第26章 | Lo que debe ser protegido
.
.
.
"Por favor, salva a Yui..."
"¿Eh? ¿Yui está en problemas?"
"..."
"... n-no, no es nada, Homura-kun, solo un delirio de este viejo"
"Seiko... el chico soportó la droga..."
"¿Eh? ¿Droga?"
"¡O-Olvídalo! Cuando está borracho, Oda se pone a decir tonterías... no hay de qué preocuparse"
"Saori-chan, por favor créeme... hoy... Fujio se veía diferente cuando vino buscando a Yui..."
"P-pero..."
"Nuestra nieta nos necesita"
"..."
"Kai-kun... puedo ver que cargas con una gran cruz en tu espalda... pero te lo ruego, por favor, salva a mi nieta"
"¿Salvarla de quién?"
"Homura-kun, F-Fujio-san es un hombre violento... y desde que mi hija falleció, ha mostrado cierta repulsión por todo lo que esta dejó como legado..."
"¿Qu-qué...?"
"Nos desprecia, tal y como hace con Yui... pero aún así, por alguna razón la mantiene a su lado"
"Incluso tú deberías haberlo notado... ese hombre te drogó, por eso te desmayaste, Kai-kun"
"Quieren decir que..."
"No es seguro que ella esté con él, siempre que vuelve aquí... tratando de ocultar heridas, no puedo soportarlo más"
"Es-Está en peligro y nosotros no- no podemos hacer más que esto... por favor... no sé qué haríamos si ella no..."
"Y-Yo... Oda-san, Seiko-san, no digan más. Yui también es alguien preciada para mi... prometo traerla de vuelta"
"Muchas gracias... Homura-kun..."
Homura-kun...
—Homura-kun...
— Homura...
— Oye, Homura...
— ...
—¡¡¡OYE, HOMURA!!!
—¿Hue? Eh, ¿Si...? —Balbuceó Kai desorientado.
No lo sabía, pero desde la noche anterior, donde cenó en casa de los abuelos Kodai, Homura había estado meditando acerca de su petición y lo que había dicho.
Salvar a Yui de su padre... ¿Qué demonios significaba eso?
Y sin darse cuenta, el pelinegro había estado afirmando a todo lo que le decían o pedían. No era bueno para analizar tanto las cosas.
Como resultado, Kai tenía otro trabajo sin paga por un mes... y había sido invitado por Midoriya a un entrenamiento de resistencia en la piscina de UA. Raro, pero cierto.
Eso explicaba por qué se encontraba en los vestidores preparándose para ingresar a la gran alberca.
—Te quedaste mirando al casillero por un rato, ¿Vamos a nadar ya? ¿O te meterás con todo y tu ropa? —Le preguntó Kaminari con burla.
—... ¿Qué?
—Que te quites esa mamada de playera, ya sabemos que tienes una panadería y que dejaste en bancarrota a la pizzería donde trabajábamos... —Se quejó Mineta apurando al pelinegro.
Homura ni sabía bien qué sucedía, así que simplemente hizo caso a lo que entendió, por lo que se quitó la camisa sin rechistar.
—¡¿Qué carajos?!
—¿Dónde te hiciste eso?
—¡Jesús de Veracruz! ¿Estás bien Homura?
—¿Eh? ¿De qué hablan? —Preguntó Kai.
—¡Eso no estaba ahí la última vez que nos cambiamos! —Exclamó Sero tocando la cicatriz en forma de cruz que el alto tenía en su pecho.
En los exámenes había pasado desapercibido por los nervios de todos.
—Ah... —No quería pensar mucho en eso, por lo que solo respondió a grandes rasgos. —Un villano de mis pasantías me lo hizo
Un sonoro "ah" sonó entre los muchachos antes de volver a lo suyo.
Finalmente, Kai y compañía fueron directo a la piscina donde se encontraron con la "sorpresa" de que las chicas también la estaban usando.
'Los trajes de baño de UA están bien...' Fue el pensamiento compartido que tuvieron los varones del 1A.
Excepto Denki... y Kai.
—Se supone que deberían de ser bikinis... —Maldijo el rubio fastidiado.
— [H-Homura-san me está viendo...] —Incluso si las alertas de Yaoyorozu saltaban solo con ver la enorme marca que tenía Kai, fue imposible para ella sentirse nerviosa por cierta mirada de color rojo.
Tal parece que Yaoyorozu ya no necesitaba calentar más tiempo.
— [Esto... esto es emocionante] —Pensó Kai mirando descaradamente a las chicas.
— [Lo perdimos...] —Fue lo que pensó Ojiro al lado de Kai.
—Los bañadores escolares son god...
Kai agradecía que nadie le diese más importancia a la gran cicatriz que tenía, así podría disfrutar de esta nueva experiencia, nunca había estado en una piscina después de todo.
—Es como un río pero más pequeño... y sin corrientes que te estrellen contra rocas
—¿Q-Qué? —Preguntó Midoriya preocupado.
—¿Ya vamos a nadar o cómo?
—Verga —Respondió Mineta.
—¡No seas grosero Mineta-kun! ¡Debemos estirar primero! —Iida ignoró a Denki ahorcando a Mineta y puso orden para los chicos que se estaban riendo.
Así, mientras las chicas jugaban voleibol con música de Haikyuu de fondo, los chicos parecían estar compitiendo por quién hacía la mejor pose candidata para un calendario.
Clic*
—¿Eh? Qué fue ese ruido?
—¿Qué pose de mierda es esa? —Inquirió Mineta.
—¿Eh? No- yo...
—Sin peros Kaminari-kun, el siguiente es Homura-kun —Informó Iida llevándose a su compañero el cual trataba de avisarles que había extraño a la afueras.
—A un lado, voy a imitar a ese tipo que vimos en ese anime de dudosos físicos —Anunció Kai tratando de hacer que Kaminari se fuera.
Eran tres chicos sin camiseta forcejeando entre sí...
CLIC CLIC CLIC CLIC CLIC*
Claramente Kaminari terminó notándolo.
—[¡¡Están tomándole fotos a las chicas...!! ] —Kaminari pensó en ese hecho por un instante. Y sonrió. — [Hehehe...] —Un malicioso plan se armó en su cabeza y necesitaba a alguien para ayudar.
Entonces el rubio dejó de forcejear, no sin antes susurrarle algo a Homura.
—Oye, están tomándole fotos a las chicas, sígueme cuando te avise para detenerlo...
—¿Eh? ¿Qué? —Kai volteó a verlo confundido, buscando de dónde podría venir tal acción, aunque lo único que hacía era tensarse más.
—¡Eso Homura! —Gritó Sero.
Para terminar de molestarlo, los chicos comenzaron a vitorearlo, lo cual hizo que se avergonzara, flexionando más su cuerpo.
Clic clic*
—¡Ya lo vi!
El sonido de una cámara junto al grito de Kaminari hizo que toda la tensión de Kai se liberara de inmediato. A toda velocidad, dos borrones volaron directo al lugar donde provenía el sonido.
Kai y Denki se fueron contra un sujeto cubierto de pies a cabeza con un gran abrigo.
—¡Te tengo- espera... ¡EEH QUE SE PARTIÓ! —Exclamó Kai con el corazón en la boca, sometiendo solo a la mitad inferior del cuerpo del "acosador".
Kaminari alzó la vista para ver con asombro cómo la mitad superior yacía levitando sobre ellos.
—¡No me atraparán con vida bastar-! ¡KYAA! ¡T-Tú no puedes tocar! —Farfulló avergonzado el acosador, por alguna razón.
— [Esta suavidad...] ¡E-espera Kaminari creo que-!
—¡Esa cámara vendrá conmigo! —Gritó Denki saltando con toda su fuerza en la dura espalda de Kai, lo suficiente como para lograr aparecer delante de su objetivo.
Dándose cuenta de que en realidad era una acosadora.
—¡¿T-TÚ?! —Preguntó Denki exaltado.
—M-Maldita sea... —Fue lo que Setsuna Tokage musitó cuando fue inmovilizada en el suelo.
El rubio revisó la cámara, encontrándose con fotos que no eran de las chicas, sino de los chicos...
—¿Ella no es del B? ¿Qué hacemos? —Preguntó Kai acercándose con su parte inmovilizada en sus brazos. —¿Kaminari?
—Esta mierda no me sirve... —Sin expresión en particular, Denki vio a la chica con una cara asustada, y era entendible, hacer algo así en UA requería huevos, o lo que tuviese esa chica, Denki faltó a esa clase de biología, pero el punto era que estaba mal, y la escuela probablemente no iba a permitir eso...
Sabía que ella estaba mal, pero ¿Y si la expulsaban...?
Parecía que sus compañeros estaban por ver la situación en la que estaban, así que debía decidir rápidamente.
Cubrirla... o que recibiera su castigo...
Denki ya había hecho su elección hace rato, solo estaba añadiendo suspenso a la chica del B que lo había molestado en el festival.
—¡Homura, rápido! Suéltala —Exclamó Denki, aprovechando la naturaleza lenta del pelinegro.
Tal y como era su manera de ser, Kai simplemente soltó la parte inferior de la chica, aunque ahora tenía una extraña sensación de vacío en sus manos...
Rápidamente, Kaminari sacó la memoria de la cámara y se la dio a la chica.
—¡Vete ahora antes de que lleguen los demás! – Ordenó el rubio quedándose con el aparato.
Sin mediar más palabras, la peliverde desapareció del lugar separándose en varias partes.
—Oye... ¿Esa no era...? —Confundido, Kai se acercó a su amigo rubio para buscar respuestas, todo pasó demasiado rápido para el pobre tonto.
—Solo olvídalo viejo... por cierto, quema esta cosa...
—... ta bien
Tampoco es que realmente le importara.
Y así sin más, Kaminari destrozó la cámara delante de todos, y luego Homura la pisó con su fuego.
Tras eso, el día en la piscina prosiguió sin nada interesante para Kai. Claro, se estaba divirtiendo en la piscina, ayudaba que el agua no fuese un río embravecido que lo arrastraba cada que se metía, pero era difícil enfocarse mucho en el jolgorio sabiendo que algo duro podría estar sucediendo bajo sus narices.
—[Piensa, ¡Homura!]
Realmente, ¿Qué estaba haciendo? Tenía un gran deber y no sabía ni por dónde empezar, incluso si confiaba en su fuerza un poco más que antes, no podía hacer nada con eso en este momento.
Era prácticamente inútil.
—... ese hombre está discutiendo con el profesor del B... —Mencionó Mineta colgado de la cola de Ojiro.
—Vaya entradas... —Comentó Tokoyami, a lo cual todos rieron.
—¿Eh...?
Lentamente, Kai volteó la cabeza hasta dar con la imagen de alguien que le haría abrir los ojos con fuerza.
—[¡Es él! ¡Definitivamente es él! ¡Esa gran frente lo delata!] —Esta era su oportunidad de oro, no debía desperdiciar ni un segundo más. —Adelántense... voy al baño
—Te limpias bien
Kai no esperó en responderles para alejarse de ellos, escondiéndose tras una pared cerca de la entrada, el lugar perfecto para escuchar su conversación sin ser notado.
—¿¿Una semana?? ¿Qué es esto? ¿Anime por temporadas estacionales?
—Bueno, si viene de repente y pide un retiro de matrícula de la academia justo a fines del primer ciclo... —Vlad King suspiró pesadamente.— y a días de un evento que involucra la asistencia de su hija pues... no sé qué esperaba
—... no juegue conmigo...
—Señor, créame, jugar no es algo que puedo permitirme ahora que me acaba de dar más trabajo... así que espere una semana por el acta y no habrá problemas...
—¡Tch! Como sea, Yui no volverá a pisar este lugar nunca más, ella merece un futuro mejor que esto...
—¿... eso era todo?
—Si, nos vemos en una semana...
Una semana...
En una semana...
—Yui se irá de UA...
—¿Quién dices que se irá de UA? —Apareciendo detrás de Kai, una voz familiar se hizo presente, asustándolo en el proceso.
Provocando que el chico soltara un grito muy varonil.
—¡PFFFT! JAJAJA- —Antes de que hiciera más escándalo, Kai le tapó la boca con la mano a la peliverde detrás suyo.
—Guarda silencio —Ordenó Kai frunciendo el ceño y con las mejillas rojas de vergüenza.
Pero aquello que más lo puso tenso fue que la chica lamió su mano, haciendo que la quitara de inmediato.
—Kyaa~ creo que ahora entiendo mejor a Yui —Comentó Setsuna tomándose de la mejillas con un sonrojo prominente en su rostro.
A Kai le tomó unos segundos reaccionar ante tal estímulo, era como hace unas horas cuando atrapó la mitad de su cuerpo...
—No me digas, ¿Quedaste templado por mi? Lo siento querido, pero ya tengo a alguien más en mente solo para mí... —Se burló la chica tomando a Kai del hombro.
—N-no... y a todo esto, ¿Qué diablos haces aquí? Creí que Kaminari te había dado una última oportunidad de vivir... —Amenazó Kai recuperando la compostura.
—Ah, es que me perdí y estaba esperando a que mi cuerpo se regenerara... —Antes de que la chica le preguntara si quería ver, fue llevada por Kai a un lado más alejado.
Eso sí la puso nerviosa.
—O-oye, espera- n-no podemos, Yui está-
—¡Shhh! ¡El profesor casi nos descubre! —Inquirió Kai, levantando un dedo señalando que se callara.
Ya viendo que el profesor Vlad se retirase, Kai volvió a preguntar.
—¿Y qué sucede con Yui? ¿Sabes algo de ella?
—Ya quisiera, no responde mis mensajes desde ayer... se supone que tuvo una cita con... —Setsuna lo pensó un momento, si uno más uno era dos...— ¡¿Y no tendrás tú algo que ver o si?! —Esta vez fue ella quien interrogó a Kai con fuerza.
El alto frunció el ceño con fastidio, incapaz de negar lo que acontecido.
—No es nada... solo me encontré con su padre cuando volvíamos...
Setsuna puso una muy graciosa cara de asombro, sin embargo, el hecho de que Kai comenzó a caminar fuera del pasillo con esa cara tan seria le hacía sentir que quizá no estaba sabiendo toda la verdad.
—B-Bueno... ¿Y no sabes dónde está Yui?
—Por eso pregunté al principio
—¿Por qué no le preguntas a su padre? Pídele disculpas si algo que hiciste lo hizo enojar y ya. —Setsuna vio que el semblante de Kai y su vista no cambiaban, lucía tenso. —Escucha, no pareces un mal chico, seguro que lo puedes convencer hablando directamente con él
Kai la vio un segundo para volver a concentrarse en su objetivo.
—... podría poner en problemas a Yui, lo haré en cuanto sepa dónde está
Kai no volvió a oír a Setsuna, por lo que siguió su camino creyendo que no sería jodido otra vez.
—¿Ese calvo que hablaba con el profe Vlad era su padre?
Mala suerte para él.
—Ugh... —Y es que no podía negarlo, él solo se delataría tarde o temprano, debía de trabajar en eso. —Si... —Una respuesta vaga, pero no podía decir más, no debía involucrar a gente desconocida en sea lo que sea que estuviese sucediendo con Yui.
Se supone que los abuelos Kodai acudieron a él porque no tenían a nadie más con quien contar... O porque estaban borrachos...
Kai sacudió la cabeza para negar ese pensamiento. Sea lo que sea, él debía de ingeniárselas, alguien debía de saber algo.
—En fin, nos vemos en el campamento... —Se despidió Kai, algo apresurado, pues quería ver si podía encontrarse con el adulto y seguirlo sin que se diera cuenta.
Era desesperado, pero ya no podía seguir perdiendo el tiempo, en una semana, Yui sería sacada de la escuela, y eso significaría...
¿Qué significaría?
¿Que ya no la volvería a ver?
¿Por qué es que ella estaba en esa escuela?
Si él estaba en ese lugar aún dudando en ser héroe, no podía ir señalando a todos y decir que querían ser héroes y ya, ¿Ese era su sueño? Debía de haber algo más, uno nunca sabe lo que oculta la alfombra hasta que la levantas.
Y a la mala, Kai lo había entendido, aquel día de otoño.
Ni el ni Yui jamás se habían hablado sobre sus aspiraciones, o lo que era importante para ellos, simplemente dejaban que las cosas sucedieran porque habían de suceder.
Bromas, discusiones, exámenes, gustos...
Sonaría superficial, pero Kai sentía que era una persona importante para él... no era capaz de ver a la luna sin ella.
¿Qué escondía Yui del mundo?
Pero no era tiempo de dudar, no podía dudar... no podía perder.
No debía dejarla ir.
Sin darse cuenta, ya había abandonado el lugar, buscando a aquel hombre que había intimidado a la familia Kodai.
—¡Tch! ¿Dónde está...?
—Oye
—¿Eh? Qué susto... —Reconociendo esa voz, el alto volteó en su dirección. —¿Tú...?
—Si quieres encontrar a Fujio Kodai, sígueme...
| 𝕮 𝖆 𝖑 𝖔 𝖗 𝖉 𝖊 𝖘 𝖈 𝖔 𝖓 𝖔 𝖈 𝖎 𝖉 𝖔 |
[... 未知の熱 ...]
.
.
.
—Shinobu-san... ¿Estás segura de que por aquí se fue...? —Pasadas ya casi las cinco, Kai era escéptico a las palabras de la mujer, aún si seguía caminando detrás de ella.
—Kai-kun, seré directa contigo, no eres capaz ni debes de acercarte a Fujio Kodai...
—... ¿Eh?
En ese momento, Kai logró reconocer el callejón a donde se dirigían.
—Eres un muchacho muy inocente... ni siquiera notaste que te estaba llevando a otro lugar—Confesó, abriendo la puerta señalada por el neón al fondo del todo.
Era uno de los locales de peleas clandestinas de Himejima.
—¿Y bien? Entra ya —La mirada de Shinobu, tan serena como burlesca, pusieron a Kai en vergüenza.
—Y-yo...
—Relájate, no te voy a comer o algo así —Bromeó, pasando a la habitación que ella denominaba como 'su oficina'.
Kai simplemente se quedó parado en la puerta dispuesto a salir del lugar, sin embargo, un dolor de cabeza le impediría irse, o tan siquiera moverse un poco más.
—[Esta migraña no se va desde ayer...] —Frustrado, se tomó de la frente tratando de apaciguar el dolor.— [Y eso que puse rodajas de papa en mi frente...]
—Apuesto a que pusiste rodajas de papa en tu frente y no pasó nada —Acertó Shinobu, desde un lugar que Kai no podía ver, el mareo estaba tomándolo por completo.
—... sí... mi mamá siempre... hacía estas cosas... ugh
De repente, Kai perdió el equilibrio, haciendo que cayese al suelo, iba a ser un golpe duro.
—Cielos, por favor se más cuidadoso, Homura-kun —Kai no notó el momento en que la pequeña mujer se acercó a él y lo tomó como si fuese un costal de arena sobre su hombro. —Arriba
— [Que fuerte...]
Shinobu tiró a Kai al sofá para levantar su brazo y sacar un poco de sangre con una jeringa mientras el alto no sabía lo que pasaba. Al depositar la muestra sobre una caja de Petri, Kai pudo ver cómo los ojos de la mujer brillaron en un intenso púrpura.
—Ya veo, es una droga inusual la que usaron aquí... pero nada que me cueste mucho tomar medida, ¡Estas de suerte, Homura-kun! —Informó la mujer con una dulce voz.
—Y que hermosa voz... —Musitó Kai más relajado que antes, ignorando el hecho de que la droga de Fujio aún seguía en su sistema.
—Me lo dicen a menudo, ¡Gracias! —Le sonrió Shinobu.
No pudo evitarlo, los pómulos de Kai se entregaron ante la belleza de la mujer, regalándole la vista de su rostro tintado del más inocente carmín.
—Serás una gran doctora, Shinobu-san... —Comentó como pudo, sonriendo de lado igualmente.
—... aprecio tu cumplido —Agradeció, haciendo que Kai voltease a verla. —¿Qué sucede?
—N-Nada... bueno, es que ahora... tu gratitud parecía más genuina que antes
—Ara, supongo que tú también estás en esa edad
—¿... de qué estás hablando?
—Fufufu, nada nada
Si Kai no era como ella creía, entonces no debía de meterse con él de una mala manera.
Pero si...
—¿Hmm?
Shinobu se acercó a Kai, sentándose en su abdomen de un movimiento. De primeras, no causó mayor reacción en el chico además de simple confusión, su rostro irradiaba por todos lados un lienzo de emociones en blanco.
No parecía tener ambición alguna...
Prosiguiendo, ella tomó nuevamente la mano de Kai, levantándola y pasando sus dedos gentilmente por todo el brazo hasta llegar al lugar donde ella sacó la muestra de sangre.
El chico apenas había mostrado un cosquilleo cuando ella introdujo la aguja en su extremidad hace un momento.
Sin embargo, cuando ella acercó el brazo hacia su fino rostro rozando sus labios, pudo ver y sentir claramente cómo este se tensaba, marcando levemente sus músculos, dejándole ver sus venas.
No se detuvo ahí, puesto que ella no había cubierto con una gasa el lugar de la inyección, acercó aún más sus labios, llegando finalmente a besar el bíceps del pelinegro.
Y succionó.
—¿S-Shinobu... san...?
De repente, Kai sintió una corriente eléctrica recorrer todo su cuerpo, llegando directamente del lugar en donde la mujer estaba succionando.
Era excepcionalmente raro, pero Kai no podía detenerla, no tenía la fuerza ni la potestad.
Ella siguió succionando, hasta que de repente, sus ojos, los cuales estaban cerrados, se abrieron para mirar de reojo al pelinegro... Shinobu se llevó una gran sorpresa.
Sus vibrantes ojos de color carmesí brillaban como vitrales de donde salían pequeñas lágrimas, el sudor recorría sus afiladas facciones y hacía resaltar más el rubor inocente que crecía en sus mejillas.
La afligida expresión sobre aquel impoluto rostro que contrastaba perfectamente con esos feroces dientes puntiagudos podrían hacer que hasta la persona más bondadosa quisiera mancillarlo.
Shinobu tuvo que morderse la lengua para reaccionar, alejándose del chico y respirando profundamente para botarlo todo en un largo suspiro, se dio aire con sus manos porque sintió que rostro ardía un poco.
Botando casi todo en un pequeño humo púrpura.
—Haah... —Suspiró. —Listo, ya limpié tu sistema, al menos la gran mayoría, ahora deberías recuperar tu fuerza paulatinamente.
Kai no dijo nada, solo volteó la mirada y evitó la de Shinobu.
—¿Qué sucede, Kai-kun?
—N-no hiciste lo mismo... cuando me ayudaste con el dolor en mi cuerpo... —Acusó Kai tomándose de los brazos como un niño pequeño.
—Homura-kun, la línea que divide las medicinas de los venenos es muy delgada... mi quirk me permite manipularlos a voluntad, siempre y cuando sepa el proceso químico y tenga las moléculas correctas, podré hacer "droga", como la que usé para aumentar tu metabolismo sin repercusiones por un tiempo
—... ... p-pero entre eso y esto... está mal... cosas como esta-
Sin dejarlo continuar, Shinobu tomó a Kai de las mejillas para que la viera directamente.
—Homura-kun, eres un muchacho muy amable... y sé que has de estar confundido por cómo me he comportado contigo, lo siento, no pierdas tus convicciones pensando en si deberías de juzgar a otros como te juzgas a ti mismo, empieza conmigo
Kai tragó en seco, calmándose por completo... podía confiar en Shinobu, al menos para desahogarse.
—F-Fujio Kodai... es padre de una amiga... p-pero sus abuelos dicen que no hay nada bueno entre ellos... fue él quien me drogó —Farfulló Kai mirando al suelo. —Quiero alejarla de él
Al final, había fallado a su promesa.
— [Este niño...] Bien, la recuperación será lenta, pero estimo que no más de una semana, así que ten esto —Con la compasión que tenía en ese momento, Shinobu le extendió a Kai una píldora.
—¿Qué es esto?
—Es para que te recuperes, succioné algo de tu sangre también, era un poco ardiente a decir verdad —Comentó tomándose de los labios.
—Oh... está bien —Sin más, Kai se tomó el medicamento. Ya no tenía energías para mucho ese día.
Sí, ese chico necesitaba orientación urgente sobre las aves y las abejas; eso fue lo que pensó Shinobu.
—Bueno... pasando a otro tema, te recomendaría que no te metieras con Fujio Kodai —Advirtió, quitándose de encima de Kai y sentándose a su lado.
Esa no era la respuesta que buscaba.
—P-pero él está haciendo algo malo, ya te lo dije, debo-
—Kai-kun... ¿Por qué crees que ese tipo sigue libre, a pesar de que hace cosas malas? —Y aunque era la pregunta que debía hacerse, él no podía responderla.
Porque no quería aceptarlo.
Pero Shinobu si.
—Tú deberías de saberlo bien, ¿Verdad? La justicia no siempre se da a tiempo... —Y ahí estaba, aquello que el pelinegro seguía negando. —Mucho menos para gente como nosotros
¿Por qué debía de ser tan terco consigo mismo?
Porque estaba cansado...
Terriblemente cansado...
—Shinobu-san, agradezco su ayuda, ya sé que no debo confiar siempre en todos los que se me acercan, pero...
Una sonrisa manchada de sangre y ceniza fue lo que se presentó en la mente de Kai, aquel chico que amaba la música fue a quien vio entre sus llamas.
Kai apretó los puños, estaba determinado a darlo todo, una vez más...
—Es porque he decidido no perder... que yo mismo voy a acabar con Fujio Kodai, y con el dolor que ha causado...
—Grandes palabras para un chico tan pequeño... ¿Y entonces, todo esto sigue siendo por una simple amiga...? —Interrogó Shinobu, viendo a la espalda de Kai.
Se detuvo un segundo antes de responder.
—... tú no decides cuánto amaré a mis seres queridos
De repente, Shinobu sintió un calor abrasador rodeando al local, sus ojos en gradiente vibraron ante la presión que ejercían las palabras de Kai.
Y sonrió.
—Homura-kun, no es mi deber detenerte, o involucrarme más de lo que debería... pero no puedo ignorarte en absoluto... así que déjame darte al menos una herramienta que sea de ayuda...
—Pero antes, heeey, ustedes allí atrás, ya pueden pasar...
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
╠═══════════╬═══════════╣
Hace unas horas
En UA
╠═══════════╬═══════════╣
—E-Espera, no me dijiste si Yui se iba de UA... y se fue
Luego de ser ignorada por Kai, Setsuna no se iba a quedar con el chisme atorado, cualquier otra cosa sí, pero no el chisme.
Así que decidió seguir al pelinegro, de todas maneras, ya tenía las partes que le faltaban regeneradas y solo estaba haciendo hora vandalizando UA...
Quizá si debían de sancionarla.
Dejando de divagar, la chica volvió a separarse, haciendo flotar uno de sus ojos, además de sus oídos en distintas direcciones, alguna debía de dar con Homura.
Y mientras tanto, el resto de su cuerpo caminaba como si nada hacia las afueras de UA.
—Separarte en varias partes para encontrar a Homura, que lista que sos Setsuna – Mencionó la chica sin darse cuenta de que solo con un ojo no podría caminar con seguridad por la calle.
Terminó por chocarse tres veces con postes y casi es atropellada.
Pero luego de tanto tiempo, su ojo faltante había localizado a su objetivo. Sin esperar más, la chica recuperó sus sentidos y se dirigió hacia su ojo.
Y como era de esperarse, se volvió a chocar con alguien.
—¡Sabía que el meñique era importante!
—¡¿T-Tokage-san?! —Para su buena -o mala- suerte, había impactado con alguien a quien conocía, en parte.
Aunque sonaba demasiado alterada.
—¡Yaoyorozu! —Señaló. —Así te llamas, ¿Verdad? —La mencionada tomó un poco de aire y asintió.
Si bien Setsuna era una chica amigable, esta no veía el momento en el que su ojo dejase de funcionar por estar separado tanto tiempo, por lo que se despidió y volvió a su camino rápidamente
Yaoyorozu también siguió el suyo, tampoco parecía dispuesta a charlar en ese instante.
— [Rara...]
Pero lo extraño fue que, así como sus pensamientos, el camino que seguían las chicas era el mismo; un callejón meramente iluminado por un cartel de neón que tenía escrito; '+18'.
—¿Hmm? Jeje, Yaoyorozu, ¿Qué haces por este lugar?
Lo primero que pensó Momo al verla sonreír fue que sus dientes eran parecidos a los de Homura.
De repente, la azabache se golpeó con sus palmas, provocando que sus mejillas quedaran rojas, y no por otra cosa.
Setsuna recuperó su ojo y se volvió a colocar, ya estaba por preguntarle a su compañera qué hacía en ese lugar, pero pudo ver mejor el cartel delante de la puerta.
—... eres una cochina, Yaoyorozu —Setsuna no necesitó de pensar mucho como para sacar sus propias conclusiones.
—¡T-te equivocas! ¡Solo, estaba s-s-siguiendo a alguien a este lugar!
Curioso cuanto menos. Al oír su respuesta, Setsuna se atrevió a preguntar.
—¿Por casualidad no será a Homura? —A juzgar por la reacción alterada de la chica, estaba claro que esta vez sí le había acertado.
—¿Y-Y tú cómo lo sabes?
—¡Lo vi con mi ojo chismoso! —La peliverde estiró su ojo como si de un juguete se tratase. —Entró a este lugar de dudosa seguridad sexual y no ha salido desde hace un rato
—¿Sabes qué? No preguntaré por qué estás aquí si es que tú tampoco preguntas por mí, ¿De acuerdo?
—Suena bien para mí
Sin nada que objetar, las chicas estrecharon sus manos y se pegaron a la puerta.
—¡Tch! No escucho nada... ¿Y tú qué estás haciendo? —Se quejó Setsuna mientras veía a la chica leyendo un libro.
—Trato de ver cómo hacer un estetoscopio
—¿No es mejor hacer solo un vaso de cristal?
—Eso solo funciona en las películas, Tokage-san
—Te falta calle, solo haz un vaso porfis, luego te invito una crepa o algo de comer...
Yaoyorozu solo refunfuñó y se arremangó la camisa para crear el vaso, y como era natural en la peliverde, no se iba a quedar sin hacer una broma recién pensada.
—O ya que lo buscas tanto, si quieres puedes comerte a Homu- —Antes de que terminara la broma, Yaoyorozu le entregó el vaso tapando su boca.
—A-Aquí está lo que pediste
—Ya nadie me deja terminar de hablar...
Yaoyorozu terminó cediendo a la idea de Setsuna y creó otro vaso para ella, ahora ambas estaban escuchando lo que sucedía en ese lugar.
—Tú deberías de saberlo bien, ¿Verdad? La justicia no siempre se da a tiempo... mucho menos para gente como nosotros...
—Oye, ¿De qué crees que estén hablando? —Preguntó Setsuna en voz baja.
—... no lo sé... —Fue lo único que respondió Momo.
—Shinobu-san, agradezco su ayuda, ya sé que no debo confiar siempre en todos los que se me acercan, pero... es porque he decidido no perder... que yo mismo voy a acabar con Fujio Kodai, y con el dolor que ha causado...
—No mames, ¿Va a pelearse con el padre por un culito? Aunque si el de Yui...
—C-Cállate...
—Grandes palabras para un chico tan pequeño... ¿Y entonces, todo esto sigue siendo por una simple amiga...?
—¡Al fin alguien que habla mi idioma!
—Nunca creí que Yaoyorozu soltaría una referencia así...
—... tú no decides cuánto amaré a mis seres queridos
—Dios, que fuerte
—Oye, ¿No sientes algo de calor?
—Homura-kun, no es mi deber detenerte, o involucrarme más de lo que debería... pero no puedo ignorarte en absoluto... así que déjame darte al menos una herramienta que sea de ayuda...
—Jeje, Homura está hot...
—¡Bueno ya estuvo!
—Espera, ¡Yaoyorozu-! ¡Solo era una broma! ¡En la cara no!
—Pero antes, heeey, ustedes allí atrás, ya pueden pasar...
—...
—...
Silencio.
Es lo que había tanto adentro como afuera del lugar.
—¿Q-qué hacemos...? —Preguntó Yaoyorozu con los nervios a punto de hacerla perder la razón.
—Eso es fácil... —Contestó Setsuna sudando como llovizna torrencial.
—Las sigo esperando...
—¡CORREMOS CON LA COLA ENTRE LAS PIERNAS!
—¡¿EEH?! ¡E-ESPÉRAME!
Y así, las dos chicas escaparon del lugar.
Shinobu suspiró, dejándole una tarjeta a Kai en la mano y guiñándole con una expresión que estremeció al chico, se dirigió afuera para atrapar a las espías.
—... ¿Gente... cri... minion...?
A Kai le costaba leer lo que decía en la tarjeta.
—Es 'Gentle Criminal', Homura-kun —Aclaró Shinobu apareciendo de la nada con las dos chicas cargadas en sus brazos.
Como era de esperarse, Kai soltó un chillido muy de hombres.
—No sabía que podías gritar como una niña, Homura... comedia pura —Comentó Setsuna fingiendo que fumaba un habano.
—Siempre te va mal en inglés... —Acusó Momo. —Podría ayudarte si me lo pidieras
—¡¡E-Eso fue muy rápido!! ¡¿Y ustedes qué hacen aquí?! —Preguntó Kai alterado de sobre manera.
Si seguían así, podrían terminar involucrándose más de lo que no deben.
— [¿Por qué se ve tan angustiado de verme...?] —Se preguntó Yaoyorozu con pesadez.
—Creo que no es necesario ser muy listo para saber que estas dos escucharon nuestra conversación
Al escuchar aquello, Kai se sonrojó un poco, hasta que Shinobu aclaró que se refería a "después de la sangre".
Ahora los cuatro estaban sentados en el sofá discutiendo la situación.
—¡¿QUE YUI SE IRÁ DE UA ANTES DEL CAMPAMENTO?!
O más bien, enterándose del chisme completo.
—Tokage, no tienes por qué gritar —Kai se tomó de la frente con molestia, aún le dolía la cabeza un poco.
—Sé que ya hemos hablado mucho, pero ¿Cómo sabes mi nombre?
—Kaminari me dijo... —Sin que nadie lo viera, una sonrisa se formó en la peliverde.
—Bueno, antes de que Homura-kun siga hablando, hay algo que no me han respondido... ¿Qué hacen ustedes dos aquí? —Shinobu no iba a estar ni un minuto más sin confiar lo suficiente en esas chicas.
Podía ser tolerante, pero tampoco había que ser irracional.
—Homura se veía muy sospechoso, y parecía que él sabía algo de la repentina desaparición de mi amiga Yui, así que lo seguí hasta aquí
Ahora todos miraron a Momo, quien se quedó estupefacta ante la explicación de Setsuna y lo rápido que todos las procesaron.
—B-bueno yo...
—Antes que nada, puedo detectar si estás mintiendo o no... —Aclaró Shinobu con una sonrisa siniestra.
Parecía que más estaban presionando a la pelinegra que a los demás.
—B-bueno, Yaoyorozu puede tomarse su tiempo, después de todo, Himejima-san debería estar entrenando con Shinso ahora mismo
—¿Yo qué?
Todos voltearon a ver a la puerta detrás de Kai, de la cual salieron tanto Shinso como Himejima.
—...
—...
—...
—Fu fu fu...
Shinobu se rio por lo bajo.
Kai simplemente agachó la cabeza cansado de las situaciones que venían una tras otra...
Volteó a ver a Shinso con una cara larga y hastiada, quien al notarlo se rascó la nuca y desvió la mirada inquieto, suspirando le hizo una seña de que le debía un café.
—Maestro Himejima, quisiera que me enseñara el mantra del que tanto habla... —Con un tono cansado, Shinso jaló al hombre gigante de su haori para que lo sintiera.
Aunque fuese un ciego, el adulto con las manos juntas en su rosario bajó su mirada hacia Shinso.
—... eso es muy repentino, pero está bien —En su voz, Himejima trataba de no sonar increíblemente feliz de que alguien se interesara en sus cosas.
— [Qué fácil eres cuando se trata de niños interesantes...] —Pensó Shinobu.
— [Jamás fue así conmigo...] —Se quejó Kai viendo cómo los dos se dirigían hacia una habitación con altares y reliquias budistas.
Y así, los cuatro de antes retomaron la conversación.
—B-bueno... la razón de seguir a Homura es que... —Yaoyorozu estaba nerviosa, por decirlo menos, aunque las miradas furtivas que le lanzaba a Kai delataban totalmente sus intenciones.
Las otras dos chicas lo notaron al instante, por lo que mostraron una sonrisa cómplice apunto de ayudar a Yaoyorozu.
Quien mientras tanto, notó que Kai le estaba dando una de esas sonrisas suyas de "no te preocupes".
Pero en su desesperación, ella se lo tomó como un "No importa si mientes o me haces quedar mal, solo sálvate".
Y eso hizo.
—E-es porque... Ho-Homura-san... me estaba... viendo mucho... en la piscina... —Se excusó la chica, dejando el lugar en silencio.
—...
—...
—...
Otra vez.
—Oi, bastardo... ¿Qué creías que hacías...? ¿Eh? ¿Eh?...
—Mirando a una chica tan descaradamente... pagarás con tu vida...
Por alguna razón, Shinobu y Setsuna se estaban comportando como delincuentes frente a Kai, arrinconándolo en una esquina.
—S-solo tengo diez yenes... y-y un boleto vencido de autobús... ¿No quieren un descuento en pan...?
Las afiladas miradas de las chicas estaban asustando a Kai mucho más de lo que le temía a pelear con demonios o nomus.
—¡B-Bueno ya! ¡Gentle Criminal yo te elijo! ¡¡Let it rip!! —Gritó Kai desesperado, lanzando la tarjeta que le dio Shinobu al suelo.
Setsuna se burló fuertemente de él, y Shinobu suspiró con pesadez.
—Homura-kun, no es un beyblade, la tarjeta solo era para presentarte a tu herramienta...
—¿Gentle Criminal...? ¿Y ese quién es? vPreguntó Setsuna.
—Un youtuber... —Aclaró Shinobu.
—...
—¡Oh! ¡Ja ja ja! ¡¿Expondrás tu situación con tu suegro en internet?! ¡JA JA JA! —Setsuna juraba que ese día había sido el más divertido de su vida en meses.
Pero gracias a eso, ahora Kai entendía hasta qué punto esas chicas habían entendido verdaderamente... y es que no sabían ni mierda de la verdadera situación.
Siendo así, retirarse y descansar por hoy sería lo más favorable para él.
Aún le quedaban seis días antes de que sacaran a Yui de UA, o bueno, cinco y medio si quitaba la noche del Tanabata...
—Ya se hace tarde, me tengo que ir... —Comentó Homura de la nada.
Shinobu solo asintió sin mucho más que hacer, ya había ayudado a Kai, aunque no pareciera que se veía bien, pero para eso estaban los medicamentos que le dio.
Más allá de eso, un doctor no habría de meterse con el paciente... a menos que este lo visitara.
Ya era cuestión de Kai.
—Oh, bueno, supongo que podemos irnos juntos, ¿Vienes Yaoyorozu? —Preguntó Setsuna levantándose.
Kai simplemente se despidió, dándoles un vistazo a las chicas antes de irse y, por supuesto, dejando dinero para que Shinso se comprase algo.
Y así sin más, los tres se despidieron tras un largo camino de conversaciones que Kai ignoró hasta la estación de tren.
—Cuídate, Yaoyorozu
—Homura-san...
Pero Yaoyorozu se quedó inquieta durante el resto del día...
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
.
╠═══════════╬═══════════╣
Un día después
Shizuoka en la mañana
╠═══════════╬═══════════╣
—Que rico que está el té el día de-
BZZT*
El zumbido de su viejo celular hizo que el estrafalario hombre casi regara la infusión hirviendo sobre sus ropajes.
—¿Quién recórcholis llama a esta hora? —Aunque el hombre ya lo sabía, siendo el criminal que era, tan solo dos personas tenían su número telefónico en todo el país.
No era porque nadie más le conociera en persona... nop, él no era un solitario... probablemente.
Pero aún así, le disgustaba mucho quien le estaba llamando, porque le recordaba la clase de persona en la que se estaba convirtiendo.
—'Dan' al habla... —Gruñó, sin siquiera inmutarse por el té caliente que se derramaba en sus guantes por su falta de delicadeza para servirse.
—¿Cómo está el fracasado favorito del jefe? —Preguntó la voz al otro lado de la línea con la mayor frivolidad posible.
—Disfrutando de un té, Madarame-kun... ¿Desean ahora que lo desmantele? —Yendo directo a los asuntos importantes, encima de una azotea, Gentle sacó de su bolsillo un Walkie-Talkie.
—Así me gusta, viejo... ya sabes a qué local de drogas vamos a asaltar así que haz lo tuyo
—¡Haz lo tuyo Danjuro! —Exclamó otra voz desde la otra línea.
El hombre apartó el teléfono antes de que le dañaran los tímpanos, así que solo acató lo que le dijeron y colgó la llamada.
Así es, Danjuro Tobita, alias; Gentle Criminal. Ese era el nombre de quien estaba cometiendo fechorías que sobrepasaban por mucho la delgada línea de la legalidad y que se supone que a él no le gustaba realizar.
¿Pero qué podría hacer alguien si era extorsionado por uno de los grupos criminales más peligrosos del bajo mundo japonés?
Nada... esa era la mentalidad del hombre "conocido" en internet como Gentle Criminal.
Actualmente desaparecido de las redes, pero con muchos canales de respaldo.
Danjuro tomó su comunicador y contactó con quien era el segundo y último contacto que tenía en su vida, su fiel secuaz... y la razón de su desaparición.
—¡Gentle! —Saludó una linda voz femenina, enviándole a Danjuro una energía de confort que, si era honesto, la necesitaba. Gentle era muy egoísta. —¿Cómo te encuentras? ... hace mucho que no me llamas
La última oración no sonaba tan entusiasta, denotaba claramente su preocupación, y con buenas razones.
—La Brava... me alegra oírte, pero necesito que me hagas un favor...
—... ¿Necesitas la información de seguridad de ese local sospechoso...?
Su voz se volvió apagada, Danjuro hizo un esfuerzo en no sonar dolido, debía de hacerlo lo mejor que pudiese.
—Si... por favor
Un silencio bastante largo fue lo que obtuvo antes de una verdadera respuesta.
—... a-al menos, ¿Podrías decirme ya de qué se trata todo esto que haces? No he roto la promesa de averiguar tu ubicación de ninguna manera posible, pero te extraño...
La culpa se hizo presente en Gentle, al oír lo afligida que estaba su compañera...
—La brava, querida... te prometo que pronto estaré a tu lado tomando el té como siempre, solo espérame, por favor
Gentle pudo oír un pequeño sollozo ahogado, cosa que le estaba partiendo el corazón de a pocos, pero supo calmarse, aunque se preguntase cuál era el sentido de todo lo que hacía incluso si lo sabía bien.
—Y-Ya te mandé los datos... están encriptados en un fax, s-solo escanéalo, no hay ningún riesgo de que seas rastreado, p-por favor cuídate...
—Tú también cuídate, la Brava, nos estaremos comunicando...
Y siendo así, Danjuro apagó la herramienta antes de que fuera demasiado sospechoso. Se tomó de la frente para respirar y sacó otro invento de su cinturón. Una máquina de fax minimalista.
Ya con su papel en manos, tan solo tenía que enviarlo por correo y listo... se libraría de esos mafiosos por un par de días...
Las cosas que estuvieran haciendo con la información que él les proveía no era de su incumbencia, pues al menos estaban lidiando con otras mafias pequeñas... cosa que solo reafirmaba que las personas con las que estaba coludido eran peligrosas.
No dejaría que se acercasen a La Brava, y si tenía que ser extorsionado y cometer tales crímenes por su bien... entonces él estaba bien con eso.
Ese sería el nuevo y manchado Gentle Criminal. Y nadie lo iba a detener.
O bueno...
—¡Oh! ¡Te encontré!
Se supone que así debía de ser, si no fuese porque un muchacho con uniforme de basurero estaba parado en frente suyo, a más de 200 pies del suelo.
—... ¿Q-Quién...?
—¡No hay tiempo para eso! ¡Quisiera que vinieras conmi- ¡UGH!
Sin dejarlo terminar, el adulto empujó a Kai sin pena alguna del borde del edificio. Sin esperar nada, Gentle supo que tenía que escapar.
—[¡Será mejor que camine!]
—¡¡OYE!! ¡¿En qué diablos pensabas empujándome así?! —Pudo escuchar cómo era que el chico se le estaba acercando.
—[¡¡Que corra!! ¡¡Será mejor que corra!!]
Sin embargo, Kai era mucho más veloz que el pobre adulto.
—¡OYE! ¡HABLEMOS UN SEGUNDO!
—¡¡QUE VUELE!! ¡¡SERÁ MEJOR QUE VUELE!! —Y sin esperar nada más, el hombre activó su don, levantando la mano delante de Kai.
—No me detendré solo porque hagas esa cosa con tu mano- ack, ¿Qué es esto? —Estupefacto, el chico se encontró directamente con una pared invisible delante suyo. —Parece un trampolín... ¿Eh? ¡¿A dónde se fue?!
Kai alzó la vista para quedarse anonadado al ver cómo el adulto que perseguía saltaba sobre el aire y rebotaba en él.
—¡No me atraparán con vida!
—¡Que no te voy a hacer daño viejo! ¡Solo quiero hablar! —Resignado, Kai también activó su quirk para no perderlo, en la medida de lo posible.
Aún le dolía usar llamas para propulsarse largos ratos en el aire.
— [Un usuario de fuego... debe ser bueno si puede evitar caer de un tercer piso... ¡Pero no es rival para mi!]
—No es suficiente... —Kai sabía que el hombre que vestía como bufón con aires de elegancia mal lograda iba a salir pronto de su radar, además de que no debía de llamar demasiado la atención. —Grrr...
Harto de la persecución, Kai tomó aire y se impulsó con rapidez hacia su objetivo, casi lo tenía atrapado, pero chocó con otra misteriosa pared elástica la cual lo envió con fuerza hacia el suelo.
—Ugh... eso debió doler, pero lo siento chico, no puedo perder el tiempo —El hombre se disculpó con Kai, alejándose entre grandes saltos en el aire.
Afortunadamente no había nadie por esas calles, por lo que el pelinegro simplemente se levantó y miró hacia Gentle.
—¡¡Te dije que solo quiero hablar!! —Vociferó Kai, lanzándose como una bala hacia el hombre que casi y no reacciona a la embestida.
Gentle lo esquivó hábilmente y, antes de que se pasara de largo, tocó el aire delante del rostro de Kai volviéndolo elástico, lo cual lo enviaría con una increíble fuerza hacia el suelo, otra vez.
—Nuevamente, lo lamento, te enviaré un poco de té al hospital en el que te internes, muchacho- ¡Argh! —Antes de que siguiera con su disculpa, Kai tomó a Gentle del torso con una sola mano.
Naturalmente, Homura arrastró a Danjuro con él hacia el suelo.
—[¡¡Fingió desesperarse para que yo lo hiciera rebotar con más fuerza y usarme como escudo!! ¡ESTOY PERDIDO!] —Fue lo pensó Gentle un segundo antes de impactar letalmente contra el suelo.
O eso es lo que creyó, hasta que abrió los ojos y notó que estaba casi sin daños, no como el muchacho que lo tenía completamente abrazado y que había recibido el impacto por ambos.
—[N-no puedo deshacerme de su agarre... es como una roca] —Maldijo Gentle siendo retenido en una llave por Kai.
—Y-ya... ¿Podemos hablar...? —Preguntó el pelinegro adolorido.
Gentle no tenía otra opción, pero primero le informó a Kai que debía de entregar algo urgente, a lo que, extrañamente, el chico solo asintió y lo siguió de cerca.
—... ¡¿Qué es eso de allí?!
—¿Dónde?
—¡Ahí te ve- ¡Waaah! —Incluso si Kai lo soltó por caer en su jugarreta, Danjuro apenas y pudo saltar antes de que un jalón increíblemente fuerte lo hiciera quedarse con los pies en el suelo.
—Viejo, a esta distancia no te vas a escapar ni aunque me empujes... recuérdalo —Aunque Kai se lo dijera con una sonrisa, la verdad era que había sonado increíblemente amenazante.
—Pues ya qué...
Entonces, Kai y Danjuro caminaron hacia una oficina postal, aunque casi y no llegan a tiempo antes de que saliesen a repartir las correspondencias.
Luego de aquello, por alguna razón el hombre estuvo ayudando a ancianitas a cruzar la calle mientras que Kai lo vigilaba, no tenía buenas experiencias con ancianos, además de que hacían espectáculos callejeros.
Obviamente la policía trató de atraparlos por usar sus quirks sin licencia, pero lograron escapar e incluso ganaron algo de varo.
Y tras eso, fueron por algo de comer a una cafetería cercana a petición de Kai, pero Gentle se negó rotundamente.
—No sirven el té que me gusta... y en la persecución de hace rato perdí mi tetera... —Alegó Danjuro evitando avanzar
—[¿Es un niño...?] ¿Y cuál es el té que prefieres? —Preguntó algo desconcertado.
—...
—... ¿Qué?
—Tienes que decirlo
—¡Oh vamos! ¡No puedes hablar en serio!
—Jamás bromearía con mi té...
—¡Acabamos de hablarlo! ¡Al menos espera un poco!
—¡Que sea ahora! ¡Por favor!
Sin mucho hígado con el que enojarse, Kai solo suspiró cansado y miró hacia otro lado, escuchando claramente cómo es que el hombre se escondía en algún lugar.
—¡Oh no! ¡Se me cayó mi cerebro y ahora no sé cuál es el té más god! ¡¿Y AHORA QUIÉN PODRÁ AYUDARME?!
—¡¡YO!! —Gritó Gentle apareciéndose desde un contenedor de basura haciendo una pose rara ocultando su cara con sus brazos.
—¡Gentle Criminal! —Kai hizo la cara más estúpidamente sorprendida posible.
—¡¡No contaban con mi astucia!! —Exclamó el hombre con euforia, arqueando la espalda hacia atrás a niveles insalubres.
—Ya dime tu puto té... —Kai quería que lo mataran en ese instante.
—¡JA JA JA JA- ¿Eh?
Gentle sintió cómo alguien chocaba con él, alarmándose al reconocer las vestimentas con las que iba el tipo.
—¡Fíjate anciano-! ¿Huh? ¿Acaso no eres el payaso de Roppongi? —Un tipo rapado y con copete encaró a Gentle irrespetuosamente.
—Kiyomasa, creo que él es la rata del jefe... —Un chico vestido de manera similar al anterior le susurró algo que apenas y Gentle pudo escuchar.
Y no le gustaba lo que venía.
—[Ahora me pedirá algo imposible... y me golpeará cuando le diga que no puedo...]
—¿Ah si? ¡Qué bien! ¡Quería pedirte un par de favores...! Si pudieras hacer que me llegasen estos mangas gratis por correo...
—[¿Por qué estos mafiosos no se consiguen gente con un mínimo de cerebro?] —Se quejó Gentle frustrado de este tipo de situaciones.
—¡¿EEEHHH?! ¡¿Puedes hacer eso Gentle?! —Preguntó Kai con gran asombro
—... —El hombre simplemente se mantuvo callado, preguntándose si es que el mundo lo odiaba o algo parecido.
—¡Oye! ¡Estaba pidiéndole algo a mi amigo! ¿Quién eres tú eh? —El copetón del principio tomó a Kai del hombro, elevando su vista para reclamarle al pelinegro.
—¿Hmm? Lo siento, es que en realidad, no parecen muy amigos, y Gentle tiene que venir conmigo —Contestó Homura con simpleza.
El mencionado tan solo se quedó pálido ante la insípida respuesta de Kai.
—... heh, he... —Una simple risa fue lo que soltó el tal Kiyomasa, volteando a ver al otro que venía a su lado, quien simplemente sonrió.
—¡¡Oi bastardos!! ¡¡Vengan a divertirse un rato!! —Ni bien habló el segundo tipo, a Danjuro se le heló la sangre.
Y antes de que pudiese escapar, varios tipos rodearon al dúo de adulto y adolescente llevándolos inconscientemente hacia un callejón, ahora no tenían salida.
—¡Ni siquiera se esfuercen con la rata! ¡Si se escapa le diremos al jefe que trató de delatarlo con la policía...! Y en cuanto a ti...
—¿Policía? ¿Ustedes hacen cosas malas?
Todos se rieron de él, Gentle solo guardó silencio, sintiéndose impotente.
—Oye... 'Dan', dependiendo de tu respuesta, puede que te dejemos ir... así que dime, ¿Conoces a este chiquillo? —Preguntó Kiyomasa, volteando a ver a Gentle.
Al igual que todos los demás, incluido Kai.
Y estaba claro lo que Gentle iba a hacer.
— [Lo siento, chico...] No lo conozco... para nada... —Fue lo que respondió por lo bajo.
—Bueno, entonces no te importará quedarte a ver cómo le doy una-
—¡¿EEEHHH?! ¡Qué cruel! ¡Y eso que pensaba en invitarte un Golden Tips Imperial! —Exclamó Kai interrumpiendo por tercera vez al cabecilla delincuente.
—¡¡OYE!! ¡Ya fue suficiente de interrumpir a Kiyomasa! ¡¿Qué acaso tu mamá no-
¡¡CRUNCH!!*
Un sonido en seco resonó por el callejón, como un gran crujido contra el asfalto.
—Esto va para todos...
Gentle no había siquiera apartado la mirada, estaba nervioso, en sus oídos retumbaba el temible golpe que Kai había asestado directo en la cara del tipo, ahora estampada en el concreto.
—No hablen de mi mamá si quieren vivir... —La profunda voz de Kai puso alerta a todos los demás.
—...... a él —Ni bien su líder terminó de hablar, todo el grupo se abalanzó contra Kai, quien solo pudo dirigir su mirada al pasmado Gentle y susurrarle unas palabras.
—No los dejes escapar
De repente, un tipo salió volando del tumulto en dirección del adulto, quien se protegió haciendo una capa de aire elástico delante suyo.
El tipo rebotó y volvió hacia Kai tan solo para ser estampado de un codazo contra la pared.
—Nueve...
Dos tipos lo agarraron de improvisto, soltando una extraña baba salida de su cuerpo que impedía que Kai se separara de ellos, convirtiéndolo en un blanco fácil.
A menos que simplemente levantara a ambos rufianes y los mandara a volar, tumbándose con ellos a los demás que se abalanzaban.
—Seis... —Una patada directa en el estómago dejaría tendido al siguiente tipo, aunque eso le dio tiempo a otro para que le asestara un golpe a Kai en el abdomen.
—[¡N-no se mueve!] —Fue lo último que pensó antes de que Kai lo tomara del brazo y lo lanzara hacia la pared elástica de Gentle, regresando y trayendo consigo a otro tipo.
Kai los derribó con un brutal golpe directo al suelo.
—Y... quedan tres... oye Gentle, cuando termine con ellos, quiero que me escuches —Avisó Kai, dando una patada giratoria que terminaría por estampar a otro tipo contra la pared.
Gentle solo asintió.
—¡Hagámoslo Masataka!
—¿No se llamaba Kiyomasa?
—¡No digas mi nombre!
—Ustedes dos... parece que ya tienen listos sus quirks, siempre que pelean en conjunto, ¿Esperan a que su equipo fracase patéticamente? —Comentó Kai viendo a Kiyomasa y al otro tipo con un corte similar quien comenzaba a brillar.
—Esos inútiles eran solo para cansarte... —Aclaró el cabecilla, comenzando a fumar un cigarrillo.
—Mira que el único humo que no me sienta es el de esas cosas... —Kai elevó sus puños en posición de pelea, listo para lo que sea.
Ya iba a noquear al tipo que se lanzó directo hacia su rostro, hasta que antes de que se acercara lo suficiente, este se extendió como si esperara un abrazo, emanando de sus manos una luz que lo cegó durante unos segundos.
—¡¡Te tengo!! —Vociferó, yendo directo a golpearlo con unos nudillos de hierro.
Un pie desnudo fue lo último que vio el tipo antes de ser vencido por Kai quien fundió su talón en el rostro del delincuente.
—[No deberías gritar tu posición si ya incapacitaste mi vista...]
Aunque cuando Kai pudo volver a abrir los ojos, lo que se encontró fue a Kiyomasa delante suyo, sacando el cigarrillo de su boca y escupiendo lo que tenía guardado en sus pulmones.
—¡N-NIÑO! —Gritó Gentle viendo con terror cómo el humo que lanzaron se convertía en una gran llamarada que rodeó a Kai por completo.
A sus ojos, Kai había muerto consumido por las llamas.
Danjuro solo pudo bajar su mirada con absoluta culpa, sabiendo que dejó morir a un chico por no querer intervenir en una pelea que fácilmente podría haber ganado.
Todo por su miedo...
Todo por su egoísmo...
Unas lágrimas salieron del hombre, aunque serían la únicas, pues al levantar la vista, vio cómo de entre el fuego que desaparecía, una imponente silueta se asomaba...
El corazón de Gentle comenzó a latir irremediablemente fuerte, y su mente entró en shock al ver de quién se trataba.
Era Kai, quien tenía a Kiyomasa colgando de su camisa golpeado.
La puntiaguda sonrisa que daba Homura solo hizo que Gentle se quedase anonadado, viendo cómo las llamas no le afectaban en absoluto, o más bien, Kai las domaba como si de un rey a su pueblo se tratase...
O como si de un demonio a un simple mortal se dirigiese...
Kai habló.
—Gentle... no me importa la relación que consideres que tenemos...
La mirada carmesí que le dio el pelinegro hizo que a Gentle se le erizara la piel de la emoción, lo cual no le dejaba moverse ni articular palabra alguna.
"Es impensable que un don nadie como tú ande haciendo fechorías y subiéndolas públicamente como si no existiese la policía..."
—Pero te prometo que si me ayudas en lo que te pido... no volverás a preocuparte por estos bastardos...
Era terrorífico que un muchacho tan sereno como él pudiese mostrar tal arrogancia, pero para Gentle... el terror era simplemente magnífico.
"Por eso yo, el rey de Shizuoka... te ordeno que trabajes para mí... a menos claro, que quieras perder esas manos con las que tanto amas hackear la ley..."
Y aquellas palabras que salieron de Kai, conmovieron a Gentle como si un verdadero rey le tendiera la mano, dándole una oportunidad de vivir como él quería.
—Sírveme, Gentle Criminal... y yo te protegeré... sin importar qué...
つづく
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top