chapter eighty-six. karma
𝐁𝐘 𝐌𝐘 𝐒𝐈𝐃𝐄 ━━ volumen ocho
capítulo ochenta y seis
❝ karma ❞
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LOS LIBROS SOBRE LA BIBLIOTECA, unos juntos a otros, llamaron la atención de Carl, quien de inmediato se apresuró a buscar los mejores que encontró y comenzó a echarlos sobre la mochila mientras Michonne se acercaba hacia él.
—Luke dijo que se ha ido el extraño que le ayudo— informó la adulta.
Él asintió —Ya.
Su ceño se frunció, pues bien sabía que las cosas entre él y Alex no iban del todo bien.
—¿Todo bien?— añadió.
Carl dejo de hacer lo suyo para mirar a su mejor amiga y asintió —Si, ¿Por qué?
Encogió sus hombros —Creí que estabas algo distraído.
—No, estoy bien— intento sonreír —¿Algo más que haya dicho Luke?
Ela negó, apunto de responder cuando el radio sonó sobre su cinturón, de inmediato lo saco pues sabía que venía de Alexandria.
—Alex, ¿Qué pasa?— preguntó Carl, una vez que presiono el botón.
Ambos atentos en la respuesta, la cual no fue respondida por Alex como él esperaba, si no por Aaron.
—Tenemos noticias.
El ceño se ambos se miró totalmente confuso, sin embargo, no era algo anormal que otro líder del consejo aparte de Alex respondiera la radio.
—¿Qué pasa, Aaron?
Escucho como suspiro antes de responder, lo cual sólo hizo confundir más al chico.
—¿Qué es, Aaron? ¿Dónde está Alex?
—Creemos que...— no se atrevió a seguir —Ella murió.
El silencio inundó la habitación, el corazón de Carl se aceleró conforme asimilaba la noticia, impaciente a una respuesta pues ninguno decía nada.
—¿Qué?
—Seguimos la horda de Alpha hasta la frontera, nos atraparon pero se estaba cayendo... y...-
—¿Creen? ¿Cómo qué creen?— insistió, dejando a Aaron sin palabras —¿Dónde está ella? ¿Dónde?
—Carl...— llamó Michonne pero este se negó, haciéndola a un lado.
—Aaron, ¿Dónde está Alex?— cuestionó otra vez, en un tono más amenazador.
—La perdimos— se limitó a decir el otro chico.
Carl en definitiva no podia asimilarlo, perder a la única chica que ama era desgarrador para él.
Ni siquiera podía pensar.
Ni moverse.
Ni hablar.
Ni llorar.
No podia hacer nada, no pudo hacer nada más que lanzar el radio lo más lejos que pudo con sus manos temblorosas, empujando luego de eso el par de estantes que se encontraban cerca de él, mientras escondía su cabeza sobre los mismos y sollozaba bajo.
La adulta solamente podía observar, tampoco podía asimilarlo pero debía estar para él.
—No me despedí de ella...— fue lo primero que Carl le dijo —Estaba tan enojado que yo... no... soy un maldito idiota.
Michonne negó, tomando de su espalda con delicadeza —No lo eres, no se ha ido, ¿Alex? Por Dios, conocemos a la misma Alex, ella no se rendiría tan fácil.
Él negó —No puedo perderla, Michonne, lo sabes, si ella se va yo... ¿Cómo voy a explicárselo a los niños? ¿A Glenn? Él apenas sabe lo que pasa a su alrededor, no puedo hacerle eso.
—Nos las arreglaremos, por ahora, debemos llegar a Oceanside, comunicarnos para saber mejor lo que paso.
Colocó ambas manos sobre su cintura —Yo no... no creo poder llegar, no así, tenemos que decírselo a Judith ahora y...— sollozo un poco —No puedo hacer esto.
Bajo la mirada, mientras Michonne se encargaba de tratarse las lágrimas en silencio.
—Lo arreglaremos.
EL POLVO INUNDÓ MI vista cuando intente abrir los ojos, había pedazos de roca a mi alrededor, madera e incluso rastros de sangre.
Tomé mi cabeza con delicadeza cuando note el hilo de sangre que salía de la misma, en mis manos había pequeñas cortadas y espinas de la madera pero simplemente las ignore y me levante del suelo.
Una vez más.
Me levantaba del suelo y tomaba la katana que estaba a unos centímetros de mi mano, tomé mi estómago con delicadeza al sentir un dolor pero solamente avanzando entre el lugar.
A duras penas pude encontrar la salida que tanto habíamos estado buscando, logrando sostenerme de la pared de la cueva cuando miré el cabello rubio de Magna irse tras Connie hacia el bosque.
Fuera de eso no había nadie a mi alrededor, por supuesto, nadie más que más susurradores de los cuales me encargué en cuestión de segundos y a pesar del dolor
No tenía nadie más de apoyo, debía encargarme de esto por mi cuenta, debía hacerlo sola. Fue como si el universo estuviese a mi favor, pues aquella persona por la que había stado esperando estaba a metros de mi, junto a caminantes y más susurradores.
Mi ceño de aligero, tomé la katana con más fuerza mientras una extraña y egocéntrica sonrisa se formaba en mis labios.
Todo lo que pienso es Karma.
Con ambas manos tomé ambos cuchillos, el primero lanzandolo sobre la pierna de uno de ellos, notando como Alpha miraba a sus lados con un arma en manos.
Ella huía con otros dos, camine sacando la espada de su funda, mientras mataba a uno de ellos en un solo movimiento, intentaba pelear con ambos con mucha adrenalina en mi cuerpo, siendo cortes y sangre lo único que había.
Finalmente termine con el otro susurrador cortándole la garganta, para girarme a Alpha, ella cortó parte de mi pierna y rostro, escupí sangre al suelo con enojo mientras tomaba una rama y la golpeaba incontables veces.
Fueron tantas veces que perdí la cuenta, pues los quejidos del esfuerzo al golpearla cada vez se intesificaban.
Finalmente clave la rama sobre su pecho.
—¿Dónde están los otros?— le cuestioné en un grito —¡Dime!
No contestó, lo cual sólo me hizo enojar mas, moví la rama en su cuerpo para provocarle más dolor.
Un golpe se impacto sobre mi nariz, provocando que cayera sobre el suelo con mi única arma a mi disponibilidad lejos. Miré a Alpha, quien sin dudarlo colocó el cuchillo sobre mi cuello pero, antes de que me tocase detuve sus manos con las mías.
—¿Quien demonios te crees para asesinar a mi gente?— susurró —Ustedes... colmaron mi paciencia, tú y toda tu gente, incluyendo a tu familia morirán, empalare a todos en una hilera, así como la última vez.
—Mate a tu gente porque así lo quería— susurre de la misma manera.
Estuvo apunto de cortar mi cuello, sin embargo, aquello solo me hizo enfurecer más hasta el punto de golpear su cara y quitar el cuchillo de mi vista.
Golpee sin parar, sin saber lo que pasaría, sin saber cuanto dolor sentía ahora, lo único que quería era que ella sintiera todo mi dolor, todo lo que sufrí hasta llegar aquí.
Repetí, una y otra vez, entre lágrimas y sangre, la acorrale de nuevo contra el suelo.
—Tu no vas a hacer eso— contesté.
Por un instante levante la mirada para ver a todos esos caminantes acercarse a nosotros, teniendo que sacar la rama para matarlos.
Mientras miraba a duras penas, sentí un dolor en mi espalda baja y el filo de un cuchillo haciéndome quejar del dolor.
Mi vista se veía nublada por la sangre que bajaba de mi cabeza, solo veía caminantes y sentía el dolor punzante del cuchillo en mi pierna.
Cayendo solo así al suelo, busqué la katana a duras penas, sosteniéndola y levantándome en cuanto vi a esa mujer otra vez.
Me era imposible volver a caminar con el cuchillo clavado sobre mi pierna, los gruñidos de caminantes cada vez se hacían mayores y el miedo me paso como un escalofrío al escuchar algo golpear.
Era Alpha, golpeando intencionalmente la pared para así atraerlos aún más.
La luz del sol daba directamente a mis ojos, haciéndome parpadear al sentirlos pesados y adoloridos.
Cayendo así otra vez inconsciente.
EN CUANTO MIRÉ UNA SOMBRA frente a mi que parecía estar muy ocupada en mi pierna, me levanté, soltando un grito que hizo a los pájaros huir.
—¡Tranquila, tranquila!— la voz de Lydia me hizo respirar aliviada —Le diste una buena pelea a mi mamá.
Resople —Lydia, solo eres tu... ay, creí que era un caminante comiéndose mi pierna.
Ella negó —Vas a estar bien.
Señalé mi espalda baja —¿Q-Qué fue eso?
—Creo que una herida profunda, intenté coserla con lo que tome de la enfermería.
Asentí —Entiendo, he tratado varias de esas... pero creo que es mejor verlas que tenerlas, ¿No?
Ella asintió también —Si, vas a estar bien por ahora.
Suspiré, tomando de mi cintura y contando hasta tres para después levantarme al soltar un quejido.
Rápidamente me llevé una mirada de Lydia —¿Qué haces? No deberías...-
—Dijiste que iba a estar bien... y te creo— suspiré al levantarme totalmente —Ya me siento... no tan mal.
Ella también de levantó —No deberías estar de pie.
Me giré a ella, —Tengo que irme.
—Estas muy golpeada, Alex, tu no puedes verte pero yo si— me siguió por el bosque —Deberías descansar un poco más.
—Lyd...— respiré a duras penas —Voy a estar bien, solo necesito que vuelvas a Hilltop y les digas a los demás que estoy viva, diles que iré en cuanto pueda.
Su ceño se aligero, mientras guardaba silencio —Iras tras ella otra vez, ¿No?
Asentí levemente —Es ella o nosotros, Lyd.
Retrocedió un poco, tomando sus cosas y girándose a mi otra vez —Lo haré, solo porque tu me lo pides.
Le sonreí un poco —Ten cuidado.
—Tu también.
LLEVABA APROXIMADAMENTE media hora caminando por el bosque, no sabía si me sentía mal a este punto, no sabía si lo que sentía era dolor o enojo.
Solo pude detenerme cuando escuché los pasos de las ramas rompiéndose en zancadas, sostuve de mi estomago y guarde silencio unos segundos, paralizandome cuando el sonido de un cuchillo me hizo girarme.
Entonces estaba ahí.
El sirviente de Alpha, el "más fuerte" a como había contado Daryl horas antes de perdernos. Estaba a unos metros de mi esperando a por mi, mirándome con un machete en mano como si por alguna razón creyera que podría matarme en un segundo.
Fue cuestión de segundos, segundos en los cuales coloque la katana frente a mi sosteniendola con ambas manos y retrocediendo al calcular sus movimientos.
Fue el primero en atacar, teniendo que desviar el machete con el que intentaba cortar mi cabeza, aprovechando aquel arrebato para golpear su estómago con tanta fuerza que pude poner. Sin embargo; este mismo lanzó un golpe a mi rostro, dejando un pequeño rasguño que sangraba en mi mejilla, lancé una y otra vez la katana al aire hasta que este logro tomarla.
Beta me miraba con una sonrisa maníaca, mientras torcia la misma en un intento de provocarme dolor, forme una pequeña mueca cuando su sonrisa se agrandó, entonces el mango de la katana se resbaló de mis manos, acto que aprovecho para golpear mi rostro y hacerme caer al suelo.
Colocó el cuchillo frente a mi, dispuesto a clavarlo sobre mi garganta mientras respiraba con pesadez.
Quizá este era el momento, quizá era hora de rendirme.
Moriría como un héroe.
Pero mataría a todos los que amo eso era seguro.
Tal vez no era el momento de morir, no aún.
Lancé una patada con todas mis fuerzas, provocando que este se retorciera de dolor mientras se sofocaba y aprovechaba para levantarme en busca de algún arma para finalmente terminar con esto. Cuando lo conseguí me giré, dándome cuenta que Beta huía como un mínimo cobarde, titubeando y adolorido aún así lancé el cuchillo en mi mano hasta clavarlo sobre su pierna
El maldito se escapo aún así, dejándome en medio del bosque.
TODO ESTABA EN LLAMAS, la mansión, los muros y todo cultivo que se encontraba y que fue alguna vez parte de la comunidad.
Personas luchaban y otros simplemente ya no estaban en este mundo, titubee un poco cuando los caminantes se juntaron, unos frente a mi y otros por los lados, me empujaban en lo que yo retrocedía en medio de ellos. Había logrado pasarme entre ellos gracias a la máscara de susurrador.
Logré escabullirme dentro de los muros, quitando la máscara de mi rostro al mismo tiempo en el que me detenía de golpe para sacar la katana y matar a todos los caminantes que se encontraban a mi lado, terminando fácilmente con ellos. Choque espaldas con Alden.
—Ale...— cubrí su boca antes de que hablara, teniendo que matar a otro caminante que se acercaban a él.
Defendí a como pude cuando noté que llevaba un bebé en brazos, corriendo lo más que podíamos y, al encontrarnos a Kelly, ella nos siguió.
—Creímos que habías muerto— mencionó Alden mientras arrullaba al pequeño durante nuestro camino en la carretera.
Suspiré —También yo.
Miró de reojo a Kelly, volviendo la mirada a mi una vez más —No quiere preguntar pero...-
Entonces miré a Kelly—Tu hermana salió de la cueva— mencioné y sus ojos se abrieron como pudieron —La vi, a Magna también pero... las perdí al salir, lo siento.
—¿Ella estaba...?
Negué —No que me diera cuenta, pero si estaba algo asustada, va a estar bien— sonreí —Connie es fuerte y muy valiente a mi parecer.
Asintió bajando la mirada —Gracias, Alex, ¿Sabes? Becca tenía razón, eres una buena persona.
—Gracias por eso.
Los sollozos del bebé llamaron nuestra atención, teniendo que mirarlo rápidamente.
—Déjame llevarlo— pedí extendiendo mis brazos.
Negó —No, no, está bien.
—Necesitas descansar.
—Descuida, Lex, debemos seguir adelante— suspiró —Earl y el resto ya deben haber llegado.
—¿Viste a Carl?— inquirí en voz baja.
Asintió —Estaba muy deprimido pero dijo que lucharía por ti y por los otros, estaba con Rosita y Eugene.
—Si...—
Adam volvió a sollozar —¡Hey! Tranquilo, no pasa nada— murmuro Alden —Ya casi llegamos, ¡Si, señor, uh, si!
—¿Por qué no lo intentas hablar de forma normal?— inquirió Kelly con una sonrisa burlona.
—Hablo normal, ¿No? Estoy hablando normal— me miró y negué aguantándome la risa.
—Estas hablando con voz de bebé aterrador— dijo Kelly —A nadie le gusta la voz de bebé aterrador, ni siquiera a los bebés.
—Estoy de acuerdo— añadí.
—Déjame ver si puedo ayudar— pidió Mary, la susurradora.
Alden le miró mal y lo noté —Te dije que te apartaras.
—Puedo ayudarte, con Adam.
—Ah, si, como no.
—Vamos— apoyé —Según Aaron ella lo conoce.
Negó —No, lo conocía, hasta que lo abandonó a su suerte— siseo al bebé pero no logró calmarlo —Suficiente que la dejé venir, no dejaré que toque a este niño, ¡Vete más lejos!
—Solo... prueba acariciandole...-
—¡Te dije que te quedes callada!
—Acaríciale la cabeza con cuidado y muy despacio y háblale en voz baja cerca del oído de forma constante.
Él me miró en busca de respuesta —Funcionará— aseguré.
Hizo caso, solo que no logró calmarlo, sabía que el pequeño estaba tan asustado por lo sucedido anteriormente, no puedo ni imaginar lo que mis pequeños sintieron. Los extrañaba.
Mary avanzó algunos pasos —Déjame intentarlo.
La miré cuando finalmente Alden se decidió y pasó a Adam sobre los brazos de Mary, quien, logró calmarlo en cuestión de segundos.
Así solamente seguimos avanzando hasta el bosque, donde Kelly me ofreció un pedazo de pan.
—Estoy bien, gracias— sonreí.
Encogió los hombros y comenzó a comérselo, pero solo pude mirar al lindo Adam sobre los brazos de Mary.
—Aw, extraño cuando Gracie estaba así— admití colocando mi mano sobre mi mentón.
Alden me miró —Carl y tu aún pueden tener otro.
Sonreí levemente —¿Otro? Apenas y sobrevivimos con Glenny— miré a Mary —¿Cómo se llamaba ella? Tu hermana.
—Francis— contestó —Se llamaba Francis y él... era todo para ella.
Sonreí levemente —Y ella lo era todo para ti, ¿No?— inquirió Kelly.
Mary asintió, —Si pudiera volver el tiempo, yo... ella debería estar aquí, no yo.
—Bueno, la vida odia a los hermanos mayores— sonreí.
—¿Cómo se llamaba?— se preguntó, cuando supo de qué hablaba.
Esa era la pregunta que menos esperaba, pues, habían pasado años desde que no hablaba sobre él.
—Glenn— sonreí —Era el mejor hermano mayor que tuve pero... ya sabes.
—Lamentó lo de tu hermano.
Asentí —Lamento lo de tu hermana.
Sonrió por primera vez, quedándose en silencio cuando se giró rápidamente detrás de ella, fruncí el ceño con confusión.
—¿Qué sucede?
Nos observo —En marcha.
—¿Qué pasa?— cuestionó Alden.
—Ya vienen.
Corrimos por el bosque hasta cruzarnos con los caminantes, había algunos de ellos y algunos susurradores también a lo que saqué la espada.
—¡Síganme, vamos!— grito Kelly y obedecimos.
Con fuerza intentó abrir la camioneta que se encontraba tirada pero fue imposible, incluso con nuestra ayuda, a penas y logramos abrirla entre Alden y yo.
Kelly fue la primera en entrar, luego yo y luego Alden pero, Mary se quedo ahí, ella negó y cerró la camioneta entregándome a Adam.
—¡No!— grito Alden intentando abrir la puerta de nuevo.
Mary grito y atrajo a los caminantes, pero Adam simplemente no paraba de llorar a todas fuerzas. Intenté calmarlo pero parecía imposible.
Los caminantes se habían ido, así que esa había sido nuestra oportunidad perfecta para salir y buscar de nuevo a Mary.
Pero fue imposible, pues ella ya había sido atacada por Beta, quien observaba el cuerpo de la chica a esperar a que esta se convirtiera.
Mi expresión se aligeró y Alden de inmediato saco una de sus flechas y disparó en el caminante de Mary antes de que otra cosa sucediera.
—Tengo que irme— murmuré entre dientes debido a la ira —Ustedes... regresen con el resto y díganles que estoy bien.
—¡No!— exclamó Kelly —No puedes irte, no después de esto.
—Van a estar bien— les entregue el único cuchillo que me quedaba.
Alden asintió y sin querer Kelly lo acepto, avance unos centímetros más cuando Alden avanzó hasta mi.
—¿Cuántos?— inquirió, dejándome confusa.
Su expresión me daba a entender a qué se refería, cuántos susurradores había añadido a la lista de muertos por mi.
—Todos con los que me crucé— respondí —Aún faltan, Alden, no te preocupes por eso, lo haré por Enid.
—¿Y ella?
Asentí —Ya me hice cargo.
CAMINABA POR EL BOSQUE, donde mis botas pisaban las ramas y hojas caídas de los árboles, me detuve frente a aquel hombre quien sonreía con cinismo al verme.
De la bolsa que llevaba en manos sacó una cabeza, cortada por él mismo, bajé la capucha de mi sudadera y miré la cabeza rodar hasta mis pies.
—Te tomaste tu tiempo— le dije únicamente.
—De nada— hablo Negan, haciendo un ademán.
Levante la cabeza de Alpha, observándola con detenimiento y asegurándome que realmente fuera ella.
Disfrutando este momento en el que por fin pude vengarme, se sentía tan bien verla en ese estado después de todo lo que nos hizo, de lo que me hizo sufrir y lo que le hizo sufrir a Carol.
—Carol nos verá en un punto no muy lejos de aquí, será mejor que nos vayamos antes de que obscurezca— indiqué caminando a su lado.
—Cuidado, no te vaya a morder— Negan señaló los dientes de aquella cabeza de caminante recargada en mi regazo.
Solté un bufido evitando formar una sonrisa en mis labios, mientras él se reía de su propio y muy mal chiste.
━━━━ ⋆ AUTHOR'S NOTE: díganme que les gusto el cap o lloro
En fin, tengo dos anuncios:
1. Si el fic llega a 300k vistas pronto les regalo un maraton de 5 caps (ojo que estos están medio fuertes en cuestión de trama)
2. Subí un libro de escenas eliminadas, donde verán contenido del fic y me gustaría mucho que le dieran apoyo <3
Eso es todo, recuerden votar y comentar :)
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