32.

La risa casi desquiciada de Zaphiri  fue una clara señal de que esta más que encantado con todo lo que esta pasando, como la desesperación de no poder hacer nada para ayudar a sus niños lo llevo a tal extremo de despertar el poder oculto de su sangre. El que ahora mismo lo hacia sentir una extraña fuerza correr por su cuerpo, sentirse con el poder de acabar de una buena vez por todas con el idiota que lo tiene prisionero, aun con todo eso a su favor sabe que no es el momento, recién despertó esa fuerza, una que no sabe como controlar.

- ¿Tú me vas a impedir obtener a tus cachorros?, ¿Tú, que ni siquiera haz podido salvarte a ti mismo? No me hagas reír.

Si quería lograr que se enojara lo consiguio, olvido todo razonamiento que tuvo antes, si podía dañar a ese chupa sangre lo haría, no importa que fuera a costa de su vida ¡Pero debía hacerlo! Se supone que los padres protegen a sus hijos no al revés, y ya es momento en que de verdad haga algo por ese par de impulsivos que tiene por hijos. 

- Rie todo lo que quieras, no me conoces solo te has dedicado a torturarme estos cuatro años ¡Te sorprendería lo que puedo hacer!

Se sorprendió a si mismo cuando pudo acertar un puñetazo en el rostro, golpe que Zaphiri no evito porque no lo creyó necesario, fue un error bastante grande, ese "simple" golpe llevaba una fuerza que solo la adrenalina puede dar. Krest no tuvo tiempo de analizar la situación o siquiera de celebrar que podría defenderse al fin, el hombre frente suyo le dio una mirada de completa seriedad.

- Bien, ¿Quieres jugar? Juguemos entonces.

Vio con miedo como esa larga uña roja apareció en la mano derecha de ese vampiro, como el mismo comenzaba a acercarse dispuesto a matarlo, a cortarle alguna parte del cuerpo o peor,  costaba creerlo pero estaba seguro que con él podía existir algo peor que la muerte misma. Podía ver perfectamente la más terrible de las torturas en ese brillo carmesí que desprende esa uña, una que ya ha probado antes su poder aunque no con todo su potencial.

Retrocedió sin querer olvidando por un segundo todo el poder que ahora tiene. Zaphiri ataco primero tomándolo por sorpresa, un fuerte dolor recorrió su cuerpo entero.

- Recuerdas lo que te dije la primera vez que te lance una de estas bellezas ¿No es así? - le sonrió con un sadismo muy marcado, uno que hizo que quisiera matarlo aún más- un fuerte veneno correrá por tu sangre ahora, otros catorce golpes y morirás.

No pudo ni responderle, soportar ese dolor del demonio otras catorce veces era una cosa imposible de lograr, estaba seguro que moriría antes de llegar a ese número. Saco fuerzas que no sabia que tenia de algún lado, antes de que Zaphiri  volviera a atacarlo con su veneno intentaría defenderse una ultima vez. Aunque ninguno de los dos se espero que lo que paso.

Itia se interpuso entre ellos, tratando de parar a esa locura o de ganar tiempo. Tiempo que no tenían.

- ¿Que crees que haces?

- Matar a Krest ahora no le servirá de nada, ¿Que le asegura que esos niños le van a creer o que no enloquecan hasta el punto que nadie los pueda controlar?

El pequeño castaño quería gritarle un sin fin de cosas, entre ellas que era una maldito cobarde por ayudar a Zaphiri. Si no lo hacia era solamente por que algo muy dentro suyo le decía que Itia le salvo la vida de nuevo.

- ¿Y a ti que te hace pensar que no es eso lo que quiero?

El silencio casi absoluto que se formo fue roto por el sonido de algo liquido caer al suelo.

- Estorbas.

Krest vio como de una momento para otro Itia fue atravesado por la mano de Zaphiri sin dificultad alguna, como su cuerpo cayó al suelo de forma brusca, quiso gritar pero su voz no salia.

- Lo ves Krest, ves lo que lograr con tus absurdas ideas de escape. Itia ya no vive, y pude pasarle a cualquier humano que habite en este lugar; Avenir, Albafica, Shaka, Francisca o Sasha, ¿Quien sera el siguiente?

~•~

"Esto no me gusta"

Milo no supo de verdad a lo que se enfrentaban hasta que pudo verlo con sus propios ojos. Él fue escogido para ser la carnada en ese plan descabellado que tenían, arriesgaría su vida y la de Camus de nuevo, solo que esta vez la vida de ese pelirrojo estaba más asegurada que la suya.

- Lo sé, es más grande de lo que uno se imagina y hay más vampiros aún.

Milo suspiro con fuerza tratando de ganar valor, tenia las manos atadas contra la espalda sujetadas por un "fuerte" nudo. Camus tras de si debía actuar mejor que nunca antes en su vida, volver a esa faceta de tipo frío que mostraba en el Nido, faceta que le permitía evitar a cualquier otro vampiro, una que ahora mismo el cazador que traía preso admirada fascinado, quería darle una patada por ser tan obvio.

- Camina.

Ordeno ya por completo en su papel, lo empujo con algo de fuerza para hacer más creíble su acto, cuando la verdad era que los dos estaban bastante nerviosos cualquier movimiento en falso podía delatarlos y todo se acabaría tan rápido como empezó.

Cuando entraron a la cueva que servia de entrada el cambio de hambiente fue muy notorio, el aire es más pesado, el sentimiento de inseguridad les recorrer el cuerpo entero, la oscuridad reina por cada rincón excepto en donde las pequeñas antorchas que se ven de vez en cuando. A mitad de camino una voz los detuvo.

- El Principito menor volvió y con una ofrenda por lo que veo.

Camus ignoro a ese comentario por completo, aprendió  a lidiar con vampiros convertidos hace mucho, sus burlas ya no le afectan.

- No es de tu incumbencia DeathMask, necesito ver a mi padre, traigo algo que le interesa.

Desde lo más alto de la cueva, lo más alto que se permitía volar, Kokuto los seguía solo una señal bastaría para que el halcón volviera con Saga  y el verdadero plan diera inicio.

🔥

Zaphiri  en modo salvaje al 80% 😱

¡Bien tarde pero ya volví!

ScorpioNoMilo.💕

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top