Muchas veces no podemos cumplir nuestras promesas por mucho que queramos. Los chicos a penas han podido venir, y ya hace dos meses. Muchos de los fines de semana que habían quedado en venir, sus proyectos se lo habían estropeado.

Supongo que organizar esas giras tiene que ser difícil. Por eso, acordamos que el primer fin de semana de noviembre, estaríamos todos, sin excepción.

Para eso aún queda más de un mes, pero me consuelo en pensar en que nos reuniremos todos de nuevo.

Las primeras semanas fue difícil. Acostumbrarnos al silencio que nuestras vidas tenían antes de que esos chicos irrumpieran en nuestra casa, en aquella barbacoa, fue más duro de lo que había supuesto.

Había días que pasaban rápidos en compañía de Chris, Nina, Dani... El instituto se volvió mi nueva rutina, pero esta no me agradaba. Convencí a mis padres de que nos apuntasen en el mismo al que iba Addie, la que se ha vuelto una muy buena amiga, más si cabe.

Todo es muy distinto ahora, yo también soy distinta, he cambiado.

Pero sé, que pase lo que pase, siempre nos quedará el recuerdo de ese verano.

Este es el final de California, amigas.

Habrá segunda temporada, pero me temo que tendréis que esperar a junio. Necesito pensar, aclarar mi mente, y darle forma a la historia. Tendréis noticias en esta historia cuando se haga, así que estad atentas de todas formas.

Anuncio que la historia estará e edición para corregir fallos y mejorar la redacción, pero no cambiará nada importante de la historia.

Muchas gracias por acompañarme durante todo este tiempo.

Siempre he sido reacia a estas palabras, pero hoy las puedo decir con todo mi corazón:

Os quiero.