-¿Papá?- preguntó Adrien al ver al hombre en la puerta listo para golpear en cualquier momento.

-Tienes diez segundos Sombre para regresar todo a la normalidad y deshacerte de ese estúpido akuma- dijo Gabriel apuntando a la mujer de blanco y negro.

-¡Ja!- rió sarcásticamente -¿Quién eres tú como para darme ordenes?- la chica de cabello rubio cenizo se encontraba sentada en el respaldo del enorme ventanal, su sonrisa deslumbraba confianza e irradiaba con cierto aspecto travieso.

-7 segundos-

Adrien y Marinette no comprendían la situación.

-Señor Agreste- dijo la azabache -¿Se puede saber qué esta pasando?-

-4 segundos- el hombre de cabello grisáceo observaba su reloj de mano, el silencio permitía que este se escuchase alrededor del lugar.

-Aja- Sombre observó sus uñas y después sus botines.

-Esta bien- Gabriel abrió su saco y levantó su corbata dejando ver un broche plateado con forma de mariposa, tomó el objeto y este comenzó a brillar -Nuruu, transformación-

De repente cientos de mariposas blancas le rodearon y en pocos segundos Hawkmoth apareció frente a ellos.

-Yo te di los poderes- comentó al tiempo que levantaba su mano y estremecía el puño, Sombre comenzó a retorcerse del dolor, al parecer podía manipularle con suma facilidad -Yo puedo quitártelos-

-¡Usted lo prometió!- Sombre cayó al suelo tomando fuertemente su cabeza. Hawkmoth continuaba apretando el puño y los gritos de la chica eran cada vez más fuertes.

Los dos jóvenes quedaron asombrados ante tal sorpresa. Adrien quería golpearse una y otra vez, ¡El villano estuvo frente a él y nunca se dio cuenta a pesar de lo obvio que pudo haber sido!

Entonces todo fue una trampa, él fingió todo ese tiempo.

La rabia invadió cada parte de su ser.

Había vivido engañado.

-Plagg- susurró -Transformación- una criatura negra salió de su bolsillo para entrar directamente en su anillo,repasó sus dedos por su rostro y una máscara apareció, rozó con su cabeza y orejas iniciaron. El traje se materializó como si de una mancha se tratase en un par de segundos.

-Todo este tiempo- tomó su bastón y lo azotó hacia el suelo -Tú me habéis engañado, ¡Yo confíe en ti creyendo que las cosas habían mejorado!- apuntó hacia su padre segundos atrás de comenzar a atacar -Me usaste como si de un juguete se tratase-

-¡Escucha!- Hawkmoth esquivó el repentino golpe -Hice esto porque pensé que sería la forma mas correcta de conseguir sus Miraculous.- Chat Noir gruñó y cargó inmediatamente a Marinette demostrando que le iba a proteger ante todo.

-¡¿Y por lo menos se puede saber la razón o eso también lo vais a ocultar?!- el hombre de mascara sonrió con tristeza.

-Lo hice por ver nuevamente a tu madre Adrien- sacó de su pecho un colgante que al abrir tenía una foto de una mujer rubia y de ojos verdes -Sólo quiero verle  y regresar a nuestra familia a la normalidad-

-¡¿Y crees que con eso volveremos a estar unidos?!- dijo secamente Adrien -Si desde un principio no te hubieses alejado esto no hubiese pasado. A mamá y a mi nunca nos importó el dinero, sólo queríamos ser felices- Marinette le abrazó aún en brazos.

-Y por eso- Gabriel hizo extender su bastón -...debéis darme sus Miraculous-

-Jamás- la azabache saltó para zafarse del agarre del chico -¡Tikki, transformación!- frente a los dos Agreste y a Sombre apareció la heroína de París; Ladybug -Existieron muchos caminos señor Agreste pero ese no era el correcto-

-¡LO HICE POR QUE EN UN PRINCIPIO YO NO SABÍA QUIÉNES ERAN USTEDES!- exclamó molesto -Tenía tiempo que sospechaba de Adrien pero después de que Sombre modificara nuestras vidas descubrí finalmente sus identidades. Ahora les pido de la manera mas atenta que lo hagan por una buena causa.-

-Entiende que ese no es el camino padre-

-Lastima...-interrumpió Sombre con una sonrisa victoriosa pues todos habían perdido la atención en ella. -Creo que ya no hay marcha atrás- apuntó amenazadora hacia los héroes -Supongo que esos "Miraculous" deben servir para algo grande así que esta vez estarán para mi- chasqueo los dedos, una espesa neblina apareció en la habitación impidiendo ver la huida de la chica.

-Genial- dijo el felino héroe intentando no toser -Ahora debemos lidiar con la loca- a ciegas tomó el brazo de la azabache y ambos caminaron hacia la ventana por la que Sombre había escapado. Dándole la espalda al villano, tomaron sus respectivas armas y salieron del lugar, a la lejanía podían verse dos siluetas saltando entre tejados y buscando a quien había causado tanto enredo.

Gabriel llevó las palmas de sus manos hacia su frente, ¡si había sido idiota! Sabía que su hijo no comprendería la situación y aún así se arriesgó a revelar su identidad. Lo peor de todo es que la akumatizada se había librado de su control y manejar un nuevo akuma sería solamente empeorar las cosas.

Tomó su bastón y al igual que los héroes, caminó hacia la ventana de la habitación y golpeó el instrumento con el suelo. A la velocidad de la luz fue desplazado de una lado a otro entre el céntrico París, se movía lo mas rápido posible intentando encontrar ya sea a los héroes o a Sombre.

...

-Veamos- un chico de traje negro se encontraba hincado entre la base de una chimenea mientras intentaba buscar a su objetivo -Si yo fuera Sombre ¿dónde me ocultaría?- con ayuda de sus manos creo dos círculos alrededor de sus ojos simulando usar binoculares para permitirle mejorar el alcance de su vista.

Sin embargo eso era absurdo.

-¿Tan rápido superaste la situación?- preguntó una chica de traje con motas negras, Chat Noir le observó y simplemente levantó los hombros.

-Hizo tantas cosas que ya no me sorprende, casi nunca ha estado conmigo y yo como idiota me creí su cuento- desvió la mirada y continuó observando el perímetro.

Nada, estaba cayendo la noche y el cielo ya era una mezcla extraña entre sol y luna. Ladybug comenzaba a impacientarse e incluso había pensado en dejar a su compañero sólo para regresar al evento de conmemoración a su desfile.

Recordó que todo era una farsa y una sonrisa estúpida escapó de sus labios, ¡eso significaba que sus padres si le amaban!, ya no importaba su fama o la clase de sociedad en la que estaba metida.

Eso lo aprendió en tan corto tiempo.

Adrien se encontraba analizando la situación de forma similar, todo era un engaño y ya no sabía que emoción expresar.

Por lo menos había descubierto la identidad de su amada.

Prometió arreglar la situación y que todo regresase a la normalidad, de esa forma y finalmente estaría pleno.

Él creía que ya no necesitaría de nada ni nadie...excepto a su Lady.

La distancia entre ambos era de menos de un metro, Chat apoyó sus piernas de la base y bajó la parte superior de su cuerpo para quedar a la altura (aunque de cabeza) de la heroína de París.

Sonrió cada vez más, la azabache se encontraba algo pensativa y si siquiera se había percatado de que su ¿novio? se encontraba frente a ella, el chico tomó la iniciativa y con un mínimo esfuerzo por parte de su garganta logró captar la atención requerida.

-¡Chat!- la ojiazul retrocedió debido al susto, el felino como buena mascota tomó la cintura de la chica con algo de dificultad y acercó su cuerpo, sus miradas se conectaron.

-Princesa- dijo con los ojos algo cristalizados -pase lo que pase por lo menos se que te tengo a ti...tú eres lo único que necesito- tomó el rostro sonrojado de la heroína y junto sus frentes, Marinette rió nerviosa ante lo que pasaba, anteriormente se sentía frustrada de la falta de expresión del chico y ahora parecía ser más frágil que ella.

-Vamos gato, no seas tan romántico- colocó uno de sus dedos en la nariz del otro y le empujó con sutileza -Debemos de encontrar a Sombre y resolver esto de una vez por todas- tomó el yoyó de su cintura y enredó la infinita cuerda en un edificio lejano, impulsó y saltó dejando al felino de cabeza.

-Nunca cambias- susurró y decidió seguirle el paso.

El ocaso había pasado a un brillante anochecer iluminado en la lejana y brillante Torre Eiffel, Ladybug y Chat Noir no pararon de saltar de un lado a otro a través de la ciudad, diversas veces se habían topado con Gabriel quien les pedía trabajasen en equipo para derrotar al akuma. Sin embargo Adrien siempre se negaba obligando a su acompañante a escapar de la escena.

-Por favor hijo, escucha- dijo el hombre quien en ese instante tenía su Miraculous activado -Al igual que tú yo necesitó vencerla para que todo regrese a la normalidad-

-Nada cambiará- murmuró el ojiverde con la mirada baja, en esos momentos ver sus gatunas botas era lo mejor que podía hacer. Se sentía brutalmente intimidado y lleno de emociones encontradas, no sabía si llorar o seguir sus deseos de golpear a su padre por mentirle de forma terrible.

-Lo se- comentó con tristeza su padre -Solamente la quería de regreso- Adrien levantó la mirada al sentir una se sus manos entrelazada con otra, Marinette ahora se encontraba a su lado acariciando suavemente la piel del chico.

Quería repetirle que esa no había sido la manera de traerla de regreso. Decidió guardar silencio.

-¿Y acaso no puedes simplemente invocar al akuma que habita en su interior?- escupió con amargura pues la bilis había logrado llegar a su garganta y ahora sentía un mal sabor de boca. Hawkmoth negó mientras observaba al lejano monumento de la ciudad.

-Lo intente y ahora ella tiene el control de sus acciones, yo ya no influyo en los deseos oscuros del akuma- aunque se encontrasen en uno de los tantos tejados; Gabriel canceló su transformación dejando salir a un exhausto kwami que termino cayendo en sus manos, con suma paciencia el ex-rubio tomó al pequeño y acarició ligeramente su cabeza.

-Nuruu siempre estuvo para mi aunque mis deseos siempre fueron de lo mas egoístas, lo mantuve como si de un esclavo se tratase y ahora me arrepiento de verdad- levantó su rostro y sonrió, lágrimas caían a través de las mejillas de su hijo aunque su mirada aun demostraba enojo e incluso odio. Suspiró.

-Se que ni tú ni tu novia me entregara los Miraculous- continuó acariciando la cabeza del kwami y observó con detenimiento a la chica que se encontraba al lado de su hijo -Nunca pensé que tuvieses tanto potencial...señorita Cheng,en este mundo alterno usted es una diseñadora exitosa- la azabache se sonrojó inmediatamente, aunque Gabriel resultase ser el villano no podía evitar sentirse alagada, ¡su mayor ídolo había dicho que era exitosa!-

-Contrólate Marinette- sonrió nerviosa y después de unos segundos intentando no gritar de la emoción; cruzó los brazos e intentó poner el gesto más serio que fuese permitido.

-Gracias señor Agreste y no sea formal, no me hable de "usted"- Gabriel rió ante el comentario, su esposa hubiese dicho lo mismo.

Una vez escuchó a su hijo decir que Ladybug y su madre eran bastante similares, ahora comprendía la situación un poco-

-Esta bien Marinette- su hijo le amenazó con la mirada y con una falsa tos llamó la atención de ambos.

-Todo esto es muy conmovedor- la ojiazul golpeó el hombro del chico y éste gruñó de dolor -Pero tenemos que derrotar a una lunática- señaló hacia la torre Eiffel, ambos Agreste asintieron.

-Deberías quedarte aquí papá- dijo Adrien -Tu kwami no luce muy bien- tomó su bastón y lo extendió hacia otro tejado, saltó con fuerza y se impulsó para llegar al otro lado, Ladybug le siguió el paso y en menos de un minuto los ojos de Gabriel habían dejado de ver el par de siluetas que se movían con rapidez a través de la ciudad.
...

-¡Marinette!- Chat tomó el brazo de su amada evitando que esta cayese al suelo -No estas concentrada- la chica rodó los ojos y mientras el rubio inició su infinito sermón sobre la importancia de ser precavido ella se dedicaba a repetir las palabras en silencio y con burla.

-Lo que pasa es que eres todo un sobre-protector Adrien- dijo finalmente -¿Dónde esta el Chat Noir que se dedicaba solamente a coquetear?-

-¡Lo digo enserio!- contraatacó -No te estas fijando en lo que pasa a tu alrededor, eres igual a mi madre: testaruda y siempre quieres tener la razón- hizo un puchero extremadamente extraño, Marinette no pudo evitar reír.

-Y aun así me amas- pararon frente a la Torre Eiffel y observaron alrededor.

¿Quién comprendía? Eran un dúo bastante bipolar pero funcional, minutos antes ambos habían demostrado ser demasiado cariñosos y ahora no dejaban de pelear sólo porque Marinette había tropezado por accidente.

-Deberías quedarte aquí- susurró burlesca la azabache -Con eso de que te preocupa que incluso un insecto me toque-

-Terminemos con esto- respondió cansado de la discusión.

-Como digas minino- Ladybug se dejó caer desde el tejado, el ojiverde inmediatamente grito preocupado y corrió para intentar salvarla.

Sin embargo lo que vio fue completamente diferente.

-¡Necesito a Chat Noir para ayudarme a derrotar a Sombre! ¿Acaso estará por ahí?- la chica se había sostenido de una columna y bajado hacia el suelo donde sonreía con autosuficiencia tratando de no reírse al ver el rostro sorprendido del chico.

Una repentina jaqueca le invadió, sacudió la cabeza y volvió a levantar la vista.

¿Acaso ella estaba comenzando a actuar como Chat y él como ella?

Debían apresurarse, incluso sus personalidades comenzaban a modificarse.

-¡APRESÚRATE ADRIEN!- su respiración aceleró y la preocupación incremento de forma brusca, podía sentir cono los latidos de su corazón retumbaban a través de sus oídos causando el efecto de que alguien bajaba las escaleras en su interior. Notó como Chat tomaba fuertemente su cabeza teniendo el mismo efecto que ella.

-Vamos- movió el bastón y la carrera contratiempo inicio. En sus mentes el sonido de las manecillas del reloj sonaba marcando paso a paso como de un momento a otro sus memorias comenzaban a sentirse afectadas y modificadas. Llegaron por debajo del momento e iniciaron a escalar en lados contrarios.

Querían crear una emboscada.

-Me alegra verles- dijo una chica de cabello rubio cenizo, había tomado a los héroes por sorpresa pues estos se habían precavido de ser sigilosos y mantenerse ocultos -Esto ya comenzaba a aburrir, ahora digan...- permitió que ambos subieran hacia la solida base decepcionados de que su plan fallara -Y deben de apresurarse, veo que comienzan a olvidar sobre sus verdaderas vidas- abrió las palmas de sus manos y una espesa neblina salió de estas, la imagen del cielo y la torre se desvanecieron dejando a su paso oscuridad -¿Qué tanto pueden hacer sus Miraculous?-

-Depende- dijo una voz a sus espaldas -Al unir ambos se puede crear un poder único e inigualable pero eso es variable a lo que desees- los héroes no tuvieron la necesidad de voltear pues sabían de quien se trataba -La única condición es que no sea con fines egoístas o de lo contrario deberás pagar por algo a cambio-

-Vaya- respondió sarcástica -Lo dice el que intento engañar a su hijo y robarle el anillo, simplemente deseo que todos aprendan una lección importante, tanto pobres como ricos-

-Existen otras maneras de lograr eso- dijo Ladybug.

-¿Y crees que funcione? Quien es egoísta siempre lo sera y aunque tenga una y otra lección...jamas aprenderá- apretó los puños, la oscuridad alrededor incremento.

-Me refiero a que existen formas más...pacificas de llevar esto a cabo, tal vez si hablases con otras personas ellos te apoyarían y así lograr tu objetivo aunque nadie tiene una buena vida.- la azabache tomó la mano de su compañero -Yo ya aprendí esa lección-

-Escucha Sombre- continuó Chat -Puedes ser pobre o de media sociedad y tener que trabajar de forma ardua pero te puedo asegurar que eso vale por tener a tu familia-

-O puedes ser rico y jamas verla, todo tiene un sacrificio y recompensa- Sombre les observó extrañada.

-Pe-pero yo quería que...-

-Querías que uno sufriera y otro ganase un lujo, debo de decir que ambos aprendimos la lección-

-¡Pero estoy segura que no quieres regresar a tu antigua vida!- grito señalando al héroe.

-En un principio, ahora se que pobre o rico él puede y jamas me preste atención- sonrió con tristeza señalando a su padre -Aunque ya no sufriré tanto- apretó su mano contra la del traje moteado -Estoy con ella-

Hawkmoth permaneció en silencio observando la escena, todo pasaba en cámara lenta. El hombre no se percató cuando el akuma que la chica portaba salió, ver como Ladybug purificaba al insecto era como apreciar cientos de fotogramas a poca velocidad, un brillo entorpeció por unos segundos sus ojos y cuando volvió a abrirlos una rubia se encontraba confundida en el suelo.

-No use mi Lucky Charm, no puedo reparar daños- las voces sonaron cada vez mas lejanas.

-Al menos supongo que nuestras vidas volverán a la normalidad- respondió su hijo dándole la espalda -Por el momento vamos a casa-

No supo ni cuando ni como, simplemente levantó su bastón y tocó la cabeza de ambos héroes borrando completamente sus recuerdos.

Todos aquellos basados en la experiencia.
Lo que sigue es historia.
...

Marinette despertó con una terrible jaqueca, sus ojos se entrecerraban y había tenido un terrible y extraño sueño.

-Tikki- gruñó de dolor -¿Qué paso?- la kwami permaneció en silencio, ella tampoco recordaba nada de los últimos días.

Ambas se encontraban en la antigua recamara de la azabache. Justo como se pensó con anterioridad, todo regreso a la normalidad.

Incluso sus recuerdos.

La chica aún quejándose se dolor decidió ir a la escuela y por mas raro que pareciera había llegado bastante temprano. Entró a la puerta principal encontrándose con su par de amigos.

-No lo se Nino- un rubio y de ojos verdes se encontraba en el mismo estado que ella -Mi padre dice que tuvo un desfile de modas pero yo no recuerdo algo sobre eso, no recuerdo sobre los últimos días-

-Tal vez estas trabajando mucho últimamente amigo- respondió el moreno golpeando suavemente su hombro -Debes relajarte- Adrien giró la vista sintiendo que alguien les vigilaba.

A unas cuantas escaleras de diferencia se encontraba Marinette observándoles fijamente, sus miradas se encontraron y sintieron como sus pechos eran oprimidos.

En verdad algo había pasado y ellos no recordaban.

Simplemente de un día para otro ambos se volvieron los mejores amigos, cuando un nuevo curso inicio los dos tuvieron la suerte de permanecer juntos y la amistad incrementó.
...

-Hablaste de corregir las cosas y volviste a repetir el mismo error- dijo un pequeño kwami rosado.

-No estoy cometiendo el mismo error- susurró Gabriel -Se que suena egoísta pero tratare de arreglarlo sin que él se entere de que yo soy su peor enemigo-
...

Continua en "Same Mistakes"
(En biblioteca)

Gracias por leer♥