Capítulo 54: Un mundo de caminos y atajos.
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Norte de Daegu, Zona neutral | 5:20 a.m.
Yoongi miró alrededor con confusión, recordaba haber bajado del auto para que Jimin lo relevara tras el volante, pero ahora estaba en medio del pasto amarillento y no había ninguna señal del auto ni de los dos dragones más jóvenes.
—¿Jimin?, ¿Cachorro?, ¡Jungkook! —Gritó girando hacia la derecha, luego a la izquierda, pies desorientados que vacilaban en el próximo paso casi lo hicieron tropezar—, ¡Jimin!
De pronto, escuchó una risa y algo que lo empujó por detrás en las piernas. Se dio media vuelta de forma veloz, pero no había nadie.
—¿Omega? —preguntó dubitativo.
Una vez más la risa infantil lo sorprendió. Esta vez pudo ver una pequeña cabeza rubia con un sombrero enlistonado, esconderse entre los pocos arbustos. Pequeños ojos rasgados se dejaron ver, de un bonito color ambar whisky idéntico a los suyos.
Fue entonces que Yoongi comprendió al instante, estaba soñando.
—¿Hola? ven aquí... —murmuró acercándose a pasos lentos.
El pequeño se mantuvo en su escondite, mirándolo hasta que levemente se paró, era tan pequeño, batallando para caminar en un par de zapatitos negros con medias blancas, llevaba un overol color marrón claro y pequeños guantes negros que se movían conforme balanceaba sus brazos encontrando equilibrio, había piedras en el suelo que entorpecían su camino por lo que Yoongi se precipitó a él, haciendo chillar al niño con sorpresa cuando lo tomó en sus brazos.
—Tú eres... vaya... —lo miró sorprendido.
Los ojos ámbar más pequeños lo miraron curioso hasta que repentinamente se achicaron y los labios se fruncieron en el inicio de una rabieta con llanto.
Y en cuanto el estruendoso grito infantil se infiltró en sus oídos, Yoongi abrió sus ojos en un salto agitado, se había despertado algo caluroso y por el aroma ahumado dentro del coche, supuso que el despertar repentino le había sacado unas cuentas chispas de fuego de los dedos.
—Joder... —murmuró así mismo de pronto teniendo sed y más calor, peinó su cabello hacia atrás con pereza y se dio cuenta que en realidad se encontraba solo en el asiento del copiloto. Se bajó del auto y, a unos pasos de lejanía se encontraban Jimin y Jungkook apoyados contra un árbol.
Más bien, era Jimin acariciando la espalda del joven dragón quien inclinado parecía estar vomitando en el pasto.
—¿Qué sucede? —preguntó ronco y soñoliento una vez estuvo cerca, no podía oler aromas amenazantes, pero si la angustia penetrante de Jungkook.
—Sólo una crisis ansiosa —susurró Jimin—, esto es mi culpa. Jungkook podría parecer normal, pero las cosas realmente le afectan, sólo que mi muchacho las reprime tanto que ahora todo ese estrés se convierte en nauseas y vómitos.
—Mi estomago... —el quejido del menor fue bastante bajito, pero Yoongi se acercó para masajear sus hombros.
—Si acabas de vomitar, te va a doler, ¿quieres agua? sólo para que te enjuagues.
Jungkook asintió con la cabeza—quiero... mi cepillo de dientes.
—Está en la maleta, espera aquí —Jimin se apresuró.
Yoongi ayudó a Jungkook a ponerse firme, pasó una mano sobre su frente quitando los cabellos que se habían pegado por el sudor.
—Estas febril, pero no creo que te vayas a enfermar, ¿o cómo te sientes?
—No, no... estoy bien, sólo... pasará, ya me conozco —. Con un suspiro, Jungkook carraspeó su garganta, la sensación nauseosa no se había ido, pero era mucho más leve.
Acariciando su cabello, Yoongi lo atrajo a un abrazo—¿Quieres que te cuente algo para distraerte?
—Mmm... —Jungkook resopló dejando caer su cabeza sobre uno de los hombros de Yoongi, en general, poniendo todo su peso sobre el alfa quien no se inmutó.
—Conocí a tu sobrino, nunca creí en esas leyendas tradicionales, pero los sueños prenatales suceden.
—¿Mmm? ¿sobrino?
—Era tan bonito, tenia el cabello de Jimin... pero sus ojos eran míos. Y esa ropa, estoy seguro que fue por Jimin, parecía un muñequito de aparador.
—¿niño? —murmuró Jungkook separándose cuando Jimin llegó con su cepillo, pasta y una botella con agua.
—¿eh? —Yoongi parpadeó—oh... si, un varón —sonrió—, es un niño, mi niño.
Jimin arqueó una ceja—¿De que hablas?
—Niño, Jimin, ese bebé tiene que ser un niño, no te imaginas lo hermoso que era en mi sueño, así tiene que ser exactamente, así como lo soñé.
Asintiendo, el omega levantó su camisa y presionó su ombligo con un dedo—Claro que sí, deja ahora mismo entro a configuración de Útero y cambio el color de los cartuchos de tinta.
Yoongi rodó los ojos sin poder evitar reír y Jimin siguió presionando su vientre, incluso Jungkook se rió y tocó el ombligo de su hermano varias veces, haciendo que Jimin lo mirara divertido y añadiera: —No hagas eso, me desconfiguras la skin del bebé, ¿Qué haré si ahora sale pelirrojo y se parece al abogado Jung?
El alfa mayor se atoró con una risa que se forzó a gruñido—Oye, no, cambia eso en ajustes.
Jimin lo golpeó suave en el hombro—Así que niño...
Yoongi asintió—Confío en mi sueño.
—Bueno, si llega a nacer, supongo que él decidirá más adelante como diablos quiere identificarse, pero eso es lo de menos, lo más importante de todo, ¿alfa, omega o beta? —preguntó Jimin, quien pasó la botella con agua a Jungkook una vez lo vio terminar de cepillarse.
Encogiéndose de hombros, Yoongi respondió—Me importa todavía menos, como sea, es mi heredero.
Jimin ladeó la cabeza—¿Pero?
Negando con la cabeza antes de sonreír, dijo Yoongi—Omega, si es un omega, no puedo negar que mi corazón va a derretirse por completo.
Pensativo, Jimin movió su mano restándole importancia—Lindo, pero por más que quisiera que fuera así, en tiempos de guerra nos conviene un heredero Alfa.
—¿Y si nunca nace? —Jungkook retrocedió ante las miradas de suma atención sobre él—, quiero decir —movió sus manos—, no es que este siendo imprudente respecto a, pero en estos momentos estamos escondiéndonos en un lugar seguro por la situación de los sindicatos, yo recomendaría, no ponerle rostro ni casta a un ser que todavía es más que una célula pequeña que puede no desarrollarse.
—Buen punto, buen punto —Jimin asintió alejándose para ir al auto.
—¿Seguro que es por eso? —preguntó Yoongi con intriga.
Alzando ambas manos, Jungkook pareció serio al responder—Por supuesto que sí, mi hermano significa mucho para mí, por eso mismo su bienestar es prioridad, no quisiera verlo atravesar otra perdida.
Con un suspiro, Yoongi asintió en su dirección—Que chico tan inteligente.
(...)
Seúl, Mansión Min | 5:20 a.m.
Caminando por su despacho, Min Hangkyu hacia un repaso de lo que había sucedido en los últimos días. Su charla con el menor de los Park realmente lo había dejado pensativo, pero era la pequeña discusión con Yoongi lo que lo tenia despierto tan temprano. Una parte suya tenia miedo de que la relación quebradiza que alguna vez imaginó entre el difunto Kangjoon y él se repitiera sobre Jimin y su hijo, pero la otra parte... temía por Yoongi, por su muchacho.
Porque sabía muy bien de lo que era capaz el dragón de cola plateada.
Nadie con un sano juicio, aún perteneciendo a una vida como la del sindicato, tendría el coraje de armarse solo para erradicar un clan entero, pero a su joven muchacho le sobró. El destierro de Mijaíl y sus hombres a mano de Yoongi será algo que siempre quedará tatuado en las memorias de Hangkyu, especialmente porqué las palabras de su esposa todavía rondaban en su mente.
"—Él no es un chico normal, Hangkyu, amo a mi hijo, pero él no está bien".
Cerró sus ojos y murmuró una oración en voz baja, no era devoto de ningún Dios, pero si alguien en la omnipotencia estaba escuchándole, por favor, que el camino de Yoongi sea libre de cualquier patrón familiar, porqué entonces, las cosas se pondrían realmente difíciles.
En sus años, embelesado por la belleza etérea y divina de Park Kangjoon, Hangkyu se vio al borde de la locura gracias a sus deseos de posesión, los dragones son territoriales, era una característica de cualquier tipo de raza drakon, pero los cola plateada, especialmente los machos, eran monstruosamente celosos, y los pensamientos oscuros que confundieron la mente de Hangkyu en aquel entonces, como el deseo de encerrar a Kangjoon pero seguir poseyendo la atención de Jisub... todo aquello lo llevó a perder, a convertirse en un traidor, traición cruel a su corazón, a su más grande amistad y su familia.
—Joder, debería dejar de pensar ya en estas cosas.
Alguien golpeó la puerta dos veces antes de que esta se abriera.
—Esperaba cualquiera cosa, menos ser molestado a las cinco de la mañana en mi propia habitación.
Taehyung lanzó un bostezo perezoso al entrar—Yo esperaba un aumento de sueldo en cuanto viniera mi jefe, pero sólo obtuve un regaño, creo que la vida no nos ha sonreído mucho en estos días, Alfa Min. Hubiera venido antes, pero sinceramente me quedé dormido en la oficina del Abogado Jung.
Hangkyu gruñó por lo bajo, pero aun así no dijo nada cuando la pantera dejó una charola con dos tazas de café sobre el escritorio. Sabía que probablemente todavía había algún hombre de Serpiente Dorada en la mansión, el omega Park se había tomado esa libertad últimamente, de dejarlos entrar y salir como si fuera su propia casa – y poco o mucho Yoongi tenía que ver en esa libertad —.
—¿Por qué estas aquí?
Sentándose frente a él, Taehyung tomó una taza y la levantó fingiendo un brindis antes de darle un trago—No tardaré mucho, sólo necesita ser cooperativo. Nos encontramos en una especie de tregua en la que me puedo permitir ser así de imprudente en nombre de mi señor.
Alzando una ceja, Hangkyu sonrió de lado—Pensé que esta cara había sido suficiente para encantar al Omega Park, me escocé el corazón pensar que te ha mandado a investigarme, no confía en mí. En el padre de su compañero, y el abuelo de su hijo.
Rodando los ojos con burla, Taehyung respondió—Lamentablemente tengo que aceptar que es de sus gustos, Jimin colecciona cosas extrañas, le encanta todo aquello que grite dinero y usted señor, podría competir con un millón de dólares. Pero a él le importa más la seguridad y ser precavido.
—¿Es un halago o debería ofenderme? —La sonrisa del alfa dragón fue ladina.
—Tómelo como quiera.
Finalmente, Hangkyu resopló y tomó la otra taza para recargarse en su silla con desgana—Bueno, apresúrate en terminar tu trabajo, esas ojeras debajo de tus ojos no se ven bien para ser un muchacho tan joven.
—Si así lo desea... ¿Park Kangjoon y usted fueron amantes?
La carcajada risueña del viejo hizo eco en la oficina.
—Me agradas, Kim Taehyung, segundo al mando. Esta tenacidad de seguro te ha llevado a donde estas.
—¿Y esta cara mía no debería tener un poco de crédito? —se burló copiando su anterior cinismo.
—No lo sé, eres muy pequeño para que yo a mi edad pueda decir eso.
—¿Pero coquetearle de vuelta a Jimin es aceptable? —refutó con una mueca de desagrado—, como sea, Jimin encontró esto —Taehyung sacó el papel arrugado que el dragón basilisco le había entregado antes de partir, extendiéndolo hacía el alfa.
—Oh... sus cartas.
—Es muy temprano, así que se puede decir que tengo tiempo para escuchar, entre más detallado sea, más feliz se verá mi señor y eso nos conviene a todos.
—¿Qué tanto recuerdas?
Taehyung se encogió de hombros—No mucho, Park Jisub y usted tenían una amistad antes de que sucediera la muerte del anterior Omega Park. El tío Kangjoon... es una memoria borrosa, sé que era amigable conmigo porqué éramos niños, pero estoy consciente de que no era alguien de corazón bondadoso.
—¿Por qué lo dices?
—Si algo puedo recordar, es a Jimin en el funeral intrigado y enojado, porqué el cofre con las cenizas de su madre fue sellado con un listón negro, el color de la traición a su sindicato.
Hangkyu asintió—La mente de Jisub era tan profunda, no podías predecir sus movimientos, ni siquiera me di cuenta en el momento en el que comenzó a planear su venganza porque efectivamente mis deseos como alfa despertaron con la aparición del antiguo Omega Park en nuestras vidas y eso lo volvió desquiciado, a mí también he de agregar. Así que en cuanto miró o al menos creyó que Kangjoon tenía un interés en mí, lo tomó como traición, sabes lo que les hacían a las parejas de los alfas lideres si cometían adulterio, ¿verdad?, un disparo en la frente fue el ultimo y tal vez el único acto de bondad de Jisub hacia Kangjoon comparado a lo que dictaba el castigo.
—Entonces fueron amantes —musitó Taehyung—, Jimin no cree que el Omega Kangjoon pereció por un disparo en la frente, pero por su propia salud mental nunca se permitió averiguarlo, y tanto Seokjin como yo no lo dejamos hacerlo.
—También lo pensé muchos años... que su muerte había sido muy sencilla, y que tan pronto se dio la noticia, ya tenían lista la ceremonia con sus cenizas. Al menos debieron ser un poco más discretos en eso, y respecto a lo primero, no, no fuimos amantes. Mi corazón después sólo pudo sentir culpa con la idea de haberlo deseado, miraba a mi hermosa hyorin y sabía que ella estaba al tanto, ¿sabías que me rechazaba? No me hablaba mucho, no fue hasta unos años antes de la muerte de Kangjoon que nosotros pudimos cambiar, y le entregué todo lo que mi alma pudo permitirme dejar en su posesión.
—Una reacción esperada tomando en cuenta que le fue infiel, se hayan acostado o no, eso es infidelidad para mí ¿Y el omega Park?, ¿por qué se mandaban cartas con tales nombres?
—Si lo pones así... supongo que sólo puedo deducirlo, pero sólo él tendría una respuesta correcta a esa pregunta. Tal vez su cariño en las cartas era ficticio, o realmente signifiqué algo, pero lo único que puedo decirte con seguridad es que el único alfa en la vida de Park Kangjoon fue Levka Markov —río negando con la cabeza—, el menor, el heredero Jungkook, es la viva imagen de ese hombre, el omega Park hace justicia a la belleza de su madre, pero no tiene ni un solo rasgo de su padre, tal vez el carácter, pero aún no conozco bien al joven Jimin para darlo por hecho, sin embargo Park Jungkook... es como si estuviera viendo a ese Ruso de uno noventa y cabello oscuro otra vez, sonriéndome cínico mientras aprieta a Kangjoon más en su agarre —sonrío de forma amarga.
—Tal vez no fue suficiente para el tío tampoco, no se quedó con él.
—No tengo conocimiento sobre lo que fue de Levka y porque no luchó por Kangjoon, puede estar muerto o vivo ahora, no lo sé.
—Esta muerto, falleció hace mucho tiempo.
Hangkyu negó con la cabeza—No podemos darlo por hecho, los escorpiones de la nieve tienen una resistencia impresionante, no tienes idea. Él intento llevarse a Jimin una vez.
Taehyung abrió los ojos sorprendido, eso definitivamente no lo sabía.
—Fue cuando Jisub recién descubrió la existencia de Kangjoon, creo que el cachorro tenia tres años, tu jefe probablemente ni lo recuerda, pero en cuanto Kangjoon dejó el nido para dejar el bosque con Jisub, Levka apareció reclamando a su cachorro e hizo un baño de sangre, si antes había pocos dragones, esa noche Jimin y su madre terminaron siendo los únicos de su especie.
—Se los comió —exclamó estupefacto Taehyung. Sabía que Levka había sido un ex convicto de la mafia rusa, pero ¿acabar con dragones basiliscos? Lo veía imposible de creer.
Hangkyu se encogió de hombros—No estuve ahí para presenciar esa parte. Sólo recuerdo a Levka llevándose a Jimin y Kangjoon terriblemente enojado.
—No recuerdo alguna vez en donde Jimin haya hablado de su padre alfa.
—Tal vez porque a pesar de todo, Jisub era la única figura cercana y con lo rencoroso que era Kangjoon, dudo que haya querido hablarle sobre él. No le agradó para nada que su separación tuvo que ver en parte porque los escorpiones de nieve sólo muerden una vez a su pareja, y está termina muriendo por la potencia del veneno, por ende, ese tipo de shifters son muy desapegados con sus parejas y prefieren enfocar toda su atención y lazo en sus crías, es por eso que incluso cuando Kangjoon estaba casado ante la ley con Jisub, a Levka le valió tres mil hectáreas de mierda y lo preñó en uno de los celos de Kangjoon.
Cerrando los ojos, Taehyung resopló cansado—Jungkook.
—Sí. Aunque Kangjoon también lo busco voluntariamente para eso, embarazado se salvaría del acoso de Jisub por unos meses.
—Extraño, normalmente los alfas rechazan a los omegas que ya han sido marcados por aroma.
Hangkyu terminó de beber su café y dejó la taza sobre la superficie dura—De lo poco que he leído, a los escorpiones de nieve les importan más sus crías, ellas nacen con un lazo directo a su padre o madre, quien sea el cambia formas escorpión, por lo que no hay necesidad de morderlos, y, por tanto, el poder de protegerlos aumenta. Así pasen treinta o veinte años, ellos reconocerán a sus crías por ese mismo lazo. El compañero, por desgracia, pasa a segundo plano.
—Es una lástima, tal vez ese lazo en la actualidad ayudaría a Jimin con sus problemas de sub espacio. Pero muerto no nos sirve.
—Lo vuelvo a repetir, no estes tan seguro, muchacho, si mi edad me ha enseñado algo, es que, si no hubo un funeral, siempre existirá la probabilidad.
(...)
Norte de Daegu, Zona neutral | 5:38 a.m.
La cabaña o casa que se imaginaba Yoongi no era en lo más mínimo cercana a su fantasía, lo que tenían en frente era una hacienda completa. Un extenso jardín que parecía no tener fin era lo más llamativo, pues todo lo que podían verse eran flores azules.
Cuando Jimin estacionó frente a la entrada, había dos personas esperando, un hombre mayor con el uniforme de mayordomo y una dama anciana quien parecía ser el ama de llaves.
—¿Esto esta habitable? Es decir, ¿no estaba abandonado desde hace años?
—¿Esperabas literalmente una cabaña abandonada?, ¿y como pensabas que íbamos a sobrevivir en eso, Alfa? sé que somos en parte género fantasía, pero también hay que ser realistas.
—Realista sería encontrar una choza en escombros después de no haber sido pisada en veinte años, Omega –—se defendió Yoongi bajando del auto.
Jimin se encogió de hombros—Dije que era el escondite de mamá, pero nunca dije que estaba abandonado, ¿o lo hice? mi error, culpa mía —pero de arrepentimiento no se le veía nada—. A excepción de los sirvientes que viven aquí, nadie más sabe su ubicación, mamá la financiaba él solo, obviamente tenía que dejarla al cuidado de empleados si no quería regresar en un mes y encontrarla repleta de bichos y polvo.
—Es linda —Yoongi murmuró mirando alrededor, la estructura no era oriental, tenía más toques coloniales que lo hacían sentir en otra época.
—Niño Jimin —la voz de la mujer fue tierna y totalmente diferente de lo querido, el Alfa hubiera esperado respeto y miedo como en cualquiera de sus empleados, pero sólo había ternura en el timbre de la anciana de cabello canoso. Entonces algo hizo clic en la mente de Yoongi, si esto era meramente del padre omega de Jimin entonces no tenía nada que ver con los sindicatos, no habría guardias por todos lados, ni personas asustadas y nerviosas acatando ordenes, sólo una hacienda vacacional estilo rural. Por lo que, a ojos de los empleados, Jimin no era más que el hijo del difunto dueño.
—Señora Dan, es un gusto verla saludable.
—Muchas gracias mi niño, recibimos el dinero que mandaste para el mantenimiento mensual, y vimos el extra para mis medicamentos y la atención médica.
—¿viajó a la ciudad como lo indiqué? —Jimin dejó el equipaje en el suelo cuando el mayordomo y otro sirviente se apresuraron a tomarlo.
La señora Dan sacudió su mano—En el pueblo de enseguida hay un buen médico, eso fue suficiente.
—Señor Park, me complace verlo después de tanto tiempo.
Jimin asintió en dirección al mayordomo—Lo mismo digo Señor Hong.
—¿Y quien podrían ser estas personas? —la noble mujer preguntó curiosa.
—Mis acompañantes por estas pequeñas vacaciones —contestó Jimin sin dar mucho detalle, Yoongi hizo una pequeña inclinación, y al instante levantó su mano obligando a Jungkook a inclinarse de la misma forma.
—Pero bueno, no se queden parados ahí, adelante Joven Jimin, bienvenido a su casa —sonrió la señora Dan subiendo los pocos escalones y abriendo las enormes puertas de cedro.
—Es... viejo —susurró Jungkook a Yoongi arrugando su nariz, el alfa mayor reconoció que la arquitectura colonial era antigua por los sorprendentes detalles de la espaciosa recepción, ahora se encontraba totalmente curioso de saber cuánto tiempo llevaba esa casa ahí, y a que generaciones perteneció y porqué exactamente un estilo tan peculiar en un pueblo olvidado de Sur Corea.
—Esto debe de costar más que cualquier departamento en Gangnam —murmuró Yoongi de igual forma en susurro.
—No podría creerlo —se quejó Jungkook, después miró como los pocos sirvientes salían por la puerta principal. Jimin se encontraba hablando con las dos personas que los habían recibido en la entrada, ambos tenían maletas en mano también, y asintieron en reverencia antes de salir detrás del personal—me enfermaré si me quedó aquí en el minimalismo simplón.
—Seremos nosotros tres solamente por lo que veo —Dijo Yoongi pasando una mano por la cintura del omega cuando este se acercó y besó su cabello—, ¿A dónde irán? pensé que vivían aquí.
—Viven aquí por temporadas, tienen sus casas por aquí cerca —Jimin miró alrededor de forma rápida—Es bonita.
Alzando una ceja, Jungkook espetó—Se ve... mm... clase baja, mucha madera y... superficies de piedra, ¿esta siquiera pintada?
Rodando los ojos, Jimin lanzó un bufido divertido—Estas acostumbrado a la mansión y que todo brille por donde camines, ¿sabes en cuanto podría estar valuada esta hacienda? mejor lee más sobre diseño de interiores, bebé —Jimin lo señaló.
Jungkook abrió la boca ofendido—¿No sé sobre eso? el suelo de mi habitación es oro blanco. Y no puedes quejarte al respecto porqué fue diseño tuyo, hyung.
Yoongi tosió para disimular la risa, pasando un brazo por los hombros del joven dragón lo acercó al improvisado abrazo de tres.
—Bueno, bueno, estoy seguro de que todos estamos cansados, manejamos parte de la noche, ¿por qué no tomamos una siesta?, ¿o prefieren desayunar algo primero?
Jimin pareció murmurar algo, pero sonó más como un maullido debido a que decidió esconderse en el cuello de Yoongi y cerrar los ojos un momento. Jungkook imitó a su hermano y trató de hacerse espacio en el brazo del alfa.
—Es muy temprano para comer, yo no tengo apetito, prefiero que mi estomago se tranquilice después de haber vomitado hace una hora —Jungkook susurró cansado y cerrando sus ojos, sus hombros dolían, su espalda hormigueaba, quería solamente descansar en una cama cómoda.
Yoongi soltó feromonas que arroparon al cachorro de una forma cálida. Su dragón estaba dando vueltas de alegría, sacudiendo la cola como una cría, era demasiado contacto físico que alimentaba su corazón hasta arrebozar.
—Lamentablemente, por más poderoso que sea mi dragón, no puedo permitirme cargar con los dos al mismo tiempo.
Tanto Jimin como Jungkook abrieron sus ojos al instante, haciendo contacto visual.
—Jungkook, quítate.
—Hyung, muévete.
—¿Muévete? Y este mocoso, ¿desde cuando tienes ese vocabulario tan vulgar?
—¿Quítate? Hyung, esta casa de clase baja te esta cambiando muy rápido.
Jimin chilló molesto—No me puedo quejar porqué eres todo lo que yo deseaba que fueras, guapo, millonario y un privilegiado —se abanicó con su propia mano—no sé si sentir molestia u orgullo.
Como si fuera ya un habito, Yoongi rodó sus ojos y mejor sujetó a ambos de cada mano—Vamos, ya, busquemos una habitación. Y omega, ¿Qué clase de educación le has estado instruyendo al bebé Park?
Jimin se recargó en su brazo mientras subían los escalones—La esencial para sobrevivir en nuestro mundo.
(...)
Seúl, Mansión Park | 6:10 a.m.
Entrando al área de estacionamiento de la mansión, Taehyung se acomodó por segunda vez el auricular en su oído para escuchar a Jimin.
—¿Llegaste seguro?
—Si, no te preocupes por eso, ¿crees que el viejo estaba siendo exagerado en sus palabras? habló tanto de tu padre alfa —inquirió la pantera.
—No creo, Min Hangkyu siempre fue muy pasional, pero entonces si no fueron amantes... sólo fue un horroroso triangulo amoroso. Que perdida de tiempo, creí que obtendríamos algo interesante.
—¿Perdida de tiempo?, Jimin, el alfa Min confesó el motivo de la traición de tu madre —Cuando encontró su lugar, apagó el auto, pero permaneció dentro—, Jisub creyó que había cometido adulterio, que si me lo preguntas-
El omega lo interrumpió añadiendo: —Mi mamá no traicionó a nadie, en primer lugar, para traicionar algo habría que ser leal a eso mismo y ciertamente él no lo era.
—¿Y qué me dices de lo otro?, Jungkook no vino de una cigüeña.
—¿Y en que nos ayuda saber cosas del pasado?, ya sabíamos que madre hizo un desastre total con dos alfas que compartían la misma neurona hasta que un omega hermoso llegó y los hizo mostrar su verdadera naturaleza.
—Jimin-
—Min Hangkyu es tan culpable como Park Jisub como Park Kangjoon, pero bueno, dos de ellos están muertos así que sólo podemos saber de ese tema a través de la percepción del viejo alfa Min, y esa percepción esta muy pero muy sesgada por los sentimientos que él guardaba hacia Jisub y mi madre, te repito, esto debería quedar ya en tema muerto, es una perdida de tiempo.
—Como quieras... ¿qué tal la cabaña?
—Jungkook la odia, nuestro niño salió más clasista de lo que pensé.
La pantera se rió fuerte—¿Y que esperabas con esa forma de mimarlo tan exagerada tuya?
—Basta, debiste escuchar el sermón que le dio Yoongi cuando siguió criticando cada rincón, mi pobre chico, estoy seguro que no se acercará a él en lo que resta del día.
—¿Dónde esta ahora?
—No lo sé, haciendo una rabieta por ahí. ¿Qué?, oh, espera, es Taehyung.
—¿Qué sucede? —Taehyung suspiró mientras salía del auto, podía escuchar los parloteos de ambos al otro lado de la línea.
—Nada, Min esta de molesto. (—Es que tienes que dormir, omega, no has dormido nada).
—Jimin, ve a descansar.
—Te dije que, en un momento, (—Omega, por favor) ah, ¿Tae? bueno, repórtame sólo emergencias por el día de hoy.
—Claro —Taehyung rodó los ojos cuando escuchó más charlas así que colgó primero. Había sido una noche muy larga y pesada, necesitaba comer algo y después descansar.
Entrando a la recepción de la mansión, lo primero que lo saludó fue la voz cantarina del Médico.
—Te ves horrible.
Seokjin salía de la estancia con un café en mano, y su teléfono en la otra.
Taehyung señaló su rostro—Esto merece un aumento, estoy muerto, desvelarme a mi edad ya no es lo mismo.
—¿Tanto colágeno te robaron?, ¿qué investigaste?
De un tirón, Taehyung se puso recto y miró sospechosamente a los lados, después camino de nuevo hacia la estancia y cuando Seokjin entró detrás de él se aseguró de cerrar bien las puertas.
—¿Qué tanto sabes de la muerte del tío Kangjoon? Recordarás más que nosotros, eso es seguro.
Jin lo miró intrigado unos segundos y después suspiró destensando sus hombros y sentándose en el extenso sofá rojo, dejó sus cosas en la mesa de centro y miró a la pantera.
—Qué fue lo que te dijo Min Hangkyu, tiene un habla muy hechizante ¿verdad?
—¿Insinúas que me mintió?
—No, pero sigue siendo un Min.
—Seokjin...
El mayor contestó—Cuando murió, entre el traslado de su cuerpo al lugar de preparación funeraria y el lugar del atentado, no tuvimos conexión con nuestros hombres por al menos quince minutos, estuvieron desaparecidos esa mínima cantidad de tiempo.
—En quince minutos pueden suceder muchas cosas, los autos pueden desviarse, pueden sacar el cuerpo y fácilmente meter otro, o... diablos.
—Recuerda que todas estas cosas estuvieron en la mente de Jimin años atrás, por algo teníamos prohibido resurgir estos temas, ¿Qué ha cambiado?, ¿Quién te ha sembrado la duda? Al viejo alfa Min le gusta hablar de más, siempre con un motivo.
Taehyung negó con la cabeza—Quince minutos... ¿por qué del atentado se indicó que fueran directo al área funeraria?, ¿Qué hizo que se saltaran un hospital?
—El que, a pesar de ser un cadáver, seguía siendo un omega hermoso, y esa era la forma más rápida de hacerlo preservar sin ningún accidente. Hubo mucha gente que lo anheló en vida, no tienes ni idea, de la misma forma que hay muchos detrás de Jimin esperándolo en las sombras.
Un acido nauseoso quiso subir por la garganta de Taehyung, con la sola idea de pensar que, si un día Jimin muriera, tendría que embalsamarlo el mismo o verlo arder en cenizas sin que nadie nunca pudiera intervenir por respeto a su memoria y su integridad difunta.
—Asqueroso.
Encogiéndose de hombros, Seokjin asintió—Totalmente, pero no podemos esperar menos cuando estamos rodeados de personas de moral dudosa, estabilidad mental ausente y mucha, pero mucha avaricia por pertenecer a esta mafia.
—No sólo es por pertenecer a una mafia, el mundo ya esta podrido, hyung, pertenecer al sindicato sólo nos da un poco de ventaja sobre ellos.
—Puede ser...
—Por cierto, ¿a dónde ibas?
Como si lo hubiera recordado, Seokjin se puso de pie—Vladislav mencionó algo sobre que un lunático encendió fuego a la tumba de Jisub.
—¿Qué? —Taehyung quedó consternado—, ¿Cómo?, atraparon al culpable, supongo. No es como que me importe mucho la maldita tumba, pero, ¿por qué?
—El equipo esta investigando eso, no descartamos que sea un movimiento de Sanghyuk, pero la probabilidad de que haya sido él es muy baja. Según las cámaras de seguridad, un hombre llegó por la noche, iba cubierto así que no tenemos su rostro, echó gasolina por todo el lugar y sólo lo miró arder por horas hasta que se retiró. No quedó nada de la capilla, las cenizas también se perdieron con el fuego, es difícil poder recuperarlas.
—Debió ser alguien muy rencoroso, como sea —suspiró—iré yo, necesito ver y hacer un informe y notificarle a Jimin —llevó una mano a su frente para masajear con suavidad—Joder, una cosa tras de otra, ¿Cuándo podré tener unas jodidas vacaciones?
Seokjin silbó divertido en dirección a la puerta—No serán hoy, te lo puedo asegurar.
Taehyung sólo alcanzó a tirarle un cojín fastidiado mientras el otro huía, realmente necesitaba dormir o el próximo lunático en aparecer sería él.
Holi, muchas muchas gracias por leerme, espero les haya gustado, estoy agradecida con todo su apoyo y sobre todo con su paciencia, ¡nos leemos en el proximo capitulo! cuidense mucho, que tengan un bonito fin de semana, los quiero ❤
nota: puede que el tema entre Jisub, Hangkyu y Kangjoon quede confuso porque hay cosas que no recuerdan, me gustaría no darle mucho protagonismo, por eso le puse una postura desinteresada a Jimin, pero en el proximo capitulo, Yoongi y Jimin hablaran sobre eso y espero las cosas queden más claras para ustedes, ¡Gracias!
-Susy.
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