-¿Entonces mi niño? -el pequeño sonrió victorioso -tendrás que poner un equipo de psicólogos para todos los corazones rotos que dejarán mis hombres madrina, porque ya... son míos -el pequeño se levantó coqueto, modeló para su abuela con una sonrisa coqueta, la rubia soltó una carcajada -oh por kami, ¿cómo hiciste para que mi comandante anbu cayera en tus encantos?, tienes que dar detalles, pensé que era un muro frío difícil de manejar -el pequeño se sentó en la silla frente a su madrina, recargó sus codos con emoción -antes de irme, me puse un poco coqueto y descarado con él, le aseguré que sería mío -la rubia lo vio con sorpresa -cuando regresé fui a buscarlo, creyó que era una de sus fans hasta que me vio, lo presioné un poco, resulta que mis coqueteos habían funcionado, todo este tiempo pensó en mí. Al inicio me quería solo para él, pero le dije que a ambos los quería por igual y que no tenía opción, no lo dejaría ir, dudó por un tiempo, pero todo esto que ves abuela -el pequeño enmarcó su cuerpo -lo atrapó-

La rubia se dejó caer en la silla riendo con diversión -es increíble mocoso, ahora tendrán que enfrentar a sus familias -el rubio se puso serio -la familia de Ita piensan que soy chica, al igual ahora el resto de la aldea, los Nara están concientes de mi condición, para ellos no es un problema, por otro lado, la poligamia es un tabú para la sociedad, pero si es por el programa de reconstrucción de clanes no lo ven mal, hipócritas -el pequeño suspiró con cansancio. La rubia lo analizaba con cuidado -tal vez no el programa en sí, tal vez un permiso del Daymio autorizando la reconstrucción de tu clan, específicamente con estos dos chicos, el señor del fuego te tiene aprecio, hablaré con él, tal vez logre algo -el rubio sonrió emocionado, abrazó con cariño a la rubia -por favor, por favor, me harías muy feliz -Tsunade volteó sus ojos con diversión.

-Cuando logres casarte con ambos, has pensado ¿dónde vivirás?, recuerda que ambos son herederos de su clanes -el pequeño sonrió lindo para su madrina -cuando me case con ellos, ya seré Hokage -el pequeño sonrió con astucia, la rubia soltó una carcajada -ya veo, al estar casados contigo y vivir aquí no tendrías problemas con sus clanes, a veces me da miedo tu mente, trabaja muy rápido cariño -el rubio sonrió con un poco de maldad en su sonrisa, para ese momento tendría todo lo que quiere y su cabeza estaría sobre la de ese maldito anciano, lamió sus labios con ansiedad -hay algo que me preocupa -

El pequeño salió de sus pensamientos para prestar atención a su abuela -si sus familias no aceptan, ¿qué pasará? -el rubio se puso serio, comenzó a jugar con una pluma en el escritorio de su abuela, su mirada se enfrió -ellos aseguran que harían cualquier cosa por mi, hasta dejarlo todo -guardó un momento silencio -no quisiera que lo hicieran, tú entiendes madrina, la mayor parte de la gente que conozco lo ha tenido todo en la vida, hasta ellos mismos, yo no había tenido nada hasta que ustedes llegaron a mi vida, tal vez suene egoísta, pero no pienso hacerme a un lado como esas damiselas de los cuentos de hadas o las novelas románticas que actúan como mártires, mucho tiempo lo fui y no resolvió nada -un silencio llenó la oficina -lo quiero todo madrina, los quiero a ellos, quiero una familia grande a la que pueda darle mi amor, quiero un hogar, quiero el puesto Hokage, quiero el respeto y reconocimiento de la aldea, quiero ser el shinobi más poderoso, quiero que ustedes y mis padres estén orgullosos de mí, quiero vivir feliz pese a quien le pese -la rubia sonrió comprensiva y de acuerdo -sabes que Jiraiya y yo siempre estaremos de tu lado cariño, te ayudaremos a tenerlo todo, puedes apostarlo -el rubio sonrió con cariño, se levantó y abrazó a su madrina con amor.

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-Problemático ¿podemos hablar? -Shikaku y Yoshino vieron con sorpresa a su heredero como se sentó frente a ellos en el tatami de la sala de juegos -¿no me digas que Naru-chan está embarazado?, porque ahora mismo destrozo tu oreja -el Nara menor volteó sus ojos con fastidio -mujer problemática, no digas tonterías -sus padres se tranquilizaron para escuchar -bien, habla hijo ¿qué sucede? -Shikaku lo alentó un poco, se veía algo nervioso -bien, como saben llevo una relación con Naruto desde hace tiempo, el punto es, bueno, el Daimyo y sus padrinos consideraron que su clan debe rescatarse, no quisieron meterlo al programa de reconstrucción de clanes para evitar que el consejo pueda poner sus manos sobre él -

Ambos lo veían con algo de sorpresa, tal vez su hijo estaba triste por esa situación, debía dejar a su novio, es difícil para una pareja de años -acoplaron un programa especial de reconstrucción, el Daymio sugirió dos parejas de clanes reconocidos para mantener el poder de su clan, acepté entrar con él -el cigarro de Shikaku cayó de sus labios, Yoshino sabía de esos programas, pero nunca pensó verse en esa situación, nunca pensó que su hijo aceptara esa situación, se desmayó.