capítulo 30

Publicado: 12/ 03/ 2018
Editado: 18/ 09/ 2020

Mewni

Los siguientes días fueron como si nada malo hubiera ocurrido con aquella tres demonios en el Inframundo. Desde la plática con el señor Lucitor, Will había pasado cada día al lado de Janna casi a todas horas, y ya que Jackie estaba al lado de ella los tres salían a divertirse cada tanto; con Marco y Tom era lo mismo, y ahora star se unía a su diversión saliendo con aquel par de amigos que aunque divertidos tenían que guardar en secreto su amorío. Bill y Dipper ahora mantenían aquella antigua amistad de solo amigos cercanos, aunque Bill aprovechaba cada oportunidad para abrazar al castaño y mantenerse cerca de él, Mabel también se mantenía más cerca de ellos reviviendo poco a poco su irresponsable y feliz ser. Ya era la hora de salida del instituto y todos los adolescentes salían sumergidos en sus pláticas; Jackie avanzaba sujeta al brazo de Marco mientras Star se aferraba al brazo de Tom, Bill como siempre abrazaba a Dipper por los hombros mientras Mabel avanzaba a su lado riendo. Will y Janna avanzaban por su cuenta tomados de las manos, ahora la chica sonreía más radiante, natural y feliz, no solo su personalidad había cambiado un poco, su ropa era completamente distinta, vestidos, blusas, faldas y pantalones, todo era un poco más colorido aunque ella mantenía su toque.

— ¿Y bien? —cuestiona la rubia — ¿Que hacemos hoy?

—Seria divertido ir a los bolos esta noche —menciona el rubio.

—Bueno —regresa la mirada Jackie —yo escuché que abrió un restaurante súper cool, solo para adolescentes.

— ¡Oooh! —se acerca abrazándola — ¡Eso suena muy interesante! —apoya Mabel.

—No se escucha nada mal de hecho —observa al peliazul a su lado — ¿Que dices Will?

—Por mí bien si tú vas.

—Vaya par —musita para el rubio — ¡Pero si hay bebida yo me apuntó! —regresa la mirada a ellos —aunque lo de los bolos no suena nada mal.

Bill sonrío con entusiasmo ante el apoyo de aquel castaño que tenía teñidas las mejillas al darse cuenta de esa mirada gustosa sobre él, Bill de pronto apretó aún más el agarre apegandolo a su cuerpo. El castaño se avergonzo aun más.

— ¡Suéltame idiota! —musitaba apenado.

— ¿Y ustedes dos que piensan hacer? —cuestiona la rubia a Tom y Marco.

—Bueno... —rasca su nuca —la verdad no tengo ganas de ir a esos lugares ruidoso —expresa Tom.

—Si —sonrie acercándose a ambos —quiza solo vayamos a caminar un rato por la ciudad y luego vuelvamos a casa.

— ¡Bien! —grita el rubio — ¡Más bebida para nosotros!

Mabel ríe — ¡Eso suena muy bien!

De pronto aquella chica abrazaba a Jackie por los hombros mostrándole su espléndida sonrisa, Bill se acercó abrazándola y despeinandola, Will enseguida se acercó a Tom dejando a Janna con los demás.

—Sobre lo que te pedí Tom...

—Todo está listo, solo espero que todo salga bien más tarde —le dedica una sonrisa cómplice.

—Estoy seguro de eso.

Era una sorpresa para aquellos demonios mirar a ese peliazul tan decidido y confiando sobre un asunto, Tom le dió una pequeña caja que Will guardo con total entusiasmo en su ropa, después de darle las gracias a aquel pelirosa avanzó hasta su chica abrazandola por los hombros con total entusiasmo.

—Bueno —sujeta a Star del brazo —Tom, pequeño Diaz, nosotros nos vayamos yendo por acá —apunta sobre su hombro —nos mensajeamos más tarde o algo.

Sin mas la chica avanzó guiandolos a todos hasta el frente, de espalda a Tom y Marco levantaba la mano en forma de despedida, Bill les dedico un signo de amor y paz mientras Mabel sacaba la lengua hacia ellos guiñando el ojo mientras avanzaban detrás del par de rubias, Will y Janna se despedían con normalidad. Star los hizo detenerse y volvió rápidamente frente a Marco y Tom.

—Entonces... ¿Llegarán más tarde a casa?

—Si, solo... Iremos a caminar un rato —informa el pelirosa.

—Hoy no tengo tantas ganas —sujeta su nuca apenado —de una fiesta, además últimamente solo hemos saltado de un lado a otro entre bebidas, creo que tengo... Suficiente dolor de cabeza por este mes.

Ella ríe —Es verdad, últimamente hemos estado muy animados —frota su brazo apenada —bueno... Supongo que iré o me dejarán atas.

—Si claro, trata de divertirte sin nosotros esta noche Star —bromea el castaño.

— ¡Cuenta con ello! —se aleja animada.

Su sonrisa no era del todo sincera, pero trataba de mantenerla mientras avanzaba hacia sus otros amigos; Marco le sonrío hasta verla perderse con aquellos amigos, Tom suspiro y suavemente entrelazó su mano con la de aquel castaño uniendo sus dedos en un dulce movimiento, Marco regreso la mirada y sonrió enternecido con toque.

— ¿Vamos? —lo atrae.

—Si, ya les he avisado a mis padres —avanza a su lado — ¿Cuánto te cobro Oskar por el auto?

—Solo... —desvia la mirada encogiéndose de hombros —me lo prestó.

—No puedo creerte eso —le dedica una sonrisa.

—Bien —expresa vencido —una guitarra nueva... Pero no me costó trabajo crearla, ya sabes —se inclina a su oído —poderes de demonio.

Marco comenzó a reír ante el juego de manos que hacía el pelirosa en su intento de demostrar sus poderes. Al dar la vuelta a la esquina miraron el pequeño auto prestado y Tom avanzó con prisa abriendo la puerta del copiloto, Marco avanzó sonriente mientras aquel demonio sostenía la puerta.

—Aunque tuve que desaparecer toda la basura que tenía atrás.

Riendo asiente —si... Antes había un gran desorden ahí, entonces... —ajusta su cinturón — ¿Dónde me piensas llevar?

—Iremos al muelle hasta que llegue la noche —sube de su lado —comprare comida para ti, y luego te llevaré a ver las luces de la ciudad —ajusta su cinturón — ¿Te parece?

—Suena muy genial.

— ¿Es así?

De pronto se miraban directo y sus dedos se entrelazaban con cariño sobre el asiento de Marco, después de pellizcar la mejilla a su lado Tom arrancó el coche con dirección al muelle. Por su parte el grupo de chicos avanzaba felizmente por las calles.

—Bien —se detiene con las manos en la cadera —primero iremos a los bolos a entrar en calor, ¡Y luego iremos al mundo de los adolescentes! —añade con entusiasmo — ¿Alguna objeción?

—Para mi suena perfecto Jackie —eleva el pulgar con entusiasmo.

— ¡Bolos! —aprieta el puño con entusiasmo — ¡Los voy a destrozar a todos! —sonrie con vigor.

— ¡Pff! ¿Quien dice que no te puedo ganar en los bolos? —lo reta con la mirada.

—Oooh... ¿Me estás retando hermanito? —le hace frente con entusiasmo.

—Un poco tal vez —dirige la mirada a su pareja —Janna y yo contra tí... —sonrie entusiasta — ¿Y quién sera tu compañero?

— ¿Quien más? —con seguridad regresa la mirada al castaño — ¿Te me unes Pinetree?

— ¡Venga! —se interpone Mabel — ¡Eso es injusto! Debe ser chico y chica —se recarga del rubio con confianza —tú y yo Bill.

—Bien... ¡La chica Pine viene conmigo!

Expresaba entusiasta abrazado a aquella chica por el hombro, Dipper suspiro entornando la mirada con disgusto mientras descansaba sus manos en sus bolsillos. Mabel y Janna sonreían alegres mientras se retaban con las miradas muy entusiasmados con aquel reto al igual que el par de hermanos. Star se vio siendo jalada por Jackie que levantaba el brazo con entusiasmo.

— ¡Pues vamos! —avanza animada —por cierto, yo apuesto por Will y Janna —jala un poco a Star — ¿Y tú qué dices Star?

—Creo que voy... Por Bill y Mabel.

— ¿Y tú Dipper? —cuestiona Jackie.

—Janna y Will —expresa sin dudas.

— ¡Genial! Que sean cinco sobre la mesa... —se acerca al oído de la rubia —y espero ganar.

Sacando el dinero de su billetera se los mostró a los otros dos quienes asentían sacando el dinero por igual, Dipper dejo su apuesta y enseguida se adelantó, Bill lo miró irse notado la molestia en su rostro con una sonrisa, le encantaba verlo molesto por cosas asi. Los chicos seguían su camino entre bromas y risas mientras Marco y Tom se veían llegando al muelle, y contrando de milagro dónde estacionarse; soltando un suspiro terminaron mirándose y comenzando a reír aún dentro del coche.

—No pudimos quedar más alejados del muelle —expresa divertido el castaño.

—Es cierto —se recarga del volante —tendremos que caminar un buen tramo... No pensé su estaría tan lleno.

—Tal vez —observa por la ventana —haya algún festejo o algo... Aunque no recuerdo nada así... —observa de reojo al pelirosa —Oye...

Suavemente aquel castaño entrelazó sus dedos con los del pelirosa que descansaban sobre el volante, Tom lo miró enseguida perdiéndose en esos brillantes y marrones ojos suyos, solo basto que Marco posara aquella mano en su propia mejilla para hacer comprender al pelirosa lo que quería; alejandose del volante se recargo del asiento de Marco y con una sonrisa, que poco a poco se desvanecia ante el deseo, se acercó a los labios de aquel castaño mientras acaricia su morena mejilla con su pulgar y se unian en un profundo y afectuoso beso, se alejaron con un suspiro encontrándose con el rostro contrario.

—Tom... No quiero que termine nuestro rato.

—Yo tampoco quiero eso.

Después de un segundo, y más corto beso, el pelirosa le ayudo a soltar su cinturón de seguridad y luego salió a su lado para tomar su mano y avanzar hacia el muelle. En los bolos los chicos estaban en pleno empaté, era el último tiro y quién fallará le daría la victoria al equipo contrario, el último tiro era se Will y Bill, mientras en los asientos Star animaba con los mismos ánimos de Dipper que ya terminaba su tercer cerveza, Jackie por otro lado daba todo su apoyo a Will mientras Janna por igual apoyaba a su pareja.

— ¡Vamos Will tú puedes! —expresaba con ánimos Janna.

Entre sus aplausos y exclamaciones logro una sonrisa en el rostro de aquel chico que con total confianza se preparaba para lanzar, todos se quedaron en silencio mirando como las bolas recorrían la pista... Y tiraban los pinos.

—Empate —espetaba con sorpresa — ¡Pff! Estuvo bien hermanito —lo abraza por el hombro —al parecer solo igual de buenos.

—Tal parece.

—Me podría acostumbrar a verte así de confiado —expresa con sinceridad —te ves mejor Will.

—Gracias.

Él seguía siendo muy calmado al hablar, pero ahora no tartamudeaba cada cinco segundos, además sonreía más, Janna avanzó con entusiasmo hacia él dedicándole una sonrisa y dándole una lata de soda, Bill por su parte fue al lado de Mabel quien le dió una palmada en la espalda ante su empate, y una sonrisa.

—Jugamos bien, después podríamos... No sé —rie —estafar a algunas personas ¿Que piensas?

— ¡Pff! —rie golpeando la mesa —aqui se muestran las enseñanzas del tío Stan.

Entre su risa con tal entusiasmo su gemela le siguió algo avergonzada pero divertida, Bill sonreía mirándolo complacido, admirando su sonrisa con total atención mientras por su mente miles de ideas cruzaban, pero una se iluminó sobre las otras «Se ve muy bien cuando sonríe de esa forma» la verdad era que aquel pequeño sonrojo sobre sus mejillas a la hora de reír lo hacían ver hermoso.

—Bueno —deja caer el dinero en la mesa —fue un empate —suspira encogiéndose de hombros —Ya que... —les regresa el dinero.

— ¿Nos vamos yendo? 

Cuestionaba la rubia tomando su bolso, con enfado y decepción de si misma se levantó con el ceño fruncido arruinando el momento de los demás (mi actitud siempre que algo va bien) en la cabeza de aquella chica Miles de cosas ocurrían, pero la principal persona que siempre se había preocupado por esos pensamientos no estaba con ella, solo causaba problemas en esa mente suya, Mabel fue la primera en levantarse y tomar su mochila para salir con prisa detrás de su amiga.

— ¡Ey! ¿¡Que pasa!? —la sigue de cerca.

—Nada realmente, creo que los bolos... No son lo mío.

—Estas de broma —rie divertida —te fascina jugar a los bolos con Marco, te recuerdo que ya nos botaron de tres lugares distintos por tus juegos extremos de bolos.

Ella ríe deteniendose —Si, pero... —su sonrisa se desvanece —como que no estoy de humor hoy.

—Se nota... —suspira sujetando su brazo — ¿Que pasa en realidad?

Ambas chicas se encontraban fuera de aquel lugar, el sol se comenzaba a esconder y ellas esperaban a sus amigos que aún reían en la parte de dentro, esta vez hasta Dipper reía contándole a Bill sobre las estafas de su tío durante aquel verano.

—Mabel, tú creés... —baja la mirada dudosa — ¿Creés que Marco... Sea Gay?

— ¿Gay?... ¿Pero que dices?

—Si... Que le gusten los chicos.

— ¿Por qué estás pensando eso?

—Ha... Realmente no lo sé —muerde su labio por lo bajo —solo estoy molesta.

— ¿Quieres... Que volvamos a casa?

—No... Yo...

Apenas salían aquellos chicos entre risas y empujones aquella rubia se volvió hacia ellos con firmeza.

— ¡Que... Regresaré a Mewni, a mitad de este año me iré a casa...! Creo que —observa a la castaña —ya ha Sido suficiente el tiempo que he estado lejos de mi hogar... De mis padres...

— ¿Qué? —expresa sorprendida la castaña.

— ¿¡Pero que dices!? —avanza con enfado el castaño.

— ¿De qué hablas Star? No puedes simplemente irte así como así a mitad del año escolar.

—Sabes muy bien Janna que tengo tutores privados en casa, ni siquiera había necesidad de venir aquí en un inició... Solo fue... "Un castigo" y creo que ya ha Sido suficiente castigo...

—Debes estar bromeando Rubia —avanza extraña la rubia —oye, apenas nos estamos comenzando a llevar bien.

Sin más la abrazaba por el hombro, Janna se acercó mirándola de cerca ¿Drogada? ¿Mucha bebida? Debía haber algo mal... ¿Tal vez se había golpeado la cabeza?

—Tiene que ser una broma —sacude su brazo —Oye Star, ¿no es así?... Y si aún si lo fuera, ¿Por qué?

—Aun si no lo fuera —responde por lo bajo —me quiero ir... ¡Pero les escribiré! —sube la mirada —mandaré mensajes cada día y tal vez hasta los llamé y hagamos videollamada.

—Si claro —espeta incrédula la castaña —con lo ocupada que te van a tener estudiando sería... Increíble que si quiera pudieras dormir...

Los demonios no comprendían muy bien que ocurría en ese momento, entendían que Star pensaba marcharse, pero no comprendían el por qué... Dipper se salió de la plática al ver que solo las chicas estaban en ello, Bill se inclinó un poco hasta el oído de aquel castaño haciéndolo sobresaltarse.

— ¿Por qué se va? —cuestiona en un susurro.

—No tengo idea, pero quizá Mabel sabe algo.

— ¿Y... Es malo que ella se vaya?

Dipper se vio aún más sorprendido al girar la mirada y ver a aquel chico tan cerca de su rostro, Will y Bill tenían a Dipper entre medio de ambos, pero eso no se quedaría así más tiempo... Bill de pronto sujeto a aquel castaño por el hombro apartandoló un poco del lado de su hermano, avergonzado Dipper miró de reojo a Will quien mantenía su mirada sobre su pareja de entre todas aquellas chicas.

—Ella ha Sido nuestra amiga por un tiempo... Es difícil pensar que se irá.

—Pero ha decir verdad... —menciona el peliazul  —ultimamente esa chica es un punto y aparte, estando sola. Jackie y Janna han estado pasando tiempo juntas y Mabel se les ha unido la mayoría de veces, si no es que está con ustedes... Y por alguna razón ella sigue quedándose atrás, alejandose un poco cada vez...

—Pero eso...

Sin poder decir más él castaño se percata de la veracidad de esas palabras, en un principio el mejor amigo de esa chica era Marco, pero ahora él salía mucho más con Tom, quien es el ex de Star. Y hablando de chicas Will tenía total razón, Mabel se alejo por un tiempo y al volver ella se acercó mucho más a Janna y Jackie... Star, sorpresivamente, había quedado fuera. Su mirada subió a aquella rubia luego de poner sus ideas en orden, ella mantenía la mirada baja con una sonrisa que parecía no podría mantener por más tiempo, pero entonces exhaló un suspiro largo y se levantó con los hombros atrás y la frente en alto, con una sonrisa, como si todo estuviera bien.

— ¡He! Que todo está bien, ya he llamado a mi madre y mi pasaje ya fue comprando así que... No hay marcha atrás.

Decía sonriente entre aquellas chicas, mientras mantenía los ojos cerrados para evitar mirar sus caras de tristeza o disgusto. Las chicas se miraron entre sí algo inquietas y asientiendo se abalanzaron sobre ella abrazándola con fuerza; Star no sé aparto en el primer instante, solo abrió los ojos manteniendo la vista en la nada mientras su sonrisa se desvanecía, y entonces algo incómoda se alejo de aquel abrazo para mirarlas con una leve sonrisa.

— ¿Vamos a la fiesta entonces?

Todos la siguieron aún cuando los ánimos habían caído de gran manera ante tal inesperada y triste noticia; mientras para esos adolescentes la fiesta no iba tan bien, para Marco y Tom todo parecía ir de maravilla, habían pasado un buen rato en el muelle yendo de un lado a otro entre comprar comida y solo pasear por ahí, ahora estaban en una banca mirando la puesta de sol aparecer, Marco bebía una bebida y Tom solo sonreía al horizonte disfrutando del momento.

—Ésto es totalmente hermoso.

Expresaba con tranquilidad bebiendo tranquilamente su bebida, Tom sonrío mirándolo de reojo y de pronto saco su celular de demonio para tomar una foto sin que el castaño se percatarse, pero apenas el pelirosa la admiraba con orgullo Marco regreso la mirada notando su rostro en la pantalla, sin decir nada arrebató el celular de las manos de Tom apartandolo con su cuerpo de aquel móvil.

— ¡Oye, ésto es injusto! Ni siquiera me di cuenta —se quejaba mirándolo sobre su hombro —yo también quiero tener fotos tuyas.

El demonio sonríe vencido —Bien... Toma tu móvil y toma las que quieras.

— ¿¡En serio!? —cuestiona entusiasmado.

—Si, anda.

El castaño sonrío animado y dejando su bebida de lado saco su móvil para poner la cámara frontal y recargar su cuerpo de aquel pelirosa quien sonreía abrazándolo por el hombro con entusiasmo en espera de que aquella foto saliera bien. Ambos estaban a gusto con la imagen, pero Tom amaba mucho mas la que él había tomado primero.

—Ya casi termino con ésto —agita su vaso — ¿Nos vamos yendo?

—Si, —se levanta tranquilo — ¿Cuánto tiempo crees que tarde eso de los juegos artificiales?

—No tengo idea, pero seguro lo alcanzamos a ver antes de irnos.

Dando un último sorbo a su bebida, Marco arrojó el vaso a la basura y apenas Tom notó eso deslizo su mano hasta tomar la del castaño entre su avance hacia el coche.

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top