Ambos rieron y siguieron charlando sobre temas triviales hasta que cayo la noche y Kala se fue a su tienda. El tiempo paso y la familia de Moisés llego al campamento, sorprendiéndose con las novedades.
- ¿Entonces los reyes de Egipto están viviendo en el campamento? - pregunto Zipora impresionada - Escuche rumores de que los reyes dejaron Egipto pero nunca creí que terminarían aquí.
- Tampoco lo pude creer cuando llegaron pero parecen adaptarse bien, a pesar de que la mayoría de los habitantes aun les guardan rencor - comento Moisés - Lo bueno es que tienen el apoyo de algunas personas.
- Aun me sorprende el hecho de que su hijo haya sido resucitado - dijo Jetro impresionado.
- Y no es el único, un par de amigos de la familia también fueron resucitados - comento Miriam - Kala fue resucitada hace unas semanas pero Jairo resucito hace años, cuando era un niño. Cada caso es distinto pero Dios los trajo de vuelta por una razón.
- Con permiso - dijo Ramsés entrando a la tienda - Shalom.
- Shalom - respondieron todos al unisono.
- ¿Que pasa, Ramsés? - pregunto Moisés, la cara de su amigo tenia escrito "malas noticias"
- Lamento interrumpir la reunión familiar pero las personas se están quejando de que te fuiste sin resolver sus problemas y no se que decirles; eso si, tienes suerte de que aun le teman a Kala o ahora mismo estarían invadiendo tu tienda - dijo Ramsés con un tono de burla al final para aliviar un poco la tensión de su anuncio.
- Debí saber que les molestaría - dijo Moisés levantándose de su silla (y quitando a Zipora que estaba sentada en su regazo) - Creo que lo mejor sera que regrese.
- Si me permites amigo, creo tener la solución. De todos modos, 45 años de reinado me abalan - dijo Ramsés presumiendo un poco, Moisés le dio la palabra - Escucha, ¿tu crees que cuando surgían los problemas en el reino, yo los iba resolviendo uno por uno? ¡Claro que no, nunca hubiera terminado!
- ¿Entonces que sugieres? - pregunto Moisés dándose cuenta de lo certera que era esa afirmación.
- Reúne a las personas mas sabias de tu pueblo y mándalos a resolver los problemas mas pequeños mientras que traen ante ti los problemas mas graves. De esa forma, resuelves todos sus problemas y te vas a casa temprano, así de simple - dijo Ramsés chasqueando los dedos, entonces miro la entrada de la tienda - ¿Puedes hacerte cargo de eso, Kala?
- ¡Por supuesto! - grito ella a cierta distancia.
- Listo, problema resuelto - dijo Ramsés cruzándose de brazos con orgullo.
- ¿Como pudo escucharte estando tan lejos? - pregunto Jerusa confundida, Ramsés iba a responder cuando...
Continuara...