Perdon

Eran muchas las emociones y sentimientos que se amontonaban en el pecho de Hermione. La incertidumbre que le había asaltado por tanto tiempo por fin se estaba disipando pero daba paso a otras emociones que no sabía cómo manejar.

Era una bruja por todos los cielos, y esa algo tan increíble y sorprendente que le costaba un gran trabajo asimilarlo, su lado racional le decía que estaba enloqueciendo, pero al tomar su varita sentia tantas cosas que le hacían que no tuviera dudas de que la magia existía.

Esa mañana se dirigió al hospital, donde le esperaba una gran sorpresa.

-Señorita Wood. -Le llamo una de las enfermeras más experimentadas. -El Director me pidio le avisara que la espera en su oficina.

Hermione no sabía porque le llamaban pero obedeció de inmediato, toco la puerta y espero que permitieran pasar. Dentro de la oficina estaba el director tras su escritorio y de pie en una esquina de se encontraba de un rubio, al que en un inicio no presto mucha atención la nerviosa castaña. Pero claro Draco por otro lado se había quedado pasmado al ver al que él creía era una muggle de nombre Nuria con el cabello castaño en lugar de negro.

Algo había cambiado y eso lo noto de solo ver a la chica que estaba frente al director del hospital, ya no le cavia duda, si antes solo había sospechado que esa muchacha era Hermione Granger, ahora lo estaba comprobando al ver un brillo muy diferente en sus ojos. Era como si algo en su vieja personalidad saliera a flote.

-Señorita Wood tome asiento por favor.

-Gracias. -se sentó frente al director.

-Le mande llamar para felicitarla por su gran desempeño, me informaron que gracias a su pronto y eficiente intervención salvo a una de nuestras paciente.

-Solo cumplí con mi trabajo señor.

-Además de eficiente es usted muy modesta y eso me complace aun más, otro motivo por la que le llame es para informarle que el señor Malfoy aquí presente a solicitado que sea usted la enfermera particular de su madre. -menciono dirigiendo su mirada a donde está el rubio que dio dos pasos al frente poniéndose a un lado de donde la chica está sentada.

-Deseo además darle una recompensa.

-No es necesario señor Malfoy yo solo cumplí con mi trabajo.

-Insisto en que lo reciba.

-Yo también ínsito en que no es necesario. Gracias.

Testaruda y orgullosa como siempre pensó para sus adentros el rubio,  por lo que sabía que no tenía caso seguir insistiendo, ella nada aceptaría.

-Si a si lo prefiere está bien, pero igual me interesa que se haga cargo de manera personal del cuidado de mi madre.

-Le agradezco que deposite en mí su confianza, pero me temo que no puedo aceptar eso tampoco.

-¿Por qué?

-Porque creo que su madre necesita a alguien con mayor experiencia que yo, no sé si sepa pero yo aun soy ayudante de enfermera y siguo estudiando para poder ejercer.

-Eso no importa ayer demostró sus capacidades.

-En verdad les agradezco esta oportunidad pero no puedo aceptar, y menos ahora.

-Porque señorita Wood.

-Por motivos personales me temo que tendré que darme de baja en el programa de servicio social, al menos por un tiempo, justo ahora me dirigía con la jefa de enfermeras para informarle de mi situación.

-Entiendo. -Dijo el director. -Entonces no tiene caso insistir.

Hermione se disculpo y salió de la oficina con rapidez esperando poder evitar que el rubio l alcanzara, sabia por su actitud que no se daría por vencido y en esos momentos ella no se encontraba en su mejor momento para dar explicaciones.

Y la castaña no se equivoco el rubio le dio alcance y la detuvo antes de que llegara al ascensor.

-Granger. -Le llamo y la chica giro desconcertada.

-Como sabes... como sabes quién soy... -le tembló la voz al hablar.

-Así que si eres Granger. -Dijo sin poder ocultar su asombro.

-Tú me conoces. -Pregunto la chica y por la pregunta Draco concluyo que algo andaba mal con ella.

-¿Qué acaso no me recuerdas? -Pregunto y como toda respuesta Hermione movió de manera negativa la cabeza. -Ya veo, ¿Podemos platicar?

-Ahora no puedo necesito darme de baja y tengo muchas tramites que hacer.

-Mas tarde.

-Tal vez. -Dijo alejándose.

Draco no podría creer que esa guapa mujer fuera en realidad Hermione Granger. Se veía tan distinta físicamente. No se dio por vencido, paso casi todo el dia al lado de su mama con la esperanza de que Hermione fuera a verla al menos por ultima vez y no se equivoco.

Narcisa estaba despierta cuando la castaña entro a despedirse.

-Señora Malfoy. -Saludo la chica

-Granger. -Exclamo desconcertada la rubia.

-Veo que usted también me conoce. -Dijo viendo al rubio que estaba sentado al lado de cama.

-Como no conocerte, si eres una de las heroínas del mundo mágico. -Hermione no comprendió la declaración de la rubia, pero no tuvo el valor de preguntar de que hablaba, se limito a sonreír con timidez.

-Siento no recordarla. -Se disculpo. -Pero perdí la memoria, pero no he venido aquí para contarle mis penas, he venido para despedirme y desear que se recupere lo antes posible. -Dijo con sinceridad y sonrió alentadoramente.

-Gracias Hermione. Espero verte de nuevo. -Dijo la rubia sin perder detalle de que su hijo miraba de manera insistente a la castaña.

-Espero que para entonces pueda recordarla.

-Solo deseo que cuando lo hagas puedas perdonarme.

-¿Perdonarla? -Pregunto pero al ver la tristeza en el rostro de la mujer prefirió no insistir. -En ocasiones en mejor olvidar y continuar adelante, solo es bueno dar un vistazo al pasado para no cometer los mismos errores y aprender de nuestras fallas pasada.

-Tan sabelotodo como siempre. -Dijo con fastidio el rubio.

-Eso no puedo afirmarlo o negarlo, pero quizas tengas razon. Si me disculpan, señora Malfoy hasta luego.

-Suerte. -Le deseo la mujer con una sonrisa.

-Gracias. -Fue lo ultimo que dijo antes de salir la castaña.

Cuando se fue Draco permaneció mirando hacia la puerta por unos segundos.

-Es bonita. -La voz de su madre lo saco del transe.

-Nada especial. -Dijo orgulloso.

-No parece que pienses eso en realidad.

-Porque seria de otra manera.

-Se nota por la manera en que la miras que no la consideras alguien común.

-Alucinaciones tuyas madre. -Dijo ocultando su rostro avergonzado. -Ya tengo que irme, mañana temprano regreso.

-Si está bien. -Dijo su madre con una sonrisa, pensando en que iría a alcanzar a la leona. Y no se equivocaba.

La alcanzo cuando esta caminaba rumbo a su departamento, comenzó a caminar al lado de la chica que no detuvo su paso, ni dijo nada de que la estuviera acompañando.

-Asi que no tienes recuerdos Granger.

-Ninguno.

-Lo imagino, de otra forma no estarías hablando conmigo. Cuando te vi la primera vez lo sospeche pero dado que no me hechizaste al verme pensé que solo era coincidencia de que te parecieras.

-Supongo por lo que dices que no nos llevábamos bien.

-Nos odiábamos. -Confeso divertido el rubio.

-Ya veo. Entonces porque me hablas ahora si nos odiábamos, al menos yo tengo la escusa por perder la memoria ¿Pero tú que escusa tienes?

-Ya no hay motivos para pelear o para odiarte. Tú y tus amigos terminaron con eso.

-¿Harry?

-Te acuerdas de él. -Dijo levantando la ceja.

-Él fue quien me dijo quien era. Apenas ayer no tenía ni idea que fuera una bruja o que existiera la magia.

-Vaya que estas mal. -Dijo con burla el rubio.

-No necesito que me digas algo que ya se.

-Disculpa. ¿Y que piensas hacer?

-No sé porque tienes tanto interés en saber, si como tú dices ni siquiera somos amigos.

-Las cosas cambiaron Granger, quizás tiene razón y no somos amigos, pero tampoco somos enemigos. Desapareciste de manera tan repentina que no pude agradecer tu ayuda y que me salvaran la vida y ahora que estas frente a mi tengo la oportunidad de hacerlo.  -Le dijo deteniendo su paso al ponerse frente a la chica.  -Se que no recuerdas nada pero sé que eres tan persistente que lograras en algún momento recuperar tus recuerdos y cuando lo hagas entenderás lo que voy a decirte ahora. Perdóname por ser un patán contigo, por insultarte y lastimarte, ya no soy lo que solía ser y me arrepiento de todas las bajezas que cometí en tu contra.

Hermione se quedo anonadada sin poder creer lo que ese chico le decía, si bien no recordaba esa enemistad que había mantenido con el rubio, debía reconocer que se necesitaba valor para expresarse de esa manera.

-Siendo así te perdono Malfoy.

-No deberías otorgarme el perdón, al menos no sin haber recuperado la memoria.

-Bueno creo que eso ya no importa, aun recordando ya no se puede hacer nada con lo que ya pasó y se necesita valor para disculparse, así que te perdono. -Dijo Sin mas y siguió caminando.

Draco la vio entrar a un edificio antes de saludar al portero, no podía creer que Hermione con o sin memoria fuera capaz de perdonarlo tan fácil.

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