Cry

Salgo con Deal del establecimiento. La madre de Bride ha tenido que venir a la universidad para acompañarla hasta su casa, pues se descompensó. Todavía no puedo creer que su padre sea el director y que esté caminando tan campante con su primo y, da la casualidad, que es el que supervisa la cafetería. El mundo es un pañuelo.

—Te agradezco otra vez por asistir a mi prima —dice el muchacho de traje, el cual tiene un particular mechón azul en su flequillo.

Río, nervioso.

—No es necesario. —Agito la mano—. Hago lo que cualquier persona con moral haría.

Y para que no se vengue conmigo después.

—Me alegra que Bride tenga tan buenos amigos como tú.

Bueno, si golpearme, ponerme el pie, tirarme agua en la cara y burlarse de mí, es ser un amigo, prefiero tragarme el tabaco que se fuma todos los días Fire.

—Sí, yo también —declaro sin un mínimo de sentimiento.

—Pero, ¿sabes qué?, siento que te conozco de otro lado.

Me sobresalto.

—¡¿Yo?! —Me alarmo—. ¡¡De ningún lado!!

¡¿Me habrá reconocido de la cafetería?! ¡¡Fire va a matarme!!

—Sí, pero no recuerdo dónde.

—Te habrás equivocado. —Río, nervioso.

—¡¡Ah, ya sé!! —Recuerda.

—¡¡Lo juro, no me gusta Burbuja!!

—Tu padre... —Hace una pausa—. ¿Qué?

—¿Qué? —repito.

—Conozco a tu padre —termina de decir—. Te vi en una reunión de asociados.

—¿A mí? —Enarco una ceja—. Habrá sido a mi hermano.

Mi padre no me registra, no me llevaría a ninguna de sus reuniones. Además, ni sé de qué trabaja. Para mí mi familia es un completo misterio. Vivimos en la misma casa, pero no hay relación.

—No, eras tú, no puedo olvidar tu cara.

—Imposible.

—¿Te gustan las matemáticas? —consulta.

¿Y eso qué tiene que ver y cómo lo sabe?

—Sí —digo, asustándome, sintiéndome acosado.

—Le corregiste una cuenta al contador de mi padre, los dejaste a todos callados, ¿recuerdas?

Reacciono.

—¡Ah, sí! —Me sonrojo, avergonzado, luego explico—. No me invitaron, nunca lo hacen. —Río, nervioso—. Estaba allí porque me pidieron traerle algo a mi hermano y me retiré rápido. Qué casualidad, fue la única interacción que tuve, pero no creo que haya sido la gran cosa.

—Fue lo único divertido de ese momento, era un bodrio que no te imaginas. No te perdiste de mucho, no te preocupes. —Hace una pausa—. Oye, no te puedo invitar a una reunión, pero si quieres un día vamos por un helado, te lo mereces por sacarme de ese aburrimiento.

Mis mejillas arden más fuerte y mi corazón se acelera, rápido. Que alguien valore mis acciones me parece un montón. Aunque no sé por qué estoy pensándolo tanto.

—Claro, ¿por qué no? Me encantaría un helado. 

Este shipp demuestra que los personajes eligen solos, porque les juro que no estaba planeada esta interacción entre ellos dos 😂

Saludos, Vivi.