🌬𖠱ּׂ̼݉͗፞-Capítulo 2.
Después de la despedida.
¿estuviste triste?
Jae miraba sus pies moverse adelante y atrás mientras el columpio en donde estaba sentada se movía.
¿Qué pensaba Jae?
– Pasarán cosas buenas.– miró al castaño, éste le regaló una cálida sonrisa, demostrando que su sinceridad era honesta. – Él me pidió que cuidara de ti, así que...
– No te molestes en hacerlo Hoseok, no es justo que te pida algo que quizás no quieras hacer.
Una de las preguntas de Jung era por qué había tanta tristeza en su mirada, o ¿por qué Jae no era buena para poder decir lo que sentía?
No la juzgaba, tampoco era como si llevaran un largo tiempo siendo conocidos.
– Podemos ser amigos, en verdad quisiera que fuera así
– ¿quieres ser mi amigo? – Jae le miró con un pequeño brillo en sus ojos.
Que alguien le pidiera ser su amigo era especial de las mil maneras.
– Yo...remplazaré el lugar de Taehyung.
¿Realmente lo haría?
– Ahora entiendo porque me pediste que me alejara de él.
– Sus caminos debían buscar otro, pero no puedo asegurarlo, es cosa de la casualidad.
– Me acostumbré tanto a una persona, sabes...él hizo grande cosas por mí.
Hoseok se quedó en silencio, él quería también ser reconocido de esa manera.
Aúnque no sabía del todo que había hecho Taehyung por ella en dos meses, contando un día entero, él quería usar más tiempo para poder ganársela.
– Taehyung suele ser así, el tipo de persona que demuestra mucho afecto, lo cual te confunde a veces.
Entonces, ¿así cuidaba de todos como lo hacía con ella?
– Una vez se arriesgó a dormir en mi casa aún sabiendo la mala zona en la que me encontraba viviendo, no es algo del otro mundo, sin embargo...no creo que alguien siendo de tan buena vida como él sea tan comprensible, me pareció increíble.
– Él es bastante bueno para ser verdad.
– Total, no me debería detener, no es como si lo hubiera perdido completamente...sólo está a...unos miles de kilómetros.
– Quédate con la idea de que estará bien ahí.
– le dije que fuera feliz.
– es mejor allá.
Con mucho dolor.
Y fue así como Hoseok utilizó sus trescientos sesenta y cinco días en Jae.
Si le preguntan que significa para ella Hoseok, sencillo.
Hoseok era la persona que sí o sí necesitabas en su vida.
Tal vez no era lo mismo por lo que pasó aquellos dos meses que terminaron en el olvido y fueron guardados en un rincón dentro del corazón y fotografíados mentalmente, permanecieron como recuerdos con una cicatriz de por medio, olvidar nunca fue una opción.
Para Jae fue difícil afrontar a eso que le llamaban realidad.
Su única meta era olvidar, intentar hacer algo bueno para el día de hoy, y si llegaba, preparar el mañana.
En cuanto abrió su restaurante sabía que estaba haciendo las cosas bien.
Y agradeció por cartas a Taehyung.
Fue con sus padres a contarles sobre la buena parte que llegaba en su vida, les contó sobre Hoseok.
Porque tal vez sin mirarlo de la misma manera como Hoseok lo hacía, Jae le apreciaba bastante, como ni siquiera las palabras suficientes son.
No había una oración que completaba la perfecta definición.
Tal vez al pasar el tiempo Hoseok pudo completar lo que necesitaba Jae, sin embargo, sólo faltaba un paso.
[...]
– Jae. – escuchó desde el otro sillón a Hoseok hablar.
Era un un fin de semana a nada de anochecer y en su entorno contando el ambiente lluvioso que había, comúnmente los dos solían ir al aire libre o hacer cualquier cosa, excepción de éste día, sólo prefirieron estar en su casa viendo algún maratón de películas.
Lo triste aquí no era la película.
Era que entre ellos dos había un distanciamiento que Jae no entendía; Hoseok de repente le miraba de soslayo pero sin ninguna expresión, mientras que Jae si le miraba más duraderas veces.
Se cubrió más con su cobija, le respondió mirándole al castaño, éste hizo lo mismo a excepción de regresarla a la televisión.
– ¿Qué harás cuando veas a Taehyung? – preguntó, en eso sentía que sus palabras y voz se oían como ella nunca los había oído.
– No lo sé
– Nada sabes Jae, deberías de- interrumpió.
– ¿Qué puedo hacer, uh? ¿Sólo decirle que me dejó hecha nada después de que se fue? O leerle en voz alta las cartas que le envié, ¿éso le diré?
– Dile que tu quieres volver a iniciar las cosas, tonta.
Él no era egoísta, sabía que tampoco iba a detener a la chica con el cabello revuelto a causa de estar acostada todo el dia. No era así, también era su amigo e iba a estar ahí para apoyarle y aconsejarle.
Con mucho dolor.
– El me lo dijo Hoseok, y soy tan tonta –. Recalcó la palabra que le había dicho el mayor –. Que le dije, "Encuentra tu alma gemela"
– Y el te respondió que la tenías, ¿cierto?
Los dos conectaron miradas, cuales sólo terminaban siendo confusas y calladas queriendo librar tanto peso cargando, no sabia que se sentía exactamente, pero aquella mirada no le daba la energía que Jae necesitaba para que su foco brillara lo suficiente, porque Hoseok ya no le miraba con esa sonrisa.
– ¿Qué harás si le gusta alguien?
– ¿Qué puedo hacer yo, Hoseok? – una pequeña lágrima resbaló por su mejilla.– ¿Por qué detendré lo inevitable?
– Porque a veces quieres algo que no piensas en tu demás entorno que lo terminas dañando.
– Desde que se fue trato de hallarle sentido a sus palabras, no sé que se refiera con aquello que dijiste, comienzo a creer que a los ojos de los demás soy sólo alguien que fingió ser algo que realmente no lo era, ¿entiendes como me siento? A pesar del tiempo que haya pasado, me siguen mirando como la novia falsa causa problemas, porque no importa cuanto me ayudaste en limpiar mis búsquedas, eso no cambia mi mentalidad sobre eso, o peor aún la de las personas.
– Detesto que te tomes tan en cuenta la opinión de los demás.
– No lo entiendes, la gente que me ha rodeado tienden a opinar sobre alguien cuya vida no es fácil, sí. Lo admito fue mi culpa, pero no arregla nada querer hacerlo de otra manera, siempre...y nadie me aceptará por eso.
– Kim Jae.
– ¿Qué?
– Eres demasiado ciega.
– ¡Deja de comportarte como un grosero! Ni siquiera sé porqué te comportas tan indiferente.– le aventó una almohada, por fin veía sonreírlo.
él se la iba a regresar, no hasta que su celular sonó; abrió lo tomó y encendió para ver el mensaje.
El rostro del castaño se puso serio, y oírlo teclear hizo dudar a Jae del porqué tan rápido el cambio.
– ¿ocurre algo?
Hoseok volteó a mirarla y apagó su celular.
– Al parecer Taehyung quiere volver a reunirse con los dos.
Capítulo dedicado a:
NishaApaza
gracias por tus bellos
comentarios!¡♡
______________
Me tardé en actualizar por unos motivos personales, pero aquí está.
Quiero que se den cuenta que más a pronto Jae irá desarrollando otro tipo de sentimiento, ¿qué pasará?
También sobre lo primero.
Quería aclarar que aquella platica que tuvo con Hoseok fue después que Taehyung se marchó, lo que implica que desde ése día comenzaron a contarse los días para que se conocieran más.
Ya verán porque Jae está re ciega la ojete, y les mando un spoiler que aparecerá un nuevo personaje, no diré si es hombre o mujer, sin embargo, se volverá muy importante en la historia, tanto que espero que obtenga un capítulo desde su posición.
Armen sus teorías, les leo.
Saben que comenzaré a dedicar a quien vea más comentando.
Pregunta de éste capítulo;
¿En qué les ha gustado Casi Perfecto?
Bạn đang đọc truyện trên: AzTruyen.Top