Capítulo 39: Un mundo de realidades.
Antes de leer: Hasta el final se menciona algo de forma muy discreta que hace como referencia al mundo de las almas gemelas y destinados, pero en business no manejamos ese concepto, sólo que los personajes son unos románticos antiguos, pero no existe tal cosa en este universo, lo que si puede existir, es la alta compatibilidad entre especies.
Por cierto, Sé que no recuerdan nada , así que pueden releer y volver a leer con calma, lo sé, no necesitan mencionarlo, :C esos comentarios están en el inicio de cada capitulo, lo lamento en serio, yo hago todo lo posible por traerles capítulos lo mas pronto que puedo...
23 años atrás.
El hombre de cabello oscuro lloriqueó, su nariz estaba roja por el frío, nunca fue bueno soportando las temperaturas heladas, y todo por seguir a su mejor amigo a sabe donde para encontrar sabrá dios qué.
—Subsub, podemos irnos ¿ya?, no tenias que hacer no sé, algo con la empresa o algo así —se quejó, diablos, los dedos de sus manos comenzaban a ponerse violetas. Afortunadamente, su amigo se dio cuenta porqué al instante tomó sus manos entre las suyas.
—Eres un llorón, Hangkyu, ¿Dónde están tus guantes? Te dije que iríamos hasta lo más profundo del bosque.
Los ojos del alfa dragón se abrieron exaltados en frustración—¡A morir!, ¡me traes a morir!, se me esta congelando el culo, joder, incluso siento las bolas congeladas, si después de esto no puedo darle un hermano a Yoongi, será tu culpa.
Jisub rodó sus ojos y soltó una risotada—Cállate, hyorin no te necesitará si algún día quisiera darle un hermano a Yoongi.
—Me quiere, yo lo sé.
—Se nota, con eso de que duermen en habitaciones separadas.
—Nos vamos conociendo... es para darle privacidad —murmuró de forma tímida.
—¿Después de años?
Hangkyu se encogió de hombros—sabes que me gusta ir lento.
Jisub alzó una ceja—Lo sé.
El otro se quejó y lo golpeó en el hombro—Osh, eres un malpensado. Anda, dame tu gorro, se me caerán las orejas.
—¿Qué parte de trae ropa para la nieve no entendiste, Kyu?
—Dijiste que sería rápido, luego me incomoda traer tantas capas de ropa, parezco muñeco de peluche caminando como idiota.
—Ya eres un idiota —Jisub dejó de caminar y apretó la mano de Hangkyu para llamar su atención—Llegamos, joder kyu, tienes que ver esto.
El mencionado sacudió la nieve que había caído a su cabeza de uno de los altos pinos, giró hacia donde Hangkyu señalaba y se quedó asombrado ante lo que sus ojos estaban viendo.
—¿Qué-e... que... que es esto? –murmuró atónito, era imposible, eso... eso no podía ser verdad.
Jisub se volteó a mirarlo—Una vez dijiste que te sentías solo, que no querías morir sabiendo nada de tu propia especie, estudié mucho y conseguí tanta información como pude, tu raza viene de aquí, Kyu, no puedo decir con exactitud si vienes de las nieves... de los fríos pinos de Rusia, pero tienes familia aquí, eso es seguro, sólo míralos.
Frente a Min Hangkyu se encontraba la manada más maravillosa que alguna vez hubiera imaginado ver en vida.
No eran muchos, parecían ser menos de diez, pero eran suficientes para dejar pasmados a cualquiera. No había visto tanta luminosidad reluciente más que en un diamante, pero ahí estaban, dragones, dragones como él, largos, grandes y escamosos, todos de color platino, blanco y diamantino, había dos que lograban camuflarse entre la nieve, eran sus ojos azules zafiro los que los hacía poder distinguirlos entre tanta blancura.
—Yo... no soy un transmutador, así que no sabría decir si mi forma es similar o igual, tengo la esperanza de que mi Yoongi pueda transformarse algún día, aunque el doctor haya dicho que era un cambia formas normal como yo.
—Esta bien, ¿te ha gustado la sorpresa? Esperaba darte un regalo de cumpleaños que realmente merecieras.
El corazón de Hangkyu se sintió cálido cuando observó a su amigo de toda la vida—Siempre logras sorprenderme, Park Jisub.
Jisub rodó los ojos y se acercó a él, apretando sus mejillas con diversión—¿Dejaras ahora de lloriquear diciendo que morirás solo y sin familia? Te he encontrado a la – probablemente- única manada de dragones que queda en el mundo.
—¿Realmente hiciste esto por mí?
Esta vez, el shifter felino sonrió y lo atrajo a un abrazo, minutos después tomó el rostro del otro con sus manos y junto sus frentes—Eres mi alma gemela, Min Hangkyu, tan jodidamente idiota y frustrante, así te quiero mejor amigo, ¿Qué no haría yo por ti?
Bufando, Hangkyu se salió del agarre, aunque mantuvo las manos de Jisub sobre las suyas, se estaba congelando—Hyorin se enojará, ella ya piensa que me estas robando, dice que me mimas demasiado.
Jisub se encogió de hombros mientras se quitaba su gorro y lo acomodaba de tal forma que se lo puso a Hangkyu, su cabeza un detalle más pequeño hizo que se viera gracioso y tierno.
—Soy un hombre de negocios soltero con mucho dinero, no tengo hijos y pareja, ¿entonces por qué no mimar a mi único amigo?
Hangkyu lo empujó con fuerza, pero riendo—Si tanto me quieres, vámonos ya de aquí, volvamos mañana cuando tenga ropa adecuada, ¡si muero realmente te sentirás culpable!
Jisub se rió mientras trataba de seguirle el paso a Hangkyu quien se apresuró a correr al auto que no estaba muy lejos.
Sin embargo, un ruido lo hizo dar media vuelta y mirar hacia atrás. Estaba lo suficientemente lejos para que pudiera hacer algo, pero demasiado cerca para verlo con claridad. Era un hombre, lo sabía, alto y de piel pálida, se encontraba desnudo y lo miraba fijamente, el cabello rubio y ojos azules brillantes. Nunca en su vida había visto unos ojos tan bonitos, incluso pensaba que superaba el hermoso whisky de los ojos de Hangkyu; Hipnotizado por la belleza divina, sintió a su alfa removerse, tendría que volver, definitivamente tendría que volver.
—¡Jisub, muévete!
Apresurado, comenzó a moverse, para cuando intentó echar otro vistazo, la hermosa criatura ya no estaba.
(...)
Actualidad.
Lo primero que pensó Jimin al despertar, es que todo el mundo iba a morir.
Lo segundo, fue que realmente necesitaba un buen descanso, estaba comenzando a estresarse por toda la situación y eso sólo lo molestaba.
Parpadeó enfocando la luz blanca de la pequeña habitación, la voz de Yoongi, y los aromas alrededor, de un momento a otro sus sentidos estaban más desarrollados, más nítidos y agiles, sin embargo, no podía sentir a su omega.
—¿Dónde? —fue lo primero que preguntó, su voz un poco ronca.
—Mi baño... yo, tuve que hacerlo, lo entiendes, ¿no? —preguntó Yoongi atrapándolo en un abrazo. Ambos se encontraban dentro de la tina, Jimin intentó moverse, molesto por el apego repentino del alfa.
—Sí, sí, como sea, ayúdame a salir de aquí, me duelen las jodidas piernas.
Yoongi se apresuró a salir primero, ayudando al, aparente débil omega. Aquello confundió al alfa, si el omega de Jimin se veía tan bien hace momentos, al menos hablando de forma física, porque emocionalmente estuvo a borde de un colapso mayor. Suponía que todo el esfuerzo mental se hizo físico y ahora el cuerpo de Jimin lo resentía con cansancio.
Salieron de la habitación del baño, la alfombrilla sobre los pies descalzos del omega, y la habitación que ya comenzaba a volverse familiar, hicieron reír por lo bajo a Jimin.
—¿Quién fue? —preguntó riendo, pero Yoongi sabía que el omega no encontraba para nada divertida la situación.
—Los hombres de Sanghyuk, quien te agredió está muerto, Hoseok y Taehyung se encargaron de él, no sabemos con exactitud que te inyectaron, nuestro medico te sacó muestras de sangre, pero aún no están los análisis, Seokjin ya debería de estar en camino o llegando a la mansión.
El extraño silencio de Jimin mantuvo a Yoongi tenso, como si esperaba que en cualquier momento el omega pudiera explotar, en cambio, el rubio caminó lento hasta la cama y se sentó en la orilla, una de sus piernas cruzándose sobre la otra mientras adoptaba una postura pensativa, parecía como si estuviera arreglando todo el desastre de su vida de la ultima hora en cuestión de minutos, porqué después su ceño se deshizo y soltó un gran suspiro.
—Pues que va, que le vamos a hacer, así es esta cosa de pertenecer a la mafia, un día estas relajado y al otro muriendo, que más se le puede pedir a Jesucristo, ¿verdad?, ve y pídeme algo de comer, estoy muriendo de hambre, Joder —Ordenó Jimin mirando sus uñas, se mordió sus labios, genial, se había roto una sin darse cuenta, que desgracia.
Yoongi lo miró estupefacto.
—¿Eso es todo?, ¿no te vas a enojar conmigo?, te mordí, te engañé, estás aquí... bueno, ya sabes...
Jimin arqueó una ceja—Cariño, eres un narcotraficante, ¿Qué querías que esperará?, ¿flores y serenata? Lo más romántico que puedes hacer por mí es no matarme, ¿y esperas que yo esperé mas de ti? por favor, comenzaría a sospechar el día en que no me mientas y te portes lindo conmigo.
—Pero...
—¿Quieres que sea hipócrita y me enoje ignorando todas las cosas que yo he hecho?, bien —Llevó una mano a su pecho y lo señaló, su tono de voz indignadamente falso—¡Joder, sucio alfa de mierda!, ¡mira que tenerme aquí de rehén y atentar contra mi voluntad mientras no estaba consciente!, ¡me mordiste!, ¡incluso aunque fuera para calmarme!, ¡me mordiste!, mereces ir a prisión, sucio cruel criminal abusador villano malévolo rey de mis pesadillas —se dejó caer sobre la cama con cansancio—¡Oh, que alguien venga a salvarme!
—Pensé que habíamos dejado en claro las cosas antes de que comenzara el atentado, lo recuerdas, ¿no? —Yoongi se acercó—, ¿recuerdas de que estábamos hablando?
Y si Jimin esquivó la mirada del alfa para esconder el tinte rosa de sus mejillas, nadie tenía porque saberlo—¿Recordar qué?
—Dijiste muchas cosas.
—Obviamente, de mi boca sólo salen palabras de oro que el mundo necesita documentar.
—Número uno, mencionaste que era imposible no enojarte cuando el alfa que esta interesado en ti, está rodeado de omegas —Cuando Yoongi se acercó a la cama, Jimin se apresuró a subirse por completo y retroceder hasta las almohadas.
—¿Yo dije eso?
—Sí, antes de que yo te preguntara directamente que eso es exactamente lo que no entiendo, si yo soy el interesado, ¿Qué te molestaba a ti?
Jimin bufó y miró hacia otro lado, aun esquivando los ojos de Yoongi que brillaban de un fuerte rojo amaranto—No lo sé, estuve en un sub espacio, ¿recuerdas? Perdí las cosas mas vergonzosas de mi vida y ahora no puedo recordarlas.
—Numero dos, dijiste que eras peor que yo y que justamente eso nos hacia perfectos el uno al otro.
Rodando los ojos, el omega bufó—¡Obviamente!, ¡perfectos para compartir celda en prisión! Te dejaré la litera de arriba si gustas.
—Número tres.
—Genial, el niño me está presumiendo que sabe contar, ¡hey! Atrás... —Se quejó cuando Yoongi se subió a la cama y comenzó a gatear hasta él—Tengo un cojín y no dudaré en usarlo —lo sacudió.
El alfa sonrió—Dijiste, dijiste claramente que te recordé que tienes sentimientos, ¿eso quiere decir que te provoco emociones que antes no sentías, Park Jimin?, emociones a las cuales te avergüenza ponerles nombre.
Jimin apretó sus dientes, sus cejas fruncidas en enojo, pero su rostro totalmente rojo—No lo digas.
—Te gusto.
—Ugh —el omega se arqueó—tráeme agua, tráeme agua, ugh.
Yoongi separó las piernas del omega, Jimin ni siquiera se inmutó cuando el alfa dragón se acomodó entre ellas y descanso sobre él, su cuerpo cubriéndolo por completo.
—Eres un infantil.
—Tú deja de fantasear con un romance que definitivamente no sucederá.
—¿No nos gustamos el uno al otro?, ¿por qué te gusta negar lo obvio?
—Bueno, ¡pero no pidas algo de novela!, ni siquiera sabemos cómo crecerá esto —formuló Jimin, Yoongi había recostado su cabeza sobre su pecho, estaba seguro de que el mayor podía escuchar su acelerado corazón, ya sea por la situación, o por cualquier otra cosa.
—¿Qué jodidos tengo que hacer para que seas mío, Park Jimin? te quiero, pero maldita sea soy capaz de encerrarte con tal de que no te escapes nunca.
—¿Y así es como tu cabeza hueca piensa conquistarme?, ¿Qué parte de tu psicópata mente piensa que eso suena romántico? Dime que no me vaya y sólo me harás tener el doble de ganas de irme.
Yoongi cerró sus ojos, podría preocuparse después, su dragón no había estado tan satisfecho en mucho tiempo, el aroma de Jimin lo rodeaba suavemente al igual que podía escuchar ahora su relajada respiración, por más defensivo que se comportara el omega, sabía que se sentía seguro y tranquilo, de no ser así, Jimin no dudaría en tirarlo a un lado, pero en cambio, los dedos del rubio pasaban por los mechones de su cabello y masajeaban con dulzura.
—Tu omega dijo muchas cosas...
—Mi omega es un estúpido, por eso necesitaba quedarse dormido para siempre.
—¿No eras tú quien aclamaba que nuestra casta y parte humana eran una sin línea de separación?
Encogiéndose de hombros, Jimin suspiró—Sólo cuando me conviene, como podrás notar.
—Jimin... ¿recuerdas algo de lo que pasó?
Tratando de hacer memoria, el dragón omega apretó sus labios pensativo—Joder, es tan difícil, recuerdo todo antes de que me agredieran, luego, destellos muy borrosos de Jungkook, tu rostro en todos lados, maldito, tu jodida cara está en cada rincón de mis memorias. También a... no recuerdo su nombre por ahora, pobre muchacho, ¿Qué le hice?
—¿A Soobin?, probablemente darle el susto de su vida. O ese fui yo, no importa... ¿pero no recuerdas nada más?
Jimin miró hacia abajo y Yoongi hacía arriba.
—Escúpelo, ¿Qué fue lo dije?
—¿Entonces no recuerdas?
—No estuviera preguntándote, gran genio.
—Tuviste una crisis... como una regresión, me confundiste con alguien más... y... creías que Soobin era... Jaemin.
Casi como si Yoongi lo hubiera previsto, se apresuró a tomar a Jimin de las muñecas y sujetarlo contra la cama, evitando que pudiera escapar.
—¡Suéltame!, ¡tengo derechos que puedo hacer valer!, ¿sabes?, ¡Jungkook te romperá esa cara metiche!
—¡La curiosidad es imposible de evitar cuando derretiste mi habitación por completo a causa de ese tal Jaemin!, además, realmente no estas haciendo esfuerzo, tú mismo podrías romperme la cara si quisieras.
Frustrado, Jimin suspiró y dejó de forcejear—¿Qué mierda quieres?
—Tuviste un heredero, ¿no es así? —preguntó Yoongi, aún se mantenía sobre el omega evitando que escapara, una pierna a cada costado para mantenerlo totalmente inmóvil—, por eso jodidamente no pude encontrar tu historial médico, lo borraste antes de que yo pudiera pensar en una conclusión como esa, tuviste un heredero.
—¿Qué mierda fue lo que dije estando en el espacio sub omega?
Yoongi lo miró directamente a los ojos—bueno, tantos años sin poder usar mi ruso, pero ahora puedo hacerme una idea de lo que tanto pedías, ¿debería dártelo ahora?
De forma brusca, Jimin utilizó toda su fuerza para cambiar de posición, subiéndose al regazo del alfa, aunque Yoongi se apresuró a tomarlo de las caderas, sentándolo tan fuerte que lo hizo gruñir por lo bajo, olvidaba que Jimin seguía en bóxer.
Fue cuando Jimin dio un pequeño saltó que recordó—Bueno, ahora puedo entender lo que mi omega pedía, pero... no es eso de lo que tenemos que hablar, no es prioridad por el momento, dime, ¿Cómo sabes de Jaemin?, de donde llegaste a esa conclusión.
Yoongi tomó ambas muñecas de Jimin con una mano y levantó sus caderas hacía arriba, haciéndolo boquear por aire y enrojecer sus mejillas.
—¡Te estoy hablando en serio! —Se quejó.
—Tú me lo dijiste, dijiste que era mi cachorro.
Ladeando la cabeza, Jimin se rió—Imposible, mi omega no puede verte como el padre de Jaemin, eso sería... eso sería...
—¿Por qué crees que tu marca está rosada y no azul? —susurró Yoongi, sus manos soltándolo y viajándolo por las curvas de su cintura hasta posicionarse en sus caderas, los movimientos pélvicos que comenzó a hacer fueron lentos y discretos—, no me rechazaste, aunque no fuera una mordida de enlace, omega que no desea a un alfa, mordida de color azul, así de fácil.
—No lo digas.
—Somos más que compatibles, somos... eres mi omega, Park Jimin, mi omega.
lamento que haya sido tan corto, pero necesitaba actualizar después de que lo pidieran mucho, tenia una escena mucho mas larga pero no me siento bien la verdad :( así que sólo será eso por hoy, espero actualizar esta vez más pronto que otras veces, ¡gracias por su paciencia! los quiero mucho, gracias por leer.
También discúlpenme si vuelvo a tardar con el maratón de dirtywork, probablemente el fin de semana pueda continuar, ¡gracias de nuevo!
-susy
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