第21章 | Amigos
Informe del proyecto "Pasantías públicas"
y el origen del humano sin quirk
N°4
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Dos días después del ataque a la preparatoria Aogaku
Kai Homura y Yoshida Hirofumi volvieron a la antigua residencia de Kaneko Yoshiaki
Y dicho lugar
Dio por cerrado el caso
En sincronía con el ataque a Hosu
Resultados:
Conocimiento de una posible resurrección
Confirmación de la existencia de la "Expansión territorial"
Y humanos sin quirk recibiendo uno
Se especula el regreso de All for One
Las pasantías serán reactivadas en cuanto el gobierno dé luz verde
Se insistirá hasta que Kai Homura vuelva a trabajar bajo nuestro mando
Y se buscará jóvenes talentos con más rigurosidad
Este departamento dará todo lo que tiene
Con el fin de hacer nuestra esa monstruosa fuerza
Los bendecidos no deben ser corrompidos
"Comisión de Seguridad Pública"
– Te digo que deberías seguir descansando... – Regañó Hirofumi irritado mientras buscaba algo dentro de una sala vacía.
La sala vacía... de la casa de Yoshiaki.
– Ya estoy bien, además, ¿No me ibas a regañar? – Levantando con dificultad un sillón, el menor, quien estaba lleno de vendas, trataba de buscar aquello que necesitaban para seguir investigando.
La marca de sicariato de la que le habló su... difunto amigo.
– Fuuuh...* Jejeje, Homura, ley de vida, si alguien te salva de la muerte; agradécele la primera vez y si a la segunda insiste en que le debes algo, apártate o golpéalo, lo que se sienta mejor
Tal parece que eso que dijo el mayor era un consejo, aunque Kai no lo entendió bien, pero Hirofumi ya había subido al segundo piso.
Dejando a Kai a cargo del primer piso.
La mirada carmesí del chico siguió su camino hasta inconscientemente fijarse en un punto en particular, la cocina de la casa.
El pelinegro se rascó el cuello volteando la mirada al suelo y, haciendo frunciendo una mueca triste, fue que se dirigió al sillón unitario cerca de la mesa.
El recuerdo de una agradable cena familiar invadía su mente, pero el sentimiento no era cálido.
Se sentía vacío y doloroso.
Kai se dejó caer en aquel pequeño sofá, tomándose de las manos con ansiedad mientras intentaba calmarse, respirando entrecortadamente calmando el vibrar de sus ojos.
– [Creí que ya sabía lo que quería... pero ese tipo simplemente vino y deshizo todo lo que hice... todo lo que hicimos hasta este punto... y ahora estoy de nuevo en la línea de partida... nada de lo que dije como propósito se cumplió a la hora de la verdad... ¿Me equivoqué otra vez?]
Con los labios temblando, el chico soltó un amargo suspiro para luego tomarse la frente con una mano y pasar sus dedos por su cabello.
Ocultando sus labios fruncidos y sus ojos tristes que aquejaban su dolor.
– [Todo este tiempo... aunque me rendí en la idea de que era imposible que las personas se mataran entre sí, terminé ignorando aquello y pensé... q-que si yo era capaz de luchar por aquellos que son importantes, todo valdría la pena en el momento en que dejara este mundo...]
Lo dio todo, una vez más, pero ni siquiera eso fue suficiente.
Y la sensación de vacío ahora era la propia desnudez de su alma, saliéndose a través de sus ojos como lágrimas y amarrando su garganta.
– [Es tan frustrante... no poder haberte salvado... perdóname Yoshiaki, no tenías la culpa de nada y aún así el mundo te dio la espalda... te entregaron a un inútil como yo para que te apoyaras... y terminé por hacer que cayeras a un lugar del que no podrás regresar... se supone que era mi ideal proteger lo que era preciado para mi...]
– Pero ahora... ya no sé qué hacer en este punto... – Tomándose el rostro con ambas manos y alzando sus azabaches cabellos.
– Hmm, ¿Por qué no te haces fuerte? – Bajando las escaleras y mostrando una marca de sicariato en forma de tabla de madera, Hirofumi le sonrió a Kai.
– ¿Eh? – El sollozo fue repentinamente cortado de la impresión.
– Acompáñame arriba – Mencionó el mayor, pidiéndole que siguiera a lo que accedió sin reclamo alguno.
– [Sigue siendo el mismo, en cierto modo...]
Mientras caminaban, Kai notó que se dirigían a la habitación de Yoshiaki por lo que paró su caminar instintivamente.
– ¿Qué pasa? No te dije que nos detuviéramos aquí... la habitación está ahí en frente – Señalando al lugar, Hirofumi le habló con autoridad al chico.
A lo que Kai, con dificultad, asintió y entraron.
– Estoy seguro de que en este punto estás cuestionando muchas cosas... eres tan tonto hombre...
Ya dentro, Hirofumi recostó su espalda en el marco de la puerta, mientras que Kai tenía la mirada pegada en la cama del muchacho y en lo que había encima.
– ¿Acaso ser un héroe es de verdad tu sueño?
Encima del cubrecama con diseño de "The Beatles" que obviamente era de Yoshiaki, yacía una caja de CD envuelta con un lazo rojo.
– Apuesto a que Kaneko Yoshiaki lo entendía, aquello que mueve a un hombre y lo arraiga a esta cruenta vida con todas sus fuerzas es... aquello que ama, desde el fondo de su corazón...
Al retirar el lazo con una enorme delicadeza, temblando, Kai pudo ver una nota detrás de la caja.
"¿No es hermoso? La felicidad que te otorga el estar vivo"
"A pesar de todo, amo lo que tengo..."
"Sin embargo, ahora que apretaré el gatillo, si muero"
"Al menos por un instante en mi vida"
"Sabré que fui feliz"
"Gracias al amor que recibí"
"Puedo encargarte mi felicidad, Homura-kun"
"Sé feliz por mi"
Arrugando y humedeciendo el papel, Homura yacía sentado y temblando en la orilla de la cama de aquel chico que ya no podría volver a ver sonreír.
Jamás.
– Tú más que nadie... merecías vivir... y ser feliz, Yoshiaki... – Musitó Kai con una voz quebrada.
– ¿Sabes por qué el amor es confundido con el odio como opuestos? Homura – Hirofumi señaló con un dedo al pecho de Kai mientras reproducía el disco.
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R e p r o d u ci e n d o
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https://youtu.be/HAIPCGfuHZ8
– Iba... i-iba a enseñarte a defenderte... y veríamos una película...
– Porque el odio es un sentimiento más afín al amor que la indiferencia, te movió a actuar aquella vez... el odio, es un poderoso vínculo que nos une como seres humanos, tanto como el amor...
Aunque no fuera un tema que Hirofumi tomara en serio, el "amor" del que hablaban ahora tenía un significado más profundo y maduro, digno de sus palabras.
Admitía que ambos habían cometido errores, eso le costó la vida a una familia.
No sería fácil de superar, porque Kai era un niño a sus ojos.
– No hay forma de volver en el tiempo, puedes enojarte, aquella ira sin precedentes por no ser capaz de perdonar será lo que te impulsará a actuar...
Claramente el menor tenía en cuenta lo que decía Hirofumi, así que, secándose sus lágrimas como pudo, lo siguiente que quiso hacer fue...
Dar su mejor cara al duelo con una sonrisa.
– [Aaah... esa sonrisa tan amable... hace días que no la veía...] Entonces, ¿Qué es lo que vas a hacer? Además de secarte bien esas lágrimas
– ... Sigo sin entender cuál es el valor en mi vida... o qué tan lejos puedo llegar si estuviera en mis manos tal poder como el de la vida de alguien más, es por eso que... hasta poder entenderlo... – Limpiándose la cara, Kai miró con convicción a su mentor.
– Hasta matar a ese sujeto... me haré fuerte... y no volveré a perder...
– Eso es lo que quería escuchar, anti-héroe – Rio Hirofumi por lo bajo.
– ¡Tch! Como sea, la voz de Yoshiaki es muy bonita, ¿No crees?
– Seguro que lo es...
"Los diarios hablan con frecuencia de «penas íntimas» o de «enfermedad incurable». Son explicaciones válidas"
"Pero habría que saber si ese mismo día un amigo del desesperado no le habló con un tono indiferente"
—El mito de Sísifo - Albert Camus
"Hay dolor y tristeza, pero no sufras solo"
"Lidia con el dolor como si fuera tu motivo"
— David Le'aupepe
;)
| 𝕮 𝖆 𝖑 𝖔 𝖗 𝖉 𝖊 𝖘 𝖈 𝖔 𝖓 𝖔 𝖈 𝖎 𝖉 𝖔 |
[... 未知の熱 ...]
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Luego de dar por cerrado y archivado el caso del ataque a Aogaku, lejos, muy lejos de las manos de la ley, transcurrieron cinco días en los que Kai dio por terminadas sus prácticas heroicas y tendría que regresar a sus clases normales en UA.
Durante los últimos cinco días que tuvo, desde que sucedió lo de Yoshiaki, Kai no revisó su celular, además de que no sabía como conectarse al Wifi de Seguridad pública.
El último día tuvo que pedirle a Hirofumi que le enseñara, para que luego de unos minutos el pelinegro fuera bombardeado de mensajes de algunos de sus compañeros, además de un extraño mensaje de Midoriya el cual mandaba su ubicación.
La duda de Kai fue disipada al enterarse que tanto su compañero de cabello verde como el presidente Iida y Todoroki se vieron envueltos en una pelea con el asesino de héroes; Stain.
Todo durante un ataque masivo al distrito de Hosu, si mal no recuerda, Kyojuro le habló de que una vez se enfrentó al asesino de héroes justamente por esa parte de Ishikawa.
Lo describía como alguien de quien temer, además de un obrador de las artes asesinas diestro a más no poder.
Alguien que, a sus ojos, es tan hábil como para ser considerado fuerte en el agudo sentido de la palabra.
Luego se disculparía debidamente con sus compañeros por ignorarlos, sin embargo y aunque descaradamente, el pelinegro se sentía un poco menos culpable al saber que habían sido respaldados por el héroe número dos, Endeavor.
Y, aun así, para sorpresa de muchos, al parecer había salido a la luz varios videos acerca de Stain, su historia.
Respaldada por opiniones de antiguos conocidos suyos y así hasta llegar al punto de inflexión del sentido de la justicia de aquel hombre.
Hasta el momento clave, su realización.
"Tras haber atacado por todas partes del país, la aprehensión del hombre que mató a 17 héroes trae alivio a todo Japón"
"¡¡Endeavor, digno de alabanza otra vez!! ¡¡Un villano de rango S!!"
Aunque se le vía algo deprimido
"Esta ha sido la más grande matanza por un solo criminal desde el debut de All Might"
"El nombre del «Anti-héroe Stain» ¡Ha dejado ya bien marcado su lugar en la historia!"
...
"¡Justo como tu novia cuando le das una nal-
BZZZ*
De repente, la tele fue apagada por Hirofumi de un jalón al enchufe.
– ¿Justo como... qué...? – Preguntó Kai quien estaba prestando atención, aunque poco le importó lo que hizo su mentor.
– No necesitas saberlo, todo lo que vendría después de esa última frase no es relevante para ti – Y así sin más, Hirofumi salió de la habitación de Kai dentro del lugar de peleas clandestinas.
Se le había dado un descanso de una hora antes de seguir entrenando con Himejima, obviamente de manera mucho más leve a comparación del día antes del ataque a Aogaku.
Después de todo, luego de tremendo desgaste muscular en el cuerpo de Kai, era imposible que se pudiera respaldar del quirk de Shinobu...
– Anti-héroe... – Musitó Kai.
¿Así sería visto luego de matar a esas personas?
– ¿Hmm? – Revisó su celular, una notificación le había llegado de parte de Denki.
Agradeciendo por la cadena que el rubio le había mandado con una imagen de piolín deseándole un buen día, dirigió sus dedos a aquello que le tenía algo impresionado desde el día de ayer.
Un chat grupal, que era dónde provenía el mensaje del rubio.
Kaminari creó el grupo 'La facha de UA 😎😎👌'
Kaminari te añadió
Kaminari: *Video facherito facheroso acerca de Stain*
Qué es esto
Salaverga y ese video?
Mineta: Borra eso Kaminari, me da miedo
Shinso: Creí que había salido de este grupo
¿Cómo?
¿Puedo comunicarme con dos a la vez?
Kaminari: Con muchas más personas
Si agregamos más
Shinso: Homura, ¿Tú le diste mi número?
Yesn't
Shinso abandonó el grupo
Kaminari añadió a Shinso
Mineta: Troleo Homura😎
Shinso: Voy a silenciar este chat, adiós
Por cierto, tengan cuidado con ese video
Parece que está prohibido difundir archivos acerca de Stain
Ya veo...
Ojiro: Xd
¿Cómo les fue en sus prácticas?
Mineta: Los primeros días Mount Lady me hizo limpiar su casa...
Te dije que lo pensaras mejor...
Kaminari: JAJAJAJAJAJAJA
Mineta: NO CREÍ QUE SERÍA ASÍ DE MAMONA, NO ME JODAN
Ojiro:
Mineta: Pero luego al parecer se puso más seria
Mount Lady ser como:
Ojiro: JAJAJAJAJAJAJA
Kaminari: JAJAJAJAJAJA
Shinso: JAJAJAJAJAJAJA
Mineta: PERO PRESTEN ATENCIÓN
Perdón
Son los stickers
El invento más gracioso de la humanidad
Mineta: Bueno, prosigo
Kaminari: Prosiga
Ojiro: Prosiga
Mineta: Luego de que activara el modo serio
Me llevó con su equipo de amigos héroes
Trikitrakatelas
Ojiro: Homura, quien sea que te esté enseñando esas cosas
No es una buena influencia para ti
Kaminari: Confirmo
Shinso: Che Homura más te vale conservar la humildad
Mineta: Oigan
Estaba pensando en llevarle una sandía a Midoriya y los demás
Esa es una gran idea Mineta-kun
Kaminari: Pero ellos ya salieron del hospital
Ojiro: ¿Podemos costearnos tres sandías?
Una para cada uno, bien pensado Ojiro-kun
Yo tengo mil yenes ahorrados😎
Shinso: ...
Ojiro: ...
Mineta: ...
Kaminari: ...
Te faltan ocho mil
Shinso: No tan humilde, Homura estúpido
¿No tienen una amiga millonaria?
Ojiro: ¿Qué clase de persona le pide dinero a un millonario?
Shinso: Cierto cierto
...
¿Entonces no le pido ocho mil yenes?
Mineta: ¡Claro que no baboso!
Kaminari: ...
¿Ah no?
Ojiro: ¡¿Tú también?!
Kaminari: Estaba por pedirle... :C
¿Está contigo?
Creí que era una prank cuando me lo dijiste
Ojiro: Homura, ya basta
Decir esas cosas no te hará más parte de la juventud
Mineta: Das cringe
¿De verdad?
Shinso: Si
Chale :')
Kaminari: ¿Saben? Me desvié del tema
A lo que venía era a ver si ya habían visto el video de Stain
Ojiro: Me da un poco de cosa
Generación de cristal
Shinso: ¿Quién le dice que tenemos casi la misma edad?
El tipo está loco
Pero se ve genial
Kaminari: ¿Verdad?
Ojiro: Es algo que he de admitir
...
Cielos, que tipo tan genial
Kaminari: ¿Ya lo viste?
Siuuuu
Por cierto, ¿Qué pasa contigo, Shinso?
¿A qué hora te pasas a la clase A?
Shinso abandonó el grupo
Denki añadió a Shinso
Shinso: Carajo...
...
Aún no me he rendido, hablaré con el director
Ya sabrán de mi, haré que todos hagan un jodido split
Ojiro: ... ¿Qué?
Que sean dos
Mineta: Y un agua de horchata
Shinso: Trato hecho, sabandijas
Kaminari: Alguien está muy basado por aquí...
Como sea, ya me llaman para seguir con las andadas😎👌
Ojiro: ¿Te van golpear?
Eso fue lo que decía Homura de tu héroe encargado
Kaminari abandonó el grupo
Shinso añadió a Kaminari
JAJAJAJAJAJAJAJA
No puedo hacer nada por ti Kaminari
Shinso: JAJAJAJAJJAJAJAJAJAJA
Mineta: JAJAJAJAJAJA
Andabas muy callado, Mineta
Mineta: Creo que tengo que dejarlos
Mount Lady trajo a sus amigos héroes de nuevo
Y esta vez los acompaña Edgeshot
Kaminari: No jodas
Ojiro:
Es del top, ¿Verdad?
Ustedes si que la pasan bien...
Ojiro: Espero estar a la altura cuando volvamos a clases
En unos días
Kaminari: Ah, yo se que si, es Mineta después de todo
Shinso: Que argumento más poderoso el que acabas de aventarte
Mineta:
Digan lo que quieran
Me la voy a pasar de puta madre, ahí se ven
Adiuuu
Kaminari: Yo también me voy, cuídense
Ojiro: Seguiré entrenando, hablamos luego
...
Nos vemos chicos
Ansío verlos de nuevo, a todos
También cuídense
Shinso: ...
Homura
¿Sabes que puedes verlos si haces una videollamada?
¡¡TRIKITRAKATELAS!!
Shinso: Mejor me voy
Rómpete una pierna, yo también entrenaré
¡Oh! ¡Acabo de recordar algo!
Shinso: ¿Qué clase de cosa recordarías al mencionar piernas rotas?
Quiero presentarte a alguien, ¿Vienes ahora? Puede que te interese
Shinso: ... mándame la ubicación
¿Cómo se hace eso? Ah, olvídalo, alguien me acaba de enseñar
Shinso: Estás algo cerca, llego en 10
Bueno
Adiuuuuu
Fin del chat
A Kai le fascinaba cada que descubría algo nuevo en su teléfono celular tanto como el pan dulce, lamentablemente no lo podía usar siempre porque andaba ocupado, como ahora que lo llamaban para entrenar.
– ¡Himejima-san hola! – Saludó al mismo tiempo que mostraba una sonrisa de oreja a oreja.
La cual solo ocultaba el hecho de que estaba más nervioso que un prota de RomCom genérico.
Sin embargo, no era porque tuviera chicas delante, no señor JA JA JA.
– P-por favor, la prensa gigante no, ya-ya le dije que traería a alguien al dojo – Suplicó sin quitar esa sonrisa que parecía haberse quedado atascada en su rostro por el miedo.
– No te preocupes Homura-kun, estoy seguro que podrás con 60 kilos... – Sugirió Himejima quien estaba por ponerse a rezar por Kai y sus brazos de pollo.
Sin duda nunca olvidaría las prácticas heroicas en toda su vida...
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Dentro de un pasillo con paredes de madera al estilo japonés tradicional, un golpeado y quemado Sid se arrastraba, apoyándose de escombros flotantes y algunas otras decoraciones japonesas.
Que también flotaban.
– Aaah... malditamente inspirador... – Declaró frívolo y cansado.
Al llegar al final, donde había una puerta deslizable, ni siquiera se molestó en abrirla como se debía, de un solo toque el chico destrozó la puerta hacia adelante y pasó.
– Es una experiencia aterradora... y me encanta, ¡Carajo! JAJAJAJAJAJA – Riendo como un maniático, Sid no era capaz de contener la emoción que sentía en aquel momento.
Ni tampoco la rabia.
– JAJAJAJAJAJA... que hago... ¡¡QUE HAGO...!! ¡QUIERO MATAR A HOMURA KAI EN ESTE INSTANTE! – Gritó entre risas y jadeos exasperantes, estaba tan agotado, y eso le hacía sentirse iracundo.
No podía ir con su dichoso Homura quien era ahora la fuente de inspiración principal para liberar aquel poder monstruoso, incluso manteniendo en pie el lugar en donde estaba.
Mientras reía, golpeaba las paredes y el suelo, haciendo inconscientemente que el lugar temblara y casi todo dentro fuera destrozado.
– Eh tú, basura, calma esa rabieta ahora o te mataré – Le habló el hombre de cabellos tan blancos como la nieve...
Y una cicatriz en ambos lados de la clavícula que parecían ser mas bien una equis que descendía hasta su pecho.
Tan sereno como amenazante, Per apareció con el semblante desinteresado de siempre mirando con desprecio a aquel que se recostaba como podía en la única pared intacta de la habitación.
– Pero si es el tipo con tendencias de drogadicto... ¿Una ayudita? – Sugirió sonriendo mientras se sostenía el brazo derecho que parecía habérsele dislocado.
– Solo si me dices contra quien peleaste... – Esas marcas de quemaduras habían llamado la atención del ruso.
– ... no me hagas recordarlo... ese niño... Homura Kai es tan jodidamente irritante...
Los casi siempre ojos afilados de Per se abrieron del asombro.
– ¿Un niño de cabello negro?
– Si, ¿Cómo lo sabes? – Preguntó, aunque ya se olía la respuesta, y no le gustaba para nada.
– Jum, ese niño, Kai... al parecer alguien sobrevivió al ataque de ese pequeño pueblo
Para luego proceder a poner esa afilada mirada, y una sonrisa macabra.
– Si él está vivo... Kyojuro también lo esta...
– No se quien sea ese, pero ahora que lo dices... el niño que había destrozado el laboratorio de Ujiko-san, creo que fue ese mismo Homura Kai... mismo quirk, misma apariencia, no hay duda...
Una sonrisa tenue se esbozó en Sid quien en verdad irradiaba un aura de ira contenida que lo hacía mirar hacia abajo.
– Con que Homura Kai eh... también el mismo que acabó con el nomu apodado "Niño" – Terminando la frase de Sid, el rostro de Per se oscureció mostrándose serio.
Unos segundos de silencio se apoderaron del camino, en ese momento Per tomó a Sid y se lo llevó en el hombro por el pasillo.
– ¡Pfft!
– Fuuh* ... JAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJA
– JAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJAJA
Sonando por todo el pasillo, ambos reían a carcajadas luego de tal revelación, irascibles y saltando venas en sus rostros de tanto reír sin parar, además de la ira y la emoción.
– Homura...
– Ese Homura... ya es todo un hombrecito – Comentó Per apretando el puño hasta sangrar.
– Bien, ahora si que tengo todo un plan en mente... ¡¡Voy a matar a Homura Kai con mis propias manos!!
– ¡¡Todos morirán!! ¡¡Hagamos esto aún más divertido!! Por cierto, no te la tragues – Bromeó Per vertiendo la sangre que salía de la palma de su mano en la boca de Sid.
– Viejo, que asco, pero me siento mejor por el hecho de que jamás tocó nada dentro mío
– Suenas como una mujer caliente, y por otro lado, de nada, me debes una
– Si si... te haré participar de la siguiente misión que tengamos... pero sé paciente...
– Con tal de matar a ese niño y pelear con Kyojuro, esperaré el tiempo que sea necesario
– Bien, entonces está decidido... Homura Kai morirá el 14 de diciembre... si... lo veo todo claramente
– ¿Enserio? ¿En que prefectura será? – Per volteó la mirada para ver a su compañero que colgaba como un trapo sucio en su hombro.
– ... – Se quedó callado, pero con una sonrisa sínica en su rostro.
– ¿No sabes nada verdad? – Volteó Per hacia el frente sintiéndose algo decepcionado.
– Jódete, ya pensaré en algo... algo como... ¡¡Ya se!!
– Cambiarle la fecha no es relevante...
– ¡¡Claro que no baboso!! ¡¡Tenemos que hacer algo de conmoción!!
Per pareció pensarlo un segundo antes de responder.
– ... ¿Masacramos alguna ciudad? – Sugirió con simpleza.
– ¡¡Tampoco!! Algo más... discreto
– Discreto y conmoción no van de la mano, imbécil
Ignorando el insulto, Sid lo meditó un instante, y se le ocurrió algo graciosísimo.
– ¡Ya se! Vamos a estimular un poco el crecimiento del pupilo del jefardo, está claro que su obsesión lo hará chocar con esos debiluchos de UA
– No estás llegando a ningún lado... – Insistió el peliblanco con sorna.
– Idiota, vamos a liberar algunos aliados para que el club del niño crezca...
– Ya veo, supongo que como somos considerados los malos, lo correcto sería darle tipos malos...
– Adoro que la conversación fluya de esta manera, entonces, ¿Dónde se encuentran los tipos malos? – El tono agudo y alegre de Sid hacía parecer que no tenía algunas costillas rotas.
– Hmm, je... ¿Cuál es la prisión más segura en este país?
– Mi querido amigo... ¿Puedo confirmar que piensas lo mismo que yo...? – Preguntó mientras cerraba los ojos con tranquilidad.
Per solo asintió mirando hacia el frente y mostrando una expresión seria.
Entonces Sid abrió los ojos mostrando sus dorados colores en estos, brillantes tanto como locos, mientras que Per afilaba más la mirada y mostraba una amplia sonrisa.
– Tártaros...
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Kai se encontraba tambaleándose por los pasillos de UA con tres sandías entre sus brazos.
Trataba de hacer que no se caigan y hagan un desastre pues los largos brazos de Kai no daban a basto para esas tres monstruosidades por las que luchó de manera sanguinaria contra las amas de casa en el supermercado.
– [Si se cae soy g- ¡¡CASI SE CAE!!] Uff... – El pelinegro de vez en cuando sufría micro-infartos viendo como es que los regalos para sus tres compañeros querían caerse al suelo.
Además del miedo de encontrarse con su profesor justo cuando suceda el accidente.
Hasta que sucedió.
Por distraerse mirando por la ventana un anuncio a la lejanía, la sandía que iba apoyándose encima de las otras dos había terminado por inclinarse hacia adelante, cayendo justo como la autoestima de un chico al ser rechazado por la chica que le gusta.
– [¡¡Sabía que debía aprender a usar Amazon y enviarlas a sus casas!! ¡¡Maldito seas, anuncio de ser tu propio jefe trabajando en casa!!] – Kai palideció sin poder hacer nada más que ver como caía hacia su final.
Sin embargo, y tan propio de la actitud de quien ocupa el primer puesto en calificaciones del curso de heroísmo, salvó el día evitando que la sandía tocase el piso.
– Homura-san, estás haciendo cosas irresponsablemente, otra vez...
– ¡¡Muchas gracias vicepresidenta!! – Iba a inclinarse, pero se dio cuenta de que si lo hacía iban a caerse las otras dos.
– De nada, pero piensa un poco en las consecuencias, por favor – Le recriminó de manera amable, aunque ni siquiera sabía como es que lo dejaron pasar con tres sandías entre manos.
Probablemente sobornó al portero.
Y en alguna otra parte de Shizuoka, Hirofumi sostenía a un criminal por el cuello de su ropa levantándolo como un brabucón.
– Por alguna razón, me siento orgulloso de Homura ahora mismo... meh – Comentó para noquear al tipo de un golpe.
Regresando a la situación actual, Yaoyorozu ayudaba a Homura llevando una sandía para encargarlas con Lunch Rush antes de que comenzaran las clases.
– ¡Por cierto! ¿Qué tal estuvieron las prácticas con Shinjuro-san? – Era algo que solo había escuchado de parte de Denki, pero estaba bastante interesado en que tan buen maestro era el padre de su propio maestro.
De cualquier fuente que no fuera el mentiroso de su amigo.
– Mmm, ¿Qué puedo decirte? El héroe Kagayaku usa un método... poco ortodoxo... – La chica hizo una mueca de nerviosismo al evocar las experiencias que tuvo aprendiendo del tutor de su amigo.
"Ya que este es el último día, les daré lo que merecen niños"
"¿Vacaciones?"
"¿Estudio de nuestras habilidades?"
"Niño amarillo, niña temblorosa... ¡¡Ambos están mal!! ¡¡Haremos el doble de entrenamiento para celebrar que se ya se van!!"
"... Yaoyorozu, mátame"
" ¡¿E-eh?!"
"¡Yo los mataré a ambos si dicen basura de mi dojo cuando se vayan!"
– Ah... ¿Entonces es malo enseñando? – Sonrió de lado al escuchar sus quejas.
Obviamente "SU" maestro Kyojuro era alguien que había tenido que sacar lo mejor del amargado Shinjuro.
No podía ser de otra manera, ¿Verdad? La estúpida cara de suficiencia de Kai denotaba lo poco inteligente que era para entender lo que le quería decir la chica.
– ¡¡P-por supuesto que no!! ¡A comparación d-de otros héroes, Kagayaku-san es absurdamente eficaz y fuerte, además de enseñarnos con rigurosidad en- – La pelinegra se detuvo al darse cuenta de que había alzado la voz inconscientemente.
Se emocionó de más, rápidamente miró en dirección de Kai para saber si se había sentido incómodo con eso.
– Ya veo... como se esperaba de Shinjuro-san... ja... ¡Jajajaja! – Para sorpresa de Yaoyorozu, Homura sonaba todo menos incómodo.
De hecho, Yaoyorozu no sabía por qué Kai se reía, no quería creer que de ella o sino iba a estallar en vergüenza.
– Me alegro de que estés bien, debes haber trabajado mucho para seguirle el paso a Shinjuro así que de seguro te volviste fuerte – Si no fuese por las sandías en sus manos, Kai habría acariciado la cabeza de la chica como recompensa por su arduo esfuerzo.
El viejo no era cualquier cosa.
– S-si...
– Ah, ¿Tengo algo en la cara? – Kai notó cómo la chica no veía el camino por voltearse hacia él.
– No, p-para nada... – Aun si decía aquello, no dejaba de hacer contacto visual.
A veces sentía pulsaciones al mirar a las ventanas rojizas de Kai, una conjetura estúpida para alguien tan inteligente....
O tal vez era otra cosa.
– Tus ojos... – Murmuró la chica sin parecer realmente consciente.
– ¿Pasa algo con mis ojos? – Preguntó el pelinegro algo desconcertado.
– ¡N-nada! ¡Q-quiero decir, tus ojos están rojos! – Sin razonarlo mucho, soltó lo primero que se le cruzó la mente como excusa para camuflar su nerviosismo.
...
– ... m-mis ojos son rojos desde que nací...
Que estúpida, pero graciosa manera de evadir el tema, Yaoyorozu quería saltar por la ventana de la vergüenza.
– Perdón por-
– Acaso... – Algo de nervios entraron en la chica al pensar que Kai descubriría lo que en verdad pensaba, por alguna razón.
– ¡¡¿TENGO UN MAL DE NACIMIENTO?!! – Exclamó preocupado el pelinegro con la cara más seria y tonta que podía.
No iba a dudar de alguien como su vicepresidenta, por algo la habían elegido, no obstante, la reacción que le regalaría sería incluso más confusa.
– ... ¡Pfft! Para nada, es solo el color natural de tus ojos, Homura-san, es uno bastante peculiar... – Suspiró internamente, se había salvado... ¿Pero de qué?
– Entonces no hay nada de malo... ¡¡Uuff!! Aun así, gracias por preocuparte viéndome [Aunque, eso es raro, lo siento vice]
Ella simplemente asintió ocultando su vergüenza.
– E-es lo normal cuando recibes ayuda, hay que ser recíprocos en favores, ¿No?
– ¿Te refieres a lo del festival? De nada
– S-si... de verdad gracias, fuiste de mucha ayuda – Le sonrió con serenidad, llegando donde Lunch Rush.
Aunque en el momento en que lo vieron al llegar, cayeron en cuenta de que iban a dejar tres sandías, debían dar una excusa creíble.
Eso fue lo que pensó Yaoyorozu, además de que, sinceramente, era penoso hacer este tipo de cosas. No eran niños para hacer este tipo de "travesuras".
– ¡Profesor! ¡Quisiera dejar estas sandías aquí por el resto del día escolar, por favor! – Pidió el chico con seriedad.
– ... [Admiro que seas tan sincero, ¡¡Pero tú si pareces un niño!!] – Pensó nerviosa la chica al verse envuelta en esta situación, ocultándolo con una sonrisa impasible.
– Homura, soy el cocinero, no un profesor – En este momento Yaoyorozu ya estaba ocultando su rostro con sus manos de la risa y la pena.
– A-aun así, este... es un regalo para mis amigos, ¿P-podría guardarlas, por favor? – Suplicó Kai con el rostro rojo e inflando las mejillas de vergüenza.
Lunch Rush suspiró y simplemente aceptó las frutas, aunque Kai tuvo que ayudarle para ser rápidos.
– Pásame la otra sandía Yaoyorozu – Avisó el chico acercándose para recibirla, aunque al momento de pasarla sus manos se tocaron.
No era nada especial, en serio.
¡No debía ser nada malditamente especial!
Eso era lo que juraba la chica mientras fruncía el ceño ocultando su expresión vergonzosamente roja por el contacto extremadamente mínimo que había recibido.
¿Qué demonios? No era fan de las comedias románticas, pero si conocía lo que era un jodido cliché cuando lo veía, y en verdad que daba pena ajena.
Se maldijo a si misma por caer en tal cosa, pero al menos no era una tontería como un beso indirecto.
Un beso indirecto con Homura...
– Y-Yaoyorozu, la sandía, por favor – Pidió Kai, no le quería quitarle de las manos la fruta como si nada.
El cerebro de la chica volvió a funcionar y se disculpó rápidamente soltándose, al parecer ese no era su día, su corazón latiendo de manera extraña lo confirmaba.
Y luego de dejar las sandías en su lugar, caminaron hacia el salón de clases donde lo primero que se encontraron fue a Bakugo con un corte de pelo tazón.
Se vieron un segundo para luego reír levemente y sentarse.
– ¡Chicos! ¡Enséñenme como hacer una videollamada por favor! Solo sé recibirlas – Exclamó el chico algo emocionado por ver de nuevo a sus besto frendos.
– Eso sonó mal Homu-
– ¡Cállate Mineta! ¡No te preocupes Homura yo te ayudo con eso! – En verdad que el enano era un sucio con cualquiera, por eso se llevó un golpe de Kaminari para callarlo.
– ¿C-cómo les fue en las pasantías...? – Preguntó el pelo de uva recuperándose.
– El héroe con el que fui parecía actuar más como un villano dictador – Se quejó Kaminari.
– Yo fui a las prácticas heroicas y terminé aprendiendo a como limpiar una habitación en menos de cinco minutos – Expresó Mineta con pesadez.
– Un gran cambio – Mencionó Homura subiendo los ánimos con una sonrisa.
– Sin embargo, puedo decir que soy alguien nuevo, pero sabes, quienes en verdad se han transformado son esos tres – Señaló Kaminari a aquellos que se habían visto enfrascados en una pelea contra el asesino de héroes.
– Cierto, me alegro de que estén vivos chicos – Kai soltó un suspiro al ver con sus propios ojos que estaban sanos y salvos.
– [Incluso les compró sandías, de verdad estaba preocupado...] Lamento no haber entendido el mensaje chicos – Yaoyorozu se acercó a sus compañeros para expresar su alivio.
– Gracias por eso, ¡¡Todos, tomen asiento!! ¡¡El profesor llegará en cualquier-
– ¡¡YA ESTOY AQUÍ!!
Luego de aquello, el profesor All Might llegó para dar las clases heroicas en el campo gamma, donde los esperaría mientras los aspirantes a héroes se cambiaban.
– El nuevo traje te queda bien Homura.... y-y la cicatriz está cool – Halagó Denki algo nervioso de preguntar cómo había obtenido una cruz en todo el tronco.
– Gracias, al parecer los de la compañía de fabricación se equivocaron y...
– ¿Eeeh? ¿Cómo dices? ¿Entonces el otro si era un uniforme de basurero? – Preguntaba Mineta con una sonrisa socarrona.
– Mineta, que hayas crecido dos centímetros no quiere decir que ya vas a ponerte a mi altura – Se rio Kai, tratando de no adular el crecimiento de su amigo enano.
– Eres pésimo insultando, pero está bien, eres más gracioso así – Denki le dio una palmada a Kai en la espalda.
– [Mierda, que grande]
– Eso no está bien Kaminari, Homura podría terminar siendo "el amigo gracioso" para las chicas y nada más – Decía el enano con preocupación por su amigo.
– ¿Ya se pusieron sus uniformes? – Preguntó Kai hastiado.
– Tienes razón, debería utilizar el favor que me debes para tu bien... cielos, ¿Qué harías sin nosotros Homura? – Expresó Denki adulándose a sí mismo... y a Mineta, tal vez.
– Ya ponte el traje viejo, el profesor nos espera afuera – Mineta se apoyó en Kai y se balanceó hasta Kaminari para ponerle su chaqueta negra de un salto; bastante calculado.
El rubio y el pelinegro se miraron un segundo antes de notar que, en realidad, Mineta si había aprendido algunas cosas en sus prácticas heroica.
– [El mundo podría acabarse ahora sin problemas] – Pensaron ambos.
Entonces, los tres juntos llegaron últimos al campo gamma, aunque justo a tiempo para escuchar lo esencial del ejercicio heroico.
Siete grupos de tres personas serían enlistados, en los que cuando el profesor diera una señal de auxilio, los tres del grupo iniciarían una carrera desde fuera de los límites del campo para ir en su rescate.
Ver quien llega primero, ese era el objetivo.
– Obviamente manteniendo los daños en la infraestructura al mínimo – Aclaró el profesor mirando específicamente a Bakugo, el cual gruñó en su lugar.
Tras haberse hecho ya 6 carreras consecutivas, el ejercicio llegaría a su final con el último grupo de tres.
– Bueno, ya sabemos quién ganará la última, ¿Verdad? – Preguntaron por ahí.
– Aunque alguno haya sufrido un cambio radical como el de Deku-kun, el quirk de Homura es el más indicado para este tipo de situaciones – Acotó Uraraka la cual estaba apenas agotada luego de tal carrera.
– Es difícil pensar que podrían ganarle... pero esos chicos que se juntan con él, se ven diferentes...
– ¿A qué te refieres Tokoyami? – Preguntó Kirishima a su lado.
– No lo sé, es solo un presentimiento, pero... pareciera que la luz de Homura... atrajera a la oscuridad de esos dos, invitándolos a competir, aún si creen en lo contrario – Comentó con seriedad el genial Tokoyami.
– Ciertamente, esos tres están callados, es un poco raro entre ellos – Ojiro quien estaba sentado, se sentía ansioso, por alguna razón.
– Es un grupo peculiar, kero
– ¡Ah! ¡Míralos! ¡Están imitando al Eines Lobby! – Exclamó Kirishima señalándolos.
Lo que todos veían por las pantallas, era al trío de raritos parados en los límites del campo encima de una barra metálica de gran altura, de brazos cruzados e imitando cierta escena de un anime que ya llega a los mil capítulos.
– ¿De verdad nos vemos bien en esta pose? [¿Hace cuánto que no me corto el cabello?] – Preguntó Kai sin dejar de cruzar los brazos, con la corriente de aire dándole en la cara.
– Por supuesto que sí, ¿Acaso no le sabes al besto shonen? – Preguntó Denki de la misma manera, haciendo que su chaqueta se moviera con la brisa.
– Estás muy basado Kaminari, hay mejores, pero en verdad todos en la sala de control deben pensar que nos vemos muy facha – Mineta les habló, dejando que el aire ondeara su capa de manera genial.
Mientras tanto en la sala de control.
– A Homura casi lo empuja el aire – Señaló Shoji viendo a la pantalla.
– ¡Pfft!
Regresando.
– ¡¡¿D-dónde se metió All Might?!! – Preguntó Homura sosteniéndose de la barra metálica.
Con All Might.
– Uff, ya me estaba matando las ganas de ocupar – Admitió el héroe silbando con tranquilidad.
– ¡¡OH SHIT!! ¡¡ME OLVIDÉ DEL ÚLTIMO GRUPO!!
Regresando, otra vez.
– ¡¡N-no lo veo!! – Gritó Mineta quien se sostenía de los pies de Homura, debido a que se tropezó y casi se cae.
Luego de la vergüenza anterior, los tres volvieron a la misma posición, riendo para calmar el ambiente.
Entonces, todos vieron con dificultad que, a la lejanía, All Might hacía acto de presencia, otra vez.
Fue entonces que, los tres amigos detuvieron sus risas.
– Demos lo mejor – Señaló Kai seriamente, sonriendo ladinamente y con los brazos cruzados.
– Es surrealista, pero siempre pienso en ganar cuando estoy con ustedes – Confesó Kaminari preparándose.
3...
– Oye Homura
2...
– ¿Algo que decir, Mineta?
– ...
1...
– Seamos héroes – Le declaró con una sonrisa ladina.
¡¡Comiencen!!
Antes de que alguno se enterara, los tres ya habían saltado al vacío como si nada.
– Vaya... – Murmuró Tokoyami.
– Q-que ferocidad... – Dijo Sero viendo a los tres maniobrar entre tuberías a su manera.
Todos con una sonrisa.
Kaminari corría por las tuberías entre saltos que lo mantenían en altura y que, parecían que en cualquier momento caería de lo más alto, aunque era el que iba más atrás, esa sonrisa socarrona parecía generar cierta duda.
Mineta era sorprendente, al parecer el hecho de que Edgeshot lo obligó a ponerle más seriedad a su desempeño como héroe lo empujó a explotar aquellas habilidades que explicaban como era que él también pertenecía al curso de héroes.
"Pareces moralmente trastornado, pero supongo que tú también deseas algo con todas tus fuerzas, espero que aprendas que ambición e ideal son cosas totalmente diferentes"
– ¡¡No me quedaré atrás!! – Gritó Mineta lanzando esferas en puntos específicos de las tuberías, justo donde iba a caer y en el ángulo casi perfecto para impulsarse hacia adelante, además de pegar unas con otras y balancearse por debajo de las tuberías.
Él no se iba a quedar atrás.
A su vez, parecía que el campo estallaba al ver como Kai saltaba entre tuberías impulsado a gran velocidad, dejando marcas de quemadura por donde pisaba, el chico sonreía al sentirse golpeado por la presión de aire, aunque aún así, no era suficiente para dejar atrás a sus compañeros.
Pisándole los talones, Mineta parecía acercársele mientras más abarrotado se volvía el entorno, entonces Kai optó por sobrevolar las tuberías, era algo que había estado practicando, el poder volar sin límites y que su respiración no se acabase en el intento.
Era arriesgado, pero el que no arriesga no gana.
Lo mismo iba para Kaminari quien viendo cómo se adentraba a un entorno lleno de muchas más paredes y tuberías que antes.
Era su momento de brillar.
– ¡Miren! ¡Es el movimiento que usó en la carrera! – Exclamó Toru con asombro.
Parecía teletransportarse entre tuberías.
Una por una, las plataformas en las que se subía Kaminari eran abandonadas en cuestión de segundos por el hecho de que el chico liberaba una corriente de 60 a 40 entre pies y brazos respectivamente, provocando que la electricidad lo eyectara fuera del piso.
– [Justo como Kagayaku-san le enseñó] – Pensó Yaoyorozu con emoción viendo como el campo gamma centelleaba entre colores morados, rojos y amarillos.
Ninguno iba a dejárselo fácil al otro.
– [Con una respiración controlada...]
– [Un cálculo instantáneo...]
– [¡¡Y la completa sincronía en los movimientos!!]
– [Yo... ¡¡VOY A GANAR!!] – Pensaron los tres amigos con adrenalina al ver a All Might parado en la meta.
Y entonces, los tres llegaron al final.
– ¡¡Increíble!! ¡¿Alguien vio quien ganó?! – Exclamó Kirishima con emoción.
– [Casi los pierdo de vista...] – Pensó Bakugo, no iba a admitirlo, pero esa carrera le había llamado la atención.
Aunque de mala manera, al parecer.
– ¡Bien bien! ¡Todos aquí han aprendido a cómo utilizar sus quirks con tal libertad que me dan escalofríos! ¡¡Ahora manténganlo así y prepárense para los exámenes de finales de ciclo!! – Dijo All Might avisando una vez más que no debían confiarse.
UA no paraba por nada del mundo.
– Por cierto, fui yo quien ganó – Ya en los vestidores, Kai afirmaba su victoria.
– Nada de eso viejo, yo gané – Le negó Kaminari.
– ¿De qué pendejadas están hablando? – Alegó Mineta quien se acercaba a Midoriya para avisarle que había encontrado un easter egg en los vestidores.
Justo detrás de un póster, un agujero en la pared que dejaba ver los vestidores femeninos, ese era el regalo que los senpais le habían dejado a la generación actual...
– [Debería detenerlo... pero olvidé por qué razón debería...] – Era algo que se le había olvidado con el pasar de las prácticas.
– Ah, ya me acordé... ¡Mineta! ¡Puto el que mire por ese agujero! – Gritó el pelinegro haciendo que el enano se volteara a reclamarle.
– ¡¡Es un precio que estoy dispuesto a pa- ¡Suéltame maldito! – Le reclamó Mineta pues ahora estaba forcejeando con Kai.
– ¡Midoriya! ¡Ayúdame antes de que le pe-
Y en ese momento, un cable jack se asomó por al agujero de manera hostil clavándose al hombro de Homura.
– A-auch... – Resignado, aguantó la primera vibración antes de lanzar al enano como un balón de fútbol americano hacia su compañero Sato.
Y haciendo una mueca de dolor, se quitó el jack y lo devolvió por donde vino, tras eso, Iida tapó el hueco.
Luego de la bromita de Mineta, todos regresaron al salón en donde el profesor a cargo de la clase daría explicaciones del siguiente evento próximo a realizarse en el curso de heroísmo.
– Ah, ya lo veo, las vacaciones de verano se acercan, por supuesto, he de asumir que ninguno tiene el tiempo libre para relajarse durante 30 días... – Estaba más que claro que lo que el profesor quería decir era que no iban a tener vacaciones en verdad.
O no como alguien lo pensaría.
– En ese caso... – Durante la pausa de cinco segundos que se tomó Aizawa, la tensión aumentó de golpe en el salón.
– [¿Me pareceré al profesor si dejo crecer mi cabello...?] – No, no se iba a parecer, esa era la respuesta a lo que se preguntaba Kai.
En otras palabras, honestamente no le interesaba el anuncio.
Y fue en ese momento que el silencio se rompió.
– ¡¡BAÑOOOOOOOS!! – Gritó Mineta.
– [Siento que este tipo quería gritar otra cosa...] – Para Kai, ya era casi un reflejo el presentir que Mineta diría o haría algo estúpido.
Nuevamente, el burro hablando de orejas.
– ¡¡AGUAS TERMALEEEEEEEEES!!
– [¿Aguas termales?] ¿Te refieres a "esas" aguas termales? – Le preguntó Kai.
– Se refiere a "esas" aguas termales – Respondió Kirishima.
– Esas aguas termales son mucho mejores directo de la naturaleza – Acotó Ojiro.
– ¡¡AGUAS TERMALEEEEEEEEEEES!! – Gritaron la mayoría de los hombres.
– ¡Sin embargo! – Manteniendo el orden en el salón, Aizawa intimidó a los estudiantes activando su do.
– Si alguno de ustedes falla en los exámenes de fin de ciclo, la pasarán encerrados en la escuela en un infierno terapéutico – Sentenció el profesor, desactivando su don.
– ¡¡Démoslo todo chicos!! – Los gritos aún no cesaban para Kirishima y Kaminari.
Con la advertencia ya hecha, todos en la clase a se esforzaron mucho en el transcurso de los días.
Entrenaron, estudiaron y dieron todo de sí, hasta que de un momento a otro, ya se encontraban en la última semana de Junio, una semana antes de las pruebas de fin de ciclo y...
¿Saben qué? Olviden lo que dije.
¡¡ELLOS NO ESTUDIARON PARA NADA!!
– ¿Estudiar? No bro, no conozco ese tipo de pan, ¿A qué temperatura se hornea? – Aclaró Kai sudando y temblando en su lugar con una sonrisa tiesa.
Aunque él ocupaba el décimo puesto... ¡¡NO TENÍA NI IDEA DE CÓMO ES QUE LO HIZO!!
– Pero chicos... ya es muy duro que también haya un ejercicio práctico... – Desde su asiento, Mienta trataba de verse genial siendo el octavo puesto en calificaciones de su clase.
– Siendo así, supongo que no hay problema en que los ayude a estudiar, si les parece bien... aunque por la parte práctica no tanto... – Con su buena intención y un susurro deprimente, Yaoyorozu se ofreció para enseñarle a aquellos que se vieran perjudicados por sus notas.
A los beneficios de la buena acción se sumaron otros compañeros, poniendo feliz a la vicepresidenta.
– ¡Yo tam- – Kai también quería unirse al grupo de estudios, sin embargo, un mensaje entrante lo interrumpió, además de que sonó la campana del receso.
Dicho sonido era una alarma para el hambre de Kai, quien instintivamente se retiró hacia la cafetería mientras veía a su teléfono celular.
Una mirada azabache se posó fugazmente en el muchacho que se retiraba.
Sin darse cuenta, Kai ya estaba sentado en una mesa comiéndose un gran tazón de tempura ignorando los llamados externos que le hacían.
– ¡OYE! ¡Estúpido Homura!
– ¿E-eh? ¿Shinso...? – En efecto, el mencionado se encontraba delante suyo.
– Te llevo hablando un rato... y tú, ahí lo tienes, ahora muévete... – Ordenó el chico, entre susurros y un tono normal, aunque al parecer no se lo decía a él.
Fue una sensación de déjà vu bastante fuerte para Shinso, aunque fue cortada por la chica que venía detrás suyo.
– Permiso – Fue lo único que dijo Yui quien venía con una bandeja de comida, al igual que Shinso.
Luego de que ambos se sentaran, Kai se animó a preguntar.
– Es genial almorzar con ustedes, pero quisiera saber, ¿Por qué? – Preguntó Kai, pidiendo contexto.
– Eso es grosero de tu parte, Homura – Dijo Shinso mientras le daba un bocado a su comida.
Yui a su lado simplemente hinchó las mejillas con recelo y volteó su mirada.
– P-pero no era mi intención, es solo que es extraño...
"Sigues siendo grosero, tonto." Fue lo que escuchó Kai provenir de un susurro de Yui, que evitaba verlo.
El pelinegro puso los ojos como puntos al escuchar a la chica, era muda para todo, ¿Menos para insultarlo?
– Bueno, lo que sucedió es que ella vino a mí para preguntar acerca de- – Antes de que Shinso dijera algo más, sintió una patada en su pierna.
Que era de Yui.
– [¡¡Pero si fuiste tú quien quería saber más de él!!] – Shinso la miró con una expresión de repugnancia y decepción.
Yui simplemente ignoró su cara y en lo que parecía ser código morse, le expresó que fuera él quien le hiciera la conversación.
– [Que molestia...] – Era lo que pensaba Shinso, aunque en el fondo le agradase ayudar.
– Entonces... ¿Hablaste con los profesores? – Kai se adelantó a Shinso para hablar, lo cual era más conveniente, además de que hacía lo que le pedía a su manera.
– ¿Hmm? Si, dijeron que cabe la posibilidad de dar un examen en un tiempo...
– ¡Me alegra escuchar eso! ¿Sabes? Iba a preguntarle al director si podías pasarte a nuestra clase, pero me di cuenta de que eso sería un poco tonto ¡Jajaja! – Le sonrió con pena mirando hacia otro lado.
– ... – Shinso volteó a ver a la chica la cual estaba temblando de risa en su sitio.
– ¡Ah! Pero aprendí a navegar por internet, y busqué registros de personas que no comenzaron sus estudios proyectándose como héroes – Kai sacó de sus bolsillos un papel y se lo entregó a Shinso.
– ¿Qué es esto?
– Son libros escritos por héroes extranjeros acerca de materia heroica, los puedes buscar en alguna biblioteca, si quieres te puedo acompañar – Hubo un momento de silencio en cuanto Kai terminó de hablar.
¿Qué sucede con este tipo? Fue lo que pensaron ambos amigos chicos al lado de Kai.
– [Ya tengo estos libros... sin embargo...] Gracias Homura, los obtendré luego de que terminen los exámenes de fin de ciclo – Tras mencionar aquello con una sonrisa, pudo notar que ambos pelinegros se pusieron incómodos.
Solo podía ser por una razón.
– [Me voy a arrepentir de esto...] S-si quieren... puedo ayudarlos a estudiar, soy el número tres de mi clase – Mencionó Shinso rascándose la nuca.
Entonces, la mirada de Kai se iluminó.
– ¡¿Enserio?! ¡De seguro que alguien de estudios generales es muy inteligente! – Era una lógica simple, pero acertada, UA no flaqueaba en ningún departamento.
Yui solo volteó con las mejillas llenas de comida, agradeciendo con un asentimiento.
Un suspiro cansado salió de Shinso, sonriendo para seguir con su plato de curry, aunque se olvidó de lo que le pidió Yui.
Pero la chica había estado viendo a Homura desde el inicio, y hablando de él, su semblante no era el mismo que antes de hablar con ellos...
¿Cómo es que ella fue capaz de notar eso? Se preguntó Yui a sí misma, luego trataría de responder esa pregunta, Homura podría estar en problemas y ella...
...
Ok, si, lo iba a admitir, ¡Pero solo para ella misma en su subconsciente! Estaba preocupada por Homura.
Entonces, Kai sintió que lo jalaban de la manga de su uniforme, volteando a ver a Yui.
– ¿Qué te tenía tan preocupado? – Fue lo que le preguntó ella de inmediato.
Kai no podía decir si debería estar sorprendido o aterrado por la velocidad con la que preguntó.
– [¿Estará bien decir esto...? Bueno ya que] E-es que... acabo de descubrir que los exámenes prácticos de fin de ciclo... serán contra héroes profesionales
Luego de decir aquello, tanto Yui como Shinso mostraron un mínimo atisbo de sorpresa.
– ¿Cómo sabes eso? – Preguntó su compañero de cabello morado.
– Pues...
Kai les mostró su teléfono celular, justo en una conversación que tuvo con su maestro, Kyojuro.
Los dos chicos se acercaron a Kai, aunque Shinso tuvo que darse la vuelta o Yui le comenzaría a pellizcar, quedando Kai en medio de ambos chicos de clases diferentes, aunque más la del B.
Un mensaje claro y conciso fue lo que leyeron, expresando aquello que el departamento de héroes quería saber...
Kai mi muchacho, prepara a tu clase
El último obstáculo a superar en su ciclo escolar
¡¡Seré yo!!
♪♫Juju Sanpo♫♪
https://youtu.be/msMj_8mteiE
Ha iniciado el otoño, un viento que canta una melodía gris lo delata.
Danza con las hojas de los árboles que caen sobre el llameante páramo.
[Aquel nacido en Otoño...]
Bailan y caen con tal intensidad como los últimos vestigios del deseo arraigado en mi pecho, sobre el querer y ser querido.
[Porque yo te quería...]
Se hunden en la tierra, se mezclan entre sí, se abrazan y se miran, postran un último vistazo sobre la copa del árbol donde nacieron y crecieron,
el jardín sobre el cuál fueron regados, se despiden del cantar de las aves y su visita que, aunque efímera, es más que suficiente para llenarse de dicha.
[Eso es lo que quiero creer...]
Aquellas esperanzas dan un último suspiro, su belleza pasa desapercibida para la mayoría, pero no para los recuerdos que las vieron crecer, quiénes lo fueron regando, nutriendo, anhelando.
[Jamás desaparecerías en mi]
Llega el otoño, y sólo pienso en arrancar aquello de raíz.
Para así sembrar nuevamente todo aquello que me hizo ser feliz.
Los días se sienten como tres otoños
De: Kai
Para: Yoshiaki
つづく
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