Conociendo a los padres. Parte 4/4.

Todoroki Enji.

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Ahora la famosa relación poliamorosa se encontraba en la habitación de Shoto jugando Monopolio. Una muy mala idea.

— ¡Odio esto! — Bakugou estaba por voltear la mesa con el juego incluido

— ¡Pues para la próxima, tal vez deberías aprender cómo se juega! — Kirishima estaba en las mismas, con lágrimas de desesperación cubriendo sus ojos

— Kacchan, dale sus 200 dólares a Eijiro, aterrizaste en su propiedad — Izuku funcionaba como intermediario en aquella pelea

— ¡No! ¡Está en la cárcel! No le daré dinero a un criminal, capaz y con eso paga la fianza

— ¡Así no es como se juega! — el chico ya se estaba volviendo loco, tirando de sus cabellos intentando guardar la calma y no tirar el juego

Desde el principio sabía que Bakugou no estaría dispuesto a perder y quedar en bancarrota, pero aquel tipo de trampa estaba por encima de sus expectativas.

— ¿Por qué Bakugou y Kirishima se están gritando? — preguntó Todoroki saliendo de su baño con una toalla envolviendo su cadera y otra en su cuello

— Cierra la boca, mitad-mitad, estamos atendiendo unos asuntos legales aquí

— Se toman esto del monopolio muy en serio

Ojalá nunca hubiera sacado el juego debajo de su cama, le pareció una buena idea para entretener a sus chicos mientras él tomaba un baño; con sus hermanos nunca hubo algún problema, solo cuando Natsuo se empezaba a quejar una vez quedaba en bancarrota y lo empezaba a sobornar para que le entregara alguna de sus propiedades.

— ¡Ojalá nunca hubiera nacido!

— Yo también, ¿Crees que quería esto?

— ¡No puedo más! — piezas del juego volaron por la habitación, los billetes llovían del techo y Shoto pudo ver al pequeño perrito Terrier escocés pasar frente a su nariz

— Esta bien, me queda claro que no pueden jugar pacíficamente un juego de mesa sin mi presencia — terminó de cambiarse, para después pasar a su tocador y ponerse un poco de colonia, lo suficiente para dar a notar el aroma, pero no demasiado como para ser desagradable

Sus novios notaron eso, además del atuendo elegante que se había puesto, por lo que no se contuvieron de preguntar.

— ¿A dónde vas?

— ¿Con quién vas?

— Mas te vale no estarnos engañando, bastardo — soltó una risita ante las palabras de Bakugou

— ¿Cómo se me podría ocurrir engañarlos? Si los tres son unos bombones y los tengo servidos en bandeja de plata — le plantó un beso en la mejilla a cada uno

— No creas que la tienes tan fácil — alegó Katsuki aceptando gustoso aquel dulce beso — Al menos no conmigo

— Iré a ver a mi madre — respondió con una sonrisa, algo único de ver para los chicos — Lo estuve pensando, y creo que es momento de presentarlos a mi familia, al menos a mis hermanos, y en su momento, a mi mamá

— ¡Aceptamos! — dijeron con emoción Izuku y Eijiro

— Si estás de acuerdo — dijo por su parte Katsuki

— Nos vemos más tarde mis amores

— Adoro cuando nos llama así — suspiró el pelirrojo enamorado

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Eijiro no dejaba de sorprenderse con lo gigantescas que podrían llegar a ser las casas de sus novios, se sentía abrumado en ambientes así, que se tuvo que sostener del brazo de Izuku para no caer de lleno hacia atrás.

Estaban en el jardín principal, el cual conectaba a todos los cuartos de la casona, una mansión al estilo oriental, dejando en claro el estilo de habitación de Shoto en la residencia. Las mucamas venían de un lado a otro, el peli verde había contado cinco personas y ninguna de ellas se repitió más de una vez. La vegetación dejó fascinado a Bakugou, preguntándose cómo era posible tener un estanque de peces "Koi" con una cascada que media dos metros, además, estaba seguro que parte de la colina que se asomaba detrás de la mansión también era propiedad de Endeavor.

— Joven amo Todoroki — se presentó ante ellos el mayordomo principal, quien controlaba a todo el personal en la casa — Bienvenido

— Gracias Katashi, ¿Mi padre no está en casa?

— No, se encuentra en la agencia, informó que regresaría hasta tarde señor

— Excelente, ¿Podrías convocar a mis hermanos a una reunión en el comedor?

— La señorita Fuyumi ya se encuentra allá señor, le emocionó la noticia de su visita que ha estado todo el día preparando la comida — el señor los guiaba por toda la extensión de la casa — En todo caso avisaré al amo Natsuo

— Gracias de nuevo, Katashi

Llegaron a su destino, donde dentro de las puertas corredizas inundaba el olor a comida casera, a los cuatro se les hizo agua la boca. Adentrándose un poco más pudieron observar como en aquel largo comedor de doce sillas se extendía un banquete digno de reyes. En la cocina escucharon la porcelana chocar entre sí, para después observar como salía una chica albina con mechas rojas en su cabellera blanca; sosteniendo una bandeja con una gran cantidad de platos, se veía inestable y Bakugou sin dudarlo fue corriendo a su rescate antes de que la elegante vasija cayera al piso.

— ¿Qué están viendo trío de inútiles? Ayúdenla — como si las palabras del rubio fueran un interruptor, empezaron a movilizarse trayendo los platillos que faltaban

— Muchas gracias chicos, me siento apenada por ponerlos a trabajar ni bien llegaron, ustedes son los invitados

— No es nada señorita Todoroki — nombró Izuku no sabiendo como referirse a la mujer

— Me llamo Fuyumi, pero si se sienten cómodos llamándome por mi apellido está bien, aunque creo que ya les basta con un Todoroki con quien lidiar — estrechó su mano con cada uno, sintiendo la firmeza y suavidad con la que era correspondida, como si aquellos jóvenes quisieran estrechar lazos a pesar de ser los amigos de su pequeño hermano — ¿Y ustedes son?

— Fuyumi ellos son Bakugou, Kirishima y Midoriya — señaló respectivamente a cada uno — Chicos, ella es mi hermana

— Un placer

— ¡Shoto! — escuchó la escandalosa voz de su hermano mayor, con un suspiro volteó, esperando ser noqueado por Natsuo en uno de sus abrazos salvajes, y así fue — ¡Que alegría verte aquí hermanito! Le traes color a esta casa, aunque seas un chico lobo solitario

— Ja, ja — lo apartó de un golpe al cuello para luego presentarle a sus parejas — Chicos, él es Natsuo, mi otro hermano, Natsuo, ellos son Bakugou, Kirishima y Midoriya

— Hola — saludó con indiferencia — ¿Vamos a comer o qué?

Se dispersaron por el gran comedor, quedando los hermanos Todoroki por un lado y los tres invitados por el otro, dejando la silla principal vacía, respetando a petición de la chica el lugar de su padre.

— ¿Me prestan el baño? — habló primero Kirishima, teniendo la extraña costumbre de lavar sus manos dos veces antes de comer, una para poner sus alimentos en el plato, y la segunda para empezar a devorar la comida

— Si claro, te acompaño

— No es necesario Fuyumi-san, no quiero interrumpir con su comida, solo dime donde está

— Derecho hasta el fondo y luego a mano izquierda

Hubiera aceptado la compañía de la albina, al menos ahora lo reconocía ahora al estar perdido en aquella gigantesca mansión; no estaba tan preocupado de salir solo y explorar aquel gran lugar hasta dar con el baño, pues si bien había escuchado a Fuyumi, no era muy bueno siguiendo instrucciones. Pensó en pedirle alguna orientación a los empleados de la casa, sin embargo, no encontró a nadie por ningún lado y desde entonces se había convertido en su objetivo más allá de llegar al baño.

Rendido, siguió con la cabeza baja, ahora regresando al comedor, resignándose a comer por primera vez sin hacer su ritual de toda la vida. Pero como era típico en Eijiro, chocó con uno de los pilares de la casa, cayendo hacia atrás, suerte que su trasero le amortiguó la caída.

Levantó la vista, listo para enfrentar al pilar que lo había chocado, aunque fuese al revés. Mas soltó un chillido aterrorizado al toparse con un par de ojos turquesa y una cabellera roja flameante.

— Su amigo ya se tardó bastante — señaló Natsuo comiendo su quinta pieza de pollo que con éxito robo del plato de Kirishima

— Iré a buscarlo

— ¡Shoto! — entró el pelirrojo abriendo de par en par la puerta, corriendo hacia su novio en busca de protección ante la persona que lo había estado siguiendo todo ese tiempo

— ¿Qué pasó? — preguntó preocupado al ver el estado de su chico

Su pregunta se respondió al ver entrar a su padre por el marco de la puerta.

— Hola, Shoto

Y desde ese momento lo único que se escuchaba en el cuarto era el sonido de los cubiertos chocando entre sí con los platos, y los sorbos a las copas de cristal. Eijiro se negaba a comer después del susto experimentado, sin dar bocado alguno hasta que se le pasara el susto; por el contrario, Natsuo devoraba su plato como jauría de hienas, sin verse afectado por la presencia de su padre quien y a su vez comía el resto de banquete que su hijo amablemente había dejado.

— ¿A qué se debe tu visita? — intentó iniciar una conversación, a pesar de saber que no llegaría tan lejos

— Venía a darles una noticia

— ¿De qué se trata? — el menor de los Todoroki estaba reacio a contestar su pregunta, sin embargo, sintió la mano de su hermana posarse encima de la suya y como ésta le daba una mirada suplicante

Sabía que significaba, y por supuesto que él también quería dejar atrás la época de rencor y odio que tanto había sufrido su familia, pero eso luego lo arreglaría con su padre a solas.

Por ahora le daría un poco de satisfacción al darle a conocer a sus parejas y próximos yernos, el cómo reaccionaría su longevo padre le valía un pepino.

— Les quiero presentar a mis novios — soltó, a lo cual Endeavor empezó a atragantarse con su puré de papas y Natsuo reía con fuerza

— ¿Quién de los tres es? — preguntó su hermana amablemente, intentando comprender la reacción de su papá y hermano

— Los tres — el albino casi se va para atrás de la risa que le daba la situación

— Déjame ver si entiendo, estos tres tipos son tus novios — su hijo menor asintió — ¿No te podías conseguir algo mejor?

Las risas de Natsuo solo iban en aumento.

— ¿Qué quieres decir con eso?

— Nada, solo pienso que con la belleza característica de un Todoroki podrías tener a tus pies a alguien mejor que una fastidiosa pelusa verde, un perro rabioso y un tiburón cobarde

— Pues te vas a tener que acostumbrar a verme con ellos, porque son mis novios y no pienso dejarlos por alguien "mejor"

— Ok, te dejo pasar al perro rabioso y al tiburón — los chicos no se podrían mostrar más ofendidos por los apodos de su suegro — Pero ¿Por qué al mini All Migth? Te puedo conseguir a alguien más verde y con más pecas si quieres, pero no me hagas esto, es una ofensa para el apellido Todoroki

— También se queda

Izuku se sentía como un perro al ser negociado de aquella forma.

— Esta bien — suspiró con resignación — Supongo que lo único que puedo hacer es pedirles que lo cuiden mejor de lo que yo lo hice

De pronto las risas pararon, y no porque Fuyumi le aventara un tenedor a su hermano; todos quedaron impactados de que Enji procesara tan rápido la noticia y no hiciera planes desesperados por regresar la heterosexualidad al cuerpo de Shoto.

— Papá ¿Estás de acuerdo con esto?

— Mientras Shoto sea feliz, está bien, de hecho, Natsuo tú también puedes traer a tu novia o novio, tú también Fuyumi

— Entró en la locura

— ¡Shoto eres un tonto! ¡Debiste presentarle uno por uno, no todos a la vez! Ya lo dejaste idiota

— Más respeto para tu padre Natsuo — regañó con una frívola mirada — No me voy a interponer en lo que decidan hacer, siempre y cuando no afecte su futuro, solamente ya no quiero ser una causa de su infelicidad

Estaba por partir a su estudio, después de todo le había llegado un mensaje de Hawks confirmando su llegada, no podía dejar plantado a su novio.

— Gracias papá — por primera vez en los diecisiete años de vida de su hijo menor, recibió un abrazo de parte de éste, seguido de Fuyumi y después de un reacio Natsuo

— Tengo que ir a mi estudio — las lágrimas estaban a flor de piel, y no se permitiría que sus hijos lo vieran llorar, menos conociendo a su hijo mayor

Le contaría la maravillosa noticia a su ex esposa. 

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¿Qué les pareció el capítulo?

¿Era como se lo imaginaban?