3.

- ¿¡Que quieres que haga!?

Golpeo con ambas manos la mesa que tenia en frente, frustrado, furiosos y con ganas de agarrar a golpes al primero que lo sacara de quisio y su compañero estaba apunto de lograrlo.

- No puedes salir a buscarlos como un loco, Milo.-trato de hacerlo entrar en razón cosa difícil cuando estaba tan enojado- seras comida de vampiros antes de que te des cuenta, ¡Enojado no piensas!

Miro al castaño con ganas de asesinarlo, porque tenia razón, cuando se enojaba sus neuronas se desactivaban y actuaba por puro instinto, varias veces casi se arroja a lo loco a matar a algún vampiro por lo mismo.

- Entiende Aioria, mi padre y mi hermano pueden estar vivos en alguna parte de ese bosque. Ese chupa sangre dijo que Kardia había desaparecido, tal vez pudo escapar del que se lo llevo, ¡Tiene que estar en alguna parte!

- Y si eso es cierto, ¿Porque no ha vuelto a aparecer?

Giro a verlo, su rostro reflejaba que no había pensado en ese detalle, su si hermano menor estaba libre ¿Porque no volvió?, ¿Se habría perdido en el camino y terminado en otro lugar? Era una gran posibilidad pero Kardia aunque era menor que el conocía el terreno mucho mejor, algo debía haberle pasado. Volvió a sentarse frente a su compañero, ya no sabia que hacer tenia unas enormes ganas de salir a buscarlo, pero el sacerdote le había dado le orden de encargarse del vampiro que tenían cautivo.

- ¿Dijo al menos donde esta tu padre?.

Ese otro punto, lo más probable que se encontrara en el "nido" lugar donde se ocultaban. Ese sitio esta bien escondido en algún lugar del bosque.

- No dijo donde, pero si que es consorte de alguien.

- ¿De quien?

- Eso quisiera saber.

Cuando su padre desapareció él y Kardia  lo buscaron por mucho tiempo antes de unirse de forma formal a los cazadores, una vez en la organización encontrar pistas fue más fácil, aun así parecía que a Krest se lo había llevado el viento, no había ni siquiera un pequeño rastro que les dijera donde buscar, algunos cazadores o habitante del pueblo dijeron haberlo visto en algún punto del bosque tratando de volver pero siempre terminaba de la misma forma, una figura alta aparecía y desaparecían los dos en un instante.

En una de sus búsquedas fue que un vampiro pelirrojo los ataco, mordiendo a su hermano, pudo liberlarlo de sus dientes pero dicho vampiro escapo y al tiempo después vino por el menor de los dos y desaparecio.

- Pueden estar vivos en alguna parte, no puedo quedarme aquí ¡Son mi familia maldita sea!

Se levanto buscando cada una de sus armas, pensaba desobedecer la orden de Lemur, aunque eso le trajera consecuencias, de todos modos cualquiera de ellos podía hacerse cargo del vampiro.

- Milo.- Aioria volvió a detenerlo, lo sostuvo de los brazos antes de que hiciera una completa locura- piensa bien lo que vas a hacer, tiene una oportunidad unica, no todos corremos con tu misma suerte, no la desperdicies. No sabes lo que daría Saga o yo mismo por volver a ver con vida a nuestros hermanos.

Tiro cada cosa que llevaba en las manos al suelo, Aioria tenia mucha razón. Si así las cosas sin pensar saldría todo mal y la única oportunidad que tenia de recuperar a su familia se iría para no volver.

~•~

"-Tengo que buscarlo, ¡algo pudo haberle pasado!

Escuchaba una voz a lo lejos, una que conocía y extrañaba demasiado, era la voz de su mellizo, se escuchaba lejana y algo asustada, al parecer discutía con alguien.

- Estas...¡Dégel, no puedes ir!

Esa voz no sabia de quien era, nunca la había escuchado antes pero tenia un pequeño parecido a la del cazador rubio que conocia, el que ahora sabia se llamaba Milo.

- Es mi familia... por favor.

Nunca lo había escuchado rogar, ni siquiera a su "padre" para que no lo castigara por no matar a los humanos.

- No iras solo, no te pienso dejar solo. Voy contigo y tal vez también me encuentre con mi hermano..."

Las voces se fueron perdiendo hasta desaparecer. Eso había sido un pequeño momento de conexión que tenia con el mayor,  por alguno segundos podía saber que pasaba con él, si seguía con vida al menos. No le gusto que ya supiera que estaba en peligro.

Camus sentía su cuerpo mucho mas pesado que de costumbre, quiera moverse, abrir los ojos o algo para saber donde estaba metido, aunque lo más probable era que siguiera en esa iglesia en la que su sacerdote casi acaba con su vida, pudo haberlo hecho si hubiera querido, pero no seria tan bueno con él.

Sintió como algo caía en su boca, un liquido tibio el que le supo mejor que nada que haya probado antes, también podía sentir  el calor de un cuerpo sosteniendo el suyo. Abrió los ojos de golpe asustando a ese cazador que veía cada que despertaba. Trago saliva cuando se dio cuenta de que de nuevo tenia la muñeca herida.

- Hasta que despiertas, ya creía que habías estirado la pata. Dormiste por dos días.

Milo se dio cuenta de que no lo escuchaba y que tenia la vista pegada en su herida, algo normal supuso pero no se imaginaba para nada lo que significaba el sabor de su sangre para ese vampiro.

La puerta de esa celda estaba abierta, si empuja a ese sujeto con la suficiente fuerza podía escapar, aunque no llegarían demasiado lejos con las pocas fuerzas que tenia. Si tan solo pudiera atrapar algún animal seria suficiente.

- ¡Reacciona!

Ese grito lo trajo de vuelta a la realidad, el hombre frente suyo lo miraba serio, pero ya no con ese odio evidente.

- Tu vas a ayudarme.

🔥

3 capítulos y ya siento que he matado mucha gente :c  van Kanon y Aioros en algún punto de la historia se sabrá que paso con ellos, lo del arquero es mas feo :c

Dégel y Camus son mellizos y como tal tienen una conexión extraña, pero no pueden comunicarse con ella.

ScorpioNoMilo.💕

Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top