-Hay cuatro tipos buscándonos, están completamente armados, y no parecen estar de buen humor, debemos salir de aquí antes de que nos encuentren - Habló Dazai, vi que Lucy trató de decir algo, pero él la agarró y salió corriendo del callejón.

Nosotros los seguimos, y me di cuenta de por qué de repente había empezado a correr, esos tipos estaban girados dándonos la espalda. Corrimos un par de metros más, y mi corazón casi se me sale del pecho cuando uno de ellos se giró y nos vio.

Miré hacia delante y vi a Dazai cambiar de dirección hacia lo que parecía ser una pastelería. Y en ese momento saltó hacia una ventana para poder entrar, Kenji  y yo hicimos lo mismo. Cuando entramos estaba completamente vacía, y el olor metálico de la sangre estaba impregnado por el lugar.

-¿Estás bien? - Le preguntó Lucy a Dazai.

-Sí, solo duele un poco - Le contestó con una muy pequeña sonrisa.

Iba a decir algo pero escuché unos quejidos a mi lado, dirigí mi mirada hacia Kenji. Tenía su brazo ensangrentado y no tenía la forma habitual de un brazo, se lo habría roto cuando entramos por la ventana.

-Necesitamos curártelo, pero no tenemos vendas - Mierda, por qué tenía que pasar esto justo ahora, ya bastante teníamos con mi herida en la pierna como para que ahora ocurriera esto.

No tenía nada encima que me sirviera como para remendarlo un poco y me estaba comenzando a desesperar. Miré hacia todo lados buscando algo de utilidad, en ese momento Dazai se giró a vernos.

-Cuando saltamos por la ventana sé dio contra los vidrios rotos - Le expliqué algo nervioso. Y él muy cabrón solo asintió para volver a lo suyo.

Aún con los nervios a flor de piel seguí mirando a mi alrededor, y aunque Kenji no estaba tan alterado como yo, sus quejidos me seguían metiendo presión.

Cuando ya estaba a punto de rendirme, un brazo con una vendas se extendió frente a mí.

Mis ojos se abrieron de par en par, miré hacia el dueño de aquellas vendas, era Dazai, le susurré un "gracias" algo avergonzado por mis pensamientos anteriores. Quizás seguía siendo un cabrón, pero ahora un poco menos que antes.

Ayudé rápidamente a Kenji con el vendaje, para acto seguido volver a seguir a Dazai hacia otro local y después hacia otro, logrando por un momento estar más lejos del peligro. La esperanza de salir vivos de esta volvió a mí, pero tan pronto escuché: "¡Conozco esos cabellos!", de alguno de esos tipos, se fue tan rápido como vino.

Las personas de antes empezaron a disparar hacia nuestra dirección, traté de mantenerme a salvo, sin recibir ninguna bala, pero al parecer mis deseos no fueron escuchados porque uno de los disparos llegó a mi pierna derecha, genial ahora ambas de mis piernas estaban heridas de alguna forma. Por suerte, la bala no me atravesó la piel, tan solo la rozó dejándome una especie de raspón jodidamente doloroso.

-¡Adentro ahora! - Gritó Dazai, arrastrándonos a otro maldito callejón. Al menos, los disparos pararon, pero los hombres se acercaron corriendo hacia donde estábamos.

Vi como Dazai sacó un arma, seguramente de las que nos había quitado antes, empezó a disparar, y acertó una bala en la cabeza de un tipo, quien soltó un grito algo desagradable de escuchar, y se quitó la máscara que llevaba puesta.

Un compañero suyo se detuvo, pero el tipo con bata blanca le obligó a seguir con su labor. Luego, otro disparo sonó y lo siguiente que supe fue que el tipo del disparo en la cabeza estaba tirado muerto en el suelo.

Los hombres se acercaban con velocidad, ya estaban muy cerca de nosotros, y no estaba muy seguro de si íbamos a poder salir de este callejón en el que Dazai nos había metido.

De un momento a otro, Dazai salió corriendo y nosotros lo seguimos, me sorprendí un poco cuando Kenji nos adelantó a todos, era realmente rápido, tal vez por su edad, la cual aún no tenía muy clara. Por suerte, Kenji vio una escalera a un lado y la señaló.

Quise gritarle para que subiera lo más rápido posible, pero Dazai se me adelantó y le gritó: "¡Sube! ". Él, claramente le hizo caso y empezó a subir para que nosotros le siguiéramos. Lucy estaba empezando a subir también, pero una bala le dio en la mano, chilló, y bajó las pocas barras que había subido, me asusté un poco por su grito. Pero cuando vi que los tipos empezaban a disparar, por nuestra más reciente debilidad, me puse alerta.

Dazai le disparó a uno en el pie, y yo, que anteriormente había obtenido un arma prestada por Kenji, le disparé al mismo hombre en el brazo, al menos este no nos molestaría mucho por sus heridas. Una bala pasó muy cerca de mí, pero pude esquivarla, y finalmente, apunté a la cabeza del tipo, y cayó.

Ahora solo quedaban dos. Menos probabilidades de morir.

Dazai se movió a otro lado, quizás para tratar de captar su atención en él, no lo sé.

Otro tipo cayó, y me fue imposible no girar la cabeza hacia el lugar de dónde provenía el disparo. Sí, lo sé, algo idiota de mi parte  sabiendo que podrían dispararme mientras estaba distraído. Miré a Dazai, pero él no había sido. Luego miré a Kenji, que estaba sonriendo con una de las pistolas en la mano.

Cuando devolví mi mirada al hombre que quedaba, bueno..., al parecer ya no nos quedaba nadie,porque Dazai le había disparado en la cabeza, y este había caído como un saco de papas contra el suelo.

Finalmente se había acabado esta pequeña guerra, suspiré, y los demás también, por el alivio de seguir vivos. Aunque ahora todos nosotros teníamos una herida por culpa de ellos, lo bueno es que no eran graves o bueno, que nos hicieran correr peligro de vida o muerte. Por ahora, no íbamos a morir.

Y joder, todo hubiera estado bien, si no hubiésemos escuchado al coche de antes acercarse. Kenji se quedó allí arriba escondido, y nosotros, nos mantuvimos abajo, buscando una salida en el callejón.

Tenía una, y aunque era algo estrecha, logramos salir bien. Luego avanzamos hacia una esquina, para meternos en otro local, en realidad, me estaba cansando un poco de esto. Aquel local estaba en perfecto estado. Y bueno, Dazai, como el idiota que es, volvió a romper el cristal para entrar.

Lo que más me llamó la atención al entrar fue un sonido como de susto, que se escuchó por toda la tienda por el silencio total. Al avanzar un poco más, vimos a una familia, el padre estaba herido y la madre abrazaba a sus hijos con miedo.

Dazai se puso el dedo en la boca indicándoles silencio. Aunque el hombre quiso hablar se detuvo al ver como tenía un arma, realmente Dazai sabe como reducir a la gente, eso podría ser útil, aunque también nos podría jugar en contra, y ahora mismo no es como si tuviera toda mi confianza en él.

-Cállate o les disparo a tus hijos - Dijo serio y el hombre asintió. Justo a eso me refiero, a su simpleza para resolver las cosas de una forma algo violenta, solo usando un par de palabras.

Pasaron un par de minutos, y Dazai no había dicho nada más desde aquello cuando entramos. No parecía haber más peligro cerca, estaba algo preocupado por Kenji, él seguía ahí fuera, solo y puede que en peligro.

Mientras nos mantuvíamos ahí, llamé a Lucy y ayudamos al hombre a, aunque sea, remendar la herida de forma temporal. Tampoco soy tan mala persona, a veces sé que la situación me hace ser algo indiferente, pero mi corazón sigue siendo el de un pollo.

Al menos ahora parecían un poco más tranquilos que antes, es que claro, hasta yo me cargaría encima si me encuentro con alguien como Dazai en esta situación. Aunque bueno, realmente si lo conocimos de una forma parecida, pero no es lo mismo, creo.

-Iré por Kenji, todos ustedes pueden quedarse acá - Dijo de repente, Lucy a mi lado quiso decir algo pero él ya se había dado la vuelta para salir. "Hombres", se quejó a mi lado y sonreí, negando con la cabeza.

Por mientras, Lucy y yo nos entretuvimos con cualquier cosa. Justo cuando volvió un rato después, estábamos jugando al piedra, papel o tijera. Y este estaba con Kenji a su lado, quien nos saludó y sonrió, para luego acercarse.

Suspiré aliviado de que estuviera bien, vivo.

Miré a Dazai, y este pareció darse cuenta.

-¿Por qué me miran así? Parecen un montón de niños - Dijo y yo simplemente le respondí algo que nunca pensé que le diría.

-Gracias por tu ayuda.

Lo sé, algo cursi, pero había traído sano y salvo a uno de nuestros compañeros, y sin mencionar que antes no hubiésemos salido de esa pelea sin él.

Luego, después de todo el drama, decidimos y un poco más afuera de la ciudad. Kenji dijo de ir al bosque, y aquello me asustó un poco, el bosque podría ser útil, pero también podría ser nuestra perdición. Estar en un lugar que no conocemos de nada, y aislados de todo no me hacía mucha gracia, además, de que podría ser peligroso si nos encontramos con los monstruos aquellos. Por lo que con las palabras entrecortadas y en un murmuro, negué aquella idea, asintieron y no me preguntaron nada, aunque a Dazai sí lo vi algo confundido.

Caminamos sin rumbo, hablaba con Lucy y Kenji, de cualquier cosa y salió el tema de la confianza. Dazai iba a unos metros detrás de nosotros así que bajé la voz.

-Sé que nos ha ayudado mucho, pero exactamente eso es de lo que tengo miedo, su forma de actuar ante todo..., simplemente no me transmite mucha seguridad - Dije, ellos asintieron.

-Lo sé, es muy raro, estoy segura de que si le decimos algo que no le gusta nos manda a otro mundo de golpe - Añadió Lucy, estaba exagerando un poco, pero razón tenía, era capaz de matarnos si le estorbabamos. Ahí dejamos de hablar.

Caminamos un poco más. Y solo por el hecho de descansar un rato y explorar un poco, entramos a un edificio como de oficinas de alguna empresa.

Este lugar también estaba perfecto, claro, en unas oficinas no hay muchos recursos de supervivencia. Aunque eso sí, había sangre por algunas zonas, pero por lo demás, estaba impecable.

Justo en ese momento vimos a un señor, ya mayor, herido y tirado en el suelo. Lo miramos por un rato, y de repente, Dazai reaccionó de una forma algo, demasiado violenta. Le apuñaló en la cabeza y cerré los ojos, no quería ver eso. Los volví a abrir una vez estuve seguro de que había terminado.

Cuando se dio la vuelta para mirarnos, tenía esa misma mirada fría, y estaba seguro de que estaba pálido en este momento, la palabras no salían de mi boca.

-Solo le ayudé a morir - Dijo serio y caminó hacia otro lado dejándonos allí.

¿Realmente tenía que morir de una forma tan cruel? ¿No era más fácil de otra forma?

Nosotros, un poco después, tras superar el shock, no sentamos por allí, y comimos algo de lo que teníamos. Y dije algo.

-Sé que nos ha ayudado mucho, pero tenemos que deshacernos de él, no quiero hacerlo, pero es peligroso - Susurré, por fin lo había dicho.

-Estoy de acuerdo - Dijo Kenji - Por mucho que nos haya ayudado sigue siendo una amenaza - Añadió. Lucy asintió

-Y-yo lo haré, cuando se acerque lo haré - Dije, algo asustado, pero con determinación. Parecieron dudarlo un poco, pero al verme así se rindieron y aceptaron.

Kenji me pasó un cuchillo.

-Hazlo con esto, es más fácil según lo hagas salimos corriendo - Dijo serio, algo raro en él.

Nos quedamos callados, y pensando en silencio. En estos momentos mi corazón iba a mil por hora, no quería hacerlo, pero el miedo era más fuerte. Y el solo pensamiento de perder a un compañero o morir, pudiendo evitarlo, me ponía enfermo.

-¿Les volvió a comer la lengua en gato? - Escuché a un par de metros de nosotros, donde él estaba sentado.

No hablé, no podía hacerlo.

Escuché como se levantaba y caminaba hacia nosotros. Cada vez mi cuerpo temblaba más, pero tenía que hacerlo. Se agachó a nuestro lado y habló.

-¿Sucedió algo? Los noto más aparte de mí y es-... - Lo hice.

Joder, lo hice. Jadeé algo asustado y solté el cuchillo. Después, tal y como habíamos planeado, salimos corriendo de allí.

Cuando ya estuvimos fuera de allí, simplemente grité:

-¡Lo siento! - Sentí mis mejillas húmedas. Y mientras nos alejabamos escuché a lo lejos un grito.

Holaaaa, ¿cómo están?

Este es el capítulo más largo que he escrito de toda esta historia.

Espero que les haya gustado <3.

Nos vemos en la próxima actualización.

10/01/2023

2125 palabras.