serio pero esto no es suficiente para que este se sintiera así de fatal.

Will negó aún triste:— No.. El.. El busca vengarse de los Shane por lo que le hicieron, por el daño que le hicimos. Haciendo todo lo contrario de lo que un Shane haría. Robar, atracos, y lastimar a los demás es solo poco de lo que ha hecho, es famoso por sus tácticas fuertes pero peligrosas.. Las Neotoxs.

Blakk lo miró unos momentos perdido antes de captar lo dicho, al darse cuenta miró consternado a Will para después pasar a sorpresa absoluta.

— ¡¡¿Blite?, ¿el amo de las neotoxs?!!. —el Shane aún en dudas asintió:— ¡¡¿Ese lucanito es un Shane?!!.

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Ptt: c viene cosas sad :,D