La Ayuda De Externos
-Sabes que los permisos para visitas es con Joseph ¿Porqué me lo dices?
-... Quiere ayudarnos a encontrar a Mobius...
Un mes después...
Jenifer estaba preparando comida, teniendo a dos detectives esperando en la sala junto a Leslie y Buddy, aunque ella y el albino sintieran que podían confiar, aún tenían la inseguridad de haber sido traicionados y manipulados antes. La puerta sonó, a lo que la chica fue a abrirla, encontrándose a Parker de pie en la entrada, ella le permitió el paso.
-Gracias, Jenifer, empezaba a dudar de que me escribirías sobre eso de nuevo.
-No fue mi decisión...
-Teníamos que saber más de ti antes de poner en riesgo a estos dos...- dice Sebastián, poniéndose de pie -Detective Sebastián Castellanos.
-Detective Joseph Oda y tú debes ser Jeremy Parker... Dijiste tener información sobre Mobius.
-... ¿Hay policías en la zona, cierto?- dice el chico algo nervioso, a lo que ambos detectives asienten -Bien- saca una carpeta de su mochila, entregándola a Joseph.
-¿Qué es esto?
-Copias de documentos que obtuve de la computadora central del Beacon antes de que fueran encintado.
-¿Hackeaste su computadora?
-... Ese no es el punto. Lo que importa es que encontré cierto programa que, al acceder, logré encontrar archivos de sujetos de prueba y algunas grabaciones con el Dr. Marcelo Jiménez y un chico Rubén Victorianos- Leslie y Jenifer comenzaron a inquietarse.
-... Muy bien, Parker. Como Joseph debe cuidar de los chicos, todo lo que encuentres sobre Mobius, me lo envias a mí.
-Pero...
-Estos chicos ya tuvieron suficiente, no los voy a involucrar a no ser que sea necesario...- dice Sebastián severo.
-Es cierto, el llevar a Jenifer y Leslie dentro de la investigación podría causar problemas más grandes de los que ya tienen.
-¿Qué problemas?- se quedaron callados, por lo que Parker podía sentir la tensión -Tal vez después...
-... ¿Tienes fax?- el chico asiente, a lo que Sebastián mira sorprendido -¿En serio?
-Sabiendo que mi primo desapareció y que Mobius esta involucrado, hay muchas cosas en que no confío.
-Bien, nos enviaremos información por ahí. La próxima vez que debas verme o que deba verte, nos reuniremos en mi casa. Si Mobius tiene los ojos en alguno de nosotros, es mejor que sea en mi que en ellos.
-De acuerdo.
-Revisaremos la información que nos diste y te hablaremos después.
-Esta bien, gracias por dejarme ayudarlos... Y gracias, Jenifer... Nos vemos en el siguiente trabajo.
-Una pregunta, Parker- dice Jenifer algo confundida -¿Porqué te arriesgarte a preguntar sobre Mobius mientras trabajábamos?
-Yo no hago video llamadas sin saber quienes están observando. No te preocupes, nadie sabe que hablamos. Adiós.
Dos años y algunos meses después...
Al no haber pruebas suficientes y sin encontrar culpables se omitió el juicio y se cerró la investigación, aunque eso no detuvo a Castellanos de seguir investigando de manera externa junto a Parker y John, el abuelo de Jenifer, que querían detener a Mobius a toda costa. Joseph mantuvo su residencia cerca de Jenifer y Leslie, sabiendo que aún había riesgo de que fueran por ellos, trabajando como detective privado en casos más pequeños.
-Jenifer, recuerda que si algo pasa, debes llamar a la estación y...
-Lo sé, Joseph, no te preocupes. Tienes un caso.
-Me preocupan. No han sido lo mismo desde que Buddy se fue.
-Sí... Pero creo que él ha mejorado mucho en el último tiempo, ya puede hablar mejor.
-Antes de irme... ¿Cómo han seguido los sueños?
-Lo mismo que desde hace dos años... Horribles y exactamente iguales para ambos.
-Lo lamento, recuerda que si algo pasa, también puedes llamar a Sebastián.
-De acuerdo, adiós.
Jenifer cerró la puerta y se dirigió a su cuarto, pero al abrir la puerta, el chico corrió a sus brazos, asustado y señalando un hombre enmascarado inconsciente junto a una lámpara rota. La joven marcó a Sebastián, atando al extraño a la pata de la cama y salieron a esperar afuera. Pasaron pocos minutos y ya habían dos patrullas, Sebastián bajó del vehículo, junto a algunos oficiales, siendo recibido por los chicos.
-¿Qué ocurrió?- dice Sebastián con seriedad.
-... Malo, malo, malo... Malo... Malo...
-Fui a ver a Leslie, ya que había estado desanimado últimamente. Cuando entre, él ya lo había golpeado con la lámpara.
-... Leslie... Necesito que respires ¿Sí?- Sebastián dijo, tomando sus hombros con suavidad como Jenifer suele hacerlo -¿Qué quería el hombre?
-... Preguntó por... Jeni... Quería... Lastimarme... Quería llevarnos... Afuera...- se alzó la manga, mostrando un moretón visible alrededor de su muñeca.
-... Al menos te defendiste bien, es un gran paso para ti...- Sebastián se acerca al oficial que estaba saliendo de la casa -¿Dónde está?
-Está muerto...
-¿Qué?...- Leslie comenzó a alterarse, Jenifer lo abraza y trata de calmarlo -¿Culpa de Leslie?
-No, Leslie, ese hombre entró en la casa y te atacó. Tú no hiciste más que defenderte...- Jenifer consolaba a Leslie, para luego mirar a Sebastián -Él estaba respirando cuando lo ate, estoy segura de eso.
-Describan...
-Cabello rubio con estilo militar, ojos cafés, altura de 1.67, mandíbula prominente, cicatriz en la ceja derecha y un tatuaje en el cuello.
-Ojos irritados y marca de golpe en la cabeza, pero la espuma en su boca da señales de un posible envenenamiento. Ya llamé al equipo forense para confirmar la causa de muerte.
-Bien, debemos identificar al sujeto. Llamaré a Joseph para que los busque en la estación.
Después de algunas horas, Joseph los recogió en la estación de policía, llevándolos a su casa, ya que la de ellos estaría cerrada en lo que buscaban pistas. Los siguientes meses fueron pesados para ellos, sobre todo para Sebastián que no lograba vincular al muerto con el grupo de Mobius, terminando con un despido, se sentía estancado, y las pesadillas sobre Lily no lo ayudaban, pero al menos ahora tenía refugio en personas cercanas y no en el alcohol.
-¿Has soñado con ella de nuevo?
-Ese tipo ya había despertado la culpa, pero... Desde que estoy investigando sobre Mobius... No puedo dejar de ver a Lily y es...
-... No puedo decir que sé cómo te sientes, Sebastián... Nunca conocí a mi hermana y mis padres me daban terror... Al único que he perdido y que ame es a Buddy... Pero me da tranquilidad que vinieras con nosotros, en lugar de hacer algo que te lastime.
-El psicólogo que me asignaron no fue de mucha ayuda... Al menos ustedes si llegan a entender como me siento...- alguien toca la puerta -¿Esperaban a alguien?- Joseph negó, Sebastián se acercó a la puerta, agarrando una botella, abrió la puerta y la sorpresa lo irritó -¿Kidman?
-Hola, Sebastián. Ha pasado tiempo.
-Tres años. Llevo tres años intentando localizarte.
-¿Y pensaste que estaría en el fondo de una botella vacía?- dice viendo la botella en su mano.
-¿Porqué venir ahora?- dice Joseph, metiéndose en la discusión antes de que saliera peor -Hemos estado ocupados.
-No me encontraron porque ellos no querían... Estoy aquí por esto- muestra dos carpetas, una se la da a Sebastián y la otra a Joseph, le entrega la carpeta a la chica al ver el nombre.
-Jenifer...- ambos abren sus carpetas, a lo que Sebastián reacciona iracundo, viendo la foto de su familia.
-¡¿Dónde la encontraste?!
-Lily y Melody están con vida...
-No... No puede ser... Ella... Se suicidó... Yo vi su tumba...
-Podemos reescribir la historia si queremos. Fingir una muerte es un juego de niños si jugamos bien las cartas. Tus padres fallaron porque tú no sabías sobre el tema, ella sí. Tus abuelos jugaron el juego y encontraron la forma de ganar, dos veces- dice mirando a Leslie, que se escondió tras la chica -¿Porqué iba a salir para mentirles? Ambas están vivas, y corren peligro. Necesitamos su ayuda para salvarlas.
-¿Salvarlas? ¡¿Qué les hicieron?!
-Esperaba que vivieran a voluntad propia.
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