Hacía meses desde que Amidala lo descubrió, desde ese momento, lo saca con excusas y le enseña obediencia y modales, como un omega pero diferente, él cree que lo educa cómo educan a los betas mayordomos de las casa más grande, pues él hace todo lo posible para que con ellas mantener una buena imagen.

— las esclavas se quejan más de tus guardias, cada vez hay más violaciones — Alexa frunció el ceño — una de ellas está embarazada, lo más probable es que sea de uno de ellos

— porque lo piensas — dijo ella claramente enojada, niño fino de los dos se llevaban bien

— tiene 14 años — dijo el niño mirándola — nadie de ellos se metería con una niña — Alexa chasqueo la lengua y asintió — manda guardias por la zona sur, es la menos vigilada y e visto más betas ahí que antes — Amidala asintió

Siguieron escuchando el reporte del niño.

— eso sería todo — dijo la alfa más grande y se paró de la mesa

— qué pasará con Willy — la alfa menor parecía molesta por la pregunta — Luzu estaba llorando, me lo encontré de casualidad

— lamentablemente, no tengo todo el control como quisiera tener — dijo la alfa enojada — fue decisión de arriba, Willy ya fue vendido — el niño no podía controlar su olor cuando escuchó eso y las alfas lo miraron con enojo haciéndolo reaccionar — ¿Qué fue eso?

— nada me disculpo — el niño apretó sus ropas enojado — solo me sorprendí

— que no se te ocurra hacer alguna estupidez — el niño asintió — vendrán nuevos esclavos, encontré cuatro artículos muy curiosos — Auron se mordió el labio odiaba cuando hablaban así — te los encargare, tienes vigilarlos en todo momento —  el asintió y se paró de su asiento, empezando a avanzar — Auron no hagas nada estupido — los ojos de Amidala estaban cansados — deja que yo me encargue — el niño no dijo nada solo volvió a sentir y se fue

— en serio puedes manejarlo — dijo Alexa y Amidala negó llorando — no hagas promesas vacías, esos niños ya no tiene salvación — la alfa lloro y la otra la abrazó — qué tonta — la tomó de la cara y la besó, a pesar de que Amidala se negaba — porque tengo que amarte tanto — dijo abrazándola — esto no terminará bien, — la volvió a besar — es mi turno de hacer el trabajo sucio, pero pase lo que pase, no intentes salvarme — Amidala iba a decir algo — solo si salen las cosas mal, prometo estar bien si — seguí llorando abrazándola — te protegeré, lo prometo

Se volvieron a besar, entrelazando sus dedos uniéndose más.

Lo odiaba ese sentimiento, bajo la colina corriendo, antes de que los guardias fueran por él omega, tenía que disculparse, tenía que asegurarse que él estaba bien, porque tenía que conocer el dolor del otro niño, no se estaría preocupando por él si tan solo, Willy no lo hubiera dicho eso, con el corazón en la boca, su instinto es un mierda, ser un alfa queriendo proteger a un omega era una mierda, volvía a sentir distintos sentimientos, que había olvidado, su lobo le estaba gruñendo para que llegara rápido.

Pero en eso paró, Willy estaba afuera de su casa riendo con su padre, entonces volvió a cuestionarse el porqué tenían que sufrir de esa manera, caminó hacia él sin expresión, Min y Willy lo miraron raro, se había desaparecido durante dos horas, tomó la mano de Willy y empezó a caminar arrastrándolo, el adulto lo detuvo pero el niño lo apartó molesto.

— no te metas — los ojos de Auron estaban brillando, pero se arrepintió al segundo, Min tuvo miedo de él

— estaré bien Min — Willy sonrió y empezó a avanzar — nos vemos luego — Min no dijo nada, una de sus manos estaba temblando, pero aún así le sonrió a Auron, el niño se mordió el labio y siguió su camino

Auron lo llevó por el bosque, Willy tenía miedo no lo negaba cuando Auron se enoja parece a cualquier otro alfa, es como si aquel niño que creía diferente nunca existió, es raro para Willy admitir que los alfas son fuertes.

Llegaron a un prado aún en los terrenos de los betas, ahí había una figura tallada en la madera, un campo lleno de flores, unas piedras lo suficientemente grandes para poder sentarse. Auron dejó la mano de Willy y se abrazó, camino a donde estaba la imagen tallada en la madera, se sentó en el piso, solo mirando la imagen.

— Auron — Willy habló bajo pues sabía que podía escucharlo

— te conté su historia alguna vez — dijo el niño mirando a Willy y él niño negó — Min la cuenta a cada rato, dice que es una diosa marginada del cielo, su nombre es Ad, que se compadeció de los betas, utilizó todo su poder de los cielos, para crear un salón donde la comida nunca se acabará, donde las cadenas se rompieron y el agua nunca es escasa, ella nos espera en una gran mesa con una sonrisa — Willy se sentó alado de él

— no la veo feliz — dijo Willy mirando el retrato

— no ella nunca es feliz aquí — Auron jugaba con sus manos — Min dice que no tiene pupilas porque le dio a unos elegidos la claridad de la verdad, y que llora cadenas al ver que siguen puestas en nuestros cuerpos, es una mujer muy importante para nosotros, es lo que nos da esperanza — Willy lo miró

— y porque me traes aquí — Auron lo acaricio

— no lo sé — las garras de Auron salieron dañando sus manos — tal vez quería que en ella puedas encontrar esperanza — abrazó sus piernas — lo siento por lo de hoy — Willy asintió — yo no sabía que tanto sufrías, tampoco quise entender tu situación, perdóname

— igual perdóname por hablar de más sé que todo lo qué haces es para tener segura a Lana y a los demás — Auron asintió — ya se porque Luzu se enamoró de ti, — Willy tomó su mano — no dejes que Amidala te controle — los ojos de Auron se abrieron — te escuche ese día, estaba despierto, lo siento sé que no me incumbe — lo abrazo

— gracias, — abrazó a Willy — prometo salvarte — le susurro con sus ojos brillando, los ojos de Willy también brillaron — tu comprador ya fue escogido, te pidió personalmente como con Luzu, vendrán a buscarte hoy, no hagas un escándalo no le digas nada a Luzu, — Willy apretó a Auron — no se como intentaré salvarte

— Auron — susurro sonriendo — no hagas nada — el niño se iba a separar — por favor no hagas nada, si dañas a Lana no hagas nada — Willy tenía los ojos brillosos — tarde o temprano iba a pasar, estoy listo, solo cuida a Luzu, prométemelo

— lo prometo, lo siento — se separó juntando sus frentes — si eres de la familia, — Willy sonrió

Oraron los dos juntos, y se fueron de ahí dejando unas flores con los que cargaron su sueño, los niños se fueron abrazados sonriendo, Min estaba detrás de un árbol y escuchó toda la conversación, acarició la figura que había tallado, sonriendo, ahora sabía el problema que atormentaba a su hijo, es su turno de tomar acciones.

— Adara, no pude protegerlos a ustedes, dame la fuerza para protegerlos a ellos, — sonrió frustrado — amor dime qué se supone que debo hacer, protégelos esos niños tiene tus ojos — miró sus manos que estaban temblando — dame fuerzas para dejar de ser el cobarde que te dejó morir — una lagrima corrió por su mejilla

Sintió como el viento sopló, era como si la figura de su antigua esposa, lo estuviera abrazando, quería creer eso, que lo escuchaba y que lo reconfortaba, de verdad quería creer que ella seguía con él, a pesar de ya no estar en ese plano terrenal.