Fire

—¡Baila tu cuerpo, alegría, Macarena, que tu cuerpo al pasar, alegría, cosa buena!

—¡¡Hey!! —grita el trencito de personas que creé en segundos con mi fabulosa actitud, la cual evita que existan los amargados en las fiestas.

—¡¡Conga, conga, conga!!

—¡¡Hey!!

—¡¡Me compro una casita!! —Alzo la voz.

—¡¡Sí!! —Me siguen todos.

—¡¡Deal la tiene chiquita!!

—¡¡Yeah!!

—¡¡Veo a la más bonita!!

La canción sigue, pero todo se detiene ante mí. Es como si estuviera bajo el agua, en cámara lenta o en pausa. Creo que la llamé con las palabras. Visualizo a Loving, entonces dejo el trencito y camino a paso firme hasta ella. Se sonroja al ver que estoy sin camisa.

—Creo que no te dieron nada para que te baje la embriagues —opina.

Tomo sus manos.

—Déjame embriagarme de ti.

Se sonroja.

—Me encanta oírte así, pero no es correcto.

—Prohibido nuestro amor, ¿y qué?... —canto—. Los dos sabemos el porqué.

Se ríe.

—Basta, te conseguiré algo.

Me guía hasta la cocina. Se ve que la conoce bien, pues se pone a buscar cosas y las encuentra con facilidad. Mi corazón se rompe, porque es probable que haya pasado tiempo aquí con Deal, y conociéndola, seguro se habrán acostado. Voy a vomitar.

Me entrega un menjunje extraño y lo observo con desaprobación.

—Tómalo. —Sonríe.

Trago saliva.

—Si lo hago se acaba el cuento de hadas.

—¿Qué cuento de hadas? —Inclina la cabeza, confundida.

—Este.

Agarro sus mejillas y la beso. Nuestras bocas se mueven en una muy buena compatibilidad. Sostiene el vaso como puede mientras retrocedemos hasta la mesada. Se le escapa un gemido cuando mis manos pasan por debajo de su remera. Nuestras lenguas juegan en un sinfín, deleitante. Ella me encandila como no hay idea.

El sueño caliente se acaba cuando me separo un poco de su boca para respirar y ella me pone el recipiente en la cara.

—To... tómalo —murmura, avergonzada—. Te sentirás mejor.

Agarro el vaso, entonces lo bebo de una sola vez.

~~~

¿Para qué hacerle caso al amor?

Estoy vomitando en un baño, mientras Loving hace círculos con su palma en mi espalda y me sonríe con ternura.

—Ya está, ya pasó.

—Me voy a morir —murmuro.

—No vuelvas a beber así —me reprende y me molesta que no me crea—. ¿Entendido?

—Sí —gruño.

No vale la pena insistir con que Deal me drogó. Todos le creen más al falso angelito. No importa lo que haga, están hechizados.

Me levanto, despacio, entonces Loving me sigue los pasos, sosteniéndome. Nuestros rostros se encuentran y nos quedamos viéndonos.

—Debo oler horrible —aclaro—. Deberías alejarte.

Mantiene la hermosa sonrisa.

—No importa, te he besado con olor a tabaco, puedo soportar tus vómitos.

—Loving, yo... —Me aproximo a su rostro—. Lo que dije...

Sus mejillas se ruborizan.

—Fire...

—¿Interrumpo? —Oigo al detestable de Deal y mi mandíbula se tensa. Camina hasta nosotros y la agarra como si nada de la cintura—. Me alegra que ya estés mejor, pero te estás tomando demasiada confianza con mi novia.

Lo sospechaba, están juntos.

—¿Y que hay de Cry? —cuestiono.

—¿Qué hay con qué?

—Dijiste cosas muy fuertes, yo no olvido lo que oigo cuando estoy con sustancias tóxicas.

—Ah, por eso estás enfadado —se burla, luego mira a Loving—. Me gusta Cry, pero no ha pasado nada entre él y yo. —Vuelve a observarme—. ¿Contento?

—¿Él lo sabe? —pregunto.

—Puedes ir a contárselo, te dirá exactamente lo mismo, en cambio tú, si te has besado con Cry, ¿no?

—Lo ayudaba —me defiendo.

—Sí, es verdad —declara con sarcasmo.

Me contempla con tanto odio. Sé que quiere lanzarse encima de mí y matarme, pero mantiene la compostura delante de Loving. Ya no solo me odia por algo que no sé, también lo hace porque toqué al objeto de su deseo, el cual no puede obtener, ya que es mi amigo. Cry hizo que su falsa tranquilidad sea destruida.

Supongo que la fiesta ya se acabó, es hora de volver a trabajar.

Y sí, esto era una historia de una cafetería con chicos disfrazados y de la nada se sacaron el disfraz los tres 😂

Aunque eso no quita que amé hacer a Fire sin autocontrol 🤣

Saludos, Vivi.